Edward POV

Eran casi las cinco de la tarde cuando Kachiri me aviso que tenia visitas, mire mi reloj y tenía que irme a buscar a Bella para la ecografía que nos tocaba hoy, Kachiri aun estaba parada frente a mi esperando indicaciones.

-¿Quién es? – pregunte, porque que yo supiera no esperaba a nadie hoy.

-Es una señorita, se llama Tía – dijo y por un momento me encontré totalmente perdido, hasta que recordé quien era.

-¿¡Tía!? – eso me sorprendió y Kachiri me miraba seria.

-Si quieres puedo decirle que no la puedes atender – se ofreció pero negué con la cabeza. Es mejor cortar esto antes de que empiece algo peor.

-Dame solo un segundo que hablo con mi padre y te aviso para que pase – dije y asintió.

Tome el celular porque era más seguro encontrarlo hay que encontrarlo en su consulta, siempre estaba dando vueltas por el hospital a menos que tuviera pacientes fijos.

-Edward, hijo ¿pasa algo? – pregunto.

-¿Estas muy ocupado? – pregunte.

-En este momento no – contesto y eso me venía muy bien -. Recién tengo ocupado para cuando les toca la ecografía a ustedes – y eso era mucho mejor.

-Me podrías hacer el favor de buscar a Bella y traerla, justo se presento un asunto que necesito arreglar ahora – comente. No quería tener problemas futuros con Bella así que lo mejor era hablar con Tía y dejarle todo claro.

-No hay problema me voy a buscarla ahora – contesto.

-Gracias – dije y cortamos -. Kachiri – llame por el interno.

-Dime Edward – contesto.

-Has entrar a la señorita – dije. Unos segundos después la puerta se abrió y Kachiri dejo entrar a Tía.

-Edward… es todo un gusto volverte a ver – dijo acercándose para darme un beso en la mejilla. Venía con un vestido muy corto de color naranja y tacos altos en el mismo tono.

-Toma asiento – dije señalando la silla frente a mi escritorio aunque la vi mirar los sillones, rápido me fui a mi asiento y ella se acomodó donde indique.

-¿Como has estado? – pregunto como si hiciera tiempo nos conociéramos y mas que no nos viéramos.

-Con mucho trabajo – conteste sin dar más detalle - ¿Qué tal tu estancia en Forks? – pregunte de manera cortes, no porque realmente me interesara.

-Es un pueblo demasiado tranquilo – dije sonriendo -. No sé como no se aburren acá, es algo deprimente – sonreí.

-Uno se acostumbra – dije. De chico siempre pensé que apenas tuviera la edad suficiente me iría para no volver más ya que me parecía deprimente el lugar.

-Es el segundo día que estoy ya quiero salir corriendo – dijo riendo y la imite. En eso la pude entender, me supo pasar.

-¿Cuánto tiempo se quedan? – pregunte, aun siendo cortes.

-Nos vamos el jueves – dijo intentando hacer un puchero de tristeza cosa que me pareció muy rara y desubicada. Me parecía mejor ir directamente al grano y no dar más vueltas en la conversación.

-¿A qué se debe esta visita? – pregunté tratando de darle el menor entusiasmo posible a la pregunta.

-No conozco a nadie por acá – comenzó -, Vanessa y Jake se fueron a pasear y en ese momento me sentía algo mal, pero como ahora estoy perfecta tenía ganas de salir y pensé en buscarte, podríamos tomar algo – dijo sin rodeos.

-Tía creo que estas confundida o por lo menos prefiero pensar eso – comencé y ella me miraba sonriendo -, vamos a aclarar las cosas. Estoy casado, extremadamente feliz y lo que seas pienses que quieres conseguir conmigo no lo vas a lograr – asegure y ahora la sonrisa se la había ido.

-¿Acoso no te hace falta diversión? – pregunto sugestivamente -. Con eso del reposo de tu esposa y su embarazo me vas a decir que no estas con ganas de algo – resople, que tenía ganas de algo era seguro pero con la única que lo quería era con Bella – Ella ni siquiera tiene que enterarse – siguió.

-Tía ¿Ves esto? – Dije mostrando mi anillo -, es un compromiso que no pienso romper por nada ni nadie en el mundo – asegure -. Es amor, la amo con el alma y no hay mujer en esta tierra incluyéndote que me haga cambiar de opinión – cerré el asunto.

-Edward solo sería algo sin importancia – insistió y rodé mis ojos. Golpearon la puerta y entro Kachiri.

-Perdón que los interrumpa – y aunque lo dijo no lo sentía -, pero te están esperando para la ecografía – me puse de pie.

-Tía tengo que pedirte que te retires – dije lo más amable que pude. Se puso de pie y fue hasta la puerta -. Solo te voy a decir una cosa – dije antes que saliera y me miro nuevamente entusiasmada -. Tendrías que aprender a ubicarte y no ofrecerte tan libremente, eso no se ve bien en una mujer o por lo menos no es de mi agrado. Tienes que hacerte respetar sino nadie te tomara en serio nunca – su cara cambio radicalmente y ahora me miraba con cierto enojo y bronca -. Yo no te tomaría en serio en otra época – insistí.

-Edward – me llamo Kachiri que aun estaba en la oficina contemplando todo -, Bella te está esperando junto con tu hija – insistió -. Creo que deberías irte a otro lado – agrego mirando a Tía la cual salió de manera rápida de mi oficina. Salí detrás de ella y Kachiri me acompañaba.

-¡Tía! – exclamo Bella y vi sus ojos llorosos. No iba a permitir que su mente fuera hacia donde no tenía que ir.

-Shhh.… no llores, no se te ocurra llorar por algo que no sabes – me había acercado a Bella y me arrodille frente a ella -. Vamos por la ecografía y luego te cuento que paso, pero no derrames una lágrima por culpa de ella – Bella asintió pero no sonrió, igual esto no iba a pasar a mayores porque no lo dejaría.

-¿Qué es lo que pasa? – pregunto papá serio.

-No es nada grave. Vamos por la ecografía – eso era lo importante, saber como estaban dos de las tres personas más importantes de mi mundo. Tome a Bella de la mano y cargue a Nessie -. Ven con papi estrellita – su manito acaricio mi mejilla y nos dimos un beso.

La cara de papá me estaba preocupando, mientras reviso al bebé en la ecografía parecía que todo estaba bien, pero cuando empezó la revisación de Bella, su peso, sus signos, el tacto y demás su cara de preocupación se acentuó.

-Bella baja así te pesamos – la ayude a bajar de la camilla delicadamente - ¿Cómo te has sentido últimamente? – miraba el peso de Bella en la balanza y parecía no gustarle.

-Bien. Lo habitual… cansada… con hambre… sueño… - creo que Bella se estaba poniendo nerviosa.

-¿Pasa algo? – ya no me contuve, era mejor que nos dijera rápido que pasaba porque su silencio solo me ponía mas ansioso.

-Vamos a esperar los análisis para que veamos como esta tu anemia – asentimos -. Carlie está muy bien – solo dijo Carlie, no dijo que estaban bien. Entonces Bella…

-¿Y Bella? – pregunte aun más preocupado, porque si ella estuviera bien no hubiera aclarado que era solo Carlie.

-Ahora vemos – contesto y eso me dio la pauta de que Bella no estaba bien.

Nos quedamos en la consulta y papá le indico a Bella que podía cambiarse ya que estaba solo con una bata, nos dijo que volvía en minutos cuando le confirmaran que ya estaban los estudios. Con Bella nos quedamos en silencio mientras esperamos Nessie en su falda solo nos miraba.

-¿Estás bien? – pregunte luego de unos minutos

-Con hambre – contesto.

-Voy a buscar a papá así puedo llevarte a merendar – dije pero me detuvo cuando me quise poner de pie.

-Puedo esperar – su sonrisa fue muy fingida, sé que está preocupada.

Acaricie su rostro – Vas a estar bien – asegure aunque yo estaba más que preocupado.

-Vamos a hablar – nos interrumpió papá cuando entro -. Bien Carlie esta perfecta sus medidas están muy bien – repitió una vez mas y eso me alegro pero a la vez estaba ansioso por saber que pasaba con mi Bella - tiene 32 semanas un bebe de su tiempo tendría que pesar aproximadamente 1 kilo 800 gramos según las medidas – dijo sonriendo -, Carlie según las medidas estaría en 2 kilos que serian las medidas para un bebé de 33 semanas – explico -, como verán Carlie ha crecido mucho – sonrió y Bella parecía aliviada, pero hasta ahora solo hablo de nuestra bebé.

-¿Pero? – pregunte.

Papá respiro profundo – La anemia de Bella esta peor y lo que me preocupa es que el bebé toma peso pero Bella está bajando – dijo -. Tendrías que haber aumentado por lo menos siete kilos y medio - dijo papá dirigiéndose a Bella -. Hasta hace dos meses viniste subiendo bien pero el mes pasado bajaste un kilo y este mes otro más – dijo -. Por eso andas tan cansada y pesada – dijo.

-¿Y qué hacemos? – pregunte con algo de ansiedad.

-Te voy a subir la dosis de hierro y vitamina B12 – dijo papá -, tienes que hacer seis comidas sin saltearte ninguna en ningún momento, no importa donde estés o que estés haciendo – Bella asentía -. Además vas a tratar de comer alimentos que contengan mucho hierro como el hígado, la soja, lentejas, espinacas, acelgas incluso puedes comer algunas almejas – dijo papá riendo y Bella puso mala cara, eso logro alivianar el ambiente -. Y vamos a seguir con el reposo – nos miro con duda.

-¿Qué pasa? – pregunte ahora más preocupado.

-No se asusten pero puede que por la anemia sientas un poco de taquicardia, algunos mareos o vértigos y algo de dificultad al respirar – dijo papá y creo que el que estaba pálido ahora era yo -, son síntomas normales los cuales van a ir desapareciendo a medida que vayas aumentando el hierro en la sangre – los dos asentimos -. El hierro trata de tomarlo con jugo de naranja para que se absorba mejor – dijo y los dos asentimos.

Terminamos con la consulta y tome a Nessie en brazos y a Bella de la mano. Fuimos en silencio hacia la cafetería para que pudiera merendar. Íbamos a empezar a alimentarla más desde ahora.

-Voy a estar bien – aseguro luego de unos minutos nos miramos y sonreí.

-Por supuesto – asegure.

-Solo tengo que alimentarme mejor y más y seguir las indicaciones de Carlisle – siguió y asentí.

-Traigo la merienda y ustedes se quedan aquí – dije. Antes de separarme bese sus labios y la frente de Nessie.

Luego de que merendamos y viendo con Kachiri que no tenía nada urgente decidí llevarlas a casa y quedarme con ellas, Bella me tiene preocupado no quiero ni imaginarme que sería si le pasara algo, eso no puede ser.

-Edward voy a estar bien – aseguro cuando estábamos acostándonos para dormir luego de pasar toda la tarde juntos con Nessie jugando y disfrutando en familia.

-Lo sé, nunca dejaría que te pase nada – conteste acariciando su espalda -. Si tengo que ir al cielo o al mismo infierno para impedirlo nunca nada te va a tocar ni a ti ni mis pequeñas.

-No será necesario porque voy a estar muy bien – aseguro y se la sentía convencida. "Ojala estuviera yo la misma convicción", pensé. Nos acomodamos para dormir, como si me fuera posible después del diagnostico de hoy.

-¡Edward! – Mi cuerpo se sacudía - ¡Edward, despierta! – "¡No hace ni cinco minutos me dormí!", proteste mentalmente. Solo espero que no sea otra pesadilla o un antojo porque seguro me largo a llorar yo - ¡Edward! – insistió.

-¿Qué pasa Bella? – pregunte tratando de disimular el enojo. Sus hormonas me están volviendo loco, en un minuto está feliz, al siguiente triste, de repente alegre y un minuto más tarde rompe en llanto.

-¡Nos dormimos Edward! ¡Viene la psicóloga! – volvió a exclamar y se la notaba agitada. Yo apenas podía abrir los ojos. Me acomode boca arriba tapando mis ojos con un brazo.

-Bella recién nos dormimos – la sentí reír bajo y luego su mano sacaba mi brazo de mis ojos.

-Mira – dije mostrándome el reloj – son las ocho de la mañana, en una hora llega la psicóloga y el asistente social – dijo y aun no podía reaccionar.

-No puede ser Bella, juro que hace cinco minutos nos dormimos – la escuche reír de nuevo bajito y fue a la ventana abriendo las cortinas lo que hizo que tapara mis ojos porque aun estaba dormido y me molestaba la luz.

-Ahora amor dormilón – me dio un pequeño beso en los labios luego de empujar mi brazo nuevamente -, tienes que ducharte y ponerte muy guapo - dijo y quedo en silencio unos segundos por lo que abrí los ojos y la mire -. Mejor no tan guapo, si alguna es muy joven seguro coquetea contigo y no lo aguantaría de nuevo – sonreí y al igual que ella.

-¿En verdad son las ocho? – Bella me miraba sonriendo desde la puerta de la habitación – Necesito dormir – proteste -. Tengo que llamar a Jasper porque me dijo que quería estar cuando viniera – me senté en el borde de la cama.

-Me llamo – dijo antes de salir -, por él nos despertamos a tiempo - sonreí y luego refregué mi cara con las manos.

Una ducha, no muy larga porque no había mucho tiempo, mucha agua en la cara, una afeitada rápida, jeans, camisa mangas cortas y zapatillas, creo que medianamente estaba listo y despierto para esta última revisación. No puedo evitar estar nervioso, que con Bella estuviéramos casados había acelerado el proceso un poco, además era solo a mí al que le hacían la observación. A las nueve en punto llego Jasper y unos segundos después llegaron Bree Tanner que era nuestra psicóloga y Riley Bears que era el asistente social, los dos eran jóvenes y muy amables. Bree ya había estado hablando con nosotros en varias oportunidades. La idea era ver nuestra rutina, Jasper les indico que en este horario generalmente yo estaba trabajando por lo que la rutina habitual no la verían.

-¿En qué horario trabaja? – pregunto Riley de manera formal.

-De 9 de la mañana a 7 de la tarde, pero vengo al mediodía a traer a Nessie de la guardería y me quedo a almorzar – conteste con firmeza aunque por dentro temblaba. Bella tomo una de mis manos y el entrelazo con la suya.

-Señora Isabella ¿su horario de trabajo? – ahora miraba a Bella.

-En este momento no trabajo – contesto -. Trabajábamos juntos, pero estoy de reposo por el embarazo – contesto acariciando su barriga.

-¿Algún problema grave? – pregunto Bree parecía genuinamente interesada.

-Un poco de anemia – contesto Bella -, nada muy grave en realidad pero para evitar mayores problemas el médico ordeno reposo – bese su mano -. Lo que sucede es que pase por mucho estrés unos meses atrás.

-Tengo entendido que el señor James Witherdale que es el padre biológico de Renesmee está en la cárcel – los dos asentimos -. Y nunca intento hacerse cargo de la menor – siguió Riley y volvimos a asentir.

-Incluso firmo los papeles renunciando a la patria potestad – añadió Jasper -. Esta junto con toda la documentación que entregamos – era uno de los requisitos para que ya la pudiera adoptar. James no nos dio trabajo en ese aspecto y fue un alivio.

-Disculpen – interrumpió Bree -. ¿El stress a que se debió? – mire a Edward.

-Hace unos meses el señor James Witherdale junto con otras tres personas secuestraron a Renesmee para pedir un rescate por ella – se apresuró a contestar Jasper -. La situación fue muy estresante para la familia completa, pero entenderán que por ser la mamá de la niña para ella fue un poco más difícil la situación – siguió explicando y los dos asintieron -. Por ese motivo el padre biológico está en la cárcel, además de tener cargos también por contrabando de drogas.

-Bien – dijo Riley -, ahora solo los vamos a observar durante un tiempo para ver como se desenvuelven – "¿Y que se supone que hacemos ahora?", pensé -. Solo tiene que hacer lo que harían normalmente – con Bella nos miramos sin saber que hacer porque ellos nos están mirando.

-Es que durante la semana no suelo estar – dije revolviendo mi pelo.

-Y con el reposo no hago más que estar sentada acá o acostada – agrego Bella.

-¿Los fines de semana que suelen hacer? – pregunto Bree, con Bella nos miramos.

-Papi – me llamo Nessie y la mire -. Lete – pidió sonriendo.

-Voy a prepararle la leche - dije poniéndome de pie y alzando a Nessie.

-Edward – me llamo Jasper -. Yo me tengo que ir – dijo sonriendo.

-De acuerdo – conteste estrechando su mano -. Gracias por todo Jazz – dije y el asintió.

-Pequeña estrellita – dijo acercándose a Nessie y ella lo abrazo mientras le dio un beso en la mejilla -. Bella, cuídate mucho – dijo mientras también le daba un beso en la mejilla.

-Te acompaño a la puerta – dijo Bella comenzando a ponerse de pie. "Aun no entiende lo que es reposo absoluto", pensé.

-Bella no me hagas retarte – le llame la atención, me miro y suspiro mientras se acomodaba de nuevo en los sillones -. Ya te abro Jazz– dije mientras íbamos a la puerta.

-Tau tío Jazz – dijo Nessie mientras Jasper salía guiñándole un ojo antes de que cerrar la puerta.

-¿Ahora si la leche? – mire a Nessie y ella asintió con ganas.

-Edward – me llamo Bella, la mire y vi su cara, algo la estaba molestando -. Ayúdame a levantarme – dijo tendiendo su mano y me acerque rápido.

-¿Estás bien? – ya estaba preocupado.

-Es solo que intente levantarme pero no pudo y tengo que ir… ya sabes… - se encogió de hombros y sonreí. Me había olvidado por completo de Bree y Riley, ellos solo observaba nuestros movimientos.

-¿Puedo ofrecerles algo de tomar y comer? – pregunte mientras Bella iba al baño.

-Si no es mucha molestia aceptaría un té – dijo Bree y asentí. Mire a Riley.

-Un café estaría bien – dijo.

-Carlie por favor pequeña – se sintió que decía Bella y reí bajo -, tranquila ya vamos a desayunar - siguió, cuando me gire Bree y Riley la miraban.

-Esta hablándole a la bebe – dije y los dos sonrieron – es grande y tiene poco espacio ya, le suele molestar cuando se mueve – dije.

-¿Ya eligieron el nombre? – pregunto Bree.

-Vamos a la cocina – pedí -. Si ya lo elegimos se llama Carlie – conteste su pregunta -. Pónganse cómodos – les indique mientras fui a preparar todo. Deje a Nessie en el piso a mi lado – Tu mamadera primero – dije mirándola y asintió.

-Edward necesito el desayuno urgente – dijo Bella entrando -. Con Carlie estamos con hambre – dijo arrugando su nariz señal de que el movimiento de la pequeña le estaba molestando.

Prepare el desayuno mientras todos esperaban sentados a la mesa menos Nessie que estaba junto a mí. Serví todo incluyendo el jugo de naranja con la pastilla de hierro para Bella, ella prácticamente se abalanzo sobre las tostadas, mi pobre panzoncita estaba con mucha hambre. Una vez terminamos de desayunar limpie la cocina. Los sábados por lo general luego del desayuno tocaba el piano con Nessie.

-Nessie vamos al piano – dije mientras la bajaba de su sillita alta.

-¡Si papi! – exclamo con entusiasmo -. ¡Queo música! – siempre la entusiasmaba tocar el piano, es muy parecida a mí en ese aspecto o por lo menos me parece, eso da la pauta que es mi hija.

-¿Estas bien? – sentí que preguntaba y cuando mire Bella se removía en el sillón incomoda mientras Bree se acercaba a ella.

-Solo se está moviendo mucho y es difícil encontrar posición cómoda – contesto sonriendo.

-Creo que ya hemos visto suficiente y mejor dejamos a la señora descansar tranquila – dijo Riley.

-¿Qué pasaría ahora? – pregunte mientras alzaba a Nessie y me acerque sentándome al lado de Bella. Sobe un poco su barriguita donde se veía la patadita. Nessie se bajo y también toco el lugar riendo.

-La señorita Tanner me entrego en el día de ayer las evaluaciones psicológicas que realizo durante el tiempo que asistieron a la entrevistas se ve todo muy bien por lo que no hay ningún inconveniente con la adopción – mi corazón palpito con fuerza y con Bella apretamos nuestras manos que habíamos tomado.

-¿Cuándo tendríamos que pasar para finalizar los papeles? – pregunte con ansiedad.

-Ahora paso mi informe de la evaluación de hoy y me comunico con ustedes el viernes para confirmarles el horario en que pasarían el día lunes – confirmo Riley -. Ahí terminaría todo una vez que firmemos los documentos – todos respiramos aliviados y sonreímos.

Una vez nos despedimos y se fueron con Bella nos abrazamos fuerte. El lunes seria oficial Nessie sería una Cullen, no abría dudas de que es mi hija y nuestra familia estaría completa.

-Creo que voy a acostarme un poco – dijo Bella y nos separe para mirarla – Carlie está muy inquieta, debe ser por mis nervios – me acerque y le di un pequeño beso.

-Te amo hermosa – dije y ella sonrió para luego morderse el labio -. Es mejor que descanses ahora -. Nessie acompañamos un ratito a mami en la cama – dije.

-¿Mami noni? – pregunto.

-Mami está cansada – respondí. La acompañamos a la habitación y Bella se quedo dormida media hora después. Carlie estaba acomodada por lo que dejo de moverse.

El jueves Jacob paso con Vanessa por casa para despedirse, solo puede estar con ellos una hora ya que no me fue posible salir antes, ya había faltado el día anterior y antes había salido temprano. Ese día vinieron sin Tía lo cual agradecí, pero apenas se fueron Bella empezó el interrogatorio sobre lo que paso en la oficina.

-No me dijiste que hacia Tía en tu oficina – se acomodó en los sillones y yo al lado.

-No hay mucho que contar – dije encogiéndome de hombros -, fue a pedirme que saliéramos - la cara de Bella se transformo -. Le deje muy claro que estoy felizmente casado – agregue acariciando su rostro -. No te pongas mal ni siquiera gastes un pensamiento en ella, no vale la pena – comencé a besarla suavemente delineando sus labios con mi lengua porque sé que le gusta lo haga de esa manera, luego tome su labio inferior entre los míos para saborearlo, se aferro a mi cuello con fuerza y adentre mi lengua en su boca buscando la suya para empezar con una danza frenética por lo que el beso se torno más profundo, húmedo e insistente.

Mi mano de manera inconsciente se poso lentamente en uno de sus pechos y comencé a masajearlo primero con suavidad y luego con más fuerza. La respiración de los dos se agito notoriamente, hacia tanto no la sentía y lo necesitaba, la extrañaba, extrañaba sentirla mía.

-Edward – gimió cuando me aleje un poco y baje a su cuello para besarlo primero con suavidad, luego empecé a lamerlo suavemente mientras absorbía su aroma y sentía como tiraba de mi pelo.

-Aguarda Bella… - la respiración de los dos estaba agitada – no podemos… aun no… – dije alejándome y estaba a punto de protestar pero la corte -. Lo sé hermosa – dije acariciando su rostro que tenía sus mejillas coloradas y calientes -, estoy igual pero debemos esperar falta muy poquito – dijo.

-No tan poquito y te extraño, extraño sentirte – y no creo que sea ni la mitad de lo que la extraño yo. La bese un par de minutos más abrazándola fuerte.