Sinceramente este es uno de Mis Capitulos favoritos.........Disfrutenlo
Bella POV
-Tu mamá me conto que tocas el piano – me senté a su lado.
-Antes solía tocarlo – dijo con algo de melancolía -, hace muchos años que no lo hago.
-¿Por qué? – yo le he contado muchas cosas y quería saber sobre él.
-Tengo otras ocupaciones y no tengo tiempo – dude que fuera solo eso, me parece que hay mas, pero no me va a contar.
-¿Cuánto hace que no tocas? – pregunte.
-Como cinco o seis años, tal vez mas – estábamos serios -. Aun no tengo tiempo… el trabajo… - se encogió de hombros como restándole importancia.
-¿O ya no te gusta? – Rosalie había pasado por nuestro lado.
-¿Tienes frio? – negué con la cabeza - ¿Segura? – asentí-. Fue mi pasión desde niño, empecé a tocar a los cinco años, y después un día era como que ya no era lo mío, se me fueron las ganas de tocar y no se… ya no lo volví a hacer – quedamos los dos en silencio mirándonos a los ojos y sentí la ansiedad subiendo por mi cuerpo. Nos miramos por varios segundos -. ¿Qué va a pasar con tus padres? – aun no lo resuelvo.
-Aun no lo sé – mire al suelo -, tengo ganas de verlos, son mis padres y los amo, pero me asusta que conozcan a Nessie, no porque pueda pasar algo, sino porque las cosas cambiarían y aunque digo que creo no estar enojada con ellos, no sé como reaccionaria y me asusta algo, mi padre siempre ha tenido la facilidad para convencerme y que haga lo que él quiere – lo mire.
-Tienes la nariz colorada – sentí el roce en mi nariz y se sintió estupendo -. ¿Segura no tienes frio? – insistió.
-Estoy bien – asegure sonriendo.
-¿Qué paso con Jacob? ¿Son amigos de nuevo? – y cuando hablaba de Jacob se notaba que no lo quería.
-Nos conocemos de niños, nunca dejaríamos de ser amigos, aunque aun no es lo mismo, pero es bueno tenerlo de nuevo en mi vida. Después de tanto tiempo de conocerlo, recién me entero que él nació acá, en Forks.
Parecía molestarle lo que le decía -, incluso tiene parientes y amigos acá, nunca supe que cuando se iba de vacaciones venia a este pueblo. Dice que hace años que no venia, luego de que murió su abuelo incluso tiene la casa familiar que aun es de ellos – y eso no le gusto para nada.
-¿Se queda acá? – miraba el cielo.
-No le pregunte – tenía un mechón que caía sobre su rosto, así que tome mi oportunidad y lo aparte de su cara -, espero que no, es bueno hablar con él, pero aun no lo quiero muy cerca de Nessie, no porque sea malo, sino porque soy una mamá celosa y la quiero solo para mí – reímos.
-Tendrías que hablar con tus padres, si están buscando acercarse seguro es porque quieren que los perdones, ellos te pueden ayudar, no creo que te haya sido fácil estar sola con Nessie – aseguro y tenía toda la razón.
-Nada fácil – asegure -, pero cuando nació Nessie y la tuve en brazos, sabía que era capaz de todo por ella y no me importaba no tener quien me ayudara, es difícil… seguro, pero no imposible – mire al frente y me sorprendió ver que estábamos solos, no quedaba nadie en el jardín y yo ni me entere-. Estamos solos – Edward miro para adelante.
-¿Entonces que vas a hacer con tus padres? – pregunto.
-Tengo quince días para decidirlo, es el tiempo que se queda Jake y ahí le aviso que voy a hacer – había algo raro en su expresión.
-¿Y el papá de Nessie? – pregunto.
-Se llama James su padre y el mío tenían algunos negocios juntos, son contratistas, James siempre estaba metido en líos y, digamos supo arrastrarme en algunos con él. A mi padre no le gustaba que estuviéramos juntos y cuando no me dejaba verlo, me escaba, querían que estudiara, pero no quería alejarme así que trabaje y no estudie. Parecía que todo iba bien, pero un día lo descubrí con otra chica, Victoria y me dejo, luego descubrí que estaba embarazada y bueno allí todo paso… mis padres me echaron, Jake se enojo y James me dio dinero y me pidió que no volviera nunca más – resumí.
Nos mirábamos a los ojos en silencio, no escuchaba nada alrededor y tampoco prestaba atención, solo veía sus hermosos ojos verdes y la intensidad de su mirada. Sus labios bien delineados me atraían. Sentados uno al lado del otro, muy cerca y lo vi acercarse lentamente a mí, no pudo moverme y tampoco lo quería.
Se detuvo en el momento que su boca quedo a milímetros de la mía, sentía su aliento tibio, su respiración pesada y la electricidad que saltaba de un cuerpo al otro. "Solo un poquito más, un poquito más y saboreo sus labios", pensé. El comenzó el movimiento y nos miramos a los ojos…
-¡Bella! – Los dos nos sobresaltamos y nos separamos – Nessie está con sueño – me di vuelta y mire a Alice. Sentí el calor en mis mejillas.
-Creo que es tarde ya – me puse de pie -. Es hora de llevarla a casa – me acerque a Alice y fuimos a buscar a Nessie.
-Creo que no da más – dijo Esme sonriendo.
-Mami – me llamo Nessie y dio un gran bostezo. Todos rieron. Estaba muy cansada, se notaba en su carita.
-Ven mi amor – dije tomándola en brazos, abrazo mi cuello y acomodo su cabecita en mi hombro.
-¿Espero la hayas pasado bien? – Esme me miraba.
-Muy bien – asegure y sonrió.
-Edward, mejor llévalas, Nessie está muy cansada, pobre angelito – pidió Esme.
-Bella recuerda nuestra salida el sábado – Alice estaba muy entusiasmada.
-Y luego el domingo con tu niña – dijo Rosalie.
-Vamos Bella – dijo Edward tocando mi cintura.
Me despedí de todos y salimos de la casa. Subimos a su auto y comenzó el viaje hasta mi casa. Ninguno hablo, pero no estábamos incómodos, fue un silencio acogedor. Reacomode a Nessie recostándola sobre mi falda. Cuando llegamos él se bajo rápido y la tomo en brazos.
-Ven, voy a acostarla directamente – dije una vez entramos en la cabaña y fuimos a la habitación de mi niña.
-En verdad está muy dormida – dijo riendo. Estaba cambiando a Nessie, pero ella no abrió los ojos para nada en ningún momento.
-Cuando en verdad está dormida no importa que hagas no se despierta por nada – conteste.
-Va a ser mejor que me vaya – dijo y nos miramos -. Mañana trabajo temprano – solo asentí.
-Si quieres puedo preparar café – propuse y sonrió.
-Lo dejamos para otro día - asentí.
Cuando termine con Nessie lo acompañe hasta la puerta y luego de mirarnos durante varios segundos en la puerta sin decir nada, dio la vuelta y se fue, lo cual me decepciono, porque tenía la pequeña esperanza que tuviéramos el beso que interrumpieron en su casa, pero subió a su auto y se marcho. Entre en mi cuarto, no me iba a duchar ahora, estaba cansada y solo quería dormir. Así que solo me cambie y me acosté. Y ahí estaba rememorando una y otra vez, ese casi beso que tuvimos. Recordé las sensaciones, nervios, ansiedad y un deseo casi incontrolable de abrazarme a su cuello y besarnos. "¿Realmente lo hubiera hecho, si su hermana no hubiera interrumpido me abría besado? Porque ahora se fue rápido y ni siquiera lo intento", pensé.
A lo mejor se sintió aliviado de que nos interrumpieran, después de todo yo tengo una hija, y no seria fácil estar conmigo así, y seguramente lo pensó bien después de eso y decidió no volver a intentarlo.
Los golpes en la puerta me asustaron, sobre todo por la hora. Es muy tarde y apenas había logrado dormirme. Volvieron a golpear por lo que me levante, en un principio pensé había sido solo un sueño.
Solo alcance a abrir la puerta y lo siguiente que sentí fueron sus manos tomando mi rostro y luego sus labios posándose suavemente en los míos. Se alejó un instante – Edward… - volvió a mis labios, soltó mi rostro y sus manos fueron a mi cintura, me abrazo fuerte y me estrecho contra su pecho. Mis brazos fueron a su cuello y enrede mis dedos en su pelo y lo tire un poco, adoro su pelo. Sentí la puerta cerrarse con fuerza, una vez entramos, aun besándonos, apenas nos separo un poco, respiro profundo y volvió a besarme. Ahora metió su lengua en mi boca y busco la mía, había algo de desesperación en el beso, acaricio un poco mi espalda con una mano, con la cual me tomo de la nuca enredando un poco su mano en mi pelo. Su sabor era embriagador, definitivamente podría estar durante mucho tiempo haciendo esto.
Finalmente nos separo, quede con los ojos cerrados y mi corazón parecía estaba corriendo una carrera olímpica para salirse de mi pecho. Sentí otro pequeño beso en mis labios y abrí los ojos.
-Me fui sin darte las buenas noches – dijo con una deslumbrante sonrisa torcida. Me quede sin palabras, ni siquiera podía hilvanar una oración como para contestarle. Así que solo me quede mirándolo totalmente extasiada.
-Ahora si me voy definitivamente – otro pequeño beso en mis labios -. Cierra con llave – dijo antes de cerrar la puerta detrás de él.
Cerré la puerta con llave, apague la luz del living, volví a mi cama, me acosté, me tape y todo esto lo hice en totalmente hipnotizada. "¡Por Dios! No hace ni quince días que lo conozco y no puedo sacarlo de mi mente y… ¡ME BESO!", pensé emocionada.
Dormir no fue lo más fácil esta noche, sentía su sabor, sus besos, hasta su aroma aun a mí alrededor, era como que todos mis sentidos estaban impregnados de él. Di miles de vueltas en la cama, hasta que finalmente pude conciliar el sueño. Y obviamente, soñé con él.
Me desperté sobresaltada pensando que se me hacia tarde, pero estaba bien con el horario. Empecé la rutina, necesitaba sacarlo de mi cabeza unos minutos… por lo menos. Me duche, me cambie, mire a Nessie y le prepare su leche para despertarla y luego desayune.
"Buenos días. Espero no sea demasiado temprano. Espero que tu y Nessie tengan un hermoso día. Me encanto besarte. Edward" - decía el mensaje cuando sonó mi celular.
"No es demasiado temprano y espero que tu día también sea hermoso. Y me gusto el beso también. Bella" - Y el día no podía empezar mejor y mi sonrisa no podía ser más grande.
Me llamo el miércoles a la tarde, las mariposas en la boca de mi estomago me hicieron tartamudear, me pidió perdón porque durante la semana no podría vernos, problemas en el trabajo. Así que el resto de la semana no nos vimos, pero cada mañana había un mensaje:
Edward: "Buenos días. Espero tengan el mejor de los días. Las extraño. Y pienso en nuestro beso"
Y a la noche:
Edward: "Que descansen. Espero Nessie tenga hermosos sueños. Yo sueño con nuestro beso".
Definitivamente es el hombre más dulce, hermoso y atractivo que conozco. Estoy feliz, siento tantas cosas, no me sentí nunca así con nadie, ni siquiera con James. Ahora creo que todo lo que paso, me trajo hasta este lugar para conocerlo, para que tenga otra oportunidad.
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