Bella POV

En el living estaba solo Emmett viendo un partido de algún deporte que no conozco por la televisión, Alice me había asustado un poco con su afirmación, pero preferí no pensarlo mucho, nada iba a pasar. Me senté a su lado y me miro.

-¿Edward? – pregunte.

-No me digas que no puedes vivir sin él – se burlo y sonreí -. ¿Te puedo preguntar algo? – dude un poco porque sus ojos y esa sonrisa mostraban algo de picardía.

-Depende – dije dudando y largo una carcajada.

-¿Hasta cuándo lo vas a tener esperando? – Lo mire sin entender – Esta desesperado por un rapidito aunque no sea más – y el rubor cubrió toda mi cara, debe haber sido un rojo furioso y él se arqueaba de la risa -. Haaay… me encantaaa… cuando te sonrojas – dijo riéndose y rodé mis ojos. Edward entraba y me miro, desvié mi vista de lo avergonzada que estaba.

-Emmett ¿Qué le dijiste? – lo miro serio.

-Nada – contesto bastante calmado -. Solo me gusta avergonzarla, a ti te gusta cuando se sonroja, la deje lista para cuando llegaras – volvió a reír.

-No seas idiota, déjala en paz – lo reto y vino a sentarse a mi lado.

-Hermanita – me llamo y lo mire -. No fue tan grave ¿verdad? – lo mire.

-No fue tan grave – dije.

-Igual no la molestes – insistió Edward -. Vas a hacer que no quiere venir más acá – sonreí, eso era imposible.

-Y eso seguro seria molesto porque no tendrían quien cuide a Nessie mientras ustedes se divierten – volvió a reír y… - ¡Auch!… - exclamo cuando Edward le pegó con fuerza en su brazo -. Eddy no era para tanto – protesto.

-No me digas Eddie, osito – me largue a reír.

-¡¿Osito?! – dije entre risas y pregunta.

-Te dije que no me dijeras así – protesto Emmett -, solo me dice mi Rose de esa manera… cuando quiere mimos – Edward resoplo.

-Teníamos un trato – dijo Edward.

-Está bien, no te digo más Eddy así no me dices osito – reí de nuevo -. Por lo menos la hice reír – dijo.

-Te queda bien osito – dije y sonrió -. Pareces un osito tierno y de peluche – Edward se rio y Emmett puso mala cara -. No te enojes hermanito, te ves mejor sonriendo – sonrió. Cuando esta serio da miedo, pero es un tierno. Sonó el celular de Emmett.

-Bueno tortolitos, mi Rose me está pidiendo que vaya con ellas – dijo -. Y eso no se lo puedo negar – sonreímos. Edward tomo el control remoto, Emmett se fue y yo me acomode junto a mi novio.

Me tomo del mentón para subir mi cara y comenzó a besarme. Cada vez sentí más calor y mas deseos de sentirlo, de apoco se fue pegando mas y mas a mi cuerpo, mientras la respiración de los dos se aceleró y se torno más pesada. Me empujo hasta que quedamos acostados en los sillones y empezó a acariciar mi cuerpo.

-Ed… - tapo mi boca con la suya y volvió a besarme -. Edward – lo llame cuando logre alejarme.

-Por favor Bella, aunque sea toquémonos, me estas matando – dijo y volvió a besarme con fuerza.

-En tu habitación – dije y sonrió. Me alzo y envolví mis piernas en su cintura y me llevo a su habitación mientras nos seguíamos besando.

No llegamos a la cama, solo cerró la puerta y me apretó contra la pared. Me bajo de su falda, tomo mi mano y la apoyo en su entrepierna. Sentí el bulto que se había formado por su pene excitado y parado.

-Acaríciame, no vamos a pasar de esto – volvió a besarme y metió una mano entre mis piernas y comenzó a acariciarme.

Y como dijo, no paso de eso, solo nos acariciábamos. Mi mano acariciando su bulto enorme, el con una mano en mi sexo y la otra en un pecho acariciaba con desesperación, los dos agitados y disfrutando el roce. Sentía las palpitaciones en mi interior e iban creciendo a medida que el apretaba mas y mas, moviendo mis caderas como reflejo como si realmente lo estuviéramos haciendo. Él movía sus caderas también y yo apretaba cada vez con más fuerza y se sentía el movimiento en la zona. Así estuvimos hasta que después de mucho que estuvimos tocándonos, los dos tuvimos el orgasmo y terminamos abrazados.

-Gracias- dijo bajo en mi oído -, necesitaba esto – no dije nada y seguí abrazada. Me empujo hasta la cama y nos acostamos aun abrazados.

En dos días mis padres se iban, estaba algo triste, después de todo era difícil alejarse nuevamente, sobre todo porque no habíamos vuelto a pelear y los dos decían estar orgullosos de mi y de cómo había logrado salir adelante sin ayuda. Y se notaba amaban o más bien adoraban a Nessie. Había dejado a Nessie con mamá en la plaza y ahora esperaba llegar a Charlie, que me había pedido hablar a solas.

-Bella – me llamo y lo mire. Lo estaba esperando hacia más de media hora en el lobby del hotel -. Perdón la demora pero estaba esperando algo – dijo y asentí -. Necesito que hablemos seriamente – dijo y me sentí nerviosa -. Vamos a mi habitación, es delicado.

-De acuerdo – dije y lo seguí.

Espere mientras miraba y se ve que leía una carpeta que había sacado de la mesa de luz. Parecía que lo que leía no le gustaba y su ceño se fruncía cada vez más.

-Sé que te vas a enojar y la verdad es que no me importa – lo mire sorprendida -. Solo ten en cuenta que hago esto porque las amo a Nessie y a ti – sonreí algo -. Quiero cuidarlas y evitar que algo les pase.

-¿Qué pasa? - ojala se apurara porque me estaba poniendo nerviosa.

-Toma – me entrego la carpeta que estuvo leyendo -, ahí está todo – tome la carpeta y la abrí.

-¿Edward? – fue más para mí que para él la pregunta.

-Lo hice investigar – dijo y me hizo enojar, no tenia porque hacer esto -, es mi deber como padre saber qué tipo de persona es…

-No lo quiero, no lo voy a ver – no creo que haya algo tan malo.

-Por favor Bella – pidió.

-No me interesa lo que haya ahí – conteste -. No tenias derecho, aunque sea porque nos quieres – me levante y comencé a caminar hacia la puerta.

-¡Sabias que tres veces lo arrestaron! – exclamo antes que saliera y me detuve – ¿O que estuvo de novio con una tal Jesica que estaba esperando un hijo de él y de un día para el otro no estuvo más embarazada? – siguió pero no me moví -. ¿Qué estuvo en rehabilitación por alcohólico y tuvo algo que ver con drogas? – me di vuelta y lo mire.

-Aun nos estamos conociendo, seguro me contara que paso – dije. Charlie rodo sus ojos.

-Bella – se acercó y tomo mi mano -, recuerdo como era con James lo mal que se ponía cuando estaba drogado, cuantas veces te dije que te alejaras. Si Edward…

-Él no lo hace ahora – asegure -, hemos pasado mucho tiempo juntos…

-Pero no te ha contado nada de esto – dijo y lo mire con tristeza - ¿o me equivoco? – no lo había hecho, pero yo tampoco le hable de mi pasado. Aunque nunca me arrestaron, me pase con el alcohol varias veces y James me hizo probar las drogas, pero Charlie no se entero.

-Realmente quieres correr el riesgo – dijo -, piensa en Nessie, el riesgo en que la pones a ella. Si él tiene una recaída, lo peligroso que puede ser – insistió.

-Pero Charlie, él la adora, no le haría nada – suspire y rodo sus ojos.

-Bella, piensa en James, la vez que se interno y supuestamente lo dejo – lo recordaba, fue una de las peores noches de mi vida -, te pego y si no hubieras reaccionado y te hubieras alejado te hubiera hecho más daño – sentí mis ojos llenarse de lagrimas.

-Lee esto – dijo y puso la carpeta delante de mi -, estuvo dos veces en rehabilitación – insistió, tome la carpeta -.

-Charlie, yo solo quiero tener una oportunidad de estar bien en él – dije.

-Bella puedes tener otra oportunidad, eres joven – dijo -. Puedes intentarlo con Jake, el te ama – lo mire sorprendida -, me lo dijo antes de irse, te lo quería decir pero no se animo por Edward – negaba con la cabeza -. Puedes intentarlo – dijo -. Habla con Edward, trata de que te cuente sobre esto y cuando se niegue, porque lo hará veras que no te miento, hay cosas que no son buenas en su vida y te van a dañar – aseguro -. Ahí dice que mientras salía con esa chica, la engaño muchas veces y con varias – ese no era mi Edward, no el que yo conocía.

-Déjame ir – le pedí -, dile a mamá que busco a Nessie en unas horas – deje la carpeta en la cama y me dispuse a salir.

-Llévala Bella – dijo tendiendo la carpeta cuando lo mire -. Nadie es perfecto y él menos que todos – la acerco mas y la tome.

Salí lo más rápido que pude y subí a mi camioneta. Deje la carpeta en el asiento, porque no quería mirarla. Después de todo Charlie lo dijo, nadie es perfecto ni él ni yo ni Charlie siquiera, todos tomábamos malas decisiones y errábamos el camino, soy la prueba viviente de ello. Además que no habláramos del pasado no quiere decir nada, porque ninguno de los dos lo hacía.