Bella POV

Seguí esperando a Em mientras camina con Nessie en brazos para tratar de distraerme. Hasta que finalmente nos encontramos y me llevaron a su casa. Un par de horas después llego Alice y aun no teníamos noticias de Edward. Todos estaban preocupados, más que eso, se los notaba afligidos y con miedo. Seguro era miedo de una recaída, pero estaba segura que eso no iba a pasar. Alice lo llamo varias veces y en ese primer momento solo lo llame una vez.

"Edward están todos preocupados, por favor llama" – tendría que haberle dicho que yo estaba igual que todos, pero no sabía cómo iba a reaccionar, después de todo el que cortara el celular cuando dijo que me amaba seguro lo hizo pensar que era un rechazo.

-Bella, cariño – me llamo Esme -. ¿Por qué no se recuestan un rato con Nessie? Tienen cara de cansadas, ella está con mucho sueño.

-Prefiero esperar a que sepamos algo de Edward – conteste.

-Bella, cuando llame te despertamos – dijo Carlisle -. Descansa un rato – insistió.

-Vamos hermanita, te acompaño a tu habitación – Emmett tomo a Nessie en brazos.

-Puedo ir a mi casa – dije.

-No, Bella, hasta que tengamos noticias te quedas con nosotros cariño – dijo Esme y solo asentí porque yo prefería quedarme.

Estuve dando vueltas en la cama una y otra vez, ya era la tarde, Nessie aun dormía, seguro estaba agotada y yo estaba igual pero no podía dormir. Lo llame de nuevo, y una vez mas paso al contestador.

"Edward, no quiero hacer todo de esta manera, llama, por favor" – sonó a ruego y fue con angustia, pero no me importaba, quiero estar con él de nuevo.

Baje y deje a Nessie aun dormida, aun estaban todos en la casa y sentados en el living esperando. La única que faltaba era Alice. Fui con Esme a la cocina y la ayude a preparar el almuerzo.

-¡Papá! – sentimos el grito de Alice y con Esme nos apuramos a salir al living.

-¿Qué pasa Alice? – Alice termina de bajar las escaleras a toda prisa.

-Mira – le entrego un papel -, estoy seguro que se fue para allá – dijo con unas sonrisa -. Él debe estar en Seattle, tiene que hacer la conexión allá.

-Alice puede haber viajado a su destino final ya – dijo Carlisle más afligido. "¿Cuál destino final? ", pensé, pero no lo pregunte.

-No, estoy segura, esta Seattle – y Emmett se puso de pie.

-Voy a reservar pasaje – dijo seguro -. Cuando llegue haya lo busco en los hoteles, en alguno lo puedo encontrar.

-Emmett existe la posibilidad de que ya haya viajado – dijo Carlisle.

-Igual nosotros teníamos planeado ir – dijo Rosalie.

-Está bien – Carlisle lo miro serio -. Apenas tengas noticias nos avisas, vamos a ver que encontramos disponible.

-Yo voy con ustedes – dije y todos se dieron vuelta a mirarme.

-Bella…

-Es lo mejor, que me vea y estando solos vamos a hablar mejor – corte a Alice.

-Bella vamos a mi habitación y hablamos solas un momento – dijo Alice acercándose a mi lado.

-Alice, se porque es y la verdad quisiera que fuera Edward quien me cuente – dije y me miro seria.

-A él le cuesta mucho, no fue fácil, fue una época difícil para toda la familia – me llevo del brazo a un costado.

-Me imagino que si, pero también es necesario, no quiero quedarme con suposiciones – dije y suspiro profundo.

-¿Puedo saber cómo te enteraste? – pregunto.

-Eso no importa Alice – dije y la verdad es que me da vergüenza confesar lo que hace mi padre.

-Bella, también debes ser sincera con nosotros, así como tú lo exiges – dijo enojada.

-Charlie lo hizo investigar, y luego Mike me dijo algo – ahora estaba mas seria si era posible, tenía el entrecejo fruncido.

-Mike Newton es un perrito faldero, siempre anduvo atrás de Jesica – protesto.

-Y fue estúpido de mi parte hacerle caso – dije.

-En eso te doy la razón – sonrió un poco.

-Mira Alice, le daré tiempo para que lo haga cuando él pueda, puede contarme todo o una parte o de a poco, pero prefiero que sea él – insistí y ella asintió.

-Deja a Nessie acá y la cuidamos con mamá – dijo y asentí.

Consiguieron vuelo para el otro día a media mañana, llegaríamos para cerca del mediodía. El vuelo en el avión fue una tortura, más cuando recibieron el mensaje confirmando que estaba en Seattle. Habían reservado dos habitaciones en el hotel Fairmont Olympic, Alice nos aviso que él estaba en Vintage. Apenas llegamos averiguamos su habitación y subí con toda la ansiedad y el nerviosismo, solo quería verlo, abrazarlo, besarlo y decirle que todo estaría bien y que estaríamos juntos.

-¡Edward! – exclame apenas abrió la puerta y lo abrace fuerte. Fue un alivio que el correspondiera el abrazo.

-Mi Bella – acaricio mi rosto cuando nos separamos. Y sus caricias se sienten tan bien.

Se acercó despacio y comenzó a besarme, sentía su caricia en mis labios, el calor de los suyos, la suavidad con la que me besaba, la adoración y el amor. Estar junto a él era perfecto, era lo que necesitaba para estar bien. Hablaríamos y todo se arreglaría, sino me quería explicar no había problema porque estaba dispuesta a esperar que saliera de él, si le dolía o no podía yo esperaría.

-Edward, yo…

-Tortolitos. La dejo bajo tu cuidado, trata de que vuelva en una sola pieza – a Emmett realmente le gusta molestarme. Tuve que esconder mi cara en el pecho de Edward.

Cuando Emmett y Rosalie se fueron entramos a su habitación y aguarde que se terminara de cambiar, su cuerpo es perfecto y me dedique a observar sus músculos hasta que corto mi visión cuando se coloco la camisa. Y debo confesar que ya estaba acalorada y decepcionada cuando nos saco de la habitación para ir a almorzar.

-¿Almorzaste? – solo negué con la cabeza mientras el sonreía -. Vamos – tome su mano y fuimos al restaurante del hotel -. Tienes cara de cansada – dijo cuando estamos sentados.

-No pude dormir bien anoche. Nos tuviste preocupados, desapareciste sin decir nada – y eso fue un reproche porque no estuvo bien para con su familia lo que hizo. Desaparecer de esa manera.

-Si lo sé, tendría que haber avisado ¿Volviste para quedarte? – me sorprendió la pregunta, después de todo para que me habría quedado.

-Si, Esme me dio nuevamente las llaves de la cabaña, pero ahora tengo que conseguir auto porque Charlie vendió mi camioneta – dije y me estaba muriendo por saber que haría él - ¿A dónde te ibas? – salió muy bajo.

-¿No te lo dijeron? – negué con un movimiento -. A Nueva Jersey, me ofrecieron un trabajo allá y lo acepte – y yo solo quiero que se quede conmigo.

-¿Es un buen trabajo? – si me diera una señal de que me perdona hasta podría irme con él. "No me ha dicho de nuevo que me ama", pensé.

-Muy bueno, por eso lo acepte – eso me puso mal porque tampoco quiero ser quien lo frene -. ¿Por qué volviste? – se noto la ansiedad en su voz.

-Nunca quise irme en realidad, estaba enojada – y me quede en silencio, hasta que tome valor… -. No te vayas – dije finalmente.

-¿Por qué? – "Porque te amo y te quiero a mi lado", pensé.

-Tu familia no quiere, todos te queremos cerca – y esa fue mi muy inteligente respuesta.

-Bella – "¡Diablos Bella!, díselo de una vez", pensé -, Bella – lo mire -. Dame una razón para quedarme – dijo.

-¿Por qué yo? No es suficiente tu familia – y vi su mirada, como cambio, se estaba molestando.

-Porque me fui por ti – contesto -. Dame una razón para quedarme – repitió y me hundí en el silencio. Se levanto una vez pago el almuerzo y comenzó a alejarse.

-Edward, aguarda – lo tome del brazo para que se detuviera.

-Dame una razón, dime porque quieres que me quede – insistía -. Sabes a que me refiero, sino no sientes nada por…

-Te amo – dije sin más rodeos. Y comenzó a besarme, con desesperación, deseo y amor. Había gente pero no me importo, era el momento y ameritaba este beso. Había enrollado mis brazos en su cuello y lleve mis manos a su cabello el cual comencé a acariciar. Él tomo mi cintura y me apretaba fuerte mientras acariciaba la zona.

-Te amo – dijo cuando nos separamos y estaba con una hermosa sonrisa y esa mirada que se solo tiene cuando me ve a mí.

-También te amo, pero debemos hablar – dije sonriendo.

-De lo que quieras, amor – dijo. Ahora notaba estaba dispuesto a hablar.

Nos abrazamos por la cintura y fuimos a su habitación de nuevo. Durante el viaje en el ascensor me beso todo el tiempo y sus besos son lo mas dulce que he probado.

-Debes avisar al resto de tu familia – dije cuando íbamos entrando a la habitación – estaban todos muy preocupados.

-Lo hare, ahora solo quiero que estemos juntos – dijo y me sonroje, por lo que él me miro sorprendió -. Bella, me refería a estar en el mismo lugar y hablar – dijo riendo.

-Quiero hablar – dije sonriendo -, pero ahora estaba pensando en algo mas primero…