Jackie despertó a Clarence, su chofer y con prisa salieron al apartamento de Rose. Jasper llegó justo cuando ellos aparcaban.

-Dime la verdad hijo, ¿qué ha pasado?- Preguntó angustiada.

Jasper respiró hondo forzando una voz serena.

-No lo sé Jackie, Bella es incapaz de decir nada coherente. Cuando salí de ahí, aún no sabíamos el motivo- Relató sincero.

-Dios mío…- Musitó- No creo que pueda soportarlo… No otra vez- se enjugó las lágrimas y respiró hondo antes de mirar a Jasper- ¿Estás preparado?- El la miró fijamente y volvió la vista a la puerta.

-No- Y empujándola levemente de la cintura, se dirigieron hasta ella.

Los secos golpes despertaron a Carlisle, quien dio un respingo en la cama. Miró a Esme, quien respiraba profunda y relajadamente. Estaba dormida.

Pensó en Emmet y Rose mientras se ponía unos pantalones, probablemente el alcohol no les dejaría ver la cerradura. Rió encaminándose a la entrada.

Lo que vio al abrir, le dijo al instante que su primera idea estaba lejos de ser la razón. Los rostros compungidos de quienes estaban en la puerta, provocaron que un escalofrío recorriese su columna.

-¿Jackie?- No, no era lógica una visita de aquella mujer a altas horas de la madrugada, y menos lógico que quien le acompañase fuese Jasper.

-Carlisle, será mejor que pasemos- Éste se apartó de la puerta y les siguió de camino al salón.

Se quedó parado, mirándoles. Ambos se observaron entre sí, y Jasper asintió levemente. Jackie le miró.

-Vengo a por Joel- Carlisle la miró sin comprender. La mujer, tomó aire profundamente y dijo de una vez el motivo- No quiero que te pongas nervioso Carlisle- Bingo, lo hizo. Se sentó en cuanto oyó las palabras mágicas.

-Por favor…- La instó a seguir apretándose las manos.

-Edward está en el hospital- La miró con los ojos dilatados y se levantó de golpe- No sabemos como está, sólo sabemos que está ahí. Vengo a llevarme a Joel- El hombre se pasó la mano nerviosamente por el pelo.

-¿De qué estás hablando Jackie?- Miró a la mujer y ésta hizo lo mismo con Jasper- Decidme que pasa… ¿Jasper?- El aludido se levantó.

-Será mejor que despiertes a Esme, Edward está muy grave Carlisle- Un grito se oyó en el pasillo.

-¿Edward qué? ¿De qué estás hablando Jasper? ¿QUÉ LE PASA A MI HIJO?- Esme entró al salón justo cuando oyó hablar de su hijo, y el pánico tomo cuerpo en ella. Tomó a Jasper por los hombros zarandeándole- ¿QUÉ DEMONIOS LE PASA A MI HIJO?- Chilló desesperada.

Carlisle la tomó de los brazos y como pudo la separó.

-Será mejor que nos vistamos cariño. Tranquila, seguro que todo está bien- Trató de sonar todo lo tranquilo que pudo mientras se llevaba a su esposa al dormitorio.

Esme le siguió en trance, tomó las ropas que Carlisle puso a su lado y como una autómata, se vistió rápidamente. En pocos minutos estaban en el coche de Jasper.

Jackie llevaba a Joel en brazos, el niño, se había removido. Preguntó qué pasaba en sueños pero volvió a acurrucarse entre la manta que su abuela llevaba en el coche. Se despidió de Jasper no sin antes pedirle información en cuanto la tuviese.

-¿Qué ha pasado?- Volvió a preguntar Esme nerviosamente.

-En realidad, no lo sabemos. Yo al menos. Es confuso. Bella y él se marcharon antes…- Consideró no decir a qué- Ella quedó en mandar un mensaje a Rose, pero al no llegar, se preocupó. Vimos su coche en el aparcamiento y llamamos insistentemente hasta que descolgó. Estaban en el hospital, el Truman. La enfermera sólo nos dijo que estaba en quirófano. No se más- Omitió deliberadamente las paradas cardíacas y su estado. No era necesario, no de momento.

-Dios, mi niño… - Esme se tapó el rostro con ambas manos mientras las lágrimas caían sin control- Ahora que había encontrado a su mujer- Siguió susurrando dolorosamente.

Carlisle no habló, se limitó a tomar una de las manos de su mujer en sus manos. Ambos, se sentaron juntos en el asiento trasero, y Jasper evitó mirar por el espejo retrovisor. No quería provocar más preguntas. No estaba preparado para las respuestas.

-Bella, cariño… ¿Qué fue lo que pasó?- Rosé tomó sus manos y se arrodilló frente a ella.

Bella se tomó un tiempo para hablar. Estaba más tranquila, al menos, el relajante hizo bien su trabajo.

-Fue Tanya- Habló en un susurro, pero hasta en esas circunstancias, el odio se filtró en sus palabras.-El me empujó Rose- Elevó sus ojos pesadamente y sostuvo la mirada de su rubia amiga- Me empeñé en ir por chocolate, él quería ir a casa, hacerlo para mí, pero… Me empeñé Rose, y ahora…- Volvió a quebrarse.

-Bella, no pienses más de la cuenta, te lo pido por favor, no te mortifiques- Rose intentó tranquilizarla dulcemente.

-¿No entiendes que todo esto pasó por mi estupidez?- Su voz se elevó levemente- Qué Edward está…-Cerró los ojos y sintió un espasmo por todo el cuerpo-… que puede estar…- Emmet la interrumpió.

-No está muerto. ¿Oyes bien Bella? No lo está. Y deja de sentirte culpable, no culpes al chocolate, no culpes al destino, culpa a esa maldita zorra a la que mataré con mis propias manos- Escupió violento.

Bella sintió dolor ante el tono de Emmet. Sintió la familiar culpabilidad del último año. Edward estaba en el quirófano, luchando por vivir, o en el peor de los casos… Y ella era la única responsable. No podía dejar de recordar sus últimas palabras y se sintió peor. No, su estupidez les trajo aquí, al ahora, y eso nadie lo podía cambiar.

-¡Bella!- Un grito desesperado la sacó de sus pensamientos.

Oh no… Vio a Esme correr hacia ella, con el rostro desencajado.

-Cariño… Cómo… qué… Bella… ¿qué?- Balbuceaba rápido, angustiada y Bella no pudo evitar llorar de nuevo. Esme la abrazó con fuerza, fundiéndose ambas en un abrazo demoledor.

-Esme…- Lloriqueó sin fuerzas- Perdóname- Gimió desesperada.

-¿Por qué?- Esme se separó y la miró presa del pánico- ¿Bella…?- Pero ésta no respondió.

-Tanya les encontró y atropelló a Edward- Emmet habló con odio, temblando visiblemente, y Carlisle le abrazó.

-¿Qué?- Se separó de Bella y se acercó a Emmet- ¿Hijo?- Le llamó apenas sin voz- ¿Edward?- Volvió a preguntar de nuevo.

Emmet, Rose y Alice miraron a Esme, Carlisle y a Bella. Jasper abrazó a Alice, quien se mantenía en uno de los sillones, encogida. Sin poder apenas reaccionar ante todo lo que estaba ocurriendo.

-¿QUÉ DEMONIOS LE HA PASADO A MI HIJO? EXÍJO SABERLO ¡YA!- Gritó exasperada. Sin poder contenerse se abalanzó sobre Emmet. ¡QUÉ!- Le zarandeó.

-Por favor mamá, tranquilízate. Yo te explicare todo, pero tranquilízate, ¿si?- Tomó a su madre del brazo y la llevó a uno de los sillones, se sentó a su lado y respiró hondo.

-Edward está grave- Su madre se encogió en el sillón, su cuerpo se convulsionó y su mano tapó su boca ahogando un gemido- Mamá… tuvieron que reanimarlo… No sé… No sabemos nada más. Entró en quirófano hace más de dos horas- Las lágrimas cayeron, el tampoco podía soportarlo más.

Carlisle se acercó a ellos, y los tres se fundieron en un abrazo de dolor. Sus llantos traspasaron los cuerpos ya tocados de los asistentes, y Bella no pudo evitar encogerse entre jadeos. Alice corrió a ella y la sostuvo entre sus brazos.

-Tranquila cariño por favor. Todo irá bien. Por favor…- Bella negaba con la cabeza, su cuerpo siguió temblando.

-No No No No No Nooo- Nada está bien Alice. Nada irá bien. Quiero a Edward… Por favor… Que alguien me lo traiga… Por favor- Musitó tan rotamente que los demás contrajeron sus pechos.

Lejos de allí, un teléfono sonó en el silencio de la noche.

-Jacob Black- Respondió con la voz pastosa.

-Black, siento despertarle- La otra voz sonó grave.

-Comisario Montes- Se incorporó en la cama rápidamente mientras prestaba atención a la otra voz.

-Black, Denali ha vuelto a actuar- Jacob abrió los ojos cómo platos.

-¿Bella?- Preguntó levantándose de golpe, y despertando a Ariana de su sueño.

-¿Qué pasa con Bella?- Esta se sobresaltó al oír su nombre a esas horas de la madrugada. Jacob paró su mano frente a ella, pidiéndola silencio.

-No, creo que es su novio- Jacob se sentó de nuevo en la cama

-¿Edward Cullen? ¿Qué ha pasado con él?- Ari se acercó a Jacob y se pegó a él con el rostro preocupado.

-Los chicos avisaron hace un par de horas de un atropello en el Bulevar de Brookside. Los testigos hablan de una mujer cubierta por una visera, que conduce un todo terreno, concretamente un Navigator negro. Un hombre la echó hacia el otro asiento, pero todos coinciden en que era rubia. La matricula ha sido rastreada y voilá, el auto pertenece a Stevens- Relató el Comisario.

-¿Qué hay de Cullen?- Preguntó cauto.

-Las cosas no pintan bien. Tengo a dos hombres en el hospital. Será mejor que vayas para allá- Suspiró cansadamente.

-En seguida- Se levantó, y tras despedirse del Comisario, tiró el teléfono sobre la cama.

-¿Dónde vas?- Ari se levantó y le imitó cogiendo ropa.

-Ari, quédate. Yo voy al hospital. Ya te llamaré cariño- Pidió mientras abrochaba sus pantalones.

-¡Ni hablar!- Respondió airada - ¿Quién está herido, Bella?- Pasó su camisa por los hombros mientras preguntaba.

-Su novio…- Suspiró- Tanya le atropelló- Negó con la cabeza.

-Maldita zorra- Sus ojos se llenaron de lágrimas- ¿Cuándo va a parar esta pesadilla… Cuando por Dios?- Jacob la abrazó y besó sus cabellos- Pronto mi vida. Pronto- Prometió con los labios apretados.