Sed de Venganza

Autor: Ness
Género: + 18
Fecha Creación: 13/11/2014
Fecha Actualización: 12/02/2016
Finalizado: NO
Votos: 3
Comentarios: 16
Visitas: 79100
Capítulos: 57

 

Todos van a pagar, todos. Los que me empujaron al abismo, los que no me ayudaron, los que celebraron mi caída sin piedad. Son doce rostros, doce nombres que me han dado fuerza para no morir.

 

Elizabeth Masen, Eleazar Delani, su esposa Carmen, su hija Tanya, Tyler Crowley, Alec, James Hide, Demetri, Jane Demons, Aro Vulturi, su hijo Jasper y el traidor de...Edward Cullen. Ellos mataron todo aquello que algún día fui, pero no acabaron conmigo del todo, no, porque antes tengo que verlos caer. Y no habrá piedad, lo juro por mi padre...¡Lo juro!

 

Los personajes pertenecen a Stephanie Meyer. La historia a Telemundo.

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 45: CAPÍTULO 44

Abrí esa caja vieja con impaciencia y comencé a leer con rapidez uno tras otro los documentos que contenían.

- Dime...¿Qué es eso?¿Qué pone?Seguro que no es nada.-preguntó Jacob impaciente.- No tuvimos que dejar ir a Jane sin saber si nos estaba tomando el pelo. Se que era el trato. Documentos por libertad, pero aún así ha podido engañarnos.

- Pero ya no podemos seguir así...-dijo Sue.-Tenemos que dejar de tomarnos la justicia por nuestra mano, dijimos que lo haríamos hasta que se pudiera hacer justicia ante la ley. Mi hijo va a ayudarnos, pero tenemos que hacerlo por la vía legal.

- Ya...-dijo Jacob.-pero esa mujer es una asesina y la hemos dejado ir. Sin ninguna garantía.

- Los lobos la están buscando...-dije mientras revisaba más documentos.-no tardaran en ajustar cuentas con ella. Y Sue tiene razón, vamos a vengarnos, pero sin tener que ponernos a su altura.

- Bueno...¿Nos vas a decir que pone en esos malditos papeles?-dijo Jacob impaciente cogiendo unos pocos de la caja.- Cielo, te gusta mucho el suspense.

- Son cheques, algunos son muy antiguos...-dije leyendo las cifras desorbitadas que había en ellos. Sue cogió otro montón y se puso a leer.- Más bien son copias de los cheques que recibía esa mujer por encerrar y enloquecer a personas que estorbaban. No me puedo creer la cantidad de vidas que Jane destruyó.

- Yo no reconozco ninguno nombre...-dijo Jacob mirando más papeles.-Seguramente los mataron antes de que yo llegara a ese lugar.

- Yo si recuerdo a algunas de estas personas...-dijo Sue triste sacudiendo la cabeza.- Se iban de repente, desaparecían, sin dejar rastro.

- Seguramente los clientes de Jane le iban ordenando que se deshiciera de ellos cuando no les convenía mantenerlos con vida.-dije con rabia contenida.

- Como lo hizo Elizabeth Masen contigo...-dijo mirándome con cautela.- Tu estarías en la lista negro de muertos si no llega a ser porque ese lugar se incendió.

Asentí viendo el gran peligro que corrí en ese sitio.

- No tiene sentido denunciarla a las autoridad de este pueblo...-dijo Jacob.-Saldría impune.

Sue siguió buscando algo de interés entre los papeles.

- No...pero podemos mandarlo a organizaciones que defiendan los derechos humanos.-dije soltando la idea que pasaba por mi cabeza.- Quizá tarden años en tomar esto en cuenta, pero lo harán. Y Jane será perseguida de por vida.

- Si es que para entonces sigue viva...-dijo Jacob torciendo el gesto.

- Aquí están...los encontré.-dijo Sue quedándose pálida.- Son los primeros cheques que Aro pagó para encerrarme. Dicen que ningún ser humano tiene precio, pero ahora se cuanto valía mi cordura y mi libertad. Cinco mil dólares.

- Se va a hacer justicia, Sue.-dije intentando tranquilizarla.- Ese canalla va a sufrir, mucho más de lo que lo hiciste tu. Al igual que todos, va a arder en el peor de los infiernos.

- El llamado quinto infierno, según decía los templarios.-dijo Carlisle entrando por la puerta. Miré a Sue y a Jacob con un interrogante y me giré hacia Carlisle.- Eleazar Delani ahora está en contra de Hide, discutió con Aro y Elizabeth y acabaron amenazándolo.

- Mmm...-dijo Jacob pensativo.-Al parecer las cosas entre los lobos están que arden.

- Al final, y como siempre, vas a tener razón Verónica.-dijo Carlisle con sorna.- Esas alimañas van a acabar mordiéndose entre ellas.

- La justicia de los hombres está tardando mucho en llegar...-dije pensativa.- Por eso está llegando antes la del Karma. El equilibrio del universo tiene que alinear la balanza y esa justicia ni se soborna, ni se puede parar. Es inevitable.


EDWARD POV

Esto tenía que ser una pesadilla. No es imposible. Llamé a la puerta del cuarto de Emily y esperé a que saliera.

- Edward,hijo.-dijo al verme cuando abrió la puerta.- ¿Qué ocurre?Es muy tarde, me despertaste.

- Dime que Jasper no es mi medio hermano...-dije suplicante.- Tu debes saberlo. Dímelo.

Ella guardó silencio.

- Edward no...-dijo pero la interrumpí.

- Tienes que decirme la verdad...¿Es cierto?-le pregunté desesperado. Ella no contestó.- Escuché a mi madre hablando con Aro. Ella dijo que no se le olvidara que yo era su hijo...la escuché, y algo me dice que no es una broma de mal gusto.

Ella siguió mirándome sin inmutarse, solo veía como tomaba la decisión por la intensidad de su mirada.

- Siempre he pensado que sí...-dijo al fin.- El afecto que el senador sentía por tí me resultó sospechoso. Pero no tengo la certeza.

- ¿Pero nunca te dijo nada?-le pregunté desesperado. Tenía que averiguarlo.

- Yo no soy su confidente...tu mismo has visto como me trata.-dijo resignada.- Para Elizabeth Masen solo soy una sirvienta, su esclava para ser más exactos.

- Emily tu has vivido con ella desde siempre, incluso antes de que yo naciera...-dije intentando que recordara algo.- Necesito saberlo, no quiero más engaños.

- Cuando Elizabeth se quedó embarazada de tí...-dijo con la mirada perdida en el pasado.- Si que noté que entre ellos dos había algo más que amistad. Incluso vi como Aro vino mientras tu padre estaba en la mina, se encontraban a solas y aún siguen así. Se encierran en el despacho durante horas para gestionar los negocios...pero eso no quiere decir que sean amantes.

- No me estás diciendo nada nuevo.-dije negando con la cabeza.- Eso no me ayuda en nada.

- Pero es lo único que sé...-dijo apenada.- Nunca vi nada más de lo que vi cariño.

Le di un escueta gracias y me fui de allí. Enfadado y pensando que no importa cual fuera mi sangre porque siempre sería un Cullen.


BELLA POV

Jasper se presentó en casa a primera hora de la mañana, y lo que en un principio parecía una simple visita impaciente por parte del hijo de Sue, se convirtió en reunión para informarnos de las novedades.

- Perdón por venir tan temprano...-dijo mientras nos sentábamos en la sala.- pero han pasado cosas muy graves.

- No te preocupes...-le quité hierro al asunto.- De todos modos te íbamos a llamar.

- ¿Qué ocurre hijo?-dijo Sue preocupada.

- Ayer Edward escuchó una conversación entre Elizabeth y mi padre...-dijo suspirando.- En la que ella le echaba en cara ser el padre de Edward. ¿Somos hermanos,mamá?

Ella me miró y asentí. Había que sacarles de la duda.

- No hijo, no lo sois.-dijo Sue de inmediato cuando vio a Jasper tan afectado.

- Tenemos la prueba.-dije mientras me levantaba e iba al despacho a por la prueba de ADN que le hicimos a Edward y a Aro. Jasper me miró al entrar en el salón de nuevo.

- ¿Cómo que tenéis pruebas?-preguntó mirando el sobre que tenía en las manos.- ¿Qué sabéis de todo esto?

- Más de lo que te imaginas hijo...-dijo Sue intentando explicarle la situación.-Yo también dudé en su día sobre ese hecho, porque si que es cierto que Elizabeth y tu padre tuvieron una aventura...Pero al final, todo resultó ser una pista falsa.

- Aquí está la prueba que lo confirma.-le dije a Jasper entregándole el sobre.- Es un análisis de ADN de Edward y Aro.

Jasper salió del shock y leyó la prueba rápidamente.

- Aquí dice que es negativo.-dijo leyendo el resultado.

- Así es.-dijo Sue.- Aunque Aro sigue pensando que Edward es su hijo porque la sinvergüenza de Elizabeth Masen lo tuvo engañado toda su vida. Habría que preguntarle por qué lo hacía.

- Eso ahora no importa.-dije señalando la antigua caja de Jane que estaba sobre la mesa.- De lo que si tenemos evidencias es de eso. Aquí tienes las pruebas que me pediste.

Jasper se arrodilló sobre la mesa de café, abrió la caja y se puso a ojear documentos.

- La mayoría son cheques y recibos de los pagos que le realizaban a Jane por mantener a las personas en el centro.-dijo Sue tranquilamente.- Revísalo con tranquilidad y encontrarás a personas muy cercanas a tí.

- ¿Cómo conseguisteis esto?-preguntó Jasper casi sin voz mirando los recibos.

- Tuvimos a Jane Demonds encerrada por un tiempo...-dije suspirando. Sabía que tarde o temprano se lo tendríamos que decir.

- ¿Cómo que encerrada?-dijo con la cara pálida.- ¿Secuestrada?

- Era la única manera de conseguir esto.-dije señalando la caja.

- Si pero lo que hicieron es ilegal...-dijo a modo de sermón.

- En la guerra y en el amor todo vale.-dijo Sue interrumpiendo a su hijo.- Y esto es la guerra.

Jasper miró a su madre en blanco y segundos después asintió de mala gana.

- Muy bien...-dijo suspirando resignado.- Voy a hacer como si no hubiera escuchado todo lo que me habéis dicho, pero...necesito hablar con ella ahora mismo.

- La dejamos libre cuando nos entregaron los documentos.-dijo escusándose Sue.- Supongo que ahora mismo debe estar camino a la frontera.

Jasper se levantó con el móvil en la mano marcando rapidamente un número en la pantalla de su iphone.

- Si yo fuera tú, no levantaba mucho ruido al rededor de esa mujer...-dije con toda la tranquilidad que me proporcionaba el que me diera igual lo que le pasara a esa mujer.- Porque la pueden mandar matar.

Suspiró y guardó el móvil.

- En ese caso, lo único que puedo hacer es llevarme esto...y darle la noticia a Edward.-dijo cogiendo la caja.- Volveré cuando revise bien estos documentos.

- Muchas gracias.-dije sinceramente.

Él asintió y se fue después de dar un beso en la mejilla a su madre.

- Se que Jasper no está de acuerdo con lo que hemos hecho.-la dije acercándome a Sue.- Pero era necesario decirle la verdad...

- Y estoy segura de que lo entenderá, Verónica.-dijo Sue tranquila.- Ahora solo hay que esperar para que haga la investigación para encerrar a esos miserables.

Suspiré con tranquilidad.

- Si la sentencia no llegara a tiempo...-dije mirando por la ventana pensativa. Si Eleazar ya había sido aislado del grupo solo faltaba atacar.- Igualmente van a acabar mal. Se van a despedazar...y yo creo que ya va siendo hora de echar más leña al fuego.

Sue sonrió con malicia.

- ¿A qué te refieres?-me preguntó con curiosidad.

- Ya lo verás...-dije sonriendo ante la idea que tenía en mente.

Escuchamos gritos fuera de casa y nos miramos extrañadas.

- ¿Qué ocurre?-preguntó Sue mirando por la ventana.

- No tengo ni la menor idea...pero quédate aquí, luego te cuento.-le dije tranquilizándola mientras salía por la puerta.

Cuando salí al exterior vi a Jacob abrazando a una mujer que se aferraba a él como si se le fuera la vida en ello. Y era obvio, se veía que habían tenido algo en el pasado...pero, ¿Quién era yo para juzgar ese abrazo cuando Edward Cullen me besaba por los rincones?Y lo que es peor...¿Cuando yo le correspondía?

Esa mujer me miró y supe quien era. Vaya, la amante de Eleazar Delani... Se apartaron cuando ambos repararon en mi presencia y Jacob casi no sabía donde meterse después de ver que lo había descubierto con su antiguo affaire.

- Zafrina...te presento.-dijo Jacob carraspeando avergonzado.- Ella es Verónica Dantés, mi...mi...prometida, eh, bueno...y Verónica tu ya conoces a Zafrina.

Cuando me acerqué Jake tomó mi mano y esperó mi respuesta hecho un manojo de nervios.

- Disculpe que haya venido así a su casa, señora...-dijo Zafrina secando sus lágrimas.-Yo no vine a buscar a su novio, solo por mi hijo...Eleazar me lo quitó y necesito ayuda para recuperarlo.

- Está bine,tranquila.-dijo Jacob cuando el llanto pudo con ella.

Esa mujer me recordó mi dolor, el dolor de no saber que iba a ser de mi hijo cuando me separaron de él.

- Sé lo que vale un hijo y el dolor terrible que se siente si te separan de él...-la dije tragando fuerte saliva para dejar pasar todo lo que sentía y no se me notara.- Así que no te preocupes te vamos a ayudar.

- Yo se que va a ser difícil...por el hecho de que es político y todas esas absurdos temas de la amnistía.-dijo preocupada.- Y bueno...porque yo no soy nada.

- Tranquila, no te preocupes...-la interrumpí.- Ten la certeza de que pronto vas a tener a tu hijo. Te lo prometo.

Jacob y yo nos miramos pensando lo mismo y sonriendo. Era hora de sacar la artillería pesada.



EDWARD POV

Llegué a casa después de haber pasado la noche en la oficina, necesitaba una ducha, ver a mi hija y volverme a alejar de esta jauría de locos. Lo había meditado y lo mejor era irme del pueblo así evitaría ver la destrucción de mi madre, la boda de la mujer que amaba y lo más importante, mi hija crecería con paz y mejores cuidados médicos.

Tanya se me acercó cuando me vio por el pasillo.

- Edward...-dijo con la voz rara.- Al fin llegas, discutí con tu mamá.

Otra vez la misma historia.

- Tanya...-la dije con las manos en alto.- Ahora no, por favor.

- Es que si no es ahora entonces...¿Cuándo...?-dijo y parecía agotada. Ni ella misma quería discutir.- Edward, vámonos de aquí. Con la niña. Para siempre.

¿Qué ha pasado para que Tanya esté así?

- Tan histérica como siempre...-dijo mi madre apareciendo. Tanya agachó la cabeza y se apartó.- Como su hermana y como su madre, o peor aún, como el infeliz de Eleazar Delani. Que equivocación cometí contigo Tanya...Edward si yo fuera tu, me divorciaría inmediatamente.

- Basta...-dije siseando. No iba a permitir que mi madre pisoteara a nadie más.- Nadie habla así a mi esposa, y tú...menos que nadie.

La cara de mi madre cambió en un nanosegundo y se me acercó escudriñándome con el objetivo que parecía tener en sus pupilas.

- ¿Cómo puedes decir eso después de todo lo que me ha dicho?-me preguntó con voz contenida.

- Ella me dijo cosas peores...-replicó Tanya.

- Tu mujer, Edward...te quiere separar de mí.-dijo suspirando aunque su frialdad seguía intacta.- Yo soy tu madre, tengo derecho...

¿Derecho?¿Derecho?¿¡Qué derecho puede tener la mujer que estaba destruyendo mi vida después de dármela!?

- ¡Suficiente!-la grité fuera de mis casillas. Tanya se encogió levemente en su sitio.- Y entiéndelo Masen, la única persona que me ha separado de tí...eres tú misma. Y Tanya tiene razón, es mejor que nos vayamos de aquí.¿Sabes por qué?Porque ya no te soporto, no soporto tus mentiras, no soporto tus manipulaciones, y no soporto tus trampas...¡Porque estoy harto de tí, de esta casa y de este pueblo!¡Por eso me voy!¡Y por mi hija...porque es lo que verdaderamente me importa!¿Está claro?

Cuando pestañeó vi la nueva ruta que iba a seguir. Y esta vez no la iba a funcionar.

- Edward...yo ya perdí a un hijo...-dijo con la voz quebrada.- No quiero perder otro.

- Pues estás a punto de hacerlo...-dije tranquilo.- ¿No te das cuenta?Acabaste con mi vida, ni siquiera tengo identidad, no tengo apellido, no soy un Cullen.¿Sabes de lo único que estoy seguro?Que soy hijo de la peor madre que puede existir...

- ¡Cállate!-me gritó con lágrimas en los ojos.

- ¡No, cállate tú!-la grité de vuelta.-Lo digo en serio. No te soporto Masen, no te tolero pero por encima de todo eso...¡No te respeto!

- No me juzgues... Tu no eres quien para juzgarme moralmente, todos cometemos errores en esta vida, y tu no vas a ser la excepción. ¿O qué?¿Piensas que eres tan puro como para arrojar la primera piedra?- comenzó a reírse en nuestra cara, retándonos.-¿Tu te crees que yo no sé nada de tu pasado?

- Eso está en el pasado...-dijo Tanya agarrando mi brazo asustada.- Vámonos Edward...vámonos de aquí.

En ese momento Aro apareció en la casa hecho una furia.

- Elizabeth Masen...-dijo siseando entre dientes.- ¿Por qué tanta mentira y tanto engaño?¿Para qué me hiciste creer algo que no era?

- ¿De qué hablas?-preguntó extrañada mi madre.

Aro se sacó del bolsillo de la chaqueta un sobre y nos lo enseñó.

- De esta prueba de ADN.-dijo enfurecido.- Es de Edward y mía. Me mentiste, Edward no es mi hijo.

En ese momento sentí un alivio tan grande, que llegó a marearme.

- ¿Qué te pasa?¿Te has vuelto loco?-dijo mi madre sin dar crédito.

Quité de las manos el sobre a Aro y lo leí detenidamente. Negativo. Menos mal.

- ¿Cómo pudiste engañarme durante tantos años?-le preguntó Aro a mi madre.

- Es cierto...-dije mirando una vez más el resultado y girándome hacia mi madre.- Aquí lo dice claro. ¿De dónde ha salido esta prueba?

- Eso no es lo importante...-dijo Aro quitándole hierro al asunto.- Lo importante es que dice la verdad y demuestra que tu madre es la arpía más peligrosa que se haya visto.

- Ya basta, Aro.-dijo mi madre.- Vamos a hablar esto en privado.

Se dieron la vuelta y se fueron al despacho cerrando la puerta tras de sí.

Se acabó. Me fui a mi cuarto e imprimí los documentos en los que se reflejaban los pagos que tenía que hacerme mi madre por mis años trabajando en la mina. En cuanto mi hija acabara su tratamiento y Rosalie cumpliera la mayoría de edad me largaría de aquí.

Volví al salón y vi que Tanya también se había largado. La puerta del despacho se abrió y Aro salió delante de mi madre acercándose a mí.

- Edward...-dijo apoyando una mano en mi hombro.- Siento mucho que esto haya ocurrido así. Yo nunca dejaré de quererte...Lástima que tengas una madre así.

Se largó sin mirar atrás bajo la astuta mirada de mi madre.

- Entonces si el no es mi padre, dime...-dije mirándola con furia.- ¿Quién es?

- No pienso contestarte a esa groseria.-dijo dignamente.-¿No te bastó con humillarme y dudar de mi palabra?Esa prueba que tienes en tus manos demuestra que todo esto ha sido una calumnia en mi contra, deberías pedirme perdón.

- En esa prueba dice que no soy su hijo...-dije siguiendo mi intuición.- Pero si a él lo mentiste durante tantos años por algo será.

- ¿Vas a seguir dudando de mí?-me preguntó altanera.- ¿Sabes qué?¡Exhuma los restos de tu padre yo no tengo nada que demostrar!

Vaya...eso era nuevo. No creo que hubiera dicho eso si me estuviera mintiendo.

- Está bien...-dije con las manos en alto.- Ahora quiero discutir otro tema.

- Edward...estoy cansada.-dijo suspirando.- ¿Ahora qué?

Le entregué los documentos con mis honorarios y esperé a que los leyera.

- Es lo que me debes por nueve años de trabajo en tu compañía.-le dije tranquilo.- Lo que me corresponda de la herencia eso lo podemos ver después.

- No entiendo...-dijo mirándome extrañada.

- Claro que lo entiendes.-dije altanero como ella.- Cuando mi hija termine el tratamiento y Rosalie cumpla la mayoría de edad me iré de este maldito pueblo y esta maldita familia.

- Edward...-dijo cuando vio que me iba.

- Escenas no, Masen.-dije interrumpiéndola.- Lo que pasó hoy fue demasiado.

Y sin despedirme me largué, necesitaba estar en el único lugar en el que respiraba algo de paz.



BELLA POV

Vi la puerta de la casa de los Delani abierta y entré sin avisar.

- Ya deja de ser tan insensato papá...-escuché decir a Alice cuando entré en el salón.- Este niño debe estar con su madre.

- A lo mejor yo puedo ayudar.-dije con una falsa sonrisa en el rostro cuando vi mi oportunidad de hablar.- Buenas tardes.

Eleazar me miró con odio y se levantó del sillón como si estuviera electrificado.

- Váyase de mi casa.-dijo sin apartar su mirada de la mía.- Verónica Dantés.

Alice se levantó del sofá dejando al niño en él y se fue al lado de su padre.

- Papá...-dijo sujetando su hombro.-¿Por qué la hablas así?

Prometí no hacerte daño amiga. Ni físico, ni emocional...

- Alice, déjame a solas con tu padre.-la pedí amablemente.

- Verónica, no creo que sea lo mejor en este momento...-dijo preocupada.- Mi papá no está en su mejor mimento.

Vi que había una botella de whisky sobre la mesa y supuse que era a eso a lo que se refería Alice. Eleazar estaba algo bebido.

- Yo creo que sí...-dije con un tono amable.- Porque no es bueno que el niño escuche esto. ¿Podrías esperar con el niño fuera?

Ella asintió y salió con su hermanastro a la calle.

- No confío en usted.-dijo con tono seguro.- No desde que se que se va a casar con ese ladrón de Jacob Black. Es una rata.

Arqueé una ceja cuando habló así de Jacob, pues él había robado mucho más dinero del que Jacob robaría en su vida. “Entre gitanos...se leen las manos” pensé con ironía.

- Yo vine a pedirle amablemente que Zafrina se lleve a su hijo...-dije regodeándome en lo que vendría ahora.- Porque un niño debe estar con su madre.

- Ese no es asunto suyo.-dijo Eleazar encogiéndose de hombros.- Se que todo el mundo está en contra mía, pero no voy a permitir que me destruyan.

- Ay...Eleazar...¿Por qué está tan paranoico?-le pregunté fingiendo asombro.-¿No será que se le remuerde la conciencia por sus crímenes?

- ¿Crímenes?¿De qué habla?-preguntó nervioso. Comenzó a darse cuenta de que sabía más de lo que contaba.- Usted no me conoce.

- Hablo de tus actos de corrupción como presidente municipal.- dije lo más tranquila que mi sed de venganza me permitía.

- ¿Se lo contó Jacob Black verdad?Él tiene mis documentos privados, me los robó.-dijo conteniendo su ira.

- También sé que ha perseguido inocentes como a Carlisle...-dije cambiando de tema para no comprometer a Jacob.- Y a otros más. Aquí mismo tengo unas copias de los cheques que usted pagó a Jane Demonds para que mantuviera encerradas a personas indeseables para usted y para sus cómplices. Compruébelo usted mismo.

Saqué las copias de mi bolso y se las pasé. Su cara se puso blanca como la cal, casi parecía fantasmagórico.

- ¿Quién le dio esto?-me preguntó con un hilo de voz.

- Son sus cheques...¿No?-le pregunté con una sonrisa.-También tengo los que involucran a sus socios. Todos ustedes están en mi poder.

- ¿Fue usted desde el principio, verdad?-me preguntó cayendo en la cuenta.- Fue quien mandó a Black a chantajearme.

- Usted está alejando a una madre de su hijo, y créame, ese es uno de los peores crímenes que alguien puede cometer.-dije con ira contenida.

- ¡Ese bastardo es mío!-me gritó en la cara.- Yo no sé a que viene su interés por el bastardo y la prostituta de su madre.

- ¡No la llame así!-le grité de vuelta.- Y mucho menos a ese niño...Zafrina me hizo recordar el dolor y la desesperación de dos mujeres a las que les arrebataron a sus hijos, ellas no pudieron verlos crecer, ni abrazarlos, ni saber si estaban bien o si las necesitaban. Y lo más importante, sin saber si los monstruos que los rodeaban les hacían más daño.

- ¿De quién habla?-dijo extrañado.

- Si sabe lo que le conviene deje libre al niño.-dije siendo tajante.- Usted ni siquiera lo quiere. Solo le interesa porque es un medio para hacer daño a su madre.

- ¿Y si lo dejo en paz, usted me deja en paz a mí?-me preguntó con miedo.

- Yo si...-dije afirmando con la cabeza.- Pero la justicia se va a hacer cargo de lo demás, de tí y de los lobos de la jauría a la que perteneces. Te estoy una ventaja Eleazar, va a tener tiempo para buscar un buen abogado, y aunque dudo mucho que se salve de la cárcel...al menos, reducirá su pena.

- ¿Por qué me odia?-me preguntó con la mirada de un hombre destruido.

- ¿De verdad es usted tan ciego?-le pregunté de vuelta mirándole a los ojos como lo habría hecho Isabella Swan. De frente.-¿Tan ciego que no se ha dado cuenta?Buenas tardes.

Me fui de allí sin mirar atrás y salí de la casa para recoger al niño. Vi que Alice jugaba con él en la puerta de la casa, parecía que le tenía cariño.

- Alice, dame al niño.-le dije amablemente.- Su madre le está esperando y tu padre ya accedió.

- ¿Cómo conseguiste convencerlo?-dijo levantándose de las escaleras extrañada.

- Diciéndole algunas verdades, hasta que entendió lo que era mejor para todos.-dije ofreciéndole mi mano al pequeño con una medio sonrisa.- Incluso para él mismo.

- Verónica, a pesar de todo este niño es mi hermano.-dijo suplicante.- Cuidadlo, por favor. Tiene mucha fiebre y no se encuentra bien. ¿Le puedes decir a su madre que me gustaría mantener el contacto con él aunque sea por teléfono y que si necesita algo puede contar conmigo?

- Vamos pequeño.-dije mientras asentía a Alice dándole a entender que haría lo que me pedía. Comencé a caminar con él hacia el coche para llevarlo a La Fortaleza.- Vamos con tu mamá, tu sitio es con ella. Siempre es con ella.

------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Hola chicos nuevo capítulo!!!Espero que os guste...aunque vaya más lenta no voy a dejar la historia a la mitad :)

Nos leemos, Ness.

Capítulo 44: CAPÍTULO 43 Capítulo 46: CAPÍTULO 45

 


 


 
14437771 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10756 usuarios