Me desperté cuando el sol entraba entre las persianas, me estire y abri los ojos, lo primero que vi fue a Edward que dormía tranquilamente a mi lado, se removió envolviéndome mas con sus brazos y volvió a quedarse dormido.

Tenia mi mano en su pecho y podía sentir los latidos de su corazón. Lo amaba con toda mi alma, amaba su forma de ser, su forma de tratarme, su sonrisa, su cabello, y sobre todo sus hermosos ojos, todo, amaba todo de el.

Alce mi cabeza con mucho cuidado para no despertarle y le di un beso en la mejilla, me quede mirándolo vario tiempo hasta que poco a poco abrió sus ojos y me miro, le sonreí.

-Que?-me pregunto sonriendo.

-Nada, es solo que amo verte dormir-le respondi y sentí el rubor en mis mejillas.

Me dio un beso en la frente.

-Feliz cumpleaños mi amor-me abrazo.

Como? Hoy era mi cumpleaños y yo ni siquiera lo sabia no podía creerlo había olvidado mi propio cumpleaños.

-Hoy es mi cumpleaños?-le pregunte desconcertada.

-Si mi amor, hoy estamos a 13 de septiembre-me dijo feliz.

-No puede ser, olvide mi propio cumpleaños-susurre descepcionada de mi misma.

-No se te olvido, solo no supiste a que día estábamos cuando despertaste del coma-me susurro-Pero eso ya no importa, lo que importa es que hoy es tu cumpleaños y tienes que estar muy feliz-me dio un beso en los labios.

-Ya nos levantamos?-le pregunte acariciando desde su hombro hasta su cuello, sonreí al verlo estremecerse.

-Si mi amor-me contesto levantándose y extendiéndome su mano.

La tome y me levante, salimos y bajamos entrando a la cocina, todo estaba vacio y no se escuchaba ningún ruido.

-No llego nadie?-le pregunte soltándolo y recargándome en la barra.

-No, se iban a quedar en la casa de un amigo de Carlisle-me contesto acercándose a mi.

-Que quieres de desayunar?-le pregunte mirándolo.

-Mmmm, no lo se, que me vas a preparar-me contesto sonriendo.

-Que te parece unos waffles con zarzamoras-le devolví la sonrisa, sabia que era su desayuno favorito.

-Me parece genial, pero por que me conscientes, si el que lo debe de hacer soy yo-me contesto cruzándose de brazos.

-No me importa, así que siéntate y déjame cocinar a mi, entendiste-le lance una mirada amenazadora.

No me contesto nada y se subió encima de la barra, mientras yo saque los ingredientes y me puse a preparar los waffles, cuando termine los puse en la mesa, también prepare un jugo de naranja que vacié en una jarra y después lo puse en la mesa.

Se bajo de la barra y se sentó en una silla, me acerque a el y me senté en su regazo.

Tome un tenedor y corte un pedazo, lo acerque a su boca.

-Abre-le pedí acariciando su cabello con mi otra mano.

La abrió y se lo comio, el también tomo un tenedor y corto un pedazo, lo acerco a mi boca, la abri y me lo comi.

-Esto, esta delicioso-tomo un vaso y le dio un trago.

-Gracias-le conteste y sentí como mis mejillas se tiñeron de un color rojo.

Terminamos de desayunar y lavamos los trastes, cuando terminamos subimos a nuestras habitaciones quedándonos en el pasillo, le di un beso en la mejilla y entre a mi habitación. Me acoste en mi cama y abrace la almohada en la que había dormido el, aspire su aroma, olia deliciosamente a el, amaba su aroma y mucho mas con esa loción que se ponía. Escuche un gran grito de Alice llamándome.

Me levante asustada y Sali, Edward estaba recargado en su puerta y Alice estaba al pie de las escaleras.

-Feliz cumpleaños-me dijo emocionada y me abrazo.

-Gracias Alice-le conteste riéndome.

-Pero que haces aun en pijamas, los maquillistas llegan a las cuatro y aun hay muchas que hacer-me reprocho enojada.

-Pero para que-le pregunte.

-Para tu fiesta, pues que creías, que me iba a quedar sin hacer nada, claro que no, y no quiero nada de peros, así que metete a bañar en este momento o Edward va a pagar las consecuencias-me contesto mas enojada, el pobre de mi amor la miro sorprendido y yo asustada.

Mire a Edward y le articule un “Perdon” con mis labios y me meti a mi habitación. Sali corriendo y me meti en el baño, me bañe bien rápido y me seque el cuerpo con una toalla, me puse crema y cuando termine me puse mi ropa interior y una toalla. Me seque el cabello con la toalla y lo cepille hasta que lo desenrede completamente.

Heche las toallas y la ropa al cesto de la ropa sucia y Sali del cuarto de baño, Alice estaba poniendo cosas en la cama y cuando me sintió voltio a verme y sonrio al verme ya bañada.

-Veo que me hiciste caso-se acerco a mi dando brinquitos.

-Pues claro que si, si no lo hacia eras capaz de hacerle algo a Edward y eso no te lo perdonaría-me estremeci con solo pensar en que alguien podría hacerle daño.

-Tan enamorada estas de mi hermano-me dijo con ojos brillantes.

-Si, tu sabes muy bien que lo amo desde que estábamos chiquitos-conteste llena de emoción, ella me abrazo.

-Te comprendo-me dio un beso en la mejilla.

Estuvimos vario tiempo abrazados hasta que me fije en la cama donde estaban extendidos varios vestidos, tres para ser exacta, uno rojo sangre, otro azul marino y el ultimo era rosa fiucha, todos eran largos pero con diferentes diseños.

-Que vestido me voy a poner, no me digas que es uno de los que están ahí?-le pregunte separándome de ella y mirando los vestidos aun sin acercarme, la mire y ella asintió.

-Cuales mas creías-me dijo acercándose a la cama.

Me quede parada ahí y solo la mire poniendo mas cosas en la cama.

-Y cual me voy a poner-dije al fin

-Aun no lo se, primero necesitamos que venga mi papá-me contesto encogiéndose de hombros.

Para que necesitábamos a Carlisle? Me pregunte pero en ese momento alguien toco a la puerta. Alice abrió y era Carlisle, le dijo no se que tantas cosas y se fue, volvio a cerrar la puerta y me miro con una sonrisa en sus labios.

-Espera hay vengo-me susurro y salió.

Me acerque a la ventana que estaba un poco mas chiquita que la de Edward pero casi era igual, mire hacia el bosque, se veía tan tranquilo que por un momento me imagine ahí con Edward paseando tomados de la mano.

Abrieron la puerta y Rosalie y Alice entraron sacándome de mis pensamientos, Rosalie también traia una bata.

-Bella, Rosalie y yo te vamos a aplicar un masaje facial mientras esperamos a los estilistas-me dijo Alice jalándome y sentándome en una silla que estaba frente a la banqueta que esta a los pies de la cama, donde estaba lleno de cremas y mascarillas.

Me recargue en la silla y cerre los ojos, al menos de algo serviría me podría relajar mientras sentía como ponían cosas en mi cara.

Me adormile un poco y me desperté a ratos mientras ellas ponían mascarillas, pulian y sacaban brillo a cada una de las superfcicies de mi rostro. Ya no sentí nada y abri los ojos Alice y Rosalie estaban sentadas en la banqueta frente a mi.

Tocaron a la puerta y todas miramos hacia allí, se abrió y Esme entro junto con 4 muchachas, nos sonrio y se fue. Alice paso a las muchachas y las puso frente a mi, me levantaron y me sentaron en una silla frente al tocador.

-Relajese, cierre los ojos y nosotras terminaremos en un solo momento-me dijo una muchacha, asentí y cerre los ojos como me dijeron. Comenzaron a hacer cosas en mi cabello y a poner otras en mi cara, les hice caso y me relaje, solo pensé en Edward y en mi, nos veía en una casa, el entraba cargándome y cuando me bajaba me daba un tierno beso en los labios.

-Listo, hemos terminado-me dijeron al oído horas después.

Comencé a incorporarme pero me tomaron de los hombros y volvieron a recargarme en la silla, no abri los ojos por que tenia miedo de mirarme asi que mejor me quede recargada.

-Todavía no se levante, quédese otro momento-me dijo otra muchacha, solo asentí.

No escuchaba ni un solo ruido todo estaba completamente en silencio y ya estaba comenzando a aburrirme, quería ver a Edward, quería sentirme segura en sus brazos pero aquí estaba yo, sentada con los ojos cerrados y sin poder moverme.

-Listo Bella, ya puedes abrir los ojos-grito Alice a mi lado, ni siquiera la había escuchado llegar.

Me incorpore y poco a poco abri los ojos, la mujer que vi reflejada en el espejo no podía ser yo, ella estaba hermosa, tenia un maquillaje que se ajustaba perfectamente a su rostro y las mejillas con un rubor natural, una parte de su cabello estaba apilado en una perfecta corona en la parte superior de la cabeza y el resto caia en una hermosa cascada de rizos sobre los hombros, se veía tan hermosa que no podía creer que fuera yo.

-Wow-suspire sorprendida.

-Que?-pregunto Alice mirándome desde la cama.

-Esa no soy yo-dije señalando el espejo.

-Claro que eres tu y estas hermosa-sonrio.

-Gracias-me sonroje.

-Ahora ven, vamos a ver que vestido te vas a poner-se acerco a mi y me jalo hacia la cama.

Me dejo enfrente de los tres hermosos vestidos que estaban extendidos cuidadosamente en la cama.

-Cual me voy a poner?-le pregunte acariciando el vestido rosa, estaba muy bonito pero el que me gustaba mas era el azul, no estaba tan escotado y tenia un cinto con un corazón de plata con diamantes incrustados.

-Cada quien va a llevar el vestido del color de la camisa, asi que tu vas a llevar el de color azul-me contesto tomandolo, me emocione al saber que llevaría puesto ese, pero mi ilusión se esfumo cuando le dio la vuelta.

Casi me desmayo al verlo, estaba super escotado de la espalda, mas bien no tenia espalda, como quien dice solo tapaba de la cadera para abajo.

-Yo no me voy a poner eso, ni loca-le dije horrorizada solo de pensarlo.

-Claro que si te lo vas a poner-me miro enojada.

-Pero solo miralo, nomas tapa…-me calle y la mire suplicante.

-No me importa, imaginate a Edward cuando te vea con ese vestido, se va a morir-levanto ambas cejas.

-Esta bien, damelo voy a ponérmelo-se lo quite y me meti al baño, me lo puse y Sali sin mirarme al espejo.

Alice y Rosalie ya estaban vestidas, se veian muy lindas, Alice traia el rojo y Rosalie el rosa.

-Te ves hermosa-me dijeron las dos y sonreí.

-Aquí están los zapatos, y este collar es mio asi que lo quiero de vuelta-me dijo Alice dándome la caja de los zapatos, me sente y la abri, estaban muy bonitos, eran de color plateado pero eran de tacon de aguja, no resongue y me los puse aunque sabia que no iba a durar mucho con ellos por que para mi mala suerte de seguro que me iba a caer.

Rosalie se acerco y me tendio el collar, era un diamante en forma de corazón, me lo puse y me levante.

-Me gusta como se te ve asi que te lo regalo-me dijo Alice sonriendo.

-Gracias-la abrace.

-Ya son las cinco y media, hay que bajar-nos dijo Rosalie y nos separamos.

Salimos y bajamos cuando íbamos a entrar a la cocina Alice me paro.

-Quedate aquí-me dijo y ellas dos entraron.

-Donde esta Edward?-escuche que pregunto Alice.

-Anda ayudando a Esme-le contesto Emmett creo.

Despues de un rato escuche esa hermosa voz aterciopelada hablar:

-Donde esta Bella?-pregunto por mi y sonreí ampliamente.

Aqii estaa nuestra primera parte del cumpleañoos de Bella, espero qe les guste, espero sus lindo comentarios.

Las quiere su amiga Denni (: