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-Entonces, explícame de nuevo Bella.- le pidió Edward.- Ahora nosotros nos tenemos que ir para que nuestros hijos se…¿Amiguen?-

-Exactamente así amor, nos vamos ellos se amigan y luego volvemos.

-¿Te das cuenta las fallas de este plan verdad?

-Dime una.

-Nos vamos. Punto. Yo no dejaré a mi hija sola con Jacob.

-Si lo harás porque así estarás a solas conmigo.- Le dijo haciéndole “ojitos”.

-Creo que puedo ver tu punto.- contesto sonriéndole.

Se encontraban en la camioneta de Bella sentados.

Finalmente le habían dado de alta a Jake con la condición de que haría reposo en su casa.

El problema fue que quiso ir inmediatamente a la casa de Nessie para aclarar todo con ella, por lo que comenzó a discutir con Bella para lograrlo, pero ella recurrió a la única excusa que sabía que haría que su hijo entendiera: Seth.

Desde que el pobre chico había llegado no había tenido más que decepciones, ahora era tiempo de que pasara tiempo con él y lo compensara.

Si bien, Bella y Edward siguieron viéndose, para Jake y Nessie no había llegado el tiempo de “reconciliarse” hasta un día antes de año nuevo, cuando le suplicó a su madre que lo dejará ir a verla.

Al principio a Edward no le hizo demasiada gracia Jacob ya que sabía que su hija había llorado mucho por su causa, pero cuando él insistió en contarle lo que había sucedido finalmente le creyó.

-¿Crees que lo perdonara?- preguntó Bella insegura.

-Eso  creo… lo ama Bells.- contesto Edward – De hecho si esta semana no fue a verlo fue porque quería que se recompusiera, no por falta de cariño.

Bella lo había “raptado” de su casa para llevárselo a la suya.

Emmett y Charlie se encargarían de distraer a Seth mientras Jake recuperaba a su amada Nessie.

Se había propuesto no terminar el año sin ella a su lado y lo lograría.

-Así que…- comenzó Edward mientras giraba su vista del camino para mirar a Bella.- ¿Estaremos solos?- pregunto con esa voz que ponía cuando quería ser sugerente.

-Algo…- respondió Bella.

Estaba nerviosa.

Los muchachos se habían ido de “campamento” durante una noche, a pesar del frío exagerado de Forks, llevándose a Carlisle con ellos.

Rosalie, que todavía estaba adaptándose a los cambios de su cuerpo, había optado por quedarse con su madre descansando.

Jasper y Alice seguían en Phoenix, por lo que solo quedaban ellos dos.

-Interesante.- medito Edward.- ¿Cocinaste algo más aparte del “plan” de tu hijo?- Bella había hecho una cena especial a pedido de Jake para él y Nessie.

-Cocine bastante para que sobre para nosotros.- miro su reloj- ¿A qué hora regresaba Nessie?

El plan consistía en lo siguiente.

Nessie estaba en casa de su amiga Bree, quien había accedido a “entretenerla” a pedido de Jacob.

Jake llegaría a su casa, pondría la mesa y la esperaría para pedirle perdón y poder hablar con ella luego de casi tres días sin verse.

El único problema era Edward, pero eso lo solucionaría Bella.

Pero estaba nerviosa.

Esta vez no se había puesto su ropa interior de abuela, sino un delicado conjunto que le había regalado Alice para navidad, alegando que tal vez lo usaría pronto.

Sabía que era algo importante para ellos, pero la realidad era que era la primera vez que ansiaba estar con un hombre, y no cualquier hombre, era el primero del que se había enamorado verdaderamente.

Sonrió al pensar eso.

-¿En qué piensas que te ríes sola?- le pregunto Edward.

-En que a mis treinta y tres años me enamoré por primera vez.-respondió mirándolo con ternura.

Él la miro con amor y le sonrió.

-Pues yo a los treinta y seis.- dijo tomándole la mano.- Es verdad que para el amor no hay edad.

Siguieron el resto del camino en silencio, pero cómodos.

Una vez que llegaron a casa de Bella, ella procedió a servir la deliciosa cena que había preparado.

-¿Así que nuestros hijos cenarán cerdo glaseado?Muy sofisticado ¿no crees?- pregunto sentándose a la mesa.

-Para nada. Es fácil de hacer y a Jake le encanta. Sé que a Nessie también.- le respondió sentándose frente a él.- Sirve el vino por favor cariño.- pidió.

-¿Por qué brindamos?- preguntó Edward.

-Por nuestra primer cena solos y tranquilos.

-Brindo por eso cariño.- dijo mientras chocaba su copa con la de ella.

Luego de cenar, lavaron la cocina y se sentaron en la sala.

-¿Quién iba a decirme a mí que terminaría el año de esta manera?- dijo Bella mientras se acurrucaba contra Edward.

-¿De qué manera?- preguntó él mientras la estrechaba con más fuerza.

-Viviendo en otro lugar, con un nuevo empleo, más amigos… un novio.- enumeró.

-Bella.- la llamo para que lo mire.- ¿Eres feliz?

Bella lo miro. Contemplo sus hermosos ojos, sus facciones masculinas.

Esas arruguitas que se le formaban al costado de los ojos cuando sonreía, o cuando estaba preocupado.

Podía sentir el calor de su cuerpo contra el de ella, protegiéndola, acompañándola.

Por otro lado sabía que su hijo estaba feliz.

A pesar de su disputa con Nessie, que estaba segura se arreglaría pronto, Jake estaba viviendo un buen momento en este hermoso pueblo.

Toda su familia estaba con ella…

-Claro que soy feliz Edward.- le respondió por fin.- Absolutamente feliz.

- Y eso me hace feliz a mí. Te amo Bella.

Ella no le contesto y se limitó a besarlo con la misma intensidad que lo besaba siempre que la sorprendía con algún gesto romántico o simplemente diciéndole que la amaba.

Cuando estaban juntos, el tiempo se detenía.

Jamás les alcanzaba para besarse lo suficiente, abrazarse lo suficiente, amarse lo suficiente.

Bella seguía nerviosa, pero sabía que esta noche tendría un desenlace distinto.

Él la respetaba, la esperaba y siempre iba a su ritmo, por lo que esta vez sería distinto.

Le urgía estar con el hombre que amaba.

Luego de unos momentos, Bella se puso de pie separándose de él abruptamente.

-¿Qué…?- comenzó a preguntarle Edward cuando vio que se paraba a su lado y le tendía la mano.- ¿A dónde quieres ir mujercita?- le pregunto suspicazmente.

- Menos preguntas y más acción hombrecito.- le respondió seductoramente tirando de su mano para hacer que se pusiera de pie.- Estamos solos ¿Recuerdas?

Edward no necesito más palabras para entenderla.

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-Bien, la mesa esta puesta, la comida servida.- Jake se miró al espejo.- Yo estoy presentable… Solo falta Nessie.- dijo hablando para sí mismo.

Luego de elaborar su plan, que no era nada sofisticado en realidad, se dispuso a preparar todo para la llegada de su novia, o… bueno… su casi novia.

Todavía no podía creer como había logrado sacar a Edward de su propia casa, pero se sentía conforme al saber que su madre lo había ayudado a convencerlo.

Luego de chequear todo por décima vez, se sentó en el sillón y prendió la tele.

Estaba comenzando a entusiasmarse con una película, cuando escucho la puerta de la entrada.

Corrió hacia la sala y apago la luz.

-¿Papá?- llamó Nessie.- ¿Estas en casa?

-Hola Renesmee.- la saludo Jacob parado frente a ella.

Nessie se sorprendió al verlo parado ahí.

A pesar de su brazo en un cabestrillo, se lo veía guapísimo.

Estaba vestido con un jean oscuro, una camisa negra y un chaleco tejido color gris.

Su inconfundible perfume llenaba la sala donde estaba y su rostro, entre avergonzado y desafiante, era adorable.

-Hola Jake.- lo saludo.- ¿qué haces aquí?

-Vengo a hablar contigo Ness.- dijo acercándose a ella.- No quiero seguir peleado contigo, no lo soporto. Necesito explicarte lo que viste en el hospital… No significo nada. Ella…- Nessie lo interrumpió.

-No necesitas explicarme nada Jake.- dijo Nessie mirándolo desde lejos aún.

-Si necesito. Debes perdonarme Nessie, yo no puedo seguir lejos de ti y menos por algo que no tiene principio ni fin.

-No necesitas explicarme nada porque ya lo sé Jacob.- respondió Ness acercándose a él.- Hannah me contó lo que sucedió.

-¿Lo sabías? ¿Y a pesar de eso no quisiste verme?- Se sentía estúpido.

Había preparado todo para ella, pensando que estaba ofendida, cuando en realidad solo sucedía que no quería verlo.

-No es eso Jake.- contesto Renesmee corriendo hacia él al ver que se alejaba de ella.- Es que no quería molestarte en tu recuperación.

-¿Molestarme?- Jacob estaba enfadado- ¿De verdad crees que me molestarías? ¡Te necesitaba Renesmee!- le dijo molesto.

-¡Lo siento!- contesto- ¡De verdad lo siento! Hice lo que creí mejor.

-Ese es nuestro problema- dijo Jake tratando de mantener la calma.- Siempre haces lo que tú crees que es mejor Renesmee. No me consultas, no piensas en lo que yo querría…

-Tienes razón Jacob.- dijo Nessie volviendo a acercarse a él.- Tienes toda la razón. Todo es como yo quiero y pienso.- Admitió.

-Bueno, ese es un gran avance.

-En serio Jake, lo lamento.- Estos días que pasaron, Nessie pensó mucho lo que Hannah le dijo al respecto de su relación con Jake. Debía dejar de querer ocultarla para poder gritarla a los cuatro vientos. – Pero aún tengo una decisión más que tomar por mi cuenta.

Jacob suspiró cansinamente.

-Espero que sea una buena, sino tendrás graves problemas. Hice cocinar a mi madre.- sonrió.

-Te prometo que vale la pena escucharme.- Lo tomo de la mano y se sentó en el sillón mirándolo de frente.- Desde que comenzamos a estar juntos.- comenzó- nunca hice nada pensando en ti.

-No entiendo.

-Claro.- explico.- Empezamos mal. Debimos ser sinceros con todos y decir que nos queríamos, que estábamos juntos, sin importar lo que los demás dijeran, mantenernos unidos.

Siempre hice  lo que yo creía que era mejor para todos, pero nunca pensé en lo mejor para ti, para ambos y eso va a cambiar desde hoy.

-Renesmee.- la interrumpió.- Tú no tienes que pensar por los dos. Hay algo que se llama dialogo y por lo general sucede cuando dos personas intercambian ideas.

- Ya lo sé Jacob.- le dijo molesta.- Entiendo el concepto. A lo que voy es que estoy acostumbrada a tomar mis propias decisiones y… creo que me cuesta un poco depender de otra persona. Debo pedirte perdón por no querer contarles a los demás que estábamos juntos, eso ocasiono todos los problemas desde el principio ¿Me perdonas?

Jacob sabía que, para ella, confesar una debilidad era demasiado, por lo que no bromeo al respecto.

-Por supuesto que te perdono Nessie ¿Tú me perdonas por el beso con Hannah?

-Te perdono porque sé que no fue un beso propiamente dicho.- se acercó más a él.- Lamento alejarte de mí por momentos.

-Ness quiero que cuentes conmigo.- dijo tomándola entre sus brazos, o bueno, entre su brazo.- Entiendo que somos algo jóvenes aún, pero yo quiero estar a tu lado siempre…

-Siempre es mucho tiempo Jake.

-Entonces quiero estar a tu lado todo el tiempo que debamos estar juntos ¿Qué te parece?

Nessie rio.

-Voy a decirte algo Jacob Swan, algo que no estoy segura que lo sepas.

-Dime…- la invitó mientras acariciaba su rostro.

-Te amo.

Para Jacob esas palabras fueron melodía.

-Y yo a ti mi monstruo Ness.

-Por una vez no te diré nada.- Dijo Nessie acercándose a él para besarlo.

-Los milagros si existen.- río sobre sus labios.