N/A: Recuerden los dones que en capítulos atrás había explicado, el de Michelle, ella puede crear la ilusión de invisibilidad, incluso en otras personas. El don de Louse, crea ondas eléctricas en el cuerpo de su oponente. El de Emmett, debilitar con el tacto, el de Tyler, telepatía, y el de Matt, crear heridas múltiples en el cuerpo (inmune al escudo).

Si olvide decir uno me disculpan jeje. Los últimos dos son nuevos.

¡Aspiro les guste el penúltimo capítulo!

NARRADOR POV’S

—Eres una maldita estúpida —expuso Thomas Salvatore cuando tomaba por el oscuro cabello de la joven que estaba en su poder; a pesar de todo los maltratos que ese malnacido le había hecho desde hace ya unos meses, a ella le calentaba, se excitaba como una desquiciada; lo veía tan salvaje y tan sexy—. ¿Cómo te atreviste a convertir al hermano de Alexandra? ¿Por qué no me lo habías dicho?

—Amor, papi, no estés así bombón, yo me enoje al saber cómo te enloquecías al pensar en ella y yo la intente buscar y… y no medí las consecuencias de lo que hice, pero… —intento decir la joven, mientras acariciaba el abdomen desnudo del apuesto vampiro que se encontraba frente a ella sin camisa.

Hasta ahora era que la muy puta le había mencionado “el pequeño detalle” sobre lo que había hecho meses atrás en México. Aquello le enfureció por completo a Thomas; porque aun el “joven” guardaba las esperanzas para estar con Alexandra pero ahora con todo esto, jamás la hermosa Alex lo aceptaría.

Maldita desgraciada solo sirves para cogerte. Pensó Thomas mirando con asco a la joven Michelle.

— ¡Zorra! No sirves para nada, arruinas mis planes, infeliz —expuso Thomas deshaciéndose de las asquerosas manos de la golfa, ella lo miro suplicante y se acerco a él con andares “sensuales”

Pero solo se gano el desprecio de parte de Thomas…

—Yo  te amo —Thomas bufo burlonamente.

—Eres una maldita, dejaste a tu padre, traicionas a tus amigos y acabas de desgraciarme ¡No amas a nadie! Lárgate de mi vista, pero no se te acurra alejarte de Forks, tu don es importante y es el que te mantiene viva, al fin en algo sirve tu maldita existencia.

¡Vete a la mierda! Manifestó Michelle en su mente dirigiéndose a fuera. Sabía lo que venía dentro de unas horas, y después de hacer todo bien, Thomas la recompensaría con el mejor sexo desenfrenado.

Por su parte Thomas no dejaba de pensar en cómo sería lamer y succionar los senos y la intimidad de Alexandra Rivera, escuchar sus sutiles gemidos en la cama, tocar absolutamente todo su cuerpo, hacerle el amor sin límites; pasar su lengua por cada rincón de su cuerpo escultural; besarla y hacerla perder la cabeza.

¡Maldita sea! ¿Por qué hice todo tan difícil? Porque no solo abusar de ella y matarla, solo quería sexo ¿Qué rayos me pasa?

Y es que las caderas de Alex, Thomas las fantaseaba sobre él, mientras que se movía con su miembro justo dentro de ella, dentro de su intimidad.

La deseaba como un maniático y quería tenerla entre sus brazos y amarla por siempre; a su manera, claro.

Thomas siempre fue así, tan duro, tan seco y siempre obtuvo lo que quiso, incluso en su vida humana fue tan posesivo y sádico.

Todos los Cullen, Jane, Alec y Jason se encontraban más que preocupados, por los Salvatore. Pero lo que ellos no sabían, era que, los Vulturi meterían sus manos en este asunto solo para recuperar a sus joyas más preciadas.

Jane y Alec.

MELISSA POV’S

¡Ninguno de los dos estaban! Además el aroma de Juliette, de esa maldita desgraciada se encontraba en toda la habitación seguido de otros aromas que no reconocí. Ella no estaba sola y yo no fui capaz de proteger a mis padres, como la cobarde que era, me derrumbé en el suelo con mi corazón destrozado.

¿Y si los mataron? ¿Y si se los llevaron? Alice lo fuera visto pero… evidentemente había algo o alguien que impedía divisar el futuro.

—Princesa, cálmate, los encontraremos —indico Alec levantándome lentamente del piso, mis sollozos fueron notables en aquella habitación.

—Déjenme sola —dije mirando la cama vacía de mis padres, todos me hicieron caso y salieron de allí dejándome sola y con mi dolor.

¿Y ahora qué?

Maldición, todo estaba acabado, perdido, mande un mensaje de texto a mi primo diciéndole que recurriera al sobre y que los amo, apague el celular aun con sollozos, extrañaba llorar…

“No te conozco; solo acato ordenes, si quieres que tus padres sigan con vida, ven sola; no tendrás tiempo de arrepentirte además tu amiguito es de mucha ayuda”

Una voz masculina invadió mi mente, me llene de odio, un infinito y gigantesco odio que carcomía todo mi cuerpo y mi ser. No me extrañaba en lo absoluto.

“Te esperamos en carretera cercana a la push”

Sin pensarlo dos veces corrí saliendo por la ventana en busca de mi familia, si había una culpable era yo, y los demás no pondrían sus vidas en peligro por mi culpa, yo debía defenderme y defender a los míos sobre mi propia vida. Sabía exactamente que me seguirían sobre todo Alec, y Edward que corría mucho más rápido que los demás.

Por más que intente no logre escabullirme de Alec, después de todo, él tenía muy poco tiempo bebiendo sangre de animales, a lo que conllevaba tener más capacidad física que cualquier vegetariano.

— ¿A dónde crees que vas? —se intercepto en mi camino Alec con una mirada severa, yo estaba más que boquiabierta, ¿Qué se supone que le diría? ¿Qué le respondería? —¡Demonios responde!

—A-Alec… y-o no… yo no quiero ponerlos en peligro —mencioné tartamudeando como una estúpida, en poco menos de un minuto ya todos los Cullen estaban aquí con sus rostros completamente preocupados, y ceños fruncidos.

Busque a Dylan con la mirada, esperanzada, pero no lo encontré por ninguna parte.

— ¿Y Dylan? —Pregunté temerosa, el silencio de todos me lleno de ira, ¿Cómo es posible todo esto? — ¡Hablen! Digan al-go —Presioné aun sin poder creerlo.

— Dylan ya no estaba cuando llegamos, al igual que tus padres —respondió Bella con el entrecejo fruncido, Bella intento hablar pero Edward la interrumpió.

—Escucho los pensamientos de Michelle cerca —declaró Edward.

¿Michelle? ¿También tenían a Michelle?

¡Maldita sea!

— ¿QUEEE? —interrogué angustiada, Alec me acerco mas a él y me coloco detrás de él, protegiéndome…

En cuestión de segundos se acercaron un gran número de vampiros liderados por Juliette quien tenía entre sus manos a él, a mi amigo, Dylan.

Y si, definitivamente si había tomado la decisión equivocada.

INICIO FLASHBACK

—Quiero que me conviertas —sus palabras retumbaron en mi mente como aquella cancioncita de ascensor en el castillo de Volterra cuando fuimos a ver a los Vulturi, donde vi por primera vez a mi Alec.

—Dylan yo… yo no puedo hacerlo, ¡no lo hare! —conteste férrea, no podía hacerlo. Dylan ha sido mi amigo desde que era pequeña, además el tiene a su familia y no todos los neófitos tendrían la suerte que yo tuve o la que tuvo Bella—. Se que quieres ayudar, pero yo no estoy dispuesta a hacerlo… por lo menos aun no.

— ¡Es la única forma de que Juliette no me utilice! —Exclamó alzando la voz, yo lo fulmine con la mirada, mi familia podría oír esta plática—. Además, yo podría protegerlos.

—Te agradezco tus ganas de ayudar —mencioné sincera—. Pero no quiero que tomes una decisión así, por nada más ayudar ¿Y qué hay del resto de la eternidad? —interrogué— No tomes decisiones precipitadas.

—Pero es la mejor forma y… yo te lo debo.

— ¡Nada de eso! —Exclamé mientras notaba el entrecejo fruncido de mi amigo— Todos cometemos errores, yo también los he cometido, solo te pido que lo pienses bien, y no tomes en cuenta para nada a los Salvatore en esto —Él asintió aún no muy convencido.

FIN FLASHBACK

Pensé que todo lo que había dicho ese día a mi amigo era cierto, bueno, de cierta forma lo era; pero lo que él había mencionado también tenía sentido, era la mejor manera de protegerlo a él y protegernos a nosotros.

Juliette lanzó al piso a Dylan frente a mí, los Cullen miraban la escena atónitos, y Jane, se veía rotundamente enfurecida, tanto así que miró con desdén a Juliette, después de unos minutos Jane suspiro frustrada al notar que nada ocurría, su don no funcionó…

Al lado de Juliette permanecía un vampiro de unos diecinueve o veinte años, cabello castaño, casi rubio, alto, muy guapo debo admitirlo, sus ojos evidentemente eran los de un vampiro, asesino de humanos.

La rabia e impotencia invadió mi cuerpo cuando cerca de este, se posicionaba aquella chica que había dicho tantas veces ser mi amiga, en las buenas y en las malas, ser mi compañera y confidente, ella sabia mentir muy bien…

Demasiado bien…

Michelle me miraba altaneramente mientras tomaba el níveo rostro del joven que estaba a su lado y le daba un desesperado beso, pero después de un momento, él la empujo rechazándola.

— ¡MALDITA ZORRA DESGRACIADA! —insulté a la muy puta que solo se dedicaba a burlarse de mi amigo que permanecía inconsciente en el suelo—. ¡MALNACIDA OJALA TE PUDRAS MALDITA ERES UNA PUTA TRAIDORA!

—Hola querida Melissa —“saludo” Juliette mientras acariciaba el rostro de Dylan. Las fulmine con la mirada a ambas. El chico al cual Michelle había besado, estaba con una sonrisa de estúpido en su maldito rostro.

¡Diablos!

Nunca había sido así, pero nunca me había traicionado tan cruelmente.

— ¡No lo toques! —dije cuando corría a ella y le daba una fuerte y merecida bofetada en su maldito rostro. Me di cuenta de que ahora el escudo de Dylan no funcionaba. ¿Acaso el estaba muerto?

Me acerque más a Dylan, su corazón latía, débilmente pero latía, aun estaba vivo; todos comenzaron a atacarse unos con otros…

Los Denali estaban aquí, Tanya, tamo a mi amigo entre sus brazos y en ese momento Juliette se posicionó frente a nosotras.

Mire hacia los lados, Emmett golpeaba y debilitaba a quien se atravesaba en su camino, eran muchos, muchos neófitos, podía ver diferentes habilidades realmente sorprendentes, en cantidad nos ganaban, estaba segura de eso, un enorme miedo me invadió.

¿Y si nadie salía vivo de aquí?

Por otro lado estaban Rosalie y Jasper que también contraatacaban a esos malditos títeres de porquería, Alice, Carlisle y Esme se les unieron mientras que Edward y Bella se acercaron a nosotros al notar como tres jóvenes neófitos caminaban hacia nosotros rápidamente, con rostros amenazantes.

Jason también estaba cerca de mí.

—Te presento a mi gran amigo y hermano, Thomas, supongo que ya habrás escuchado hablar de él, digamos que es muy popular —Menciono Juliette con una sonrisa sádica—. Ella es Louse, Michellle que ya la conoces ¡Es tu mejor amiga! Pero qué hermoso reencuentro —Maldita hipócrita pensé mientras hablaba—. Ellos son Tyler y Matt —Señalo a dos chicos jóvenes que eran idénticos, mismo porte, mismo cabello de color rubio, misma mirada y sonrisa siniestra.

— ¿DÓNDE DIABLOS ESTAN MIS PADRES? —interrogué desesperada, aguantando las ganas de matarlos quemándolos a todos, pero así no conseguiría nada, y algo me decía que estos tenían algo que escondían.

—Tú lo sabes querida… ¿Qué? ¿No recuerdas? —pregunto Tyler, quien poseía la misma voz que se había metido en mi mente hace algunos minutos, Alec me miro sin entender que era lo que el rubio había dicho.

— ¿De qué habla, Melissa? —cuestionó Alec, quien en un descuido comenzó a ser golpeado por Tyler, divise a Matt con su mirada clavada en Dylan que comenzó a sangrar de la nada, múltiples heridas aparecían en su cuerpo, todos los vampiros que se encontraban allí miraban con deleite al joven chico que aturdía sus sentidos con él aroma de su sangre.

Es que era un aroma exquisitamente provocativo…

Hasta Tanya estaba muy tensa.

Opte por utilizar mi don adicional, el cual hizo calmar un poco el ambiente…

Alec y Tyler se golpeaban en uno al otro, yo decidí atacar al estúpido de Matt, que lastimaba a mi amigo con su don, pero algo extraño ocurrió…

La sangre que derramaba Dylan paró y Juliette golpeo fuertemente a Matt como una total desquiciada.

— ¿QUÉ DEMONIOS CREES QUE HACES ESTÚPIDO? ESAS NO FUERON LAS ORDENES —reclamó Juliette enfurecida.

—Yo sé lo ordene —admitió Thomas acercándose a nosotros con su típica sonrisa. Juliette lo fulminó con la mirada.

— ¡ESTO NO ERA PARTE DEL PLAN! YA TODOS HABIAMOS HABLADO SOBRE ESO —gritó aún enojada Juliette, al parecer le preocupaba mi amigo, pero ¿Qué clase de amor podía ser este?

—No queremos distracciones, eso es todo —habló con voz pasiva Thomas, ganándose una sonora carcajada sarcástica de la rubia.

— ¿Tu hablando de distracciones? Pero por favor… ¿ya olvidaste a la mexicana o te la recuerdo? —preguntó Juliette, Jason escucho perfectamente todo lo que hablaban e imaginaba que estaba guardándose el odio para más tarde— OYE MALDITA ZORRA DE MIERDA, ALEJATE DE DYLAN —manifestó Juliette dirigiéndose a Tanya.

Todo ocurrió muy rápido, incluso para el ojo vampírico lo era, vi como le causaban un terrible daño a Alec, era algo así como electricidad, no sabía qué hacer, solo veía la mirada penetrante y amenazante de Louse, mientras Juliette y Tanya también se golpeaban respectivamente.

Rápidamente me posicione frente a la malnacida que estaba lastimando a mi novio y prometido y sin más decidí utilizar mi don sobre ella, Jane se acerco también, creo dolor en ella y yo la queme dejando solo sus malditas cenizas.

Tyler yacía sin extremidades y sin cabeza en el suelo…

Ahora, otra cosa me preocupaba, aquí no estaba Charlotte y precisamente mis padres estaban desaparecidos.

— ¿Qué le hiciste a Dylan? —pregunté, porque él no reaccionaba.

—Nada, ya no lo utilizare, no lo necesito, ahora tenemos a Clarisse —contestó Juliette mientras que una pelirroja se posicionaba frente a nosotros, como me pude dar cuenta, nuestros dones dejaron de funcionar debido a que yo quería de una vez por todas rostizar lentamente a Juliette Salvatore que ya había agotado la poca paciencia que me quedaba.

— ¡MELISSA, DYLAN ESTÁ MUY MAL! —avisó Tanya preocupada, Juliette abrió sus ojos como platos al escuchar lo que Tanya había mencionado—. Ha sangrado mucho.

—Maldita sea —Murmure entre dientes fulminando con la mirada a Matt y a Juliette, todos estaban protegidos por lo que supuse era un escudo que poseía Clarisse, muy parecido, idéntico o más poderoso al de Dylan.

—Quita el escudo de Thomas y la zorra, ya no los quiero vivos —mencionó Juliette, esta vampiresa no tenia escrúpulos, estaba a punto de traicionar al que dijo ser su “amigo y hermano”.

*

ALEC POV’S

Ahora sí que todo había llegado, estaba ocurriendo lo que todos temíamos y esperábamos; Melissa intento huir, algo que, me molesto, ¿Cómo fue capaz? Se suponía que ambos estábamos juntos en esto; sin embargo debo admitir que si tuviera en mi alcance esconderla para que nadie la dañara lo haría, lo haría sin pensarlo.

Pero no podía, no podía hacerlo, su familia estaba implicada y ahora no sabíamos donde estaban. Mientras que Melissa enfrentaba a Juliette junto con Tanya, yo me dirigí con Jason y con Jane para darle su merecido al muy maldito de Thomas Salvatore.

La aparición de Clarisse no me sorprendió en lo absoluto, y sabía que esto era sumamente peligroso, pero ella se veía muy ocupada con Tanya, Melissa y Juliette.

—Hace mucho que esperaba este encuentro maldito infeliz —índico Jason apretando sus puños con enojo. Él nos había contado todas las porquerías que Thomas le había hecho a Alexandra, la hermana de Jason.

— ¿Ah sí? —Preguntó el malnacido incrédulo—. Supongo que me odias como todos esos estúpidos, ¿No es así?

Jane se encargó de ayudar a los Cullen y Denali al ver que Jason y yo controlaríamos todo.

—Efectivamente —Afirmó Jason entre dientes —. Eres un maldito que pagará todas las cochinadas que has hecho en tu mugrienta existencia, desearas no haber nacido, desearas no haber hecho todas esas cobardías… algún día pagarás, si no es hoy, juro que me las cobraré.

—Vaya… —dijo soltando un sonoro suspiro mientras caminaba de un lado a otro—. Creo que de verdad soy un niño muy malo, ¿Pero sabe que opino?… opino que no entiendo ni una mierda.

Jason bufo burlonamente…

—Él… él es el hermano de… de la puta esa —intervino Michelle ganándose una mirada de odio de parte de Jason el cual inmediatamente se acerco a ella y la tomo por el cuello.

— ¡NUNCA MAS VUELVAS A HABLAR ASI DE MI HERMANA MALDITA! —masculló Jason enfurecido, yo por mi parte opte por acabar de una buena vez con el estúpido.

Lo tome por el cuello, pero él se libero fácilmente, él sabía cómo luchar pero yo no me quedaba atrás, pertenecer a la guardia Vulturi por más de quinientos años me brindaba cierta ventaja.

Michelle luchaba con Jason, el cual empujaba y golpeaba a la chica con gran odio, Thomas intento tomar mi cabeza, ganándose un enorme empujón de mi parte, quedando tirado en el suelo como lo que era, una completa basura asquerosa.

Al intentar tomarlo pro los brazos, él se libero rápidamente; deseche la idea de utilizar mi don, seria inútil, aquí estaba esa chica que por lo que sabía era un escudo inmune a cualquiera de nuestros dones.

—Qué tierno verte defender a tu amada —expreso Thomas intentando golpearme, él sonreía como idiota, y yo, pues yo no expresaba ningún sentimiento en mi rostro. Eso llegaba a confundir al oponente.

—Es muy agradable de tu parte darte cuenta de tal cosa, maldito —Conteste con repugnancia, el soltó una carcajada.

—Claro, es obvio que la defenderías —Expuso caminando de un lado a otro—. Me imagino cómo se comportaría tu parejita en la cama, ha de ser exquisita, ha de coger exquisito.

— ¡MALDITO INFELIZ HIJO DE PERRA! —mi paciencia se agotó y comencé de nuevo a golpearlo sin ningún hallazgo de piedad. Lo lance en el piso mientras golpeaba su cara con mis puños, no sé cuantas veces lo hice, solo me deje llevar por la ira, no estaba seguro de cuánto tiempo ni con qué cantidad de fuerza lo golpee, solo sabía que quería matarlo, este malnacido debía aprender a respetar, y no hablar de esa forma de las mujeres, sobre todo de mi ángel.

Ya lo tenía acabado, una de sus extremidades superiores estaba a punto de ser desprendida, me acerque a su cabeza para acabar con su vida…

Pero algo muy extraño ocurrió…

Mientras que Jason golpeaba a Michelle, esta le susurro.

—Hasta la vista baby —sin más, ella y Thomas desaparecieron como por arte de magia debo decirlo, pero sabía que podía ser un bloqueo o una ilusión visual. Los vampiros teníamos dones, pero no mágicos o extraordinarios como desaparecer, lo sabía por las arduas investigaciones que Aro empleaba desde hace mucho tiempo.

— ¡Pero qué rayos! —exclamó Jason sin entender absolutamente nada de lo que había ocurrido.

—El aroma de esos dos ha desaparecido, al igual que ellos —señaló Edward acercándose—. Sus mentes no logro escucharlas.

—Ni yo puedo percibir sus emociones —agregó Jasper— Será mejor que nos acerquemos a los demás —al mencionar esto Jasper, me di cuenta de que estábamos muy alejados de la ubicación de Melissa y los demás.

Pero cuando nos acercamos, el olor a más neófitos nos invadió…

—Genial —murmuré entre dientes, mi don era muy práctico, me dejaba de rodeos y mataba de una vez por todas a esos imbéciles.

Mientras que todos luchábamos y acabábamos con los inútiles neófitos, me di cuenta de el alboroto que se estaba formando donde estaba Dylan con mi novia.

Corrí a toda velocidad para acercarme a donde se encontraban, pero al llegar, no podía creer lo que mis ojos captaban.

Melissa había desaparecido, al igual que Thomas y Michelle…

Holaaa hermosass pues acá esta el penultimo capítulo, espero les agrade, espero subir capi mañana o el martes. Agradezco sus comentarios, bella_22 geme Mel gracias por sus hermosos comentarios del capi anterior las quiero!

y bueno a las silenciosas jaja tambien les agradezco :D

saludos a mariiana, tina, monica, luz, un beso.♥

Bueno si llega a ser el caso que no actualice pronto, pues agreguenme a facebook, allí encontraran algunos avances de cada capi y de la secuela. Este es el link.

https://www.facebook.com/day.swan.r 

No olviden pasar por mis otros fic's y mi one shot.

espero sus comentarios y votos hermosas.

No olviden que ya casi termina y me gustaria ver sus opiniones, si no es mucho pedir. Las quiere...

Day_Swan ♥