En nuestros cuerpos despertaba otro tiempo de sed, una sed que añoraba ser calmada, sed de amarnos, sed de entregarnos, esa sed nos gustaba, y nunca desaparecería, a pesar de los siglos…  

ALEC POV

Quería amarla, amarla más de lo que ya la amo, el tiempo que estuve lejos de ella me había enseñado que debía  vivir , experimentar como si fuesen mis últimos días, vivir todo lo que no pude vivir en mis más de 500 años de existencia.

Por fin había convencido a Jane para volver aunque sé que su cambio de planes se debió Samira y a sus insinuaciones y coqueteos hacia mí, Jane quiso alejarme de ella.

De los Vulturi pues todos quedaron sorprendidos por nuestra decisión de retirarnos y Jane por más que le pidió a Demetri que viniese con nosotros no logro nada, Demetri opto por quedarse.

Jane y yo nos fuimos de allí dejando en el pasado esa maldita vida que llevábamos, ahora nos dedicaríamos a vivir todo lo que no pudimos vivir antes.

Cuando llegue me encontré con una Melissa furiosa y dolida. Pero finalmente nos besamos, nos besamos con todo el amor del mundo y con esa pizca de pasión que siempre ha estado allí.

La lleve a Venezuela, ese lugar donde los dos nos sentíamos tranquilos y en paz, donde nos alejamos de toda la presión que a veces teníamos.

-Que ocurre?-Pregunto tomando mi rostro  entre sus manos mientras acariciaba mi cabello, gesto que me encantaba.

-Melissa, eres mi ángel-Confesé, aunque eso siempre lo decía-Quiero estar contigo, día y noche, eres la mujer perfecta-Mencione colocando el estuche en sus manos dulcemente, ella miro por unos minutos nuestras manos que permanecían unidas-Quieres casarte conmigo?-Pregunte, uniendo nuestras frentes, este era uno de esos momentos que no eran muy comunes en mi en que me sentía realmente nervioso, mi felicidad dependía de su respuesta.

Mi felicidad era ella.

-Con todo mi corazón-Respondió besándome en los labios, sentía una ráfaga de felicidad en todo mi ser, esta mujer ahora era mi vida, y me llenaba de grata emoción, saber que ella también quería compartir su existencia conmigo.

-Prometo nunca alejarme de ti, estaré contigo por sobre todas las cosas-Dijo dulcemente

-Prometo lo mismo y nunca te olvidarte, a pesar de todo-conteste colocando el anillo en su delicado dedo, este era un compromiso, un sueño.

Comencé a besarla como siempre. Demostrándole que mis palabras eran ciertas. Ella me respondió gustosa, sus labios rozaban los míos con dulzura y desesperación, su lengua era mi droga, me llevaba en un solo viaje a la locura infinita y a la total y plena excitación.

La tome por la cintura atrayéndola más a mí, mientras nos besábamos yo acariciaba su espalda y cadera, en el ambiente podría sentirse el fuego y la pasión que ambos estábamos desbordando.

Bese su cuello intensamente, causando millones de sensaciones nuevas, en ella y en mi…

Acaricie su mejilla y la mire a los ojos, ella se mordió el labio inferíor pícaramente, enloqueciendo cada fibra de mi ser.

La bese de nuevo, necesitaba de ella, mi cuerpo reaccionaba ante el roce de ella, Meli acariciaba mi pecho y comenzó a quitar mi abrigo, yo seguí acariciando su espalda y piernas, besando desesperadamente su cuello y labios, ella respiraba artificialmente, soltando pequeños gemidos de placer los cuales seguían enloqueciéndome.

Lentamente fuimos quedando sin ropa, se vía tan hermosa, tan perfecta.

Recorrí cautelosamente cada diminuta parte de su escultural cuerpo, estaba completamente deseoso, deseoso de ella.

Suspiro, causando un gran impacto de electricidad en mí. Se acerco a mis labios de nuevo como si de ellos necesitase, nos besamos y poco a poco terminamos acostados en el hermoso claro de aquel latino país.

Se miraba tan bella, tan hermosa, sé que esto ya lo había dicho, peo no me cansaría nunca, la luz de la luna reflejaba sus ojos dorados, que una vez fueron negros, pero estos no habían cambiado, seguían teniendo ese misterio y dulzura que tanto adoraba, sus labios carmesí que me pertenecían y su hermoso y perfecto rostro pálido que plasmaba esa notable felicidad.

La tenía allí, solamente para mí, a punto de ser mía, en cuerpo y corazón.

Atrape uno de sus pechos en mis manos, dándole a ella y a mí mismo un placer increíble, su piel rogaba por ser tocaba y acariciada por mí. Ella gemía de placer pero seguía mirándome a los ojos, ambos nos transmitíamos ese deseo en este momento.

La noche era testigo del amor y la pasión de dos seres que se amaban.

Que querían ser felices, que deseaban amarse desenfrenadamente.

Entre a ella, entregándole todo de mi, ella soltó un pequeño grito ahogado, erizando mi piel, coloco sus manos en mi cuello acercando sus labios a los míos, nos besábamos mientras con movimientos lentos y eróticos nos deleitábamos el uno al otro, ella fue aumentando de velocidad en sus movimientos, causándome sentir amado y deseado por ella.

Este era el cielo, pero también era el infierno, ahora éramos uno solo, ella era mía y yo era de ella y así seria por el resto de la eternidad.

MELISSA POV

Nunca pensé que hacer el amor con Alec fuese tan hermoso, estábamos siendo uno solo, y él me trataba como el caballero que era, esta era mi primera vez, y la del, la primera vez que me llevaban al borde de la demencia, la primera vez que experimentaba algo así.

Nos movíamos ambos causando un placer infinito, nuestros gemidos ya no podían ser ocultados, al igual que la pasión, de ambos.

Nuestros cuerpos se conectaban a la perfección, y se atraían como dos imanes.

El era mi todo ahora, y este sería el comienzo de varias noches de deseo. Acariciaba mi vientre entregándome leves cosquilleos que comenzaban desde mi vientre y terminaban en donde el ahora se encontraba, donde me estaba ofreciendo la maravilla de ser suya.

Dentro de mí.

 Disfrutaba esto, sí que lo disfrutaba, disfrutaba saber que nuestros cuerpos se atraían al igual que nuestros corazones.

Me moví a una velocidad sobrehumana quedando sobre él, el me miraba deseoso, y yo seguía moviéndome sobre él, entregándonos sensaciones inexplicables.

Todo esto era así. Inexplicable. ¿Cómo explicar todo lo que ahora sentíamos? ¿Qué palabras usar? No tengo idea de cuales serian las palabras perfectas, solo sé que este hombre que deseo con toda mi alma y corazón me está dando esa dicha de ser suya, de que recorra cada centímetro de mi piel, y yo la de él, tocar su perfecto cuerpo, es la infinita gloria.

Es Tocar el cielo.

Sus ojos carmesí brillaban de tanta satisfacción, y goce, y a pesar de todo lo que hacíamos en este momento, no podía dejar de perderme en sus ojos, tan intensos, tan perfectos, tan sexys.

Esta era una pasión y un fuego así transcurran días. Años, décadas, siglos, no se acabaría, estaba completamente segura.

Estaba cerca del climax, ambos lo estábamos, esto era increíble, y entre besos y gemidos habíamos llegado al mismísimo paraíso.

Nunca olvidare el deleite de sus caricias, de sus movimientos, de sus manos sobre mí. Todo esto era inolvidable.

Beso mi frente, mientras yo me coloque en su regazo con una gran sonrisa, el desplazaba su dedo índice por mi espalda y hombros.

-Te amo-susurro el-Ya te lo había dicho?-

-Nunca me cansaría de oírlo-Conteste soltando un suspiro-Yo también te amo-

-No más que yo, te lo aseguro-Comento aun acariciándome

-Sabes que no es así-Asegure

-Y tu sabes que a veces pienso que no eres real-Dijo pensativo-Incluso desde que te vi cuando tenias unos 6 o 7 años pensé que eras un ángel-

Solté una sonora carcajada.

-Y cualquiera que te escucha diría que eres un pervertido-Bromee, el rio conmigo-Y para mi nada de esto parece real-

-Poco a poco me fuiste enamorando-Menciono moviendo mi rostro para mirarme-Antes te veía como a una niña, pero todo cambio cuando estabas con ese imbécil-

-No seas celoso Alec!-Dije sonriendo y besando su mejilla-Ahora tu eres el dueño de mi corazón-El sonrió y acaricio mi mejilla para acercarse a mi oído.

-Antes no era un pervertido, pero tú, en este momento sacas toda la perversión que llevo dentro-Susurro en mi oído, despertando de nuevo mis sentidos y deseando ser de nuevo de él.

Y sin más nos dejamos llevar por ese amor que nos unía y creaba un fuerte lazo, fuimos de nuevo uno solo y la noche, la luna y las estrellas fueron testigos de ello y que los dos estábamos teniendo la mejor noche que nunca habíamos tenido alguna vez.

…………………………………………………….

-Creo que ya deberíamos volver-Susurre en su oído acto que causo que el comenzara a besarme rápidamente de nuevo. –Alec! Ya casi amanece!-Exclame, el frunció el ceño, como un niño pequeño al que regañan por alguna travesura.

-No quiero alejarme de ti-Cuestiono mirandome mientras yo me vestía.

-Yo tampoco quiero amor, pero Kathy está en la habitación y si no me ve podría echarnos de cabeza-Indique guiñándole un ojo

-Podrías dejar de cautivarme cuando haces eso-Señalo Alec refiriéndose a cuando le guiñe el ojo, el se vestía, yo me acerque a él atrevidamente.

-¿Quieres que no lo haga?-Pregunte levantando una ceja, el sonrió.

-No definitivamente no quiero que dejes de hacerlo-Respondió con la misma sonrisa, beso mi frente, y comenzamos a correr con destino a casa, a enfrentar a los demás.

Ahora debíamos pensar cuando seria la boda, y cuando se lo contaríamos a todos.

Aunque era más  que obvio que Alice ya lo sabía, y nos recibiría como loca y comenzara con los preparativos.

Alec me dejo en mi ventana y se dirigió a casa de los Cullen, yo entre con suma delicadeza a mi habitación con cuidado para no despertar a Kathy, entre al baño y comencé a ducharme.

No deje de pensar en ningún momento en las caricias de Alec… esas habían marcado mi piel y mi corazón eternamente.

Me vestí  con una pijama y seque mi cabello, hoy jugaríamos beisbol, pero beisbol del normal, mis padres y tíos irían, pasaríamos un momento agradable, en familia.

No sabía si decir la noticia hoy, o esperar hasta la graduación, finalmente me decidí por decirlo después d la graduación, se que Alec respetaría mi decisión, guarde el anillo en uno de mis cofres y vi a Kathy despertando, rápidamente me posicioné en mi cama y me acosté.

Tarde unas horas así, pensando en la noche buena que había tenido, que noche buena, ¡noche fantástica!

Finalmente Kathy despertó y se levanto de su cama, fue al baño y ahí fue donde aproveché para también levantarme, extrañaba soñar, si fuese humana estuviese soñando con todo lo que viví, pero también si fuese humana esto no fuera ocurrido.

Así que me sentía completamente satisfecha…

Kathy me sonrió cuando salía del baño.

-Buenos días-Saludo ella sonriente

-Buenos días-Conteste igual sonriendo-Como estas?-Pregunte

-Bien… y tu?-Pregunto ella algo tímida, seguramente estaba nerviosa por mi comportamiento de la noche anterior, es que ella estaba con mi primito, y a veces suelo ser algo celosa, no me imagino si tuviese hermanos, pensé para mis adentros.

-bien-Respondí sonriendo, entre al baño (De nuevo) no sin antes tomar mi atuendo del día de hoy, sería algo deportivo, decidí tomarme mi tiempo, y media hora después ya estaba lista para la ocasión.

Todos abajo desayunaban y yo me disculpe diciendo que no tenía hambre (como siempre)

-Manuel, no había tenido tiempo de hablar contigo, pero, porque no dijiste que traerías a una chica!-Exclame un poco dolida mientras yo lavaba los platos y el los limpiaba.

-Era sorpresa, primita no hables de secretos porque si es así tu tienes muchos-Menciono con una risita picara-O crees que no me entere de tu salidita de anoche?-

-Ehhh eso no tiene nada que ver-Trate de replicar, el solo subió sus manos en señal de paz

-Tranquila tranquila, no se que diabluras hiciste pero tampoco quiero que las expliques-Dijo levantando sus cejas, imagine a Emmett haciendo eso, era más gracioso.

-Ya basta!!!!-Exclame, y todos los que desayunaban me miraban perplejos-Lo siento-Me disculpe, Manuel se burlo y yo le lance una mirada envenenada.

-Paz, primita Paz-Decía mientras se retiraba de la cocina, mi primo loco, este era solo en comienzo, ahora vendrían las bromas de Alice, de Emmett y del propio Edward.

Hoy sería un día extremadamente largo!

Después de desayunar nos dirigimos a la casa de mi segunda familia, los Cullen, cerca de su ostentosa casa estaba el bosque, donde había suficiente espacio para jugar beisbol, el beisbol vampírico lo jugaríamos en la madrugada,  gracias a mi don el clima estará nublado y será suficiente excusa para los ruidos que hagamos.

Emmett no dejo de molestarme con las bromitas sobre escapadas y noche de pasión, Alec estaba molesto pero no decía nada, la mirada picara de Alice me persiguió por todo el día, me sentía intimidada, pero no dejaba de darme risa.

Edward no se quedo atrás, y no dejo de aconsejarme que no fuera a un hotel, menciono algo sobre accidentes con plumas de almohadas, ese comentario sí que me dio risa, como lo imagine también bromearía sobre eso.

Pasamos el día muy alegremente, entre risas y bromas de Emmett por supuesto, todos lucíamos muy unidos, amaba esto.

Todo era perfecto, al final llego la noche y nos dirigimos a casa, Kathy se quedaría en mi habitación, pasaríamos juntos el fin de año también, por lo que me había contado Manuel, ella no tenia familia, sentí mucha pena por ella al enterarme de eso.

Jugamos beisbol en la madrugada, la pasamos genial!

Pero una parte de mi se sentía extremadamente preocupada.

No habíamos vuelto a saber sobre los Salvattore, y eso era preocupante.

Además de que otra parte de mi se sentía sumamente nostálgica, en estas fechas siempre estaba junto a mis amigos, Dylan y Michelle, y ahora estábamos alejados, Michelle que se escapo, y Dylan que ahora estaba muy cambiado.

Decidí ir a hablar con él.

Lo extrañaba mucho.

……………………………………

El reloj marcaba las 2:00 de la tarde, el clima en Forks estaba frio y nublado, como a mí me gustaba.

Acomode mi cabello y Salí de casa, hoy iría a casa de Dylan. Decidí ir corriendo, al fin y al cabo no gastaría energías.

En menos de 2 minutos ya estaba en casa de mi amigo. No sabía si tocar la puerta o llegar a su habitación, opte primero por marcarle a su celular.

Pero no contestaba, esto me estaba enfureciendo, estaba actuando como un niño de 8 años!

El estaba en su casa, podía distinguir su aroma, decidí enfrentarlo, así que trepe a su habitación.

El estaba con su Ipod, escuchando música, no se percato de mi presencia en ningún momento, me coloque en frente del, para enfrentarlo. El me miraba sorprendido.

-Melissa!-Exclamo sorprendido mientras se levantaba de la cama donde él se encontraba –Que haces aquí?-

-Vine a verte, no es obvio?-Pregunte incrédula, el negó con la cabeza irritado. –Que diablos te pasa? Porque me evitas?-Pregunte indignada, el seguía callado –Responde!!!!-Presione

-Estoy enamorado de Juliette-contesto, dejándome perpleja ante tal declaración, mi amigo, mi mejor amigo, enamorado de una vampiresa, que me odiaba, que quería acabar conmigo.

Y lo peor de todo es que ella lo utilizaba a él para acabarme, y el parecía omitir eso.

-Acaso estás loco!?-Pregunte irónica-No sabes todo lo que planea esa desgraciada?-

-No hables de ella así!!-Exclamo enojado, lo mire por unos minutos estupefacta ante el comportamiento tan idiota de Dylan.

-No la conoces Dylan-Me limite en responder tomando paciencia –Ella intenta manipularte.

-Si la conozco, sueño con ella, ella intenta comunicarse conmigo atreves de los sueños-Dijo esperanzado, lo mire con lastima, respire hondo de forma artificial incitando calma, no era muy paciente.

-Escucha, Dylan, con su don, ella domina el tuyo, así que solo lo hace por eso, entiende, ella no puede ofrecerte nada, ella no te ama, ella no es para ti-Intente que recapacitara, pero él seguía con lo mismo, no cambiaba de opinión.

-Ves!! Por eso te evitaba! No entiendes-

-No! El que no entiende eres tú!-Exclame furiosa, ahora si me había hecho enojar, ya le había explicado varias veces la situación, pero no! El señor testarudo nunca entiende y acepta las cosas, como en verdad son. –Con el tiempo te darás cuenta que todo lo que te digo es por tu bien-Mencione, y sin más que decir, me fui de aquella habitación con una infinita rabia y tristeza, corrí rápidamente alejándome de él, de Dylan, el único amigo humano que me quedaba, aparte de Jason, que él estaba en otro país, pero Dylan, a Dylan lo conocía desde pequeña.

No podía creer que el prefiriera creerle a una maldita que no conoce bien.

Esto era un golpe bajo.

JASON POV

Mi hermana me miraba sonriente, yo no entendía en lo absoluto que ocurría, había otros dos chicos con ella, podía sentir que algo no estaba bien.

Además de que estaba muy cambiado.

-Que ocurre?-Pregunto una voz musical, que era la mía, mi voz estaba mucho mas… ¿Perfecta? Parecía la voz de un ángel o algo por el estilo, por alguna razón recordé la primera vez que oí la voz de mi hermana cuando regreso de aquel viaje de U.S.A

-Ya te explicare hermanito-Contesto Alex abrasándome, se notaba aliviada, era raro, pero la había extrañado, la abrace fuertemente, hasta que ella comenzó a quejarse.

-Oyee!! Tu fuerza-Menciono riendo

-Lo siento-Comente confundido.

Los ruidos de afuera los oía a la perfección al igual que los corazones de esos dos chicos que estaban cerca de mí, eran tan parecidos, parecían hermanos, escuche pasos y dos aromas desconocidos, por impulso mire hacia la puerta que fue abierta por dos hombres extremadamente pálidos.

Mire mi mano al verlos, no sé porque lo hice quizás por curiosidad, porque esos dos hombres eran tan pálidos como mi hermana, y me resultaba extraño, me impacte al ver que yo también estaba sí, mi pregunta era ¿Por qué?

¿Por qué sentía este ardor en mi garganta? ¿Por qué quería correr y buscar algo que ansiaba?

¿Qué era ese algo que tanto añoraba? Era algo dentro de mí que estaba saliendo a flote, y no sabía si podía controlarlo.

Y las caras de preocupación de todos me hacía sentir más confundido de lo que ya estaba.

Todas mis dudas desaparecieron cuando estos decidieron contarme todo.

*

*

-Jason, esa chica, te convirtió en vampiro-Explico Alex cabizbaja –Perdóname por no estar… cuando tú me necesitabas ahora eres un monstruo como yo… eso no me lo perdonare nunca-

Yo solo escuchaba todo tranquilamente, no cabía duda que en el mundo podían pasar cosas, cosas realmente extrañas, absurdas, raras, pero, todo era posible, no lo podía creer, pero lo estaba viviendo, muy dentro de mi sabia que ella estaba siendo sincera.

Y que lo que tanto necesitaba era… sangre…

Una pregunta se cruzo por mi mente luego de darme cuenta de lo que ahora, yo era, ¿Cómo serian las cosas ahora, con Lucia? El amor de mi vida…

¿Y BIEN? ¿LES GUSTO? DEJEN SUS OPINIONES CHICAS ♥ ESPERO SI LES HAYA GUSTADO. EL CAPITULO MERECE VOTOS, COMENTARIOS O LO QUE SEA? XD JAJA ESPERO Q SI (ESO SIEMPRE LO DIGO) SALUDOS PARA TODAS, MI GEMEE MEL QUE SIEMPRE ESTA PENDIENTE TE ADOROO HERMOSA:* MONICA, BELLA_22, SOBRI VERO, TIA JOVI,  PRIMIS MARIIANA, TINA, MUCHAS GRACIAS! POR TODO EL APOYO CHICAS, COMO SIEMPRE LO HE DICHO ME INSPIRAN A SEGUIR! Y ESTE CAP ES DEDICADO A USTEDES.

ESPERO PUEDAN PASAR POR MI NUEVO FIC "MI DESTINO: AMARTE POR TODA LA ETERNIDAD" http://lunanuevameyer.com/sala-cullen?id_relato=3046 LAS ESPERO POR ALLA :D ♥

MILLONES DE BESOS Y ABRASOS

**~DAY~**