Capitulo XVI

Bella Pov

-¿tu?- fue lo único que salió de mis labios, está en shock, anonada, impactada.

-Bella- susurro de sus labios.

-suéltame por favor- dije mientras trataba de reincorpórame, el me soltó de inmediato. Se me quedo viendo como si fuera un salvavidas o algo por el estilo.

-¡Cuánto tiempo!- exclamo, si y aún no he olvidado lo que me hiciste, pensé para mí misma.

No lo mire a los ojos.

-Si- dije y comencé a caminar o mejor dicho prácticamente a correr hacia donde estaba mi auto.

-Bella- escuche que me llamaba, pero no me detuve. ¿Por qué me había tenido que reencontrar con él?, ¿ahora como haría?, tenía miedo, estaba en París, visitando mi Academia, la Academia donde SU  hija estudiaba, todo  se había complicado, buenos mal que mañana Eli se iría de viaje luego vería como hacía con él.

-bella espérate, tenemos que hablar- dijo mientras que yo escuchaba como corría hacia mí, aumente mi velocidad hasta que llegue al auto, metí la llave para abrir pero la mano me temblaba y me era imposible.

 Sentí cuando se detuvo atrás de mí.

-tenemos que hablar- dijo entrecortadamente.

-No tengo nada que hablar contigo- respondí secamente mientras abría la puerta del auto, me cogió del brazo impidiéndome que me montara.

-Suelta- siseé.

-Solo quiero decirte algo.

-No te quiero escuchar Edward Cullen, ahora suéltame que me tengo que ir- me libere de su agarre de un jalón y me metí dentro del auto, prendí el motor y Salí del aparcamiento lo más rápido que mis nervios me lo permitían.

¿Ahora qué haría?, Elizabeth nunca se puede enterar de que él es su padre, estaba siendo egoísta, pero él me la quitaría y yo no lo permitirá. Además él nunca estuvo conmigo y él fue quien me violo.

Edward Pov

Estaba estático, donde antes había estado el auto de bella ya no había nada, solo soledad y un pozo de tristeza. La había visto otra vez después de 15 años y estaba que saltaba de la felicidad, pero yo no era bien recibido por ella, cuando me reconoció salió huyendo de mi como si fuera una plaga o algo por el estilo.

Yo sabía que ella sabía que yo la había violado y aunque me costara admitirlo, ella me odiaba más que a nada en el mundo y ¿quién no?, si hasta yo lo hacía. Pero lo hecho ya estaba hecho no podía cambiar todo de la noche a la mañana, ahora la pregunta que me rondaba era ¡que hacia ella en París? , ¿Por qué estaba en la Academia donde estudiaba mi hijo?, ¿será que es una visita? O ¿se residenciara aquí?

Salí de mi trance y me encamine nuevamente hacia la entrada de la Academia para buscar a mi hijo.

Él se despidió de Eli, la cual yo veía como si fuera una hija para mí, todo en ella me llamaba a que la protegiera y salimos partimos a la casa a arreglar todo.

El destino me volvería hacer reencontrar con ella, de eso estaba seguro. Solo quería hablar y pedirle perdón aunque ya hayan pasado 15 años.

Elizabeth Pov

Ya me había despedido de Anthony  y ahora me estaba montando en el auto para ir a la casa.

Una vez llegue subí a la habitación de mamá, esta estaba con la mirada perdida y me percaté de que tenía los ojos rojos a causa del llanto.

-¿Por qué lloras?- pregunte acercándome a donde ella estaba. Cuando se dio cuenta de mi presencia se secó las lágrimas y sonrió.

-Por nada- dijo  y se reincorporo.

-No te creo pero bueno- dije  sonriéndole.

-Vamos a terminar de arreglar todo, mañana te vas a Venezuela, diviértete- me abrazo y me mantuvo así un largo rato.

-Por supuesto que lo hare- le conteste.

Lo que quedaba de tarde nos las pasamos arreglando mis maletas, había de todo en esas maletas, llevaba como unas 4 o 5 la verdad no sé , pero pasaríamos un mes allá, dicen que mujer precavida vale por dos y yo no sería la excepción.

Metí de todo, ropa para el frio, trajes de baño,  vestidos para fiesta, de baile, casual, deportiva. Aparte de mis cosas personales, también metí fotos de mamá para siempre verla, no me digan melodramática pero la extrañaría.

También puse la cámara fotográfica entre otras cosas.

Terminamos exhaustas  y me quede dormida.

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Ya estábamos a punto de abordar el avión mamá estaba ahí, pero el padre de Anthony no había podido ir a causa de que tenía un compromiso.

-Mis niños cuídense y pórtense bien- nos decía mamá por vigésima vez.

-Si mamá- repetí lo mismo que venía diciendo desde hace hora y media.

-La dejo en tus manos Anthony, si le pasa algo el culpable serás tú- le advirtió mamá a Anthony.

-Ya mamá no nos va a pasar nada, además irán profesores- dije riéndome.

-Lo sé,- nos abrazó y luego nos dejó ir.

-Tu madre se preocupa por ti- me señalo Thony-

-Si- coincidí yo.

-Pero igual ni muerto dejo que te pasara algo, obre mi cadáver- dijo mientras  cruzábamos la puerta del avión y buscábamos nuestros puestos.  Nuestros puestos habían quedado juntos yo iba al lado de la ventanilla y Thony al lado de mí.

-Este viaje será divertido- dije emocionada.

-Sí, pero más emocionante será compartirlo contigo- dijo dándome un pequeño beso.

-Nos espera un largo viaje- dije mientras era abrazada por Anthony.

-Tampoco así, solo son  8160, 62Km- me le mire mirando incrédula.

-Si será muy corto- dije con cierto sarcasmo.

Escuchamos como nos decían que nos abrocháramos los cinturones, lo hicimos y esperamos el despegue.

Como a la hora de haber despegado una azafata nos ofreció de comer, bueno solamente a Anthony ya que a mí ni me miro, maleducada, pensé para mí.

Lo veía indebidamente, él era mío solo mío. Me cruce de brazos y mire a Anthony mal y a la azafata con ganas de matarla.

-Ya le traigo lo que pidió- dijo ¡guiñándole un ojo a Anthony!, ¿Qué se creía?

Una vez se fue, mire por la ventanilla.

-Eli-dijo Anthony suspirando, pero no me volví- Eli- volvió a llamar pero nada- no seas celosa solo nos estaba ofreciendo algo de beber- me gire y lo mate con la mirada.

-Pues no me pareció- refunfuñe el soltó una carcajada.

-Vamos fierita, solo tengo ojos para ti- dijo mientras trataba de abrazarme pero yo lo apartaba.

-te veía como si te quisiera comer- le reproche.

-¿en serio?- preguntó restándole importancia.

-No te vengas hacer Anthony Cullen- le dije con los dientes apretados.

-No te pongas brava, ni siquiera medí de cuenta- dijo agarrando mi rostro con sus manos, volví mi cara pero él me la mantuvo quieta.

-Mírame- me ordenó- Eli mírame- volvió a repetir, pero lo ignore- Elizabeth Swan- dijo seriamente   lo mire inmediatamente él nunca me había dicho así, siempre era Eli o fierita, princesa, pequeña, mi niña o algo así.

Sonrió complacido de mi reacción, me volví hacia la ventanilla.

-No seas infantil-dijo mientras se acercaba a mí.

-No estoy siendo infantil-  me defendí.

-Claro que sí y estas  celosa también- dijo mientras daba un pequeño beso a mi nariz- pero déjame decirte algo- susurro junto a mi oído- solo te amo a ti y solo tengo ojos para ti- se separó de mí y me sonrió se me quedo mirando a los ojos y me beso.

Sus manos tenían apresado mi rostro, su beso era lento como una cohesión, pero le respondí al beso, nada me tranquilizaba más que eso. Escuche como unos zapatos sonaban en contra del suelo del avión seguro era la azafata esa, así que  profundicé más el beso, su respuesta fue inmediata ya que mordió uno de mis labios haciéndome gemir un poco,  nuestras lenguas jugaban, no me quería separar de él, pero lo tuve que hacer por falta de aire. Cuando abrí mis ojos la estúpida azafata me veía con mirada asesina no deje que Anthony volteara y le dije:

-Te amo- para darle un pequeño beso-

-Yo también te amo pequeña- dijo para acariciar mi mejilla- la azafata rompió el momento aclarándose la garganta.

-Aquí esta lo que pidió- dijo dejando las cosas ahí, le sonreí triunfadora y se  fue indignada.

-Eres mala Eli, muy mala- dijo Thony abriendo una botella de agua.

-¿yo?, si no hice nada- me encogí de hombros y me sonroje.

-Sí tú, con ese yo no fui compras al mundo- me reía de su expresión.

-¿pero que hice?- pregunte inocentemente mientras ponía mi rostro angelical.

-Besarme de esa manera sabiendo que ella estaba ahí- rodo los ojos pero me miro sonriendo- eres un peligro para la humanidad- dijo.

-¿Acaso no te gusta que te bese?- mi mirada se puso triste pero era actuación.

Vi que casi se atragantaba con el agua que tomaba, me miro serio y respondió:

-Siempre me encanta que me beses, tus besos son como una adicción para mí- dicho esto me beso.

-te creo- estaba tratando de recuperar la respiración.

Luego de esa pequeña pelea, el resto del viaje se hizo muy divertido íbamos metidos en nuestra pequeña burbuja personal, los dos íbamos escuchando canciones.

En un momento dado me quede dormida, y no fui consciente de mí. Solo sentía que Anthony me tenía entre sus brazos cantándome una canción y así me quede dormida.

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-Pequeña despierta hemos llegado- me decía Anthony al odio, abri mis ojos lentamente para encontrarlo con una sonrisa.

-Buenos días bella durmiente- se rio con ganas.

-¿llegamos?- pregunte mientras veía por la ventanilla y en efecto estábamos en la pista de aterrizaje.

-Si vamos tenemos que bajar- dijo mientras me quitaba el cinturón.

Una vez fuera del avión todo era diferente, ¡tan diferente!, parecía como si nos encontráramos en otro mundo.

Mire maravillada todo el lugar.  Ya en las puertas del Aeropuerto nos esperaban varias camionetas para llevarnos al hotel en donde nos hospedaríamos.

La profesora de ballet fue con nosotros en una camioneta. Cuando llegamos al hotel nos esperaban varias personas hay me imagino que traductores pues algunos no hablaban español, aunque yo lo dominaba bastante bien gracias a que mamá  tenía una obsesión por el español.

-Hola Bienvenidos al Hotel Alba Caracas- dijo un chico muy apuesto aunque no le preste  mucha atención, estaba  viendo todo. El hotel era inmenso, muy inmenso, grande, tenía más o menos altura y una entrada al Lobbie espectacular.

-Gracias- respondí yo en mi perfecto español, Anthony me miro impresionado.

-¿hablas español?- me pregunto en español yo lo mire asombrada.

-Si- le conteste en el mismo idioma.

-Increíble- dijo negando con su camisa, el chico que era como una guía turística nos llevó hacia nuestros cuartos, a las chicas no había tocado en un ala diferente al de la chicas.

 A mí me tocó con Verónica, Julieta  y Ani, eran chicas muy amigables. Una vez nos instalamos por completo, nos encontramos en el Lobbie para hacer un recorrido por todo el hotel.

Anthony me tomo por la  mano y el recorrido comenzó, nos enseñaron las instalaciones por completo, el Hotel contaba con  37 salas de  reunión, un salón de baile grande y sala de estar ejecutiva con vistas panorámicas de la ciudad,  2 piscinas al aire libre, un spa, el gimnasio,  5 restaurantes y bares. Además de que tenía   una sala donde hacían conciertos de noche y la gente cantaba karaoke.

Al final del día ya habíamos visto todo el Hotel, ahora cada quien estaba en su habitación alistándose para irse a dormir ya que mañana por la mañana iríamos a Los Roques, que era una isla, o algo así como un archipiélago.

Me tumbe en la cama y caí en un sueño profundo, el viaje me había dejado cansada más la recorrida del todo el Hotel hoy, estaba realmente exhausta. Este viaje prometía.

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Escuche el molestoso sonido del despertador cuando abrí los ojos. Estaba  levantando  mis brazos  para apagarlo  cuando vi la hora y eran ¿las 4 de la madrugada?,¡ las 4 de la madrugada!. ¡Dios santo!, pensé para mí. Era muy temprano, pero recordé que hoy iríamos a el Archipiélago los Roques, me levante de mala gana y comencé a alistarme.

Cogí un gran bolso de una de las maletas y comencé a meter todo lo que necesitaría, metí una toalla,  bloqueador y bronceador para el sol, unas gafas, otra muda de ropa, artículos personales,  un suéter, me dirán que estoy loca pero uno nunca sabe y  metí otra muda de ropa, aparte del traje de baño que tenía puesto  el cual era color rojo pasión y contrastaba de maravilla con mi piel blanca como la cal.

 Busque el Ipod, los  audífonos, mi celular, la cámara digital y ya estaba lista cuando me di de cuenta las chicas también se estaban terminando de alistar y eran las 5 ya teníamos que estar en el Lobbie que era donde nos encontraríamos todos juntos.

Me vi por última vez en el espejo y me gusto lo que vi, había un chica igual a mi obviamente, con un hermoso vestido playero con estampado de flores entre blancas y rojas y abajo el traje de baño, llevaba una sandalias de playa y el cabello suelto, me puse las gafas y Salí con las demás chicas.

Al llegar al Lobbie pude ver que la estúpida de Rebeca estaba muy cerca de Thony, este se veía como incomodo pero igual le sonreía. Me llegue a donde estaban y salude a Thony.

-Hola amor- susurre mientras  lo veía a los ojos, este me sonrió y me agarro por la cintura para darme mi beso de buenos días yo le correspondí una vez nos separamos rebeca ya no estaba a nuestro lado, sonreí aún más.

-¿Cómo amaneciste?-preguntó.

-Muy bien aunque con sueño es muy temprano- me queje como niña chiquita.

-Si eres quejona, la pasaremos bien- me dio un pequeño beso y luego pusimos atención en que auto nos iríamos.

Estábamos en uno de los tantos autos el cual nos llevaría nuevamente al Aeropuerto de Maiquetía para poder tomar luego otro avión o avioneta y poder llegar a Los Roques.

El tráfico en caracas que era la Capital de Venezuela era horrible,  tráfico por todas partes y las colas que se hacían eran enormes, pero gracias a Dios llegamos temprano para tomar el avión que nos llevaría  nuestro destino.

Abordamos el avión el cual era un  vuelo operado por (Aerotuy, Chapi Air, Aeroejecutivo).

El vuelo duro como unos 35 o 45 minutos más o menos en los cuales, Anthony estaba que echaba chispas  pues todos los chicos me estaban viendo mucho y con una mirada para nada bonita. La venganza es dulce.

-Anthony-lo llame ya me estaba mirando no sé qué.- Amor- susurre en su oído pero nada- Anthony- le tome una mano y la lleve a mi cara pero nada, suspire y pedí paciencia.-Por  favor-dije pero nada ya para ese entonces nos encontrábamos bajando del avión, ahora estábamos en el Aeropuerto Los Roques el cual quedaba  en la isla Gran Roque, el bajo y ni me espero.-Anthony Cullen llame una vez llegue a donde él estaba, pero el muy tarado no me respondía-Sabes que te amo a ti ¿no?- le pregunte pero no obtuve respuesta alguna. Ya estábamos en las calles del pequeño pueblo todo era muy lindo, los colores muy vivos, podías escuchar las olas de  la playa era todo muy pacifico. Deje que el grupo se adelantara y me quede con Anthony  atrás, lo detuve e hice que me mirara a los ojos. Su mirada está pérdida, solo había una cosa que lo haría reaccionar, lo bese pero no me respondía el beso, ¡maldito!, pensé para mí.

Lo acerque más y profundice más el bese, yo estaba guindada a su cuello y  trataba de estrechar mis labios con los de él, le mordí el labio pero ¡NADA!, mis manos bajaron por su pecho y pude sentir como se tensó, pero seguí mi recorrido, metí mis manos bajo su camisa y pude tocar su marcado abdomen,  estaba por subir cuando sentí que me inmovilizaban las manos. Bajé mi vista y eran las manos de él.

-Detente-susurro con voz  ronca, sonreí con suficiencia.

-por fin hablas- dije, pero no saque mis manos de donde estaban.

-¿podrías sacar las manos de ahí?-señalo su abdomen.

-Mmm-dije pensando y el me miraba serio- Si sonríes y me dices que tienes y a bueno me dices te amo- lo mire- lo hago-No dijo nada.

-Debo suponer que no quieres que saques mis manos, ya que no dices nada- dije tratando de subir más mis manos, pero las apretó un poco más.- me miro suspiro y sonrió, va una, pensé.

- Lo que me pasa es que estoy CELOSO- dijo   dando mucha énfasis a la última palabra- no soporto que te vean así Elizabeth, eres mia, solo mía, de nadie más-dijo mientras aflojaba su agarre,  pero yo no sacaba mis manos- y por supuesto que te amo, más que a mi vida- dijo para besarme con mucho entusiasmo, su lengua jugaba con la mía, era un beso desesperado, apasionado y salvaje.

-Creo que nos tenemos que ir- dije viendo donde estaba todo el grupo el cual iba muy adelantado.

-Si-dijo viéndome- Ya lo sabes Eli solo mía.

-y tú solo mío- susurro cerca de sus labios, sonrió y nos encaminamos hacia donde estaban los demás.

Llegamos a la playa  muy rápido en realidad la teníamos al lado, se podía ver el ambiente a relajación completa y total. El agua era clara había varios tonos de azules, el sol resplandecía encima de nuestras cabezas, la gente sonreía, jugaban a la pelota, nadaban,  conversaban, se bronceaba o simplemente admiraban el mensaje. Las casitas y los kioscos los teníamos detrás de nosotros, era maravilloso. Todo era hermoso.

Una vez nos ubicamos, todos se dispusieron a quitarse las prendas que tenían encima, menos yo.

-Vamos Eli a nadar un rato todo esto es hermoso- me decía Anthony mientras se quitaba su camisa y quedaba con los short. Asentí y deje mi bolso en uno de las tumbadoras me quite las sandalias y me quite el vestido, lo doble y lo deje en la silla cuando levante la vista Anthony me veía con sus ojos como platos, me sonroje y me le acerque.

-¿Vamos?-pregunte mientras le daba un pequeño beso.

-Tu no pensaras quedarte así o ¿sí?- pregunto mientras me veía de arriba  hacia abajo.

-Si- dije.

-Eli no- negó con la cabeza.-

¿Por qué?- dije inocentemente.

-Solo ve a tu alrededor- lo hice y todos me miraba embobados.

-Solo quiero que me veas tu- susurre en su oído.

-Eso ya lo hago- dijo sin pudor alguno.

-Vamos a nadar- lo anime.

-Eli así no, por lo menor ponte algo una malla, que se yo- dijo viéndome con ojitos de borrego.

-No- dije y Salí corriendo, el agua chocaba contra mis pies, era muy clarita, casi transparente pero azul, de diferentes tonos de azul era hermoso, podías ver la arena del fondo y los animalitos que habían, como estrellas, pececitos y otras cosas. Sentí que caía hacia el agua pero que a la vez caía en la tierra no había podido correr mucho.

-Me vengare- fue lo que dijo, su cuerpo estaba encima del mío, lo podía sentir por todas partes, emanaba un calor único.

-Te amo- dijo mientras que una de sus manos se posaba en mi cintura desnuda y algunas olas rompían contra nuestro cuerpo.

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Bueno aqui esta.. : ya saben votitos y  coment me hacen muy feliz muakk :*