Estuvimos en la terraza hasta el amanecer, mis padres estuvieron ocupados toda la noche, y lo deduje porque mi padre no se había escandalizado por no ver a Jacob en la sala, lo que quería decir que no habían salido de la habitación *-*… ¡esos vampiros eran insaciables!

Fue sin duda la mejor noche de mi corta vida… Jake y yo la pasamos recordando historias graciosas de mi cortísima niñez… como la vez nos arrojamos de los acantilados más altos en la reserva… a mi madre casi le daba un paro cardiaco cuando se entero. En realidad lo del paro no tanto… pero  sí que se molesto… papá casi mata a Jacob por ser un “irresponsable”… eso si que iba a suceder. En ese entonces aparentaba unos 10  u 11 años más o menos. Por eso pensaron que sería peligro… su niñita saltando de un acantilado. Y ahora su niñita esta recostada en el regazo de su irresponsable amigo.

¿Amigo?

Ahora que no pensaba mejor… como se pondrían las cosas con él, sería muy incomodo no solo para mí sino también para él supuse.

          Justo antes de que el sol saliera por el horizonte, Jacob salió de mi cuarto, claro sin antes darme un beso de despedida, sus labios eran cálidos, más de lo que había imaginado…

-intenta dormir un poco princesa, nos queda un gran día por delante.- dijo antes de salir al pasillo para hacerse el dormido.

-dulces sueños mi ángel moreno- pensé para mi, al regresar a la cama, no creo que dormiría mucho después de lo sucedido hacia solo unas cuantas horas.

*

Escuche unos golpes en la puerta, pero estaba tan cómoda que no quería levantarme de la cama.

Se repitieron los golpes… ahhhhhhhhs!!! No quería levantarme!!!! Pero ante la maravillosa posibilidad de que fuera Jacob para salir a dar un paseo decidí alejar esa frustración matutina y abrir la puerta.

-         buenos días cariño, ¿Cómo dormiste?- dijo mi madre en el marco de la puerta.

-         ¿Por qué tocas la puerta?, nunca lo habías hecho. Y… contestando tu pregunta, dormí como un bebé.- dije dedicándole la más dulce de mis sonrisas.

-         Bueno, es que… pensé que estarías… tu sabes… acompañada- estaba nerviosa, lo supuse pues jugaba con sus manos, y  a pesar de la seguridad que tenia normalmente con respecto al tema del sexo, esta vez la veía mas agitada, cosa que era difícil de creer.

-         Pensaste que estaría… mamá como se te ocurren estas cosas, y mas aun sabiendo que papá acabaría con quien sea que solo pensara en tocarme- dije haciendo especial énfasis en la palabra “PENSARA”.

-         Cariño debes entenderme, al salir del cuarto vi que Jacob no estaba ahí, que crees que una madre pensaría sobre un casi así. Debes entenderme cariño soy nueva en esto de ser la madre de una adolecente. Y no solo me refiero a ti, sino que también soy responsable de Jacob.

-         Mamá… Jacob sí paso la noche conmigo.- al decir esas palabras sus ojos estaban a punto de salírsele de sus orbitas.- pero no como te lo estas imaginando, estuvimos hablando mucho tiempo en la terraza, y … me dijo que… bueno… me dijo, que..me quería, y luego… nos besamos. Eso fue todo, pero no te enojes conmigo ni con él, fue la mejor noche de todas mamá, no te lo imaginas.- estaba tan contenta que no me percate que estaba sentada en la cama junto a ella.

-         Me alegro que seas feliz cariño. No estoy molesta, al contrario, pero… sabes que debes ser muy prudente Ness. Jacob es mucho mayor que tu, y pienso que tiene algo de experiencia… con ciertas cosas, y te pido que seas la responsable, sé que es bueno, de hecho el mejor. Pero eso no quiere decir que no los vigilaré. Y… tendrás que decírselo a tu padre. – al mencionar a mi padre la sangre abandono mi rostro, sería mucho más fácil si el aceptara a Jake con tanta facilidad como mi madre. Ella confiaba en él pero mi papá no tanto.

-         Lo haré.

-         De acuerdo. Te amo cariño – me besó la frente y se dispuso a salir de la habitación. Estaba asustada, pero lo superaría y sobre todo lo haría por Jacob y por mí, nuestro amor merecía ser vivido. No se lo ocultara a nadie, y mucho menos al hombre que me dio la vida, y al que amaba con todas mis fuerzas.

Pero ¿merecía la pena arriesgar la vida de las personas que mas amaba por amor?

Al precio que sea sería feliz con mi Jake… y si mi papá no lo quería… haría que fuera así