Confiar, Sentir y Amar (+18)

Autor: PrincessCullen
Género: Romance
Fecha Creación: 08/08/2011
Fecha Actualización: 30/09/2012
Finalizado: SI
Votos: 21
Comentarios: 230
Visitas: 112127
Capítulos: 44
(Finalizado)
Como dicen por ahí, después de la tormenta, viene la calma. Así paso en mi vida, luego de sufrir incontables veces, la vida me había sonreído. Ahora era plenamente feliz al lado de mi familia y amigos. Pero sobre todo, al lado de mi Edward.
PrincessCullen.
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Capítulo 43:

Hola mis niñ@s hermos@s. Perdonen la demora. Pero aquí está, el penúltimo capítulo, espero no decepcionar a nadie. Y espero de todo corazón sea de su grado. Sin más que decir. Solo me queda agradecer a tod@s aquell@s que se tomaron el tiempo de leerme, que me relagaron su hermoso voto y su maravilloso comentario. Quier que sepan que ese es el mejor obsequio que me pueden dar. L@s quiero mucho. Su siempre amiga. PrincessCullen.

 

 

Edward POV

Lo cierto era que mi Bella estaba más animada desde que tuvimos los chicos y yo ese encuentro con el idiota ese de Mike.  El simple hecho de saber que Vanessa Vulturi nos podía dar la respuesta que anhelábamos obtener nos había recargado las baterías, nuestras energías habían mejorado bastante, pero tampoco las teníamos al cien por ciento.  A pesar de tener ya un punto de búsqueda certero, no dejábamos de pensar en lo que podía estar pasando nuestro hijo justo en este momento.

Muy dentro de mí aun me encontraba sorprendido. ¿Vanessa Vulturi? Esa mujer que me había hecho tanto daño años atrás, ¿Cómo era posible que ella tuviera algo que ver? ¿Qué tenía ella que ver con Tanya Denali? ¿Cómo se habían aliado para hacer algo tan ruin? Estaba desconcertado, la respuesta aun no cabia en mi mente, mejor dicho no la encontraba, esto era descabellado.

-Edward… ¿por fin lograste localizar a Vanessa? –Me pregunto Rosalie con un dejo de asco en su voz, suspire frustrado, “hablando de la reina de Roma” negué con la cabeza. La ubicación de Vanessa era otro punto y aparte, había desaparecido de la faz de la Tierra, trate de llamarla a su departamento con ayuda de mi asistente. Igual a su celular, pero siempre caía la contestadora, esto en parte era bueno y malo. Bueno porque nos confirmaba que algo ella tenía que ver en cuanto a mi hijo. Y malo porque aun no podíamos dar con ella y su paradero.

-¿Por qué no le envías un e-mail? – Aporto Alice, todos los presentes la miramos- Vamos,  no puede estar aislada del mundo así como así, háblale al correo Edward, no sé, convéncela de verse. ¿Qué se yo?  Tal vez así podríamos dar con ella. Total ella debe estar tan empecinada contigo como la maldita de Tanya ¿no? –Se encogió de hombros-

-Puede ser… -Murmuro Jasper, acercándose más, ya que se encontraba en una de las esquinas más apartadas de la sala- Si Vanessa Vulturi es cómplice de Tanya, lo más seguro es que sea porque tengan un motivo en común, y ese motivo eres tu Edward. –Sentencio-

-¿Por qué siento como si el secuestro de mi hijo es culpa mía? –Alce una ceja mirando a todos los presentes, en eso la mano de mi Bella tomo la mía suavemente, haciendo que la mirara.

-Eso no es cierto amor. – Sonrio dulcemente, alzando su mano libre para acariciar mi mejilla- Es culpa de dos locas obsesionadas, que no saben ya que hacer para llamar la atención. –Un dejo de diversión cruzo su rostro. Solté una sonrisa, aunque la alegría no me llego a los ojos y ella lo noto puesto que suspiro hondamente.

-Bueno, entonces haremos eso. –Chillo Alice, acercándose a nosotros, parándose en medio de Bella y de mí, mirándonos a ambos- Edward tú envíale ese correo a la zorra esa ¿vale? –Sonrio de manera angelical, luego miro a Bella- Tu, Rosalie, Nessie y yo, vamos a hablar. Si nos disculpan. –Tomo la mano de Bella arrastrándola hacia el despacho de mi padre que no estaba claro, junto con sus amigas tras ellas. Escuchamos el “clic” del seguro.

-Bueno, vaya a usted a saber que hablaran ese cuarteto de locas. –Emmett se encogió de hombros, se acerco a mí con una sonrisa que hasta miedo me dio- Nosotros cuatro… -Señalo a Jasper, Alec, a sí mismo y a mi- Tenemos una carta que redactar.

-Pero… -Ya Alec iba a decir algo cuando Emmett lo callo, suspiro resignado- Esta bien.

Pronto todos nos fuimos  a la habitación de Emmett, directo a su PC, los chicos y yo nos estábamos quedando en casa de nuestros padres, ya que se nos hacía más fácil el estar juntos en un momento como este. Me senté en la silla y ellos tras de mí.

-Ok-Dijo Emmett- ¿Qué se le puede decir a una loca desquiciada que quiere tener a Edward entre sus piernas? –Murmuro en tono divertido, todos lo miramos de mala manera- Oh vamos, ¿me van a decir que no es eso lo que esa loca quiere?

Suspiramos hondo.

-A ver, tiene que comenzar no sé. ¿Romántica? ¿Erótica? ¿Seductora? –Emmett definitivamente estaba disfrutando esto. Volví a suspirar- A ver hombres ¿Qué nunca tuvieron un amor secreto? 

-Emmett no todos somos tú –Se defendió Jasper, Alec solo miraba la escena divertido, y yo mantenía el recuadro de “redactar” en blanco. –No me están ayudando.

-Veamos… Comiénzalo así… -Entonces Jasper empezó a aportar ideas muy buenas y pronto Alec tambien, Emmett tambien ponía su toque, al final el resultado me gusto, reíamos a carcajadas, mientras nos dábamos empujones llegando a la sala, las chicas ya estaban ahí y nos miraban divertidas.

-¿Qué es tan gracioso? –Le cuestiono Renesmee, mirando a Alec, que de inmediato se puso colorado, negó con la cabeza.

-Pues resulta pequeña silenciosa –Comenzó a decir Emmett- Que ya le hemos mandado el correo a Vanessa. –Ellas nos miraron sorprendidas, luego la cara de Alice se ilumino, mire a Bella sin entender.

Bella se acerco a mí, tomo mis manos. –Por suerte no tendrás que verla… -La mire sin entender, si no la veía ¿cómo nos íbamos a enterar del paradero de nuestro hijo? –Las chicas irán por ti…  -Termino de decir, mire sobre su cabeza, sus amigas sonreían maliciosas.

-Pusieron un punto de encuentro ¿no? –Pregunto Rosalie seria- ¿Cierto? –Miro a Emmett, este asintió- ¿Dónde es?

-Uno de los hoteles de Edward –Añadió Jasper. –Habitación 303, piso 7 saliendo del ascensor a la derecha. –Concluyo Alec.

-¡Perfecto! –Chillo Alice. Luego se puso pensativa- ¿Cuándo es? –Miré a Emmett, el sonrio- Dentro de dos días. –Miré a Bella, ella solo me miraba a mí, sonriendo, la esperanza asomaba en su mirada.

Todos nos sentamos en la sala, yo en uno de los sillones individuales con Bella sobre mí, mientras la rodeaba con mis brazos, en uno de los sillones grandes, se sentaron Emmett con Rosalie, y Alice con Jasper. En el suelo al lado de estos estaban Nessie y Alec, todos mirábamos atentos la pantalla del televisor. Mis padres se habían ido a trabajar, al menos varios de nosotros tenían que seguir con la normalidad de su vida.  Des resto,  los padres de Rosalie se habían ido a casa  al igual que los de Alice. Estos últimos se habían ido con una sonrisa en sus labios, no estaban a gusto aquí, menos en las circunstancias.

El padre de Bella estaba de un lugar a otro, buscando junto con varios policías a Tanya,  que como se había dicho antes, no había dejado rastro de su paradero, a Mike lo tenían bajo custodia, luego de la paliza que le di, lo llevamos a la comisaria y lo tenían en una de las celdas especiales. Hasta ahora no había dicho otra cosa.

*

*

*

*

Narrador  POV

El día tan esperado había llegado, hoy sería el día en que Vanessa tendría su encuentro con “Edward”

Las chicas ya estaban listas, Alice, Rosalie y Renesmee, vestían ropajes negros. La mayor de todas ellas, Rosalie, vestía una falda negra que le llegaba a mitad de rodilla, era pegada al cuerpo, la cual acentuaba su hermosa figura, debajo de esta, unas medias panty negras igual. Llevaba una blusa ajustada del mismo color que la falda, unos hermosos tacones negros de terciopelo, y para culminar con el look, su cabello iba recogido en una coleta alta.

Alice por su lado, vestía un pantalón pitillo negro igual, sus pies iban decorados con unas botas de infarto de terciopelo, una camisa gris oscuro con un bello estampado al frente hacia conjunto con el chaleco que iba sobre esta. Su cabello en punta con un broche a un lado.

Nessie por su parte, era una combinación de las dos anteriores, sus piernas estaban cubiertas por un conjunto de falda-pantalón muy lindo, está en cambio portaba unas zapatillas, sin tacón, se le hacía mas cómodo a la joven. Llevaba un sweater cuello alto, que le llegaba hasta las muñecas,  su cabello iba suelto en ondas hasta abajo.

Sus rostros perfectamente maquillados, sombra negra en los parpados, hacían de marco a sus ojos, junto con sus pestañas alzadas con ayuda de la máscara, las tres habían usado delineador.  A diferencia de Rosalie, que había pintado sus labios de un rojo intenso, las otras dos, Alice y Nessie solo habían usado brillo.

Cuando aquel trió enfrento a sus amigos en la sala, todos quedaron impactados, incluso Bella, se quedo con la boca abierta, Emmett en su mente, ya se imaginaba mil formas de desnudar a Rosalie en ese mismo momento, por unos instantes juro que su amigo había reaccionado, así que tuvo que posar su mirada en el suelo y pensar con la cabeza fría antes de que alguien lo pudiera notar.

Jasper por otra parte, las miraba a las tres fascinado, aunque por supuesto su atención total era para su pequeña Alice, que le sonrio abiertamente al percatarse de que su mirada la recorría de arriba abajo, la interpelada se sonrojo sin poder evitarlo, solo él podía hacerla sentir avergonzada.

Alec, fue el primero el reaccionar, se acerco a Nessie, y la rodeo con sus brazos, susurrando en su oído lo hermosa que estaba, la sorprendida chica no hizo más que corresponder el abrazo. Segundos más tardes cada quien estaba con su respectiva pareja, entonces un carraspeo los saco de su ensoñación.  Era Carlisle que miraba la escena divertido.

-Lamento interrumpir el momento, hijas están hermosas, pero el tiempo apremia, ya casi es hora, deben irse. –Todos se miraron entre sí, la casa estaba llena de policías, uno de los agentes de acerco a las chicas, colocándoles micrófonos, que a simple vista no se veían.  Cuando Bella le conto su plan a su padre este al principio renegó ya que no pondría en riesgo la vida de las amigas de su hija, pero Bella logro convencerlo, diciendo que era la una salida a este problema.

Fuera de la casa, había más de diez patrullas esperando a que las chicas entraran en acción y así saber donde tendrían que buscar. Veinte minutos más tarde, las chicas ya se habían despedido de sus respectivas parejas, el cuarteto se abrazo.

-Prometo, que averiguaremos donde tienen a mi sobrino –Prometió Rosalie con lagrimas en los ojos,  mientras miraba a una Bella que ya lloraba a cantaron.

-Lo prometemos Bella –Secundo Alice, Nessie asintió y le beso la mejilla.

Ya había llegado la hora, las chicas se subieron al auto de Alice, que iba al volante claro está, y partieron, Bella se quedo en casa siendo rodeaba por los brazos de Edward. Los chicos, Emmett, Jasper y Alec solo esperaban que todo saliera bien, y de nuevo estar con sus amores.

Una hora más tarde, las chicas ya estaban en la habitación del hotel, sentadas en el sofá del recibidor.

-¿Y si no viene? –Se preocupo Nessie- ¿Y si no cree que Edward quiera verla? 

-No seas negativa Ness- La corto Alice, esta miro a Rosalie, como esperando a que dijera algo.

-Yo solo me pregunto, que habrán puesto esos chicos en el correo. –Se encogió de hombros.

Los minutos pasaban y nada sucedía, estaban a oscuras, con solamente la luz que se filtraba por las cortinas iluminando la estancia. Media hora más tarde, ya la desesperación y el aburrimiento se apoderaban de las chicas, Alice se paro del sillón molesta.

-¡Era zorra no va a venir! –Chilló, cruzándose de brazos.

-Alice tiene razón. Estamos perdiendo el tiempo. –Se paro Nessie del sofá ahora, colocándose al lado de la mencionada.

-Shhh… -Las silencio Rose, parándose del sofá acercándose a la puerta- ¿Oyeron eso? –Ellas negaron. Rosalie acerco su oreja a la puerta y era cierto. Pasos se acercaban por el pasillo rápidamente.

-Tal vez no sea ella… -Comenzó a decir Alice.

-Son tacones… -Anunció Rosalie, haciendo que Alice se tragara lo que iba a decir.

-¡¡¡Es ella!!! –Grito Nessie, luego se llevo las manos a la boca, notando la mirada asesina que Rosalie le había lanzado al proferir aquel grito.

Segundos más tarde, una sombra se diviso al otro lado de la puerta,  Rosalie se  alejo de la puerta sin hacer ruido,  la puerta sonó al abrirse, las sorprendidas se empujaron entre si hasta llegar a la habitación, miraron a su alrededor.- Allí – Alice señaló la puerta del armario, se acercaron y notaron que solo cabían dos, Rosalie les indico que ellas ahí, y ella se escondería en el baño.

Se escucharon pasos acercarse, sus corazones latían agitados, pero estaban decididas a no salir de ahí sin una respuesta, porque no solo era el hijo de Bella el que había desaparecido, sino tambien su sobrino. Ellas eran hermanas, no de sangre, pero lo eran.

-¿Edward? –Cuestiono una voz que de seguro ya estaba en la habitación.  -¿Edward estás aquí?

Rosalie salió de su escondite, con cuidado, noto que la chica le daba la espalda, ella aprovecho para acercarse a la puerta y cerrarla sin hacer ruido. Miro hacia el armario y con señas indico a las chicas que no salieran.

-Edward no va a venir… -Murmuro Rosalie, haciendo que una muy asustada Vanessa se diera la vuelta, su rostro paso de asustada a una muy molesta.

-¿Y tu quién eres? – Aun Vanessa no asimilaba todo, así que no había recordado, que ya Tanya había hablado de las amigas de Isabella, y tambien que se las había descrito con pelos y señales.

-Una amiga… -Rosalie se encogió  de hombros, sonriendo ampliamente. –Que viene en busca de respuestas… -La rubia se acerco peligrosamente a Vanessa.

-Tú… -La señaló la chica de cabello oscuro- Eres amiga de Isabella… -Su voz se había transformado. Ahora era severo. –De mi boca no saldrá nada… -Vanessa dio un paso adelante encarando a Rosalie, eran de la misma estatura- Tany confía en mi… Nunca sabrán donde esta ese mocoso.

-Escúchame bien –Comenzó a decir una Rosalie realmente molesta, sus ojos denotaban odio y rencor.- O me dices donde está… O saldrás de aquí sin cabello estúpida.

Mientras tanto las otras dos amigas observaban todo atentamente desde el interior del armario, a través de las rendijas que este tenía, las ganas de salir de ahí las estaban matando, pero ellas debían a esperar a que la cosa se saliera de control, tenían la esperanza de que Vanessa hablara antes de que Rosalie se pusiera realmente molesta y cumpliera su amenaza.

Por otro lado en casa de los padres de Bella, los mencionados, junto con los chicos y varios agentes escuchaban atentamente lo que sucedía dentro de aquella habitación a través  de los micrófonos que las chicas portaban.  Emmett estaba emocionado al oír a su Rose tomar la situación en sus manos.

-¡¡¡Esa es mi Rose!!! –Gritaba emocionado ganándose varias miradas reprobatorias y risas por partes de otros.

En el centro de la ciudad dentro de la habitación de aquel hotel, las chicas ya habían salido de su escondite y debatían con Vanessa, la cual no estaba dispuesta a soltar la prenda.

-No diré nada, locas, ese mocoso pronto estará lejos del alcance de cualquiera de ustedes. –Escupió con odio, mirando a las tres mujeres frente a ella- Tany se lo llevará del país. Lejos de aquí. –Sin saber ella misma estaba soltando la sopa.

-¿Aún está en el país? –Cuestiono Edward a uno de los agentes sin el mismo poder creerlo. Bella lo miró esperanzada.

-No si antes la encontramos. –Rosalie se acerco a Vanessa, tomándola del cuello con ambas manos, Vanessa trato de zafarse pero el agarre la que la rubia ejercía era demasiado fuerte.

-¡Suéltame! ¡Me haces daño! –Grito agitada Vanessa que ya sentía la falta de aire.

-Esto no es nada a comparación de lo que te hare si no abres la boca zorra de mierda –La amenazó.

Alice se acerco a Vanessa arrebatándole la cartera, mientras Rosalie no la soltaba, entre la pequeña duende y Nessie, se pusieron a sacar todas las cosas que tenia aquella mujer en su cartera, encontraron varios celulares, se miraron sorprendidas, varios documentos de identificación con diferentes nombres pero la misma foto. Aun no encontraban nada importante, y ya Rose perdía la paciencia.

-¿Dónde queda esto? –Nessie se puso de pie, enseñándole la foto que había encontrado a Vanessa, que abrió los ojos como platos y frunció los labios, gesto que para la rubia de Rosalie no fue desapercibido, una de sus manos viajo al cabello de Vanessa, enredando sus dedos en el halándolo con fuerza, la lastimada chica profirió un gemido de dolor, miro a Rosalie, luego la foto y después a Nessie.

-No diré nada… -Murmuro, luego una sonrisa maliciosa asomo en sus labios.

-¡Ya me cansé de esto! –Chillo Alice, poniéndose de pie, aparto a Nessie de un empujón y estampo su mano derecha contra la mejilla de Vanessa, que cerró los ojos ante el impacto contra su rostro.

Así estuvieron un buen rato, Alice estaba energúmena, su paciencia se había agotado y ahora azotaba con sus manos el rostro ya muy hinchado de Vanessa,  la cual haciéndose la dura aun no daba mayor información.

-Alice es mi turno… -Anuncio Renesmee acercándose a Alice, tomándola del brazo haciéndola a un lado, Rosalie mantenía a Vanessa de rodillas frente a ellas, tomándola del cuello con una mano y con la otra su cabeza enredando sus dedos en el cabello de la castaña.

-A mi me enseñaron así –Agrego Ness sonriendo divertida, antes de estampar su puño cerrado fuertemente contra la mejilla de Vanessa. Que tuvo que escupir la sangre que ya corría por sus labios.

-¡Esta bien! ¡Está bien! –Grito Vanessa desesperada- Ya no más golpes por favor, soy modelo, vivo de mi imagen –Añadió llorando, Rosalie la soltó, alejándose unos pasos al igual que sus compañeras.

-Habla. –Ordenó con voz fría.

-Tanya tiene al niño en el departamento que yo solía usar –Dijo en voz baja, sosteniéndose con sus manos sobre el suelo, para evitar irse de bruces contra él.

-¿Dónde es? –Cuestiono Alice.

-A las afueras de la ciudad… -Las miro con su rostro hinchado y labios ensangrentados, dio la dirección con pelos y señales.

-Vayan ustedes. –Las señalo Rosalie- Yo me quedo con ella.

Las mencionadas asintieron y salieron de ahí corriendo.

Los agentes que ya habían escuchado todo, se habían puesto en marcha, Bella y Edward tambien habían pedido ir, no se podían quedar en casa a esperar, Carlisle tambien fue, cuidando del estado de Bella por supuesto.

Edward POV

Ya estábamos frente al edificio, Bella estaba a mi lado abrazándome fuerte de la cintura, estaba tan o más nerviosa y ansiosa que yo mismo.

-Ustedes esperen aquí… -Nos indico uno de los agentes.  Bella ya iba a refutar pero le recordé que era peligroso, ella suspiro resignada.  Observamos como varios uniformados entraban al edificio, esperamos un buen rato y nada sucedía, entonces oímos algo romperse al caer al suelo detrás de nosotros, giramos y era un ¿jarrón? Miré a Bella, segundos más tarde miramos arriba y de una de las ventanas estaban cayendo millones de cosas, desde vajilla hasta jarrones, nos tuvimos que refugiar en la recepción. Bella se notaba nerviosa, como si de un momento a otro fuese a desmayarse, la atraje a mi pecho rodeándola con mis brazos.

Minutos más tarde acariciaba con amor las puntas de su cabello, cuando oímos gritos provenientes de los pisos superiores, era Tanya, lo podía jurar, soltaba montones de maldiciones y grosería, juraba venganza, y un montón de locuras más. De momento a otro los gritos cesaron pero volvieron a aparecer cuando las puertas de uno de los ascensores de abrió.

Tanya venia forcejeando contra dos policías que la venían sujetando cada uno de un brazo, su mirada se poso en nosotros, primero en Bella, la miro con odio y rencor, tanto que Bella se estremeció a mi lado, luego los ojos de aquella desquiciada mujer se posaron en mi. Un dolor profundo cruzo su mirada, por primera vez sentí algo por ella… Sentí lastima. Cuando ya no estuvo a nuestro alcance los gritos siguieron hasta la salida.

-Hey… -Llame a uno de los policías, el se acerco.  - ¿Y mi hijo? –El negó en señal de no saber nada.

-Ya me canse de esto –Anuncio Bella, tomando mi mano, caminando a paso decidido hacia los ascensores, sabía que estaba molesta y ansiosa, así que simplemente la seguí, marque el piso donde había oído que estuvo viviendo Tanya, cuando llegamos los corredores estaban custodiados por guardias pero nadie entraba al departamento, me pregunte porque, ellos nos indicaron que entráramos.

Comenzamos una búsqueda exhaustiva, era increíble que ellos no hicieran nada, entonces caí en cuenta de que ellos no estaban aquí por mi hijo sino por Tanya.

Bella y yo decidimos separarnos, así lo haríamos en menos tiempo y abarcaríamos más espacio, yo me fui a la habitación, ella tomo camino a la cocina, entre al cuarto, rebuscando con la mirada, corrí al baño, corrí las cortinas de la bañera, no estaba, la desesperación estaban haciendo estragos en mi ¿y si Vanessa había mentido? ¿Y si mi hijo no estaba aquí? “Edward deja de ser tan negativo…” Me regaño mi mente, tome una larga bocanada de aire y continúe.

Miré bajo la cama, no estaba, la patee frustrado, eche abajo todo, ¿Dónde estaba mi hijo?

-Edward –Oí de pronto que Bella me llamo con un hilo de voz lo bastante alto para oírla, Salí como alma que lleva el diablo de la habitación directo a donde estaba Bella.  En la cocina, cuando entre rodee la isla y ahí estaba mi Bella, arrodillada en el suelo, con lagrimas surcando sus ojos, no apartaba su vista de sus brazos, seguí la dirección de su mirada, solté un jadeo. Ahí, acurrucando temblando de miedo estaba mi hijo. Dereck, estaba abrazado a su madre como si su vida dependiera de ello. 

Me acerque sin vacilar a ellos, rodeándolos con mis brazos, las lagrimas ya corrían mis mejillas tambien, mi hijo mayor ya estaba con nosotros, estaba vivo, y ya pronto en casa.

-Los amo… -Susurré- Ustedes sin mi vida… -Los apreté mas a mí, mi hijo se movió entre nuestros brazos, ahora se acurruco en mi pecho. Sentí por primera vez en una semana que el alma me volvía al cuerpo. 

Capítulo 42: Capítulo 44: Confiar, Sentir y Amar.

 
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