Alice POV

"Desperté en la sala de mi casa, viva, resplandeciente, alegre, pues la verdad yo misma; como generalmente se mantiene mi estado de ánimo.  De verdad estaba en todo mi esplendor, por asi decirlo, aunque la verdad poco a poco empecé a tener una sensación de deja vú; había algo que me decía que esto ya lo había vivido, pero mi mente no me dejaba recordar.  La verdad mi casa estaba tal y como siempre la recordaba, muy arreglada, bonita debido a mi impecable gusto con la decoración.  Hasta que de repente el motor de un auto me hizo recordar el porque de la sensación de deja vú, este era un sueño, lo comprendi.  Mi casa estaba así porque en un día igual a este conoci a Jasper.

Mi corazón latió a mil, estaba de verdad desenfrenado por la emoción de revivir tan hermoso recuerdo; espere en seco que mi hermano apareciera, y después la mejor visión de un dios.

Alguien toco la puerta y mi corazon latío un poco mas rapido, aunque sabía que eso no era posible, conocía una sola persona que lograba  ocasionar eso en mí.... Jasper, mi Jazz.    Caminé hacia la puerta, estaba frente al piano de cola blanca de Edward, camine y pase frente al espejo de cuerpo completo que mi madre había instalado en una de las paredes.  Lo que vi me asustó, era yo lo sabía, era yo pero estaba mas grande, mayor.  Ya no tenía mis hermosos 19 años, parecia como de 25 y la verdad me sentía un poco cohibida, estaba mas hermosa que antes, no que sea o fuera egocentrica, aunque una mujer debe reconocer que un poco de belleza extra no hace daño a nada ni a nadie, incluso es una buena herramienta para conseguir lo que una quiere... por supuesto que lo que yo quiero es lo que tenía pensado conseguir a toda costa.  La puerta volvió a sonar, y esta vez me saco de mi ensueño, agarre la perilla de la puerta y me di cuenta de que mi mano temblaba, y sabia por que.

Abrí la puerta y esperando ver a mi hermano  parado frente a mi y esperando a que Jazz apareciera por detras de él, lo que vi me sorprendió no digamos lo que escuche.

-Hola amor, ¿porque tardaste tanto en abrir?, creí que mi brazo se me caería...-dijo Jasper, era mi dios, mi dios griego, parado delante de mi.  Estaba también mayor, parecia irreal.

-Alice, cielo ¿que te pasa?, estas palida, como si hubieras visto un fantasma..-pregunto Jazz algo procupado.

-Mmm... no  es....nada-logré decir, esperen ¿él había dicho "amor", "cielo"?, ¿había escuchado bien?, ¿esto no era mi recuerdo?, ¿que era esto?.

-Bueno si tu lo dices, amor ¿me ayudas con la cena? es que de veras ya no siento mi brazo.-dijo al momento que me entregaba un tierno beso en los labios, y yo le recibía las bolsas de comida.

-Perdón Jazz, dame acá yo te ayudo.-dije un poco deslumbrada y emocionada por el beso.

-¿Jazz?; ¿desde cuando me volví otra vez "Jazz" y deje de ser "amor"?-preguntó enarqueando una ceja perfecta, y con un pococ de dolor en al mirada y en la voz. Habíamos llegado a la cocina,y las bolsas estaban ya sobre el desayunador.

-¿que?-pregunté, de veras me estaba comportando como una tonta, por favor, alguien me podía explicar lo que estaba pasando.  Me recargue sobre una de las sillas de la cocina.

-Alice, ¿te sientes bien pequeña? o... ¿ya dejaste de amarme? o.... no me digas.... ¿te arrepientes de haberte casado conmigo?-preguntó al borde del colapso.... Un momento¡¡¡, ¿escuche bien?, ¿estoy casada con Jasper Hale?.  AHora si me sentía débil, ¿mi sueño se había vuelto realidad?.

-No... No¡¡¡, amor como crees, lo que pasa es que todo esto me parece un sueño y la verdad a veces me da miedo despertar-respondí en parte cierto, en parte mentira.  Caminé hacia él para sentirlo cerca, y que de verdad cayera en la cuenta de que esto no era un sueño, era una realidad, mi realidad. 

-No me asustes así Alice Cullen de Hale, ¿es que acaso quieres que me de un ataque?-preguntó un poco divertido, un tanto por mis reaccione, y otro ranto por la situación, al momento que el valle de sus brazos musculosos me acogían y me rodeaban. Esto era el paraíso.

-Perdón...-dije haciendo un puchero divertido para que no me creyera de verdad loca.

-Hum.... sabes no deberías hacerme esto o juro que adelantare nuestra luna de miel y te poseere aquí mismo en la casa de mis suegros...-dijo con un tono demasiado seductor.

-Sabes no creo que a ellos les importe mucho despues de todo estamos... s o l o s...-lo dije como si fuera una revelación de algo obvio.

-De acuerdo señorita, tento mi autocontrol y ahora sufra las consecuencias....-respondío tomandome en brazos y cargandome como si fuera una novia, en su boda... esperen ya estabamos casados osea que era normal.

-Uyyyy¡¡¡¡ ¿es acaso eso un castigo?-pregunté un poco intrigada por la respuesta.

-Bueno deberás averiguarlo...-dijo, con una voz malditamente sexy.

Me llevó en brazos de nuevo a la sala, al mismo tiempo que me besaba, un beso que empezaba tierno, paciente, tranquilo... se convertía en un beso lleno de pasión, de más ternura pero a la vez de impaciencia, intranquilo, un beso que sabía solo Jasper era capaz de darlo.  Al parecer estuvo tentado a subir las escaleras porque se había quedado ahi un buen tiempo besandome, indeciso si subir o no.  Así que le ayude a decidir, le empece a desabrochar cada uno de los botones de su camisa, cuando al fin lo logré metí mis manos dentro de ella y acaricié su pecho tan bien formado.  Eso al parecer lo inquietó mas porque optó por no subir, sino caminar hacia la sala, donde lo primero que encontramos fuer el piano de mi hermano, la verdad no importo asi que me cargó un poco mas y me subío al piano.  Dejo de besarme mis labios para bajar por mi cuello y subir a mis orejas, estaba volviendome loca con cada caricia, de verdad esto era enloquecedoramente sensual.

Empezo a buscar la forma de desnudarme pero mi ropa no le daba tregua, ya que cargaba una blosa de maga corrida, color blanco con el cierra en la parte de atrás y la verdad no salia solo así, así que al darse cuenta de que mi blusa no quería ceder, gruño bajito y la arranco, basta decir que el cierre se abrió del impacto y se descompuso pero la verdad no me importaba, me encantaba que fuera así, me volvía loca.

Cuando mi blusa cayo al suelo decidí que yo solita me quitaría la falda, la verdad no me importaba que destrozara mi ropa, pero estabamos en la sala y si alguien entrava de imprevisto no quería que me encontrara en paños menores y lo peor sin nada con que cubrirme. La verdad al pensar en eso un clic hizo en mi mente:  ¡estabamos en la sala, sobre el piano de mi hermano¡, ¿de verdad quería Jasper que Edward o Carlisle nos matara?.  Aunque eso me preocupara la verdad no le di la importancia que se merecía, estaba siendo poseída por mi "esposo", no me lo creía, asi que no importaba quien nos encontrara, esto esa perfecto.

-Allie, te amo¡¡¡....-dijo contra la piel de mi estómago.  El roce de su aliento frío era enloquecedor, cada nueva caricia era un maldito tormento, esto de verdad era un castigo, uno de placer que no sabía cuanto  más iba a soportar.

-Yo... también... te.... amo... Jazz-logre decir, mi centro palpitaba esto se estaba saliendo de control.

Cuando al fin me libere de mi estorbosa falda me encamine a desnudarlos por completo a él.  Empece a deslizarle la camisa por los hombros ya que solo le había logrado desabrochar los botones peor no había alcanzado a quitarsela. Despues de eso encamine mis manos hacía su pantalon, la sorpresa fue de veras, sorprendente. La verdad no encontraba palabras para describirlo, y en eso me encontraba en expresiones incoherente...

-Wow Jazz.. ¿es eso una arma en tu bolsillo o estas feliz de verme?-pregunté divertida.  De verdad era grande.

-Tu que crees amor, esto es algo que solo tú eres capaz de provovcar en mí-contesto con la respiración pesada pero seguía besandome.

-¿de verdad soy la única?-pregunté, encantaba que dijera eso, el tambien era el único que me hacia sentir ese calor abrazador en mi vientre.

-Si.. Alice, la única¡¡¡-gtiró debido a las caricias que le propiciaban mis manos a su miembro.

-Te amo Jasper-levanté un poco la voz, esto era insoportablemente caliente.

-Lo sé pequeña, y por eso te haré el amor como nunca te lo había hecho en todo este  tiempo de estar juntos-dijo como haciendo una promesa solemne.

-Hazmelo Jasper, como si mañana no existiera.-termine, abriendo mis piernas para que su mano bajara completamente y me hiciera de veras feliz. Me acaricio sobre las panties cuando..."

-¿Alice?-una voz preocupada  y asustada me desperto.  En verdad mataría a quien había osado despertarme del mejor sueño de mi vida.

-¿Alice?¡¡¡-Ahora la vos era mas desesperada y la pude reconocer perfectamente.

-¿Bella?-pregunté extrañada.

-Ohh, Alice, pensé que no te habías despertado...-dijo Bella en punto de sollozo.

-Bella, ¿qué pasa?-pregunté ahora si despierta y preocupada.

-Alice, de verdad... yo.. no... perdon...-balbuceo, estaba temblando.

-BELLA¡¡¡ ¿QUE PASÓ?-ahora si estaba aterrada, la respuesta sabía no era del todo buena o peor era del todo peor.

-No, no puedo...-con eso, su barrera cayó y empezo a llorar ahora si en todo su esplendor, la verdad sabía que no me iba a decir lo que le había pasado hasta que estuviera calmada.  La abrace y la recoste en mi cama, le empece a masajear su cabello cuando note algo que me dejo sin habla, a medida que mi mano bajaba hasta lo último de su cabello (el cuál estaba mojado), noté que la ropa de Bella estaba un tanto destrozada.  Me levanté un poco para poder verla mejor, ella ya estaba dormida así que me estiré un poco más para encender la luz  y vi algo que me dejo sin palabras y con un  dolor punzante en el pecho...

La ropa de Bella estaba totalmente desgarrada, ella estaba llena de lodo, sucia, parecía como si un animal la hubiera arrastrado y atacado.  Me agarró un escalofrío horrible por toda la columan, caí en la cuenta de que Bella estaba peor de lo que imaginaba....  la pregunta era ¿QUE DIABLOS HABÍA PASADO?.

                 Jasper POV

Estaba de verdad emocionado, al fin estaba a unos cuantos minutos de ver a Alice, desde que mi hermana y mi cuñado habían tomado la decision de casarse y hacer la ceremonia en la casa de los abuelos de Bella (sin conocimiento de esto aún), así que ni dos veces pense en venir a visitar a mi duendecilla.

Los dias habían pasado volando, cuando me dí cuenta ya era la víspera del viaje y aunque por un lado me sentía emocionado por viajar, conocer el tormento de Edward, apoyar a mi hermana en su compromiso y por si fuera poco ver a Alice, pero hacia dos días ese no era mi pensamiento, exactamente cuatro días antes de la fecha en que viajaríamos Edward me llamó, triste, decaído.  Estaba destrozado en el alma, se le escuchaba en la vos, y aunque el decía que fatidiar a Bella se había convertido en un trabajo o mas bien un pasatiempo de tiempo completo me había dicho algo que le perturbaba y que por ende a mi me preocupaba.

Edward había dicho y cito: "Cuando siento que las cosas con Bella empiezan a mejorar es cuando los recuerdos vuelven a mí y me duele recordar el porque de nuestra separacion."; "Creo que despues de todo no sere para Bella algo más que el hermano mayor que nunca tuvo y eso me perturba más."... "No puedo obligarla a corresponderme pero han sido demasiados años esperando una mirada chocolatada por parte de mi Angel".... "Una vez más la edad me acecha y me separa de Bella."

De acuerdo incluso yo me había dado cuenta de la situación "corta venas" en la que Ed se encontraba pero en algo si tenía razon: la edad los volvía a separar, y la verdad no me imaginaba estando cerca de Alice, por el amor de Dios eran alrededor de cuatro años y medio de diferencia entre nosotros... Lo se no era mucho pero aún así era una buena excusa para que ella no me viera a mi como alguien más que el mejor amigo de su hermano.  Esto me estaba frustrando.  Se suponía que la edad era un problema común entre mujeres pero ¿entre hombres?. Malditas inseguridades que solo salían a flote cuando todo se trataba de Alice, pero ahora ya iba en camino para Forks y lo último que quedaba era rogarle a Dios que ella me aceptara tal como era....

-Hola Jazz...-Era Rosalie, mi hermana la que me saludaba, estaba en el umbral de su habitación, la verdad había decidido no ir al viaje.  Las cosas estaban ahora más claras ye ra seguro que no quería hacer el rídiculo.  Rosalie... mi hermana menor. La verdad la quería mucho y era un poco sobreprotector con ella.

-Hola Rose...-Contesté sin mucho ánimo. Mi hermana estaba terminando de arreglar su ultima maleta de su enorme equipaje, la verdad esq estaba seguro de que tanta maleta era innecesaria, Por Dios solo eran unos cuantos días, no era que nos fueramos a quedar a vivir allá, bueno si por mi era la verdad la respuesta era mas que obvia pero no.. no me iba a convertir en un maldito acosador... A los ojos de cualquiera Alice era una niña.

-¿Pasa algo Jazz?, te noto algo procupado o mas bien opacado.-contesto, poniendose uno de sus tantos sombreros, la verdad era una amante de los accesorios y los sombreros se le miraban realmente bien.... De acuerdo confieso, he aprendido a contemplar mejor la "moda" gracias a sesiones de compras a las que Emmett y yo hemos sido arrasatrados por el torbellino que el tiene como prometida y yo como hermana.

-Nada, es solo que la verdad vengo a decirte que no podré acomparñarlos al viaje, la verdad he tenido la oficina un poco descuidada y la verdad con este viaje estoy seguro de que todo se acumulara entonces vengo a desearte un feliz viaje.-dije lo mas rapido posibel tecnicamente atropellando cada frase.

-Oh no, eso si que no Jasper Hale, no te salvaras de esto, no despues de lo que Emmett y yo hemos tenido qu ehacer por tí, además de que sirve realizar el viaje si el principal no va?-contesto mi hermana exasperada, la verdad era dificil ver a Rosalie de esta forma y honestamente me asusto por un momento... Esperen ella dijo que esto era por mi?, ¿el principal?.

-Explicate Rosalie Hale-exigí con tension ante la posible respuesta.

-Mmmm, Jazz por favor no te enojes pero.... que creías que era ciega y no me daba cuenta de que Alice Cullen te trae de un ala y además con Em decidimos hacer esto no por nuestro compromiso porque total la boda sera dentro de un año y medio, esto lo hago por tí hermanito por que  te amo..-Contestó, había escuchado bien... mi cuñado y mi hermana hacian esto por mí... ¿tan evidente era mi fascinación por ese pequeño duendecillo?

-Así que arreglate y termina todo, Alice Cullen no sabe lo que le espera y la verdad esta vez espero no lo estropees y le declares tu amor, no me gusta verte así por una mujer, ni siquiera por una tan extraordinaria como lo és Alice Cullen-respondío, de acuerdo era cierto que el amor la tenía tan sentimental pero de algo estaba seguro, no importaba mis malditas inseguridades, conquistaría a Alice asi fuera lo último, y otra cosa mi hermana era un ángel y ahora la amaba más que nunca.

-Gracias Rose, no se que haría si no estuvieras al pendiente de mí, aunque sabes me frustra tener que ser el que cuiden y no el que cuida...-dije con algo de exasperación por dentro de verdad asi me sentia.

-Bueno la verdad no es tan así hay veces que tu sobreprotección me altera pero asi te amo hermanito.-Contestó al momento que me daba un abrazo. Rosalie, mi hermana era una verdadera dama, hermosa, llena de vida. La amaba...

Ahora estaba en un avión de camino a Forks, Washington. "No te me escaparas esta vez duendecilla, no esta vez..." pense antes de quedar dormido en mi asiento.

                Alice POV

Me desperté un poco agotada, busque a tientas a Bella en mi cama pero no estaba ahi, yo estaba sola, mi habitación estaba vacía.  Eso me asusto por un segundo, hasta que alguien toco a mi puerta.

-¿quien es?-pregunte.

-Mmm, soy Dídima-dijo una vos maternal.

-Pasa-dije al momento que me levantaba y ponía mi bata larga.

-Gracias querida, pero solo es para avisarte que los Hale ya estan aqui y dentro de poco serviré el desayuno-dijo al momento en que se retiraba.

-Gracias¡¡-exclame mientras corria al baño.. ¿qué?, ¿Jasper ya habia llegado?. Maldición Alice apurate, pense.

Me arreglé lo más rápido posible, y lo más sexy la verdad no quería que me viera tan desastroza como me sentía.  Al fin ya satisfecha, decidí bajar lo más relajada posible.

-Buenos días...-dije y lo que pasó me dejo sin habla, ¿por qué a mí?¡¡¡¡¡¡