Suspire fuertemente. No entendía con certeza que es lo que quería Jake, ¿Qué no había quedado claro ya todo? Lo que me molestaba no era que viniera, sino que, me molesta ver como miraba a Edward, como si quisiera asesinarlo con la mirada; mientras que Rose me miraba de manera negativa, estaba molestaba, me daba cuenta por que no dejaba de golpear el piso con su pie, estaba cruzada de brazos y con esos ojos que parecían que le salían llamas de ellos.

-Comienzo a creer que no les caigo bien a tus amigos.

-No te conocen.

-¿Me puedes decir que pasa?

-Mi hermana y Rose tenían la esperanza de que terminara con Jake – me encogí de hombros – En fin aún hay mucho que contarte. Lamento que nuestra cita durara tan poco.

-No te preocupes entiendo, ya tendremos tiempo para vernos y conversar de muchas cosas más.

-Así es – me prepare para salir, pero él me tomo de la mano.

-Me alegra mucho tenerte de nuevo en mi vida Bella.

-A mí también Edward, después de una extensa búsqueda por fin te tengo en mi vida.

-¿Extensa? Solo fueron seis meses y seguiste con tu vida.

-De cierto modo te espere, no tengo pareja – le guiñe un ojo y baje del auto, me asome por la ventana – Esta semana te sorprenderé por tu consultorio.

-Estaré ansioso – lance un beso al aire.

No podía parar de suspirar y de dejar de esbozar la sonrisa que tenía en el rostro.

-Veo que ha pasado una tarde excelente – ataca de inmediato Jake, cuando me ve a su lado.

-Así es, ¿algún problema? – abro la puerta de la casa.

-¿Tan rápido?

-Es un amigo Jake.

-Un amigo con el que estas saliendo y te gusta.

-Creí que ya había quedado todo claro.

-No, aun no puedo entender de verdad

-No hay nada que tú debas entender.

-¿Por qué me haces esto? – parecía ya desesperado.

-Yo nunca te e echo nada Jake.

-Te comportas como una… - quedo callado, pero sabía perfectamente la palabra que iba a decir.

-¿Cómo una qué? ¿Por qué no tienes el valor de decírmela a la cara? Eres un cobarde, eso es lo que eres, no te quiero ver.

Entre a la casa, sin importarme dejarlo ahí solo hablando y mucho menos que Rose estuviera ahí también escuchando nuestra discusión, pero no tardó en aparecer en la sala de mi casa, sumamente molesta.

-Creo que Jake no se merecía que le hablaras de esa manera – se paró frente a mí con los brazos cruzados, yo tape mi rostro con un cojín.

-¿Podrían dejar de molestar? Ya estoy harta de que solo se fijen en Jake y no en mí.

-No debiste darle alas en todo caso.

-No – me levante de golpe – Yo nunca le di alas a Jake, siempre deje bien en claro, el tipo de relación que yo tendría con él.

-Él me ha dicho que… - la interrumpí.

-Tal vez mal interpreto todo lo que he hecho por el estos dos años, pero siempre ha quedado claro y he sido clara. A parte ustedes también tienen culpa, tú y Alice se han entrometido tanto entre la amistad que tengo con Jake, ustedes son quienes le dan alas. No sé qué tanto le dirán, para que el insista día con día.

-Es mi primo, no me gusta verlo de esa manera.

-¿Crees que a mí me gusta verlo así?

-No claro que no

-Te lo advertiré Rosalie, espero que esta sea la última vez que te metas en mi vida, que me reclames por algo que no tienes derecho a reclamarme.

-Tú cambiaste Bella.

-¿Cambie? Por dios Rosalie yo no he cambiado en nada.

-¿No? Por favor no digas que no es así, porque claro que lo es.

-¿En qué he cambiado según tú?

-En muchas cosas. Desde que te enamoraste de ese tipo – me puse rígida.

-¿De quién?

-De tu secuestrador, claro que lo es Bella, desde que te dejaron libre comenzaste a ser otra persona.

-Soy la misma.

-No lo eres, todo este tiempo me he dado cuenta perfectamente de que no quieres a mi primo de que lo ve como un amigo, sabía que aun pensabas en ese tipo, pero ¿Por qué de repente tanto interés en él? ¿Edward se llama? – Asentí - ¿De dónde salió?

-Es un viejo amigo.

-¿No será él? – La mire a los ojos – No será el tu secuestrador y ahora lo encontraste.

-No, él no es.

-¿Por qué creo que me mientes?

-Dios mío – me deje caer en el sillón, tapando mi rostro con las manos. Sentí que se sentaba a un lado mío.

-Vamos Bella, puedes hablar conmigo de lo que sea – acariciaba mi espalda

-No digas eso Rose, yo sé que no puedo confiar en ti, como tampoco puedo confiar en mi propia hermana.

-Lo siento Bella, he sido una tonta lo sé - suspira amargamente – Quiero recuperar tu amistad, quiero que confíes en mi.

-¿Cómo hacerlo después de lo que me acabas de decir?

-Eres alguien muy importante para mí, ya lo sabes, te conozco desde que teníamos cinco años, es solo que me frustro rápidamente, me desespera que no me tengas confianza, como también me dolió el saber que no estarías al lado de mi primo.

-Rose…

-Lo se Bella, es solo que yo quería que formaras parte de mi familia, pero ya aprenderé a sobrellevarlo.

-La verdad no sé si confiar en ti ono.

-¿Es el verdad? ¿Él fue tu secuestrador?

-¿Lo dirás cierto? Iras a decirle a Alice y Jake quien es para que se aleje de mi vida.

-No Bella, no sería capaz de hacer eso – acariciaba mi espalda, me sentía deshecha cansada – Cuéntame como estuvo.

-Les mentí a todos.

-¿En qué sentido?

-Yo siempre he sabido el nombre de mi secuestrador – lo dije en un susurro – Mientras estaba secuestrada él y yo nos hicimos amigos, me dijo su nombre.

-¿Cómo se llama?

-Anthony ese es su segundo nombre, se llama Edward Cullen.

-Ok – dijo de lo más tranquila.

-Dirán que soy una loca, pero de verdad que me enamore del Rose, se convirtió en mi todo, no te puedes ni siquiera imaginar el gran vacío que sentí, cuando me dejaron libre, quería volver a su lado y de ahí no apartarme nunca.

-¿Y él? ¿Qué siente el por ti?

-Cuando me dejo libre me confeso su amor.

-¿Y ahora? ¿Qué siente el por ti?

-No lo sé se Rose, no hablamos mucho, tenía que volver a casa.

-¿Qué dices tú?

-Que me ama, su mirada lo dice todo.

-Entonces lucha por su amor.

-¿Qué dices? – la mire, sabía que sus palabras le salían del corazón.

-Que luchas Bella, no te des por vencida, el amor no lo encuentras a la vuelta de la esquina.

-Quiero luchar; pero hay muchas cosas las que nos separan.

-¿Qué cosas?

-El que él sea mi secuestrador principalmente, que si mi familia se llegase a enterar querrá matarme.

-Alice lo sabe.

-Ella se creyó la historia de que Edward es un viejo amigo, cree que he olvidado a mi secuestrador.

-Como se ve que tu hermana no te conoce bien - negó.

-Alice está empeñada en que me quiere ver con Jake – bufe – Me tiene harta con eso.

-Ya se le pasara – me animo.

-Espero, porque no quiero seguir discutiendo con ella, por eso.

-Bueno, ¿Qué harás entonces?

-No lo sé – jale mis cabellos – Todo esto es difícil para mí.

-Oye – me tomo de la barbilla e hizo que la mirara - ¿Cuánto tiempo esperaste por este día?

-Mucho

-Entonces, ¿no te darás por vencida tan pronto cierto? No eches a perder esta oportunidad que tienes.

-Tienes razón, no me daré por vencida y luchare por lo que siento.

-Así se habla, cuenta conmigo siempre, no dudes de mi amistad por ti.

-Gracias Rose.

Le di un gran abrazo. Esto era lo que necesitaba, que alguien pudiera entenderme y comprenderme en todos los sentidos.

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nos vemos en el proximo cap =)