Amor Bandido

Autor: belibeli
Género: Romance
Fecha Creación: 11/04/2015
Fecha Actualización: 17/09/2015
Finalizado: NO
Votos: 6
Comentarios: 13
Visitas: 28179
Capítulos: 22

Un secuestro cambio mi vida por completo. ¿Quién iba a pensar que me iba a enamorar de quien me robo mi libertad?. Es de locos creer esto, pero asi fue me enamore de el. Se convirtió en mi amigo durante el tiempo que estuve encerrada; cuando fui libre lo único que quería era volver a su lado, pero por cuestiones de la vida no fue asi, seguí con mi vida, dejando atrás ese episodio, que para muchos seria traumático, pero para mi fue lo mejor que me pudo haber pasado. Todo iba en orden en mi vida, pero de repente tuvo un giro de 180º grados cuando el reapareció, ¿Quién iba a pensarlo no? Quien iba a pensar que la vida lo pondría frente a mi de nuevo. Fue en ese momento cuando vi su rostro por primera vez. Parecía que todo esto era un amor real, sincero y perfecto, no me importaba que el hubiera sido mi secuestrador, yo lo amaba con cada fibra de mi ser y el lo hacia de la misma manera, solo eso bastaba para ser felices. Pero todos fueron crueles con el, a nadie le importo que esto fuera un amor verdadero, me destrozaron el corazón. Se decía que era un “AMOR BANDIDO”

Quiero agradecer a Looree Rojas♥ por permitir que publique su historia, los créditos son para ella y su pagina(https://www.facebook.com/pages/Estoy-irrevocable-e-incondicionalmente-enamorada-de-la-saga-Twilight/150005105103464) visiten y ayuden con un Me Gusta.

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Capítulo 12: Nada es igual

 

Pov.Bella

Y aquí estaba yo dos días después disfrutando del hermoso día que L.A. me estaba ofreciendo, teníamos una casa aquí, y aquí pasábamos las vacaciones. Pero esta vez era un motivo diferente el que me tenía en este lugar.

Mis padres, estaban muy preocupados por mí y, creían que el secuestro me traería secuelas, el no querer salir de casa, estar triste o llorando, tal vez si estaba triste y con ganas de llorar, pero no me dejaría caer, tenía que seguir con mi vida como si eso no hubiera pasado, tenía que hacer lo mejor que pudiera, para que ellos no notaran mi tristeza, pero no por el hecho de que fui secuestrada, si no por el hecho de enamorarme de alguien a quien ya no vera en mi vida.

-Qué lindo día, ¿No hija? – mire a través de mis gafas, mamá estaba sentada en la silla continua, para acompañarme a tomar el sol.

-Si es un lindo día.

-¿Cómo te sientes?

-Bien, ¿Por qué lo preguntas?

-No, nada más preguntaba.

-Mamá, si esperas verme mal, ni lo pienses, estoy bien, no me afecta en lo absoluto lo que paso, tengo que seguir con mi vida, ¿no? Eso es lo que hago, seguir con mi vida y darle vuelta a las páginas.

-¿Por qué no me cuentas con exactitud lo que paso hija?

-No pasó nada mamá, me tenían encerrada en un cuarto, no podía ver, ni escuchar nada.

-¿Nunca te hicieron nada?

-Nada, podrá sonar raro, pero fueron buenas personas, siempre estuvieron al pendiente de mí.

-Lo menos que podían hacer – se quedó callada – Tu hermana anda un poco extraña.

-¿Extraña? – me quite los lentes de sol, para mirarla a los ojos.

-Sí, anda perdida en su mundo, sé que ayer platicaron, ¿Qué paso?

-Diferencias simplemente.

-Dos meses sin verse y cuando lo hacen discuten.

-Somos muy diferente madre, no siempre estaremos de acuerdo en todo.

-Deberías hablar con ella, no me gusta verlas distanciadas – tenía razón, había que hablar con ella.

Desde ayer que salió de mi habitación ya no quiso dirigirme la palabra, parecía perdida en su mundo y eso era malo, solo significaba una cosa “algo tramaba” y cuando Alice tramaba algo, era demasiado peligroso o para mí lo era.

-Iré ahora mismo

Me pare de la silla y fui en busca de ella. Fue fácil encontrarla, estaba en el balcón de su habitación dándome la espalda, vestía un traje de baño. Me di cuenta de que hablaba por teléfono.

-Tenemos que hacer algo Rose… No lo sé… - se dio la vuelta en ese momento y palideció al verme ahí parada– Si iremos de compras definitivamente a esa tienda, no sé como pero iremos, si te quiero te veo pronto – termino la llamada - ¿No te enseñaron a tocar antes de entrar?

-Lo siento, no pensé que te molestaría – antes hacía eso y no se molestaba, ahora parecía ser que si - ¿De qué me perdí estos dos meses? – me senté en su cama, mientras ella caminaba de un lado a otro.

-Nada que a la señorita le pueda importar.

-Por dios Alice no seas infantil

-No soy infantil.

-¿Entonces? ¿Por qué estas molesta conmigo? Yo no te he echo nada.

-Me molesta tu actitud.

-¿Mi actitud?

-Me molesta saber que mientras nosotros estábamos preocupados por tu secuestro, tú te andabas ligando a tu secuestrador, ¿Qué pasa por esa cabeza tuya? ¿Qué no piensas?

-Alice uno no elije de quien enamorarse.

-Por supuesto que si elige Bella, no me vengas con esa tontería – se veía ya hasta roja del coraje.

-No entiendo, por qué me tratas así, lo que me dices no son argumentos necesarios para que me hables de esa manera.

-Ya entiendo por qué James te dejo por otra, porque eres una niña inmadura. – golpe directo a mi corazón, ella no tenía derecho, a decirme aquello. Mis ojos se llenaron de lágrimas, fue ahí cuando ella noto su error– Bella yo… - trato de tomar mis manos, pero se lo impedí.

-¡NO ALICE! – Ella retrocedió – Ya ha quedado todo claro, no puedo creer que mi propia hermana me esté juzgando de esta manera, tú no puedes entender lo que yo siento, porque tú no has tenido la fortuna de enamorarte, todos son pasajeros, el día en que te enamores vas a saber el dolor que me estas causando al decirme esto. Me haces creer que me tienes odio, envidia por algo que no existe, mi propia hermana expresándose así de mí, cuando yo he dado mucho por ella, ¿Oh ya se te olvida? Todas las veces que te he ayudado con mis padres, cuando perdiste a tu bebe, ¿Quién estuvo contigo? – Sus ojos se llenaron de lágrimas – Solamente fui yo quien estuvo ahí, porque mamá y papá te dieron la espalda en ese momento, lamentablemente perdiste al niño y yo fui quien cuido de ti en ese tiempo tan difícil para ti.

-No me hables así Bella – sus lágrimas ya caían descontroladamente.

-Te hablo de la misma manera en que tú lo haces.

-Lo de mi bebe fue un accidente, yo no quería que algo le pasara.

-Y lo sé. Necesitas pensar bien antes de comenzar a juzgarme en lo que hago.

Me di media vuelta y Salí de la habitación, enojada y con unas ganas inmensas de llorar hasta más no poder. ¿Es que nadie me entendería?

Me encerré en mi habitación, llore todo lo que me había guardado estos dos días para que mis padres no vieran el dolor que yo sentía, pero era un dolor por amor a alguien que se había ido de mi vida, ¿Por qué me pasaba esto? ¿Por qué no pude enamorarme de otra persona y si de él? Definitivamente las cuestiones del destino sí que eran muy extrañas.

Un secuestro que cambio mi vida para siempre, ¿y que hacia yo ahora? Quería y tenía que seguir adelante con mi vida, dejando ese capítulo atrás, pero sentía que no podía y mucho menos quería dejar ese episodio atrás, ¿Por qué hacerlo? Porque para los que muchas veces fueron secuestrados, tal vez fue la peor experiencia de su vida, para mí no lo fue al contrario, fue la mejor experiencia de mi vida, ¿Qué logre? Enamorarme de una persona sin la necesidad de ver su rostro, solo ver completamente su alma y corazón. Quería estar cerca de él, sentir sus brazos alrededor mío, ya extrañaba su presencia, su voz, hasta su olor, todo del ya era una droga para mí y ahora me la habían arrebatado de un solo golpe, era como encontrarme en abstinencia y me estaba volviendo loca al no tenerlo cerca de mí.

Me quede dormida en algún momento de mi llanto. Desperté al sentir una presencia en mi habitación, me exalte rápidamente, creí que era él quien había vuelto a mí de nuevo, pero no, él no estaba era mi madre, que me miraba fijamente.

-¿Qué pasa mamá? – me acomode en la cama, seguía en traje de baño. Me frote mis ojos.

-Haz estado hablando en sueños de nuevo – acaricio mi mejilla.

-¿De nuevo? – Asintió – Hace mucho que no sucedía.

-Así es, no dejas de mencionar a alguien –me asuste.

-¿De verdad? ¿A quién mamá?

-Tú debes de saberlo, ¿Me quieres decir quién es?

-Un amigo – conteste con sinceridad.

-¿Por qué no me dices la verdad pequeña? – me miro triste.

-No estoy mintiendo madre, Anthony es un amigo mío.

-¿Es el que te secuestro?

-No madre, no sé cómo se llama ese tipo, Anthony es un amigo mío de la facultad, lo conocí antes de que fuera secuestrada, me ha caído muy bien.

-Bien, aunque no te creo nada – nos quedamos calladas -¿Sabes que le pasa a tu hermana? Ha estado llorando desde hace rato.

-Tuvimos una discusión.

-¿Por qué?

-Alice a veces puede resultar tan inmadura, critica mi forma de ser y como es que llevo a cabo mi vida, me ha dicho algo que me lastimo.

-¿Qué te dijo?

-Que James me dejo por ser una niña inmadura.

-¿Te dijo eso?

-Si.

-Hablare con ella, no tiene por qué decirte eso.

-No madre, me he defendido y muy bien, pero la lastime, sería mejor que vallas con ella a hablar, te necesita mucho como madre.

-¿Qué hay de ti?

-¿Qué es peor mamá? ¿Perder un hijo o perder a quien amabas? – se quedó muda.

-Sé que me equivoque al darle la espalda a mi propia hija – sus ojos se humedecieron – Y con nada podre llenar el vacío que le dejamos, pero estoy haciendo todo para que este mejor.

-Ella lo ha sobrellevado bien mamá, ya han pasado seis años de eso.

-Yo no podría soportar perder alguna de ustedes, son mi vida entera.

-Entonces la entiendes mejor que nadie, ella quería a ese niño a pesar de saber que era una niña.

-Tienes razón, tengo esa plática pendiente con ella.

-Ve mamá – le di un beso en la mejilla - ¿Cuándo volveremos a Londres madre?

-Aún es muy pronto después de lo que paso.

-Quiero volver, tengo que terminar mis estudios, estoy en los últimos semestres.

-No te preocupes por ello, volveremos cuando lo creamos conveniente.

-Pero mamá, yo necesito volver, tengo una vida allá, no me quiero esconder.

-No entiendo aun, como es que estas tan tranquila después de lo que te paso.

-Me trataron bien madre, tal vez por eso estoy bien emocionalmente.

-Me preocupa de cualquier manera, te mandare con la psicóloga.

-Por favor mamá, no es necesario.

-Si lo haces, volveremos a Londres pronto.

-¿Cuándo es pronto?

-Convenceré a tu padre de volver la otra semana, solo si tú aceptas ir con un psicólogo.

-Hecho.

¿Cuál era mi plan ahora? Volver cuanto antes a Londres, para encontrarlo y decirle de frente todo lo que estaba sintiendo en este mismo momento.

 

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Nos vemos en el proximo capitulo =)

Capítulo 11: Volver a casa Capítulo 13: Una aventura

 
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