Forks, Washington

Pov: Demetri

Estaba sentado frente a mi piano acariciando suavemente las teclas, con Carol como musa era como si el piano tuviese vida propia, la música fluía como fluye el agua en el arroyo.

-Cariño la canción es preciosa-sin darme cuenta mamá ya estaba sentada a un lado mío en el piano.

-Gracias ma´, es para Carol le tengo preparada la más especial de las sorpresas, se que le va a encantar-

Mi madre me miró con dulzura.

-Cariño esa chica si que te robó el corazón-

-Mami eso es imposible, pero sin duda alguna daría todo y más por Carol-

-Mi cielo eso me encanta, que por fin hayas encontrado a la chica de tu vida-

-Ella es más que eso para mí mami-

De pronto con mucho alboroto Jane y Tanya entraron.

-Oh Demi estés en tu piano, por favor toca algo para mi quieres?-y se sentó a un lado mío, no supe en qué momento Jane y mi madre salieron.

-No Tanya no quiero tocar para ti, quieres dejarme en paz de una vez por todas?-pude ver en su rostro la rabia, ella no estaba acostumbrada a que la gente le negara nada.

-Mira Demetri lo mejor será que lo hagas por las buenas porque de un modo u otro acabarás estando conmigo quieras o no-me llenaba de rabia el modo en que me acosaba.

-Mira Tanya tu eres una dama, no me obligues a olvidarme de eso y déjame en paz-

-Demi voy a ser directa, o estas con migo o te juro que hare que Carlisle mate a tu estúpida humana, mira que el lo haría gustoso y no habría lugar donde ella pudiera esconderse y lo sabes-esto si que no me lo esperaba, era lo más bajo que Tanya podía caer, pero que podía hacer yo si estaba en riesgo la razón de mi existir?, contra eso no había nada que hacer, solo me quedaba ceder ante el capricho de Tanya.

-Que es exactamente lo que quieres?-su sonrisa de satisfacción me llenó de ira, tanto que por un momento casi olvidaba que yo era un caballero y ella una dama.

-Primero que nada debes decirle a tu familia que somos novios, que estamos hechos el uno para el otro, que me amas y segundo irás conmigo al bosque, ahora a hacer lo primero-

-Les diré que somos pareja, pero nada más-

-Como gustes amor-y me besó, era horrible besar a alguien a quien odias.

Bajamos a la sala y ahí estaba toda mi familia.

-Papá mamá chicos, Tanya y yo estamos juntos, somos pareja-la cara de Jane era rara primero sorpresa y después alegría, se abalanzó sobre Tanya.

-Quien mejor que tu mi mejor amiga para estar con mi hermanito-va si supiera que esto no era más que una farza, mi madre me miró y como era quien mejor me conocía solo me miró con lástima, ella y yo conocíamos bien a Tanya.

-Hijo me da gusto que al fin sientes cabeza, después de tantos siglos ya era justo y necesario-

-Gracias papá-

-A mi me da igual si tu eres feliz para mí está bien hermano-

-Gracias Alec-

-A mi la verdad me da lo mismo, preferiría que Carol fuera tu novia pero en fin-si algo era evidente era que a Félix no le agradaba ni un poco la idea de que Tanya fuera mi pareja y es que hace décadas ella trato de encamarse a Félix, obviamente que Jane no lo sabía, que si no seguro le habría arrancado la cabeza a Tanya.

-Gracias por la bienvenida Félix-le dijo Tanya sarcásticamente.

-No si no es bienvenida, más bien es el anuncio de que no me agradas para mi hermano y punto-si algo adoraba de Félix era la transparencia con que se conducía el era completamente incapaz de mentir.

-Vaya cuando menos eres sincero-

Tanya tu sabes que eso de mentir no se me da-

-Para ya gran bobo-y Jane le propinó un zape.

-Familia dicha la noticia Demi y yo tenemos que salir no es así amor?-

-Así es mami papá nos vemos al rato-y salimos de la casa tomados de las manos.

-Vamos al bosque Demi-y sin más la segui, no me quedaba más, era como si yo fuera su esclavo.

Llegamos a un punto en el bosque y ella se desnudo ante mis ojos, era realmente linda pero no la amaba, segundos más tarde y sin darme cuenta yo también estaba desnudo, me temía lo peor de pronto un exquisito aroma vino a mí, lo conocía mejor que nada, incluso muerto lo identificaría, pero sería esto posible, acaso Tanya podía caer tan bajo, pronto su silueta me lo confirmo, Tanya había caído aún más bajo, mi Carol venía con Paul y me vio a punto de acostarme con Tanya, esto no podía ser peor, pronto vi como los ojos de mi Carol se llenaron de dolor.

-Carol esto no es lo que piensas-quería explicarle pero ella echó a correr y justo cuando iba detrás de ella Tanya me detuvo.

-Ahora tu lugar está a mi lado amor-la odiaba más que a nada en el mundo.