a traves de tus ojos

Autor: darydeth
Género: + 18
Fecha Creación: 26/05/2011
Fecha Actualización: 03/01/2013
Finalizado: SI
Votos: 17
Comentarios: 17
Visitas: 45282
Capítulos: 20

 

Después de un terrible accidente, el mundo de Isabella Swan y todo lo que la rodea se convierte en una terrible oscuridad. Ella tendrá que aprender a ver el mundo de otra manera y lo lograra de la mano de un misterioso joven el cual guarda muchos secretos

 

 

 

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Capítulo 7: PLANES DE VIAJE

CAPITULO 7: PLANES DE VIAJE


Los gritos de Jacob no tardaron en atraer la atención de todos los miembros de mi familia. Charlie no entendía que rayos hacíamos hablando a altas horas de la madrugada. Por fortuna a Nessie se le ocurrió decir que su novio solicitaba ayuda para que ambos arreglaran sus problemas.

Algo de verdad había en todo eso, Jake todavía estaba un poco molesto por nuestra escapada a Seattle. Pero todos los que conocían bien a la parejita, sabían que no podían pasar más de un día enojados. De manera que Charlie se molesto con el y le exigió que volviera en un horario mas adecuado. Cuando la mayoría dejo mi habitación, tuve que soportar que mi padre me sermoneara, diciendo que no tenía porque meterme en peleas ajenas y sobre todo hacer de Cupido a las cuatro de la mañana. Estaba muy enfadada con Jake, por tener que aguantar el monologo sin sentido de mi padre.

Cerca de las cinco de las mañana, Jacob se fue y todos volvieron a intentar descansar.
Fue inútil querer dormir, nunca mis sentimientos se habían confundido tanto con respecto a una persona. No paraba de pensar en Edward, en su declaración y sobre todo en sus besos.
Como podían cambiar las cosas en tan poco tiempo?. Solo hace unos días me preguntaba porque me evitaba e ignoraba todo el tiempo y porque no quería ser mi amigo, y ahora resulta que estaba enamorado de mi.
Que significaba Edward para mi?, me preguntaba una y otra vez.


La mañana, fue una tortura total. Mi amigo licántropo, se paso por mi casa muy temprano. Luego de desayunar, el y Nessie me llevaron al jardín trasero para hablar muy seriamente conmigo. Los dos se habían puesto de acuerdo para convencerme que era muy mala idea que mantuviera contacto con los Cullen. Jacob afirmaba que la manada podría cuidar muy bien de mí, sin que ninguna sanguijuela se metiera en “esto”.

Eso, era algo que les agradecía con todo mi corazón, pero no cargaría con la responsabilidad de que algo grave les ocurriera. Edward ya me había advertido, y sabia que hablaba con la verdad. Por ello deje en claro que definitivamente no aceptaba su intervención.

No obstante, Jacob era muy testarudo y me amenazo con contarle toda la verdad a Charlie. Eso si que fue un golpe bajo, no quería que mi padre se involucrara en este asunto tan peligroso. Jacob era un idiota por pensar en eso y solo incrementaba mi malestar y no aportaba nada.

Nessie trato apoyar a su novio, pero en cuanto le pregunte si estaba dispuesta a verlo lastimado o algo mucho peor, se tenso y lo medito mas en profundidad. Era un hecho que la vida de Jake era muy importante para ella y aunque Jacob quisiera convencerla de que no había de que preocuparse, ella ya no estaba tan segura.

-Porque la asustas de esa forma Bella?-Gruño mi amigo.

-Solo digo la verdad, tu mismo me lo haz repetido, “los vampiros son sanguinarios y muy peligrosos”-dije dibujando una comillas en el aire.

-Pero aun así, tú quieres seguir en contacto con los Cullen.-dijo con ironía

Ya estaba cansaba de que me cuidaran y protegieran, aun cuando me rehusaba a aceptarlo. Ahora también me buscaban y seleccionaban a mis amistades??

-Hace más de un mes que los conozco, he pasado horas en su casa y nunca me han hecho daño. Ustedes lo dijeron “ellos son diferentes”.-le grite furiosa

Jacob se quedo en silencio, pero por su respiración y por la forma en que caminaba de un lado a otro, sabia que estaba irritado y enojado.

-Te gusta Edward Cullen no?

-Que?!-preguntamos Nessie y yo al mismo tiempo.

-Anoche cuando los encontré en tu cuarto estaban muy cariñosos, hasta te abrazaba y no se quería apartar de tu lado-me acuso muy tenso.

-N..No sabes lo que dices-titubee.

-Es cierto Bella?-escuché preguntar a Nessie horrorizada- El es un vampiro, tu no puedes…

-Y Jacob es un lobo, lo quieres menos por eso?-la acuse sin pensar en mis palabras

-Ves como lo defiende?-gruño Jake

-Edward es mi amigo, al igual que su familia y por si no lo sabias le debo la vida.-masculle entre dientes.

Jacob lograba sacarme de mis casillas con mucha facilidad.

-Que estas diciendo Bella?-murmuro Renesmee

Tome aire para explicarme y deseaba que una vez por todas confiaran en mí y dejaran de contradecir mis decisiones.

-Cuando llegue hace Forks y no los conocía aun, Edward me salvo de que me ahogara. Estaba caminando por la orilla del río y sin querer me adentre mas de la cuenta. Me enrede con algunas algas y la corriente me arrastro.

-Porque no dijiste nada?-susurro Ness.

-Porque si Charlie, se hubiera enterado seguro me enviaba de regreso con Renée y ya no quiero ser una carga para mi madre.

-Eso no cambia, ni prueba nada-dijo Jake.

-Ok ya estoy cansada de todo esto, he tomado una determinación y no la voy a cambiar, los Cullen son mis amigos tanto como ustedes, si no puedes vivir con eso lo lamento mucho-sentencie cruzándome de brazos.

-Haz lo que quieras Bella, después no digas que no te lo advertimos-gruño y lo escuche alejarse rápidamente.

-Jake, espere no te vallas-grito Ness, quien permanecía a mi lado.

-Ve con el Nessie, yo esperare a Edward aquí para ir a su casa.

-Estas segura Bella de lo que vas a hacer?

-No quiero pelear contigo Ness, eres mi amiga y te pido que respetes lo que hago, así que ya no hablare más del tema. Lo único que quiero es encontrar una solución para que ni Charlie, no mi madre resulten heridos. Seria muy infeliz si algo les sucediera por mi culpa.

-Lo entiendo pero..

-Renesmee quieres que le suceda algo a Jacob?-pregunte exasperada

-¡Claro que no!, me moriría de dolor si algo le pasara.

-El también es mi amigo, al igual que tu, así que no los dañaría a ninguno poniéndolos en peligro.-asegure y sabia que ante eso no podía persuadirme.

Renesmee comprendía que tenía razón y por ello no discutió mi punto de vista. Me abrazo y se marcho detrás de Jacob. Prometió que lo tranquilizaría y lograría que su enojo conmigo no durara por mucho tiempo.

En el fondo, que el estuviera enfadado a lo mejor era necesario para que no tomara insistiera en intervenir en el asunto de James.
Lo mejor seria irme de Forks.


-Siento mucho que tus amigos se hayan enojado Bella.

La voz de Edward me sobresalto y casi se me sale el alma del cuerpo en cuanto sus dedos se posaron sobre mi hombro.

-Lo lamento, no fue mi intención asustarte, pensé que me habías escuchado.-dijo apartando su mano.

-No te preocupes, estaba algo distraída.-susurre

-Como te sientes?-pronuncio mientras se sentaba a mi lado.

Sentirlo cerca hizo que reviviera lo que había pasado la última noche. De pronto comencé a sentirme algo incomoda y no sabia como actuar con el. Nunca me habían besado de la forma en que el lo había hecho, fue algo extraño sentir sus labios helados y como su embriagador aliento se mezclaba con el mío. Pero a pesar de todo fue también placentero.
“Deja de pensar en eso tonta”, me regañe cuando mis manos comenzaron sudar.

-Bella con respecto anoche yo…

-Edward no digas nada, se que todo es una locura y ninguno de los pensaba con claridad así que no tienes porque disculparte yo no...

-No me estoy disculpando Bella…besarte fue lo mejor que he hecho en mis 100 años de existencia, solo quería que supieras que no deseo presionarte y lo volveré a hacerlo hasta que tu me lo pidas.

“Hasta que yo se lo pidiera”, “Dios, no creo que tuviera las agallas para hacerlo, si eso sucediera”, O si?” “Deja de pensar en esas cosas Isabella”

Me aclare la garganta y trate de despejar mi mente, tenia que hacer algo más importante que pensar en los líos de mi cabeza.

-Dejemos ese tema por un momento… estoy muy preocupada por mis padres. Crees que James intente acercarse a ellos para llegar a mí?

-No te voy a engañar Bella, así que… Si, es lo más probable-dijo con suavidad.

-Demonios, maldita suerte la mía-susurre y escalofrío recorrió por mi espalda.

-No te preocupes Bella, protegeremos a tu padre y con respecto a tu madre veremos como cuidarla también.

-Ella esta viajando constantemente por el trabajo de su esposo, crees que eso ayude a que este segura?

-Puede ser… siempre y cuando no mucha gente sepan donde se esta quedando.

-Mi madre no tiene familia y amigas menos, solo nosotros sabemos a que ciudad de traslada. Y en lo que se refiere a mi padre, Jacob y sus amigos pueden cuidarlo, pero yo tengo que alejarme de Forks, no puedo atraer a James hasta aquí.

-Mmm… es buena idea, pero no permitiré que estés sola en ningún sitio, eso nunca-sentencio tomando mi mano.

Mi mano libre cubrió la suya, casi por instinto.

-Te quedarías conmigo Edward, me ayudarías a irme lejos?

- Siempre… y no tienes ni que preguntarlo, mi familia esta dispuesta a cuidarte y protegerte tanto como yo.

Sin poder evitarlo tantee su cuerpo y lo abrase con mucha fuerza. Necesitaba que alguien me cuidara y por extraño que sonara, confiaba en el vampiro que me envolvía en sus gélidos brazos. No pude evitar llorar como una idiota, al sentirme tan desprotegida e inútil. Odiaba con todas mis fuerzas no poder valerme por mi misma.
Estaba más que claro que una humana débil y un poco torpe, no podría contra un vampiro súper fuerte y desquiciado como James. Pero con mi ceguera, no podría correr si quisiera huir de el. Estaba sentenciada a depender de alguien por el resto de mis días.

-Por favor no llores Bella, no me gusta verte de esta forma-dijo apartando las lagrimas de mi rostro

Otro de los tanto momentos de Isabella Swan , arruinado por las lagrimas. Es que algunas vez pararía que llorar?

-Tienes razón, ya no quiero llorar otra vez- murmure para luego tomar aire-Se acabo, fue la ultima vez que lloro por ese cretino, imbécil… desde ahora seré fuerte o moriré en el intento-dije en un tono dramático.

.-No digas eso Bella, nadie tienes morir…bueno el único que debe hacerlo es James y yo me ocupare de eso.

-¡No!, no quiero ningún enfrentamiento…no quisiera que te hicieran daño.

-Así que no quieres que me pase nada?

-Bueno… eres mi amigo y te quiero, al igual que a tu familia.

-Ok, lo entiendo-suspiro en un tono molesto.

Al parecer mi respuesta no le gusto demasiado o esperaba otra cosa.

-Vamos a casa, mi familia quiere verte.-murmuro con más suavidad

Como si pesara dos kilos me tomo en brazos y comenzó a caminar deprisa.

-¡Hey!, estoy ciega pero puedo caminar hasta tu coche.

-Lo se, pero no traje mi coche y no pienso hacer que camines hasta casa.

-Y como se supone que llegáremos?.

-Corriendo-grito riendo.

En cuanto el viento golpeo mi rostro, lo único que hice fue acurrucarme junto a su pecho. Mis brazos se aferraron a su cuello y me sujete con fuerza. Edward corrió por unos cuantos minutos, ni siquiera se detuvo a descansar y su respiración fue normal, en todo el largo trayecto. No estaba agitado, ni un poco agotado cuando mis pies tocaron el suelo.

-Puedes soltarte Bella…aunque no me molesta que me abrases-bromeo.

Insegura me afirme en el suelo.

-Estas a salvo Bella, no te vas a caer, no te preocupes.

-Eso fue...

-Aterrador?

-Interesante-sonreí

La residencia Cullen estaba en completo silencio al momento de traspasar la puerta principal. Edward me condujo a la sala y tome asiento un poco nerviosa. Cuando Alice hablo y se acerco a mí para pedirme perdón, no pude evitar asustarme. De un silencio absoluto, llego una brisa y a los segundos sus pequeños, pero fuertes brazos me abrazaban y su voz cantarina, repetía una y otra vez que yo era su mejor amiga. Que nunca se había burlado de mí, ni se había aprovechado de que conmigo pudiera esconder su secreto.

Edward la regaño por ser tan efusiva y por darme tremendo susto. Alice por supuesto lo ignoro y me pregunto si aun éramos amigas. Me sentí muy mal al escucharla tan perturbada y preocupada por mi rechazo. Así que le devolví el abrazo y le asegure que nada había cambiado entre nosotras, ella todavía seguía siendo mi amiga.

Esme fue la siguiente. También la escuche afligida y avergonzada por todo esto. Tanteo mi cuerpo y me explico que se había asustado mucho cuando supo lo de James. Yo era un miembro más de su familia y quería que supiera que jamás, nadie había fingido el gran aprecio que me tenían.
Hace unos minutos atrás, le había prometido a Edward que no lloraría más. Sin embrago no era inmune a tanto cariño y me daba cuenta que todos eran sinceros. Mis ojos ardían y tenía un nudo en la garganta, no sabia hasta cuando podría contener mis lágrimas.
“No te contengas cariño”, me susurro la madre de Edward y enseguida coloco un pañuelo descartable, para que limpiara mis ojos.

Carlisle, como siempre, me hizo sentir en mi hogar. Lo primero que dijo fue bienvenida a casa otra vez. Sus palabras me llegaron al corazón, porque desde mi accidente, ya no encontré un hogar propio. En cada sitio al que iba, me sentía extraña o que estorbaba debido por ser diferente. En la residencia de los Cullen, no me sentía de esa forma, todo lo contrario, era como estar en casa de verdad.

Emmett fue otro que me tomo desprevenida y me sorprendió con otro abrazo que separo mis pies del suelo. “Que bueno que ese maldito, no daño mi diversión personal”, “Debes tener cuidado Bella, si no, a quien voy a engañar con mis bromas”.
Mientras estaba en el aire escuche gruñir a Edward. Pronto sus brazos fueron los que me envolvieron y se sentó a mi lado en aquel cómodo sofá.

Jasper y Rosalie, no fueron tan efusivos, pero dijeron que se alegraban que estuviera bien.
Luego de comprobar que todo seguía como antes, nos pusimos a hablar con mucha seriedad sobre el asunto que me preocupaba. Edward comento que lo mejor era, que me alejara de Forks, para que Charlie no corriera peligro alguno. El me llevaría lejos y cuidaría de mí durante un tiempo.

A Esme no le gustaba la idea de perder a ninguno de sus hijos y me sentí muy mal por eso. Como si leyera mis pensamientos Edward me atrajo hasta su pecho y me pidió que no me preocupara.
“Como si fuera posible”?

-Lo mejor será quedarnos un tiempo en Alaska, tenemos una casa allí y cuando la adecuemos para ti Bella, nos podremos alojar.

-Es una buena idea, además allí están los Denali y seguro si les explicamos la situación nos ayudaran.

-Mmm... No creo que a Tanya le guste mucho la idea-dijo Rosalie.

-Eso no es problema Rosalie y guárdate tus comentarios.-mascullo Edward entre dientes, en un modo muy irritado.

Tanya?, el tono que utilizo la hermana de Edward, daba a entender algo mas. No hablaría de alguna vampira, novia de Edward?.
Seria mucha mala suerte echarme otro vampiro enemigo encima.

-No deseo separarlos y no quiero incomodar a nadie-susurre.

-Bella…no tienes que preocuparte y ya te dije que me quedare contigo, solo nos hospedáremos en casa de mi “prima” Tanya un par de días y luego nos iremos a nuestra casa.

Así que era un pariente. A lo mejor no le gustaban los extraños o los humanos y por eso Rosalie hizo ese comentario.

-Lo importante es que estés a salvo, mientras ideamos como nos libramos de James-sentencio Jasper.

No pude evitar temblar con su aporte. Además cortar cabezas, desmembrar cuerpos, prender fuego a James y otras tantas cosas, me ponían los pelos de punta. Por fortuna Edward me saco al jardín para no continuar oyendo tácticas de guerras y las excusas que le dirían a Charlie para que no me impidiera abandonar Forks.

Toda mi mente era un caos y no dejaba de estar inquieta y de imaginar muerte y destrucción a mí alrededor.

-Bella te mantendré segura, lo prometo-aseguro Edward tomando mi barbilla.

-Estas seguro que eso es posible?

-Nadie te tocara, nunca-habla un poco tenso.
Su aliento me acariciaba el rostro cuando pronunciaba esas palabras de aliento. Era inevitable dejarme llevar por esta atracción que cada segundo crecía más y más. El me hacia sentir especial, y cuando estábamos juntos, podía ver. El era una luz a mi vida. Tal vez el si pudiera ser el hombre que me amara e hiciera que mi fe en el amor renaciera otra vez. Edward lograba que mis sentimientos se fueran aclarando, con cada palabra, cada caricia y todo lo que hacia para cuidarme.


-Entonces me voy contigo a Alaska-murmure

Mis manos se posaron en su pecho, estamos tan cerca otra vez…se sentía bien, que el me tocara se sentía muy bien.

“Besarte fue lo mejor que he hecho en mis 100 años de existencia, solo quería que supieras que no deseo presionarte y lo volveré a hacerlo hasta que tu me lo pidas”

Recordé sus palabras y me estremecí al rememorar sus labios sobre los míos. El sabía como besar a una mujer.

-Bésame…-susurre tan bajo que pensé que el no me había escuchado.

Sin embargo mi boca estuvo felizmente ocupada, al terminar de pronunciar aquella simple palabra.

Capítulo 6: NO ME APARTES DE TU LADO Capítulo 8: PASIÓN

 
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