CAPITULO 12: DESESPERADO

POV: EDWARD

Quería morirme mientras mi vista estaba fija donde se había perdido el niño vampiro con mi Bella.

Mi Bella…tenia que ir por ella, pensé volviendo a la realidad de pronto.

James continuaba reteniéndome con la ayuda de Tanya. Como pudo haberme traicionado, no solo a mi sino también a mi familia. Alice y Jasper no podían ayudarme en el estado de confusión al cual los habían sometido. Era asombroso el poder que tenía esta pareja de vampiros.

-Bien, ya te ayudamos a recuperar a tu mujer-dijo el extraño rodeando a su compañera con uno de sus fuertes brazos.

-Ok, pueden irse, prometo alcanzarlos en Seattle para ayudarlos con ese tema pendiente-les mintió James

-¡Hey¡ primero haz que Velkan termine lo que pactamos-Exigió Tanya.

Sus pensamientos llegaron a mi mente en segundos. Como había caído en un engaño tan estúpido. Ella nunca fue fácil de engañar, pero estaba cegada por deseos enfermizos.

-Como puedes creer lo que te prometió?, pensé que eras más inteligente Tanya-hable con los dientes apretados, viendo como había sido parte de un estúpido engaño

-¡Cállate Edward¡.-miro al vampiro- Tu, haz que el me ame, que deje de pensar en esa maldita humana-le grito a Velkan furiosa

Toda la situación, parecía la maldita serie televisiva, la zona desconocida.
Que la amara? Tanya estaba realmente muy mal. Hasta donde se había dejado influenciar por James. Era mas ciega, que la propia Bella.

Tenia que zafarme de este problema, antes que ese niño la lastimara

-Porque no dejas de engañar a todos y te enfrentas a mi, maldito cobarde.

James aparto a Tanya con facilidad y me elevo en los aires, arrojándome contra uno de los frondosos árboles del bosque. El tronco se partió al medio y caí sintiendo como mi cuerpo se sacudía completamente. Por lo menos el idiota era fácil de irritar y ahora estaba libre, intentando ponerme de pie.

-No lo lastimes-gruño Tanya interponiéndose en medio

-Apártate-gruñí fulminándola con la mirada

“Como si necesitara que ahora se preocupara por mi”

-¡No¡ el cumplirá lo que prometió-grito apretando sus puños

-Cual es tu don Velkan?-pregunto James pareciendo aburrido

-Me introduzco en el cerebro de cualquier ser y juego con su mente.

-Entonces haz que el me ame- señalo Tanya, hacia mi desesperada

-No puedo hacerlo, no funciona de ese modo.

James sonrío con sorna y le hizo un gesto a Tanya para que se apartara de su camino.

-Maldito bastardo ese no fue nuestro arreglo, prometiste que el seria mío a cambio de Bella. Cumple el pacto o te matare con mis manos.


Velkan y su compañera me inmovilizaron por orden de James. El vampiro jugo con mi mente distorsionando todo lo que veía, las figuras se tornó borrosas por momentos.

-Vete Tanya, no seas estúpida-grite leyendo la mente de James

El maldito salto sobre ella con un solo movimiento y literalmente, le arranco la cabeza. Su cuerpo sin vida cayó frente a mis ojos. No podía creer que las cosas terminaran así. La cólera y la envidia la habían destruido y a pesar de todo tenia mis sentimientos confusos hacia ella. No podía odiarla, ni desear que acabara de esta forma.

-Maldito enfermo, pagaras por esto, lo juro.


“Como si yo fuera a perdonar a tu querido Edward, por osar quitarme lo que es mío”, pensó James mientras le prendía fuego al cuerpo de Tanya. El maldito río mientras se ella se consumía.


-Nuestro trato nunca fue este-dijo la mujer aturdida

Caí libre a los pies de Tanya cuando me soltaron. Pronto no quedaría de ella. Velkan y su compañera liberaron Alice y a Jasper de su extraña confusión. Ambos se miraron horrorizados al darse cuenta que se atacaban mutuamente. No tardaron en desviar su atención hacia mí.

-Les pedí ayuda a cambió de información, que tanto desean, así que no se quejen. Si desean unirse a el no me molesta.

El tiempo se detuvo cuando aparecieron una docena de neófitos flanqueando alrededor de James. Alice y Jasper se ubicaron a mi lado al instante.

-Ya era hora- gruño James.

“Que haremos Edward?”, pensó Alice

“Carlisle y los demás están en camino, pero no se si llegaran a tiempo”-señalo Jasper en mi mente”

Era una lucha perdida solo tres contra james y su ejercito.

-Velkan, puedo leer la mente, y se que James te engaño. Ahora mismo planea matarte a ti y a tu compañera. Únete a nosotros y prometo ayudar a recuperar lo que tanto quieres.

-Ya estamos cansados de tantos juegos y si nos unimos solo será para acabar con este embustero.-respondió colocándose delante de su compañera.

-El es mío-gruñí dispuesto a luchar y a no permitir a nadie que me quitar el placer de matarlo.

A continuación, todo fue un caos, los neófitos arremetieron contra nosotros. No estaban coordinadas ni nada por el estilo. Solo tenían una orden a cambio de sangre libre albedrío.
MATAR.

James, se quedo atrás los primeros minutos del enfrentamiento, riendo y observando como luchábamos con los nuevos vampiros. Velkan y su compañera, eran un dúo muy fuerte, combatiendo en perfecta coordinación y con exactitud. Jasper, nos indicaba a mí y a Alice los puntos débiles de nuestros oponentes. Refresco algunos conocimientos en estas creaturas irracionales y fuimos certeros acabando con varios. Sin embargo, no era nada fácil. Su número era mayor y perdíamos el control poco a poco.

Yo solo quería llegar a James, acabar con el, para luego quemarlo hasta que no quedara absolutamente nada. Cada vez que avanzaba un paso hacia el, algún neófito se interponía en mi camino, frustrando mi objetivo.

A unos kilómetros ya escuchaba los pensamientos de mi familia. Solo teníamos que aguantar un poco más.

-¡Enfréntate conmigo, deja de esconderte!

Por fin, tuve su atención y James se encamino enfurecido, apartando a dos neófitos. Le rompería cada parte de su asqueroso cuerpo y lo disfrutaría, pensé estudiando sus movimientos.

-Donde esta Bella?

-Crees que te lo diré Edward?-río de forma sarcástica- No te preocupes, cuando me reúna con ella, le enviare saludos de tu parte.

El maldito sabia de mi don y no dejaba escapar ningún indicio, del paradero de Bella. Tenía todo perfectamente planeado, ni el conocía con exactitud donde la ocultarían. Su plan desde un principio, había sido, acabar con migo por venganza y luego localizarla para reunirse con ella.

-No hará falta, yo mismo la traeré de vuelta- dije saltando sobre el.

Mi familia arribo al lugar, para ayudar a Alice, Jasper y a la pareja de vampiros.
Toda mi mente, fuerza y furia estaban en mi oponente. Vengaría a Bella por todo lo que había sufrido y continuaba sufriendo a causa de su locura.

Los vampiros somos fuertes y no necesitamos descansar y recuperar fuerzas. Pero tenia un agotamiento mental, ya que desde que ellos irrumpieron y se llevaron a Bella. Mi mente se abrió a cada pensamiento, para saber donde estaba la mujer que amaba. No podía perderla, pensaba con fuerza devolviendo y esquivando cada golpe de James. El bastardo era muy bueno, pero yo había entrenado muchas horas, aguardando este momento. 

Los neófitos estaban casi acabados y Emmett y Jasper querían interferir en mi pelea.

-Se llevaron a Bella, tienen que rastrearla- grite


James se distrajo, al ver que mis hermanos se ponían en marcha. Con una fuerte patada en su abdomen, lo hice girar en el aire hasta impactar con una gran roca.

-Voy a disfrutar esto-gruñí colocando mis brazos alrededor de su torso.

-Si, no regreso en pocas horas, la mataran-amenazo retorciéndose

Mi boca se poso en su cuello y arranque un trozo de su dura piel con mis mandíbulas. El aúllo y continuo intentando librarse de mi, pero ya era tarde.

-Nunca fue tuya y nunca lo será maldito enfermo…ella solo conoció el amor con migo-masculle entre dientes, tomándolo cada uno de sus brazos, mientras colocaba uno de mis pies en su espalda. Con un tirón separe sus miembros y su cuerpo cayo flácido frente a mí. Lo mismo hice con sus piernas. Estaba cegado por la ira, mientras la voz de mi padre me pedía que acabara con esto de una vez.
Ignore su voz mental y lo deje agonizar, lavando un pie en su espalda, antes de tomar su cabeza y arrancarla limpiamente.
Lo mejor fue llevar, sus partes hasta la hoguera donde ardían los neófitos.

No podía apartar mis ojos del fuego, quería comprobar que no quedaría nada. Que se marcharía para siempre y no atormentaría más a la mujer que amaba.

-La encontraremos Edward, tranquilízate-Escuche a lo lejos a Carlisle.
Mi pecho subía y bajaba, aun presa de la tensión. No necesitaba respirar, pero por acto reflejo lo hacia y de forma muy agitada, mientras apretaba mis puños con fuerza.

La nariz me pico con un profundo olor a…perro?

Jacob apareció con Esme y su imprimación. Mi madre lo había ido a recoger cuando las cosas se descontrolaron.

-Que sucedió?-pregunto observando el campo de batalla y la enorme hoguera en el centro.

-Se llevaron a Bella-fue Carlisle quien hablo.

-Que?!,! no se supone que la protegerías¡-grito caminando hacia mi.

-No estoy de ánimos, debo encontrarla así que deja tus reclamos, chucho-gruñí fulminándolo con la mirada.

-Jake?!

-Nessie, quédate en el auto con Esme.

Rosalie y Esme, regresaron a casa, para proteger a Renesmee, mientras el resto esperábamos a Emmett y Jasper.

-Ustedes que saben de todo esto?-pregunte a Velkan y a su compañera.

-Nada, solo acordamos el rescate de la humana.

Mi teléfono sonó en ese instante.

Emmett y Jasper habían perdido el rastro de Bella a unos cinco kilómetros.

-Perdieron el rastro-dije apartando con fuerza el móvil.

-No había ninguna humana que rescatar. Nosotros nos encargábamos de su protección-explico Carlisle-Les pido que nos acompañen a nuestra residencia, para que nos ayuden en cualquier cosa que nos de una pista de la joven.

Me rehúse a ello en cuanto Emmett y Jasper regresaron. Tome la decisión de seguir el aroma de Bella por mis propios medios, pero incluso con la ayuda de Jacob fue imposible. El olor se perdía donde mis hermanos habían mencionado.

Me deje caer de rodillas, en medio de la nada, intentando captar algo que me llevara a ella. Esto no podía estar sucediendo, Jacob tenia razón…yo debía protegerla, se lo había prometido…

-Edward, regresemos hijo-suplico Carlisle

No se como pude volver a casa, quería estar solo y deje a mi padre a hablar con la pareja. Igual lo mismo los escucharía desde el cuarto que compartía con Bella. Cuando me acosté en la cama, su aroma lleno mis pulmones, por un momento quise destruir todo y aplacar la furia en mi interior.
Solo me limite a tomar su camisón y aspirar profundamente, mientras recordaba como me había sonreído hace algunas horas.

-Ya quiero ser una Cullen mas…quiero ser tu mujer para siempre, para toda la eternidad.

-Bella…ya eres mía, solo mía… para siempre

Intente tranquilizarme estudiando cada palabra que salía de los labios del vampiro macho. Ellos se toparon con James, por casualidad, en su intensa búsqueda de su hija. Eso fue una parte interesante, la vampira llamada Mary, solo hace unos 18 años que había sido transformada, al dar a luz al hijo biológico de Velkan. El bebe había recibido la mayor parte de los genes de la madre, y lo dejaron en un viejo orfanato, hasta que Mary, pasara su etapa de neófito. Cuando regresaron por el, lo habían adoptado, perdiendo todo contacto. El maldito bastardo de James, los había engañado, ofreciéndole una ayuda que jamás verían.

-Ojala te pudras en el infierno maldito bastardo-murmure pasando una mano por mis cabellos.

Al otro lado de la habitación, Renesmee lloraba por su amiga, en brazos de Jacob. No soportaba ver sus pensamientos. Bella no estaba muerta, pensé bajando a la sala.

-Que saben del niño que se la llevo?

-Niño?-pregunto Carlisle confundido

-James transformo a un niño, aparentaba tener unos 12 o 13 años.

-El se llevo a Bella?, son muy inestable, como pudo hacerle una cosa así a una creatura-susurro Esme

-James era un monstruo

-El pequeño se llama Thomas y no es malo-apunto Mary

En su mente pude ver algo del último tiempo que ella compartió con el niño. Thomas le temía a James, quien lo golpeaba y lo torturaba con su sed. Además lo amenazaba con dañar a Sharon, su pequeña hermana.

-Porque no intervinieron y ayudaron al niño, al ver lo que el hacia.-mascullé entre dientes

-Esos no son mis recuerdos, aclaro Mary, son los de Thomas.

Los del niño, como podía ser eso?

-Explícate, por favor.

-Controlo los sueños, como así las pesadillas. El niño estaba inquieto todo el tiempo. Nosotros los vampiros no dormimos, pero con mi don, he comprobado que algunos soñamos despiertos. El tenía constantes malos recuerdos, demasiados vividos y perturbadores de sus lejanos recuerdos como mortal. La presión de las ultimas horas me revelo, muchas cosas-miro a su compañero. Le pedí a Velkan que nos lo lleváramos cuando todo pasara.

Una idea paso por mi mente. Tal vez fuera la ultima oportunidad para hallar a mi Bella, antes que fuera demasiado tarde.

-Puedes evocar algo sobre sus últimos recuerdos, alguna pista que me lleve a mi compañera

-Tu compañera?-pregunto Mary curiosa.

-Si mi compañera…Bella-pronuncie intentando no perder la calma.

Por su mente sintió ternura y pena ala vez. Su situación y la de su compañero eran similares a la mía. El también se había enamorado de una humana.

-Ayudare en todo lo que necesites, nosotros fuimos engañados, no quisimos hacer nada equivocado.

Solo asentí, mientras ella se disponía a liberar su mente. Pidió unos minutos para organizarse y enfocar su cabeza solo en Thomas.

Mi madre fue a la cocina, intentando aplacar sus nervios, al preparar algo de comida para Renesmee y Jacob. Ella sufría mucho, como el resto de mi familia. Todos amamos a Bella y estábamos muy afectados. Jacob, bajo media hora más tarde, cuando su imprimación se quedo dormida. No le gustaba nada lo que sucedió con su amiga, pero estaba dispuesto a ayudar. Parte de la manada, ya se hallaba a disposición para una nueva búsqueda.

Eleazar, Carmen, Kate e Irina, llegaron también.
La tristeza nos rodeo cuando ellos asumieron su perdida. La más afectada fue Irina, quien al igual que su hermana, había formado parte de un rechazo irracional hacia Bella. Ahora veía en su mente, cuento se arrepentía, por no haber impedido que Tanya, siguiera con su obsesión hacia mí.
Lastima que tuvo que pasar esto, para que viera la realidad.

-Tengo algo-Susurro Mary llamando mi atención

Estábamos en la sala, el resto nos habían dejado algo de espacio.

Pronto los recuerdos de Thomas se proyectaron.

“Sharon esta allí”-dijo el niño emocionado

“Si, llevaras a la humana, hasta que te encuentres con mis amigos”-explico James

“En unas horas, me reuniré con ustedes y tendrás a tu hermanita”

Los ojos casi dorados de Thomas, brillaron con la promesa, al parecer el niño tendría apenas un año o un poco menos de su transformación.

“Bien entonces Montana, me reuniré con Simón”

“No lo olvides, si no quieres pasar sed por un tiempo”-gruño James

El niño lo miro horrorizado.

“No lo olvidare, señor”

Un calor se abrió paso por mi cuerpo cuando tuve, una pequeña pista del paradero. No tenía tiempo que perder, tome las llaves de mi auto y corrí en busca de mi Bella.

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