Esto se llama amor

Autor: josicullen
Género: Romance
Fecha Creación: 12/04/2011
Fecha Actualización: 09/03/2018
Finalizado: NO
Votos: 10
Comentarios: 23
Visitas: 44464
Capítulos: 18

Bella y Edward se conocen luego de que jacob la ataca. Todo va bien, se puede ser feliz para sorpresa de bella. Pero ¿que pasara cuando jacob trate de recuperar a bella a toda costa o por otro lado matarla? ¿que sucede cuando tratas de dejar un pasado que parece no querer irse? 

Chicas es mi primer fic y espero lo disfruten. soy nueva en esto asique acepto comentarios constructivos.

Actualizacion: Comparten el mismo fanatismo y amor por esta saga que yo, este fic comenzo hace mucho tiempo y estoy actualizando lo que ya existia, espero poder terminar esta deuda que tengo con este fic, y que les guste en el camino.

ALERTA: FIC EN RE-EDICION. Ortografia, redacción e hilo conductor. Capitulos Editados: 1.

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 7: 7º

LO SIENTO :(No tengo escusas. pero antes de leer... los minutos que hablan con ed en casa de bella son 45 no 15 y con rose hablan otras horas más, mas o menos.

 



 

Edward POV

-porque no me lo dijiste??!!- bella estaba realmente molesta, una arruga se formaba entre sus cejas, sus ojos estaban entrecerrados y fruncia los labios. Me quede en silencio un minuto y luego hable.

- no lo crei importante..

- no lo creiste “importante”? no pensaste que talves para mi si valiera la pena saberlo…

- para alardear que un millonario te salvo??!!- no lo podía creer, para ella el dinero era importante.

- para ahorrarme la sorpresa Edward!, para por lo menos saber que mi vida no volverá a ser normal!- bella me miraba directamente a los ojos, trate de ver dentro de ellos, que pensaba, que sentia, pero no lo logre, sus ojos no expresaban ira, o molestia, era algo distinto, entre sorpresa y algo que no logre identificar.

- bella si eso te molesta puedo alejarme de tu vida…

- eso no es lo que estoy diciendo.- me corto, esta ves estaba seria.- Edward no me importa si eres millonario, pobre o cualquier otra cosa, tu me ayudaste, te preocupaste por mi, no llamaste a una ambulancia  para que me llevaran y tu irte; me tomaste, me llevaste al hospital y te quedaste conmigo, no me abandonaste, a pesar de ser una completa desconocida tu me cuidaste y eso es algo que yo nunca podré olvidar. No me importa si hay alguien tomándonos fotos o grabando todo lo que digo ahora, porque con solo unas horas de conocerte puedo ver a la persona maravillosa que hay dentro del envoltorio sexy que todos ven.

- bella yo…- baje la mirada, no sabia que decirle, por un momento pense que era de esas peronas que tanto habian entrado y salido de nuestras vidas, que se aprovechan por nuestro dinero y luego se van. Pero estaba hablando con bella, con la chica dulce, inteligente, preocupada, “real” con la que pase la tarde-noche de ayer; no con esas chicas de plástico que se nos acercaban.-bella, lo siento. Es que temi que si te decia, te interesaras en el dinero y no en mi.- levante la mirada y me encontre con sus ojos, ella me veia con ternura, ¡TERNURA!- hemos pasado mucho por lo mismo, creemos hacernos amigos de alguien pero no le interesamos nosotros, sino lo que les podemos comprar.

-  si soy sincera, creo que te comprendo, no del todo obviamente, no he pasado por ello, pero no me gustaría vivir estando pendiente de en quien puedo confiar y quien se aprovecha de mi.- bella tenia mis manos entre las suyas, y trazaba lineas imaginarias con su dedo en mi palma, era extremadamente relajante, y reconfortante.

- no tienes idea de lo horrible que es..- un carraspeo nos interrumpio, era el camarero.

- lo siento señor pero vamos a cerrar. -Lo mire raro, apenas eran las 15: 30.- hoy serramos antes- me dijo luego de verme.

- Emm si claro, cuanto es?- pregunto bella, pero que estaba haciendo?, le quite la billetera( monedero), y pase mi tarjeta de credito.

- ah, y eso por?!- bufo

- no iba dejarte pagar, viniste conmigo yo pago.

- eso no era necesario!- ok otro aspecto en la personalidad de bella, es independiente.

- hagamos algo, el proximo helado lo invitas tu.

- Bien.

- Bien.-repeti, mientras me entregaban mi tarjeta.- bueno debemos irnos, a donde quieres ir?

- no lo se, no quiero volver a casa sera aburrido y el dia esta tan bello que me apena desperdiciarlo.- salimos del restaurante y caminamos a mi auto; si ella no queria volver y no queria estar bajo techo ya sabia que hacer, solo espero que le guste.

- bueno, si es así me gustaría que vieras algo.

- puedo saber que es?!- pregunto con una sonrisa en su cara.

- Nop, si no no seria sorpresa.

- bien.- dijo resignada, subimos al auto, arranque el motor y lo eche a andar hacia Forks. Estabamos en silencio otra ves, pero ahora no era incomodo, la verdad era todo lo contrario, ya no había nada que nos molestara a ninguno.

Veia a bella de reojo de ves en cuando, estaba tan tranquila, su respiración era acompasada, y su mirada estaba perdida en algún punto del bosque que pasábamos, me moría por saber que pensaba, pero no quería romper el momento, ya se lo preguntaría después, volvi a mirarla, sujetaba su cabeza con su mano, mientras que con la otra jugaba con una hilacha de su polera, poco a poco levanto la vista y me miro a traves del espejo, se giro, sus ojos chocolate se conectaron con los mios unos segundos y miro al suelo, al tiempo que un leve sonrojo se apoderaba de sus mejillas; era tan tierna, adorable, pero también se veia tan delicada, su piel era casi traslucida, lo que la asia verse muy fragil, ella necesitaba a alguien que la protegiera, que la cuidara, y yo iba tomar ese cargo, seria su guarda espaldas de ahora en adelante aunque ella no lo quisiera, daría mi vida por ese ángel.

Doble en el camino de tierra correspondiente y unos dos kilómetros mas adentro me estacione.

Bella se veia confundida, su cara era todo un poema.

-Edward que hacemos aquí?

- shh… solo sigueme.-dije alejandome del sendero y entrando al bosque.

- Ed…

- Confía en mi bella, por favor.- extendi la mano esperando que la tomara, me miro dudosa un segundo pero luego se acerco a mi y me dio su mano. Sonreí y ella me sonrió,  la guié por el sendero que había trazado en mi cabeza a traves del bosque unos años atrás cuando encontré este lugar, tropezó unas cuantas veces con ramas o piedras… y otras tantas con el suelo plano también, era gracioso como se enredaba con sus propios pies, se tambaleaba un poco y luego seguía como si nada hubiera pasado.

Caminamos alrededor de hora y media, y bella ya estaba bastante sucia por sus constantes tropiesos.

- cuanto mas falta Edward esto ya es bastante molesto, soy torpe.

- tranquila ya llegamos.

- Edward mira a tu alrededor, yo solo veo bosque y ramas, arbustos, BOSQUE.- recalco la palabra.

- tapate los ojos

- Que?

- bella hasme caso, cierra los ojos.- lo dudo un instante pero luego los cerro.- bien dame tu mano, ahora hay que caminar un poco.

- Ed te juro que si me dejas caer te mato.- me rei, se veia tierna tratando de ser amenazadora, era como ver un gatito creyéndose tigre, tierno, gracioso, todo menos peligroso.

- Nunca dejare que nada te pase bella, es una promesa.- le dije firme, era verdad, de ahora en adelante nada le pasaria como que me llamo Edward Cullen.

Luego de un suspiro tomo mi mano, y con la otra en su cintura la guié unos metros mas hasta nuestro destino, abriéndome paso entre los arbustos. Salimos de entre los arboles y me acerque hasta casi tocar su cara. La senti estremecerse por mi aliento en su cuello mientras susurraba.

- Ya puedes abrirlos pequeña.

Lentamente abrio sus ojos y pude ver la sorpresa en ellos. Jadeó un poco y dio un paso más hacia delante; miraba alternadamente entre mi y el claro que tenia frente a ella. El sol estaba descendiendo ya, pero de todas formas tocaba cada punto del el hermoso prado; bella se situó al centro del prado miro su alrededor. La imagen frente a mi era fascinante. La luz del sol dejaba ver unos ligeros bisos rojos en su cabello caoba que no sabia que existían, extendía un poco sus manos y alzó el rostro al cielo sintiendo el calor que emitía el sol, mientras las flores violeta, blancas y amarillas se movían al compás de la suave brisa de la tarde. Era la aparicion de un angel, un angel enviado para dar alegria a mi vida.

Era un cuadro hermoso, su cabello ondeaba junto con las flores dandole un aire de paz extrema.

Pasaron unos minutos cuando abrio los ojos, se dio la vuelta lentamente y me vio observarla desde el borde del claro, me regalo una sonrisa y me tendio su mano; me fui acercando poco a poco hasta llegar a su lado.

- te gusta?

- Edward es…es hermoso- dijo asombrada viendo la belleza del lugar.

- lo se, me encanta este lugar.

- no sabia que esto existía.

- nadie lo sabe. El sendero que hay, lleva asia otro claro, un sitio para picnic, y obviamente no se compara con este.

- como lo descubriste?

- bueno vinimos aquí hace 4 años, me puse a pelear con emmet, cosas sin importancia, pero me volvi al auto, estaba tan enojado, queria estar solo y pues me meti al bosque y camine, camine, camine, camine y camine y llegue aquí. Siempre vengo desde aquella vez, cuando quiero pensar o paz o simplemente estar solo, es como mi refugio, me desconecto del mundo aquí, puedo pasar horas aquí y ni siquiera me doy cuenta. Esa dia, cuando volvi con los demas todos estaban como locos buscandome, Emmett era una bola de nervios, Jajaja, decia “es mi culpa, se enojo conmigo y ahora es comida de ositos, a quien voy a molestar? ali ahora a quien le copio en lengua? Voy a reprobar!!”

- jajajajaja siempre a sido así, no es sierto?

- si, siempre. Pero es mi hermano que le voy a hacer?!

- soportarlo.

- ni me lo digas, cuando un conozcas más a Emmett, entonces puedes decirme que lo soporte.

- ok, lo haces ver malo lo sabias?

- si, esa es historia antigua.- me miro divertida, pero era cierto Emmett era así, desde niños todo se lo tomaba a la ligera, era raro ver a Emmett serio.

- nunca he tenido un lugar para mi sola desde que llegue a Forks.-dijo de repente.

- desde que llegaste? No eras de aquí?- “olle parece que te dio un ataque de idiotez! claro que no es de aquí, la hubieras visto en la escuela”

- si, quiero decir, amm, a mama le ofrecieron un trabajo en Phoenix  en una escuela de ballet, y no pudo desperdiciar la oportunidad asique yo me fui con ella, tenia 17 años, lo unico que queria era un cambio, lo malo fue que Charlie no podía dejar la estación, no podía dejar el pueblo, asique el se quedo aquí.  Cuando mama murio yo tube que volver y con el estrés por su perdida nunca nos separamos, excepto cuando estaba con Jacob, pero ese es tema aparte; lo que en resumidas cuentas, hace que mi único lugar privado fuera el baño, y no es un lugar lindo para pasar las horas.

- bueno, de ahora en adelante, este lugar también es tuyo cuando quieras, ok?- ella sonrió y me miro, un ligero rubor se extendió por su rostro mientras asentía.

- claro, gracias.- nos consumió el silencio por unos minutos, silencio que se vio interrumpido por un escalofrío de parte de bella; estaba anocheciendo y la temperatura comenzaba a bajar, el sol se ocultaba tras los arboles lo que bloqueaba su calor.

-Creo que debemos volver, esta anocheciendo y tienes frio- frunció el seño y abrio la boca para protestar- no lo niegues eres pésima mentirosa.

- esta bien, esta bien, tengo frio. Me enseñas el camino?

- claro vamos

Volvimos casi dos horas después, entre enseñarle el camino, y la poca luz que había le prometí volver y mostrárselo a la luz del dia, a lo que sonrio complacida.

En el auto las cosas no fueron muy distintas del viaje anterior, el silencio y las miradas discretas seguían pero esta ves no apartaba la mirada de inmediato, pasaban unos tres segundos y luego la retiraba. El viaje se me hizo demasiado corto, cuando menos me lo espere ya estábamos en su casa; poso su mano el la manija y presiono para abrir.

- bella.- se giro y clavo sus ojos en mi.

- paso por ti mañana? Así te enseño el camino al claro.

- si, me encantaría.

- bien! Te recojo a las doce.

- perfecto.

El tiempo se congelo, era ella y yo alejados del mundo, rodeados de la noche. Vacilo una milésima de segundo y luego se acerco rapidamente y beso mejilla, instantáneamente senti la corriente electrica que se estaba haciendo familiar, se bajo del auto y se encamino a la casa con su hermosa sonrisa en el rostro, se volteo un momento y entro por la puerta.

De algún modo que desconozco llegue a casa, no preste atención a si había alguien o si me hablaban, escuchaba voces de fondo y mi nombre unas cuantas veces pero eran un murmullo lejano, lo unico que cabía dentro de mi cabeza ahora era la sonrisa de bella y sus ojos en los mios. De forma mecánica me cambie y acoste. Pasaron unos minutos antes de que pudiera conciliar el sueño, pensando en bella y deseando que el dia siguiente no hubiera mal clima.     

 

 

 

 

                  

 

            

 

   

                      

 

Capítulo 6: 6º Capítulo 8: 8º

 
14442623 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10759 usuarios