Ok prometi que les tareria el cap lo antes posible y creanme que lo hice, al fin aqui!!!! espero que les guste.

Una luz brillo en mis ojos y sentí un peso sobre mi, cuando mi vista se enfoco lo primero que vi fue el rostro de Edward frente al mío, me sonrío y se acerco hasta tocar mis labios en un beso suave,  Edward profundizo el beso pero repentinamente se transformo en algo agresivo, entonces tomo mis muñecas y la apretó hasta ser doloroso, me solté de él pero ya no era Edward, una sensación de pánico se alojo en mi pecho.

- Hola bella-  Jacob me miro con esa mirada desquiciada que le vi el día del juicio, un grito se ahogó en mi garganta y como si de magia se tratara me encontré en una habitación de hospital, tenia la respiración acelerada y me tomo un momento devolverla a la normalidad y calmarme, podía sentir unos fuertes brazos rodeándome y luego de unos segundos sonreí para mi misma, se había quedado, no sin un poco de esfuerzo me di la vuelta. Ahí estaba él, al borde de la pequeña cama, un hilo de saliva escurría por la comisura de su boca completando un cuadro gracioso al que se sumaba su cabello desordenado que termino de tranquilizarme. Una risa se escapo de mi boca, pero enseguida se transformo en un quejido. Me dolía la cabeza, me dolía bastante y el sueño que acababa de tener no me ayudaba mucho.

- Te encuentras bien?- mire a Edward que había abierto los ojos y estaba mirándome preocupado.

- Si, no es nada, tan solo me duele un poco la cabeza- Edward se inclino incluso más casi cayéndose y tomo algo entre sus manos.- que haces?

- Llamo a una enfermera.

- Edward no es necesario.

- Bella déjame ser sobreprotector ¿si?- hizo un puchero, y dios que tierno se veía.

- Así como estas no te es difícil convencerme.

- De que hablas?- lo mire un segundo y aguantando la risa limpie la saliva de su mandíbula con la manta, él se llevo la mano a la boca y se sonrojo.- ¿no te moje o si?- un carcajada salió de mis labios y una puntada de dolor ataco mi sien.

- No, no lo hiciste.- hubo un golpe en la puerta y acto seguido entro una enfermera, Edward comenzó a acariciar mi cabeza y ella lo miro con ternura.

- Hola chicos, me llamo clara, soy la enfermera de turno, ¿que sucede?

- Hola, es que me duele un poco la cabeza, si tuvieras alguna pastilla que pudiera tomar seria estupendo.

- Si, eso esta bien, le diré al doctor Carlisle que despertó, para que venga a verla, y pediré que manden su desayuno, ¿esta bien para usted?

- Si, muchas gracias.- la enfermera se dio la vuelta y se dirigió a la puerta.- y clara- ella me miro- por favor trátame de tu- se rio y salió por la puerta. Me di la vuelta buscando los labios de Edward y deje un beso sobre ellos.- deberías ir a tu casa, has pasado toda la noche aquí.

- Y dejarte sola, ni hablar. Además estoy muy cómodo aquí contigo- extendió su brazo y rodeo mi cintura ocultando su cara en mi cuello- novia mía.- un suspiro salió de mis labios.

- Eres imposible ¿lo sabias?- el guardo silencio- ¿Edward?

- No vuelvas a hacer eso- lo mire extrañada.

- ¿a que te refieres?

- No vuelvas a, prométeme que no volverás a hacer algo como lo de antes de ayer. Escapar e ir al medio de la nada y quedarte allí.- saco su cabeza de su escondite y me miro, tenia los ojos llorosos y casi se me rompe el corazón al verlo.- tienes idea de lo preocupado que estaba, saliste corriendo del restorán sin decir una palabra, desapareciste, luego no podíamos encontrarte, si no hubiera sido que soñé con el claro no te abríamos encontrado- guardó silencio un segundo y tomo una bocanada de aire.- bella si no te hubiéramos encontrado tu, tu no- se detuvo como si no quisiera decir lo que tenia en mente- tenias hipotermia y bastante aguda, te trajimos al hospital y Carlisle comenzó a trabajar contigo de inmediato y aun así… bella casi mueres.

- ¿Qué?- el guardo silencio, como un eco de mi sorpresa, y me dio un pequeño beso. Iba a decir algo pero sonaron unos golpes en la puerta. Carlisle entro y su sonrisa se fue al ver mi rostro.

- Bella, Edward, buenos días- llego a mi lado y deposito un vaso de agua y una pastilla en mi mano- para el dolor de cabeza- se detuvo un momento, yo aun no salía del asombro.- ¿van contarme que les pasa?

- Estaba contándole a bella lo que paso- Edward miro a su padre un poco más repuesto.

- Supongo entonces que ya sabes que tuviste hipotermia.

- Si- Edward se sentó en la cama y me ayudo a enderezarme- pero me dijo que casi muero ¿es eso cierto?- Carlisle suspiro y acerco una silla que se encontraba pegada a la pared.

- Si es cierto- me miro con preocupación, tanta que podía sentirla- siendo verano la verdad no debería haber llegado a hipotermia pero considerando las inusuales bajas temperaturas que ha habido y que estabas en la montaña en medio del bosque estuviste muy expuesta y llegaste a esa gravedad- escuchando a Carlisle pude interiorizar toda la información y sentí un peso sobre mis hombros- la verdad bella es que- miro un segundo a Edward dubitativo- estuviste muerta por cuatro minutos.- contuve el aire y escuche como Edward hacia lo mismo, mi corazón se detuvo por cuatro minutos, sentí una lagrima rodar por mi rostro. Como pude ser tan estúpida, tenia a toda esta gente que se preocupa por mi, mi padre, y desaparezco para luego morir por cuatro minutos. Edward apretó mi cintura y yo pegué mi frente a su mentón, no podía imaginarme muriendo y despidiéndome de ellos. No podía imaginar un lugar en el que pudiera ser feliz si ellos no estaban conmigo.- logramos devolverte el pulso, desde entonces no despertaste hasta la noche.

- ¿mi padre como se encuentra?- no podía pensar si no en lo nervioso que estaría luego de todo lo que le había hecho pasar últimamente.

- Él esta bien, lo mande a dormir a casa tan solo un momento antes de que despertaras, y seguramente ya viene a visitarte- me relaje y lleve la pastilla a mi boca, seguido le di un buen trago al vaso con agua y Edward lo dejo en la mesita junto a la cama. La luz que entraba por la ventana se hizo más intensa, no debían ser más de las ocho de la mañana.- bueno chicos creo que los dejo, tengo más gente que ruega por mi presencia.- nos dedico una sonrisa y se fue. Se hizo un silencio, que no era para nada incomodo, pero que parecía vacío. Se me hizo un nudo en la garganta que tuve que aclarar antes de poder hablar.

- Lo siento- Edward levanto la mirada y sus ojos se fijaron en los míos, al principio parecía un poco confundido pero casi inmediatamente tomó el ritmo de a que me refería.- Edward lo siento tanto- sentí las lagrimas acumularse en mis ojos- de verdad lo siento.

- Bella no tienes que disculparte.

- Si tengo que, los hice preocuparse cuando podría haberlo evitado. No era necesario que fuera en medio del bosque, no debí hacerlo- un lagrima cayo por mi rostro, Edward la limpió y dejo su mano contra mi piel.- casi muero Edward y no imagino una vida sin ustedes- Edward me abrazo, incluso estando tan juntos quería sentirme más cerca de él.- se que nos conocemos desde hace poco más de una semana, y a los chicos, pero esta a sido la mejor semana que he pasado desde que mamá murió, me han hecho tan feliz y no puedo imaginarme perdiéndolos- me estire hasta dejar un beso en sus labios- no puedo imaginar perderte.

- Bella te amo- deposito otro beso en mis labios- parece increíble hasta para mi, pero no había creído en el amor a primera vista hasta que te vi, y no voy a perderte, no te vas a alejar de mi y me asegurare de eso.- me recosté en su pecho y nos quedamos abrazados un buen rato hasta que se escucharon unos golpes en la puerta, seguido entro mi padre.

- Papá- vi como su pecho se agito al soltar su respiración de golpe y una mirada de alivio se instalaba en su rostro.

- Bella, querida- Edward se bajo de la cama y mi padre se acercó de forma cómoda- ¿cariño como estas?

- Estoy bien papá no te preocupes- me abrazó un momento y coloco sus manos alrededor de mi cara.

- Bella no vuelvas a hacerme pasar por algo así- mire un momento a Edward y me concentre nuevamente en mi padre.

- Lo prometo papá, lo siento- una lagrima rodo por mi mejilla- como amaba a mi padre.

- Estaba tan preocupado, no sabes como me sentí cuando no te encontrábamos.- aguante las lagrimas que se formaron en mis ojos. Odio llorar.

- Tranquilo papá estoy bien, perfectamente, siento mucho lo que hice.- tomo mi cabeza entre sus manos y comenzó a dejar besos en mi frente. Un suspiro sonó desde la puerta de la habitación. Alguien golpeo la puerta y los chicos se asomaron por ella.

- Oh! Amo los momentos felices y afectivos- un risa se escapo de mis labios, Alice.- mi padre se aparto y los saludo.

- Hola enana, hola chicos- un unísono y raro “hola” lleno la habitación y comenzaron a abrazarme.- ¿sabes lo que nos hiciste pasar?

- Lo se y lo siento chicos de verdad.

- Esta bien, esta bien, yo te traje algo- Alice me mostro un bolso que traía oculto en su espalda.

- Eso es…

- Si- Alice respondió con un saltito sin dejarme terminar la pregunta.- traje dos  tenidas para que elijas, hoy vuelves con nosotros y debes estar bella- luego miro a Edward he hizo el ademan de olerlo, él la miro como diciendo ¿qué?.- si también traje para ti pero necesitas una ducha- todos reímos un poco mientras Edward la miraba molesto.- muy bien hombres fuera.

- Alice- mi padre trato de hablar pero ella lo interrumpió.

- Charlie te quiero y se que me quieres pero estarás con ella en casa y este es momento de chicas, y lo mismo para ti- dijo apuntando a Edward.

- Bien- mi padre alzo las manos y se acerco a mi- nos vemos en casa bella- dejo un beso en mi frente y se fue. Pronto lo siguieron Jasper y Emmet, Edward fue el ultimo, dejo un ligero beso en mis labios y se despidió con una sonrisa.- muy bien arriba.

hola!!! chicas les gusto?? se que el capitulo no llega a mucho pero tiene que haber un hilo entre todo lo demas, espero que lo que viene les siga gustando y no las decepcione :) nos vemos para el proximo!