Perdon por la tardanza, gracias por su apoyo durante mi larga ausencia y pues les tengo una noticia muy buena y una mala ^^ , mañana les digo cuales son estas, no se preocupen de alguna manera terminare este fic ^^ . y en serio muchas gracias por seguir leyendo, y por dejarme sus comentarios y votos, es lo que me hace regresar aun cuando no duermo por terminarlo XD, un abrazot!
Capitulo IV
Historia de un Arcangel
* Nota: solo para aclarar y que no haya malentendidos ^^, Phoebs y Azrael son la misma persona, su verdadero nombre es Azrael pero para fines prácticos en su convivencia con humanos ella decidió adquirir el nombre de Phoebs ^^
A continuación su historia...
Phoebs POV
Ambos habíamos sido…creados de la misma forma, un simple experimento que en contra de las posibilidades había tenido éxito, dos seres humanos que nacerían como…inmortales, obtuvieron lo mejor de las especies, no había fallas en nuestro proceso, el sol no nos afectaba como a ellos, la única cosa que podría terminarnos al igual que nuestros hermanos vampiros era el fuego, aunque ya quisiera que alguno lo intentara…éramos tres veces más rápidos que cualquiera de ellos. No teníamos nombre como especie…
A mí me gusta pensar que somos lo mejor de ambos mundos, el humano y el del vampiro, imaginen un ser humano que pudiera ser más rápido que cualquier automóvil de fórmula uno, casi tan rápido como un jet, un ser humano tan fuerte como la roca de granito más sólida, más inteligente que cualquier maquina creada por el hombre…eso éramos nosotros, entonces…¿Qué nos diferenciaba de ellos?
Una cosa simple en esencia, nosotros…nacíamos, no éramos convertidos, sangre corría por nuestras venas y nuestros órganos son tan funcionales como el mejor deportista…crecíamos.
¿Cómo es que fuimos creados?, bien, eso es una historia interesante…complicada en toda la expresión de la palabra, no tenemos familia, no hay regla humana que aplique para nosotros, tampoco…vampírica. Nunca existió un progenitor, como con nuestros hermanos humanos, no teníamos familia como tal, fuimos el resultado de décadas de investigación, miles de pruebas y errores por parte de la ciencia, mi cuerpo tal como luce ahora, cabello rojizo, y no bromeo cuando digo rojizo, el color era el de las llamas, nuestros ojos azules tan profundos como el océano y nuestra piel pálida, ese físico, había sido utilizado por la persona que…me dio vida, una chica de veinte años que respondía al nombre de Phoebe, jamás supe sus apellidos, jamás conocí su historia, solo sabía que la chica había estado en el momento y lugar equivocado…otro sacrificio más a favor de la ciencia.
Ellos tomaron algunas de sus células, y algunas de éstas, aquellas que eran funcionales para el propósito fueron modificadas, uniendo el ADN de estos inmortales y al ADN humano de la chica, fue así como nos crearon, no soy su…hija, soy ella misma…una nueva mente en su cuerpo, el resultado de este experimento: una humana nueva y poderosa, una…inmortal. Nací del vientre de una madre que jamás conocí, si es que se le puede denominar así, ellos le denominaban “transporte”. Desde el primer momento que llegue al mundo pude recordar cada detalle, como es que abrí mis ojos mientras los doctores me abrazaban en una manta y me situaban en una habitación térmica, el primer hogar que conocí y quizá el único durante toda mi corta infancia…si es que se le puede llamar infancia.
Michael había “nacido” un año después de estos eventos, hasta ese momento fue cuando recibí un nombre, uno que según nuestros superiores tuviera significado, a él lo nombraron Michael, como el arcángel, aquel que sería el Jefe de los Ejércitos de Dios, el que traería justicia y orden a los nuevos tiempos, a mí en cambio me nombraron Azrael, como el ángel de la muerte, aquel que tiene por misión recibir las almas de los muertos y conducirlas para ser juzgadas. Juntos tal como los libros antiguos describían traeríamos paz y orden a estas tierras, claro…yo no creía en esas…tonterías, éramos simples esclavos de una orden secreta denominada “Salvación” que combinaba su fanatismo con su poder y nos utilizaba como mensajeros de sus “profecías”, nos llamaban Arcangeles.
Aunque nunca pensé lo contrario, yo era una más que creía todas las cosas que nos eran enseñadas, creía fielmente en mi propósito de completar mi misión…todavía lo hago, pero hasta hace poco descubrí que quizá las cosas no eran como nos fueron contadas, que quizá yo no era mejor que todos ellos…
Apenas mis pies habían tocado el suelo a los once meses de edad cuando ya tenía asignado un entrenador personal, nos entrenaban física y mentalmente, conforme los años pasaban las practicas cada vez eran más extenuantes y más…aburridas, a la edad de cinco años yo podía derrotar a cualquier enemigo que se me pusiera en frente, cuando cumplí los siete años mi misión…mi proyecto de vida comenzó
Flashback
Las paredes blancas de la habitación donde vivía la mayoría de mi tiempo estaban iluminadas por los primeros rayos de sol de la mañana, eran las siete de la mañana y yo comenzaba mi rutina diaria, me despertaba en mi cama el único mueble de la habitación e inmediatamente hacia los ejercicios que me eran programados, un par de horas después la puerta de mi habitación se agitó violentamente mientras alguien llamaba mi nombre con fuerza, llegue al marco y tome la perilla, se abrió rápidamente y vi a Michael aun en sus ropas de entrenamiento, su cabello rubio y sus penetrantes ojos azules estaban clavados en mi propia mirada, algo de humedad luchaba por salir de ellos…
— Te llevarán lejos— dijo él tranquilo, todo el peso de sus palabras recayó en mi mente, vi lo que quiso mostrarme, una visión de mi próxima misión
— ¿Vendrás conmigo?— pregunté y el niño agitó su cabeza
— Te veré algún día…lo sé, regresa pronto hermana— dijo él y me abrazó, rápidamente sus brazos me fueron arrebatados, el no luchó más y en un par de segundos ya no estaba frente a mi…estaban mis “superiores”
— Tu vienes con nosotros— dijo uno de ellos mientras me hacía que lo siguiera por los largos pasillos de aquel que llame hogar…y que jamás volvería a serlo
Fin Flashback
...
Mi primera misión fue asignada un par de días después de que salí del instituto, me enseñaron mi objetivo, en unas horas yo ya sabía todo sobre ella, ¿Quién era?, ¿Qué le gustaba?, ¿Qué era su familia?, ¿Qué tan peligrosos podrían ser?...como eliminarlos, básicamente fueron cinco ordenes:
1. Conocer y seguir a Renesme Cullen
2. Generar confianza en el objetivo
3. Conocer todo sobre su familia
4. Llegado el momento, organizar el plan maestro que llevaría su especie a la extinción
5. Y sobre todo…que nadie se enterara de mi verdadera naturaleza.
Hasta ahora ya completaba las primeras tres órdenes , me asignaron a su escuela y gracias a mi poder de prever las cosas provoque que “accidentalmente” chocáramos y pudiéramos establecer comunicación, había funcionado, desde ese momento ella se convirtió en mi único contacto con el mundo humano, no vivía para nada que no fuese ser su “confidente”, con los años fui logrando que ella pudiera contarme varias costumbres de su familia, me tomo mucho esfuerzo el esconder mis objetivos hacia ella, jamás conté con su nivel de percepción, ni tampoco con su…amistad sincera, conforme los años pasaban el trabajo ya no era…trabajo, de repente ya no era solo mi objetivo ella era mi amiga, y la única que tenía, me enseño cosas que ni siquiera los mejores profesores del instituto hicieron, algo para lo que nadie me había preparado, sentimientos… ya no era tan fácil cumplir mi misión…
— ¿Qué diablos haces aquí Michael?— pensé sabiendo que me escucharía, su penetrante mirada me trajo de vuelta a la realidad…saliendo de mis recuerdos
— ¿Es que no te alegra mi presencia hermana?— dijo el en voz alta y acabo tumbándose en el sillón más cercano, levantó sus pies y los recargo en la mesa de centro— ¿un poco de oxigeno?— preguntó mientras sacaba una cajetilla de su abrigo de piel negro, tome uno de mala gana y lo puse sobre mis labios, lo observe esperando que notara su falta de caballerosidad— oh!, que grosero de mi parte, permíteme…— dijo él y sus ojos se concentraron en mi boca, un milisegundo después el cigarrillo ardía, pude notar el cambio repentino en el color de sus ojos, un color rojo fuego coloreó su iris, al igual que pasaba cada vez que usaba su nuevo poder
— Michael, ¿Cómo supiste donde…?—pregunté mientras dejaba escapar una bocanada de humo que formó estructuras caprichosas en el aire mientras se desintegraba, me perdí observando estas formas mientras esperaba su respuesta
— Sabes que ellos jamás te dejarán ser libre, no eres como los humanos Azrael, regresa conmigo hermana—dijo el mientras la columna de humo aumentaba, sus ojos azules brillaban con cada bocanada y aunque una sonrisa de satisfacción cruzaba su rostro, yo sabía la razón por que su mirada era tan oscura…tan vacía
— No voy a regresar Michael…y no olvido mi situación, la libertad es demasiado preciada para soñarla incluso— le dije mientras apagaba el cigarrillo y me levantaba del sillón dirigiéndome hacia la ventana dándole la espalda a mi…hermano
— ¿y crees que yo lo hago por placer?— respondió el casi enojado, en un segundo estaba a mi lado observando la ventana con su mirada perdida en sus pensamientos— te encontraran tarde o temprano, ¿Crees que porque no te han visitado en años eres libre?— dijo el claramente irritado
— Eso lo sé…por eso estas aquí— le dije y supe que parte de su orgullo había sido lastimado, a diferencia de mí, él no había pasado tiempo con otros humanos, era un vigilante, una persona que creía firmemente en la única cosa que le habían impreso en su mente…era el salvador, y sabía que lo mandaban para que yo regresará…yo podría sentirme libre pero jamás lo sería, ¿Cómo lograban mantenerme vigilada y en control si era cien veces más fuerte que ellos?...la respuesta era simple, nosotros teníamos un dispositivo dentro de nuestro cuerpo, uno que respondía según lo que ellos dictarán, sabíamos que en caso de que su “experimento” no saliera como ellos quisieran…bueno al menos ellos tenían la manera de detenernos, si ellos lo activarán en cualquier segundo nuestra mente se desconectaría de nuestro cuerpo, seriamos tan fuertes como las rocas pero…estaríamos tan vivos como ellas, pasé mi mano por mi brazo sintiendo la textura extraña que hacia el dispositivo dentro de mi piel, deseaba arrancarme el brazo en ocasiones si eso significara mi libertad…aunque sabía que eso no era posible, en el momento en el que siquiera lo intentará…yo moriría, no éramos tan inmortales después de todo…
— ¿Sabes que no me hieren tus palabras?— dijo él riéndose— yo no fui el que abandono a su único amigo alguna vez— pensó él, me giré hacia él sin nada que decir por primera vez… quise poner mi mano sobre su hombro, quise abrazarlo y decirle que se quedara conmigo…que podríamos intentar ser diferentes…no lo hice
— Bien…¿Qué quieren ellos ahora?— pregunté girándome de nuevo hacia la ventana
— Quieren que compruebe…tu lealtad, ¿recuerdas quienes son los malos aquí?— dijo el sonriendo
— Siempre está en mi mente…— le respondí
— Entonces ¿porque no has avanzado?, tu último reporte fue hace meses y no dejan de quejarse por tu desarrollo tan…mediocre— dijo él casi serio — ¿es que acaso tienes miedo?— sonrió
— Yo no le temo a nada— respondí rápidamente…casi como un impulso, hubo un gran silencio hasta que su carcajada lo termino
— ¿estas lista para terminarla?, ¿estas segura que cuando llegue el momento tu no…dudaras?— dijo él riendo, burlándose de mí
— Yo…haré lo correcto, no tienen nada de qué preocuparse Michael— le dije
— ¿Sabes que ella es el enemigo no es cierto?, ¿Que el mundo estará mejor sin ellos?— dijo él serio frente a mí, no pude sostener su mirada y me gire un poco
— No…no dudaré— le dije y le di la espalda— supongo que hemos terminado aquí, ¿hay algo que necesites saber?— dije tomando mi chaqueta del asiento del sillón
— Supongo…que es todo— dijo él
— Bien, me alegró tu visita pero tengo…cosas que hacer— le dije y saque las llaves señalando la puerta, él se movió lentamente casi sin ganas entendiendo mi punto
— Mantén tu mente abierta, pronto estaré de regreso, siento…que te he descuidado hermanita, ten cuidado…con lo que haces, ellos están a punto de tomar una decisión— dijo él mientras salía por la puerta
— Y supongo que la próxima vez que te vea será una clara señal de eso…— le dije molesta
— No te molestes conmigo, yo solo soy el mensajero ¿recuerdas?— dijo él sonriendo y un segundo después desapareció de mi vista
— Maldición… — suspiré cerrando la puerta tras de mí, el regreso de Michael era una clara señal de que jamás podría escapar a mi destino… y eso realmente era una patada en el…
Entonces, mi teléfono sonó interrumpiendo mi pensamiento, sonreí
— ¿Qué hay chica del cumpleaños? —pregunté
— ¿tienes planes para esta tarde?— preguntó Renesme
— ¿Qué me ofreces?
— ¿A parte de mi dulce compañía?— dijo ella sonriendo
— Definitivamente tienes que aprender a sobornar a la gente Ness— le dije
— Vamos…es mi cumpleaños, quiero que conozcas a alguien…
— ¿un chico?
— Si, bueno…es mi familiar o algo como eso, ¿Qué dices?— preguntó ella, recordé los historiales donde no refería que ella tuviese familiares jóvenes, ¿Quién era y porque estaba ahí?, necesitaba investigar…
— Bien, tu ganas, en una hora en el café que me gusta— le dije
— Genial...¿porque no pasas a casa y nos llevamos el auto de mi hermano?
— No lo creo, Adiós Nessie — dije mientras colgaba, jamás podría permitirme estar cerca de su familia, desde que éramos pequeñas jamás estuve a menos de un kilómetro de su hogar y no empezaría ahora, no sabía que tan intuitiva su familia podría ser, y lo mejor era no arriesgarse, la misión estaba en juego…y mi vida también
— Bien…necesito un auto, ¿azul?, si definitivamente azul será— me dije a mi misma y me dirigí a la carretera donde tomaría mi “carruaje” prestado…
Continuará
Les presento a Michael y Azrael, espero les gusten estos personajes yo ya comence a encariñarme con ellos, ^^ un abrazote y solo recuerden que lo de arcangel es solo un nombre, no es que ellos sean angeles reales ^^
Espero sus comentarios o votos ^^
Saludos ^^
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