Capitulo 1. Charlie
Mientras pensaba sacudí mi cabeza tratando de ahuyentar los pensamientos, y seguir adelante, pasaban de las diez de la noche, una vez que tome la decisión de hacer bien las cosas, él aceptar la demanda de Edward, decidí que lo primero que tendría que hacer seria hablar con Charlie, una tarea peligrosa sin duda, pero aquí estábamos, la patrulla de Charlie estaba estacionada frente a la casa, las luces de la sala estaban encendidas, Charlie estaba en casa viendo algún canal de deportes y no esperaría las noticias que le llevaríamos...
— ¿estas segura Bella? — pregunto Edward, mientras sus ojos me penetraban con infinita ternura, entonces sentí el frio pero suave tacto de sus dedos en mi mejilla— estas temblando, ¿sabes? , una palabra tuya podría cambiar esto, mis demandas ya no son...un requisito - dijo esto mientras se acercaba peligrosamente a mis labios, yo sabía lo que pasaría si llegábamos a unirlos, mandaría todo por la borda, lo que quería estaba frente a mí, y sin duda el contacto de sus labios con los míos nublaría mi juicio
— Espera— dije poniendo mi mano relativamente caliente en su pecho deteniéndolo, mi respiración mas entrecortada de lo que hubiera deseado, pero esa era la reacción normal ante Edward, cuando levante la mirada observe que él levantaba una de sus cejas sorprendido— si sigues así, temo que podría cambiar de opinión, y no es lo que deseo— le dije y acorte el espacio que nos separaba para darle un suave y rápido beso en los labios, entonces me separe y abrí la puerta.
Claro que cuando me gire el estaba ya de frente sosteniendo la puerta y brindándome su mano para salir del coche, una sonrisa asomo por sus labios, y entonces tome su mano, el anillo, mi anillo, se apoyaba entre nuestras manos, casi podía sentirlo como una entidad propia, como un hechizo que incluso desde ahora nos unía.
Cuando entramos, él estrecho mi mano y me brindo una sonrisa, capaz de nublar mis pensamientos, pero la voz de Charlie al interior me despertó de mi ensimismamiento
— Bells, ¿eres tú?, tienes que ver... Oh Edward— dijo mi padre con sutileza mientras observaba a mi prometido, le lanzo una mirada de pocos amigos reparando en nuestras manos unidas, paso su mano por la pistola que llevaba aun, después se la quitó, y la puso en el recibidor junto a sus llaves— ¿qué hay chicos, como ha estado la tarde?— pregunto mientras se dirigía a la sala, invitándonos a seguirlo, sin acidez en sus palabras, solo como...Charlie.
— todo perfecto, Señor, ha sido una excelente velada, los bosques en estos días son un espectáculo para ver—respondió Edward al observar que no podían salir palabras de mi boca, no aun, mi padre asintió con la cabeza permitiéndose toda la amabilidad que le era posible. Nos sentamos en la pequeña sala, el televisor estaba encendido en un volumen aceptable, facilitando la charla, hubiera deseado que el volumen fuera más alto...
— Charlie, Bella y yo quisiéramos charlar contigo, bueno yo quisiera hacerlo primero si me lo permites ¿Bella?— pregunto Edward a lo que respondí con un ligero asentimiento con la cabeza y una ceja levantada, esta parte no la había planeado— a solas, si no hay problema Bella — entonces me tensé, Edward y mi padre en la sala solos, un policía y un vampiro, charlando sobre mi futuro... nuestro futuro... Asentí más fuerte y me levante, me dirigí a la cocina por un vaso de agua, solo por tener algo que hacer, aunque me quede lo bastante cerca para escuchar sus palabras.
— Bien, Charlie, no estoy seguro de varias cosas en mi vida, probablemente solo soy un adolescente para ti, pero quiero que entiendas algo, se de algo que estoy muy seguro , nunca en toda mi existencia había amado de la manera en la que amo a tu hija, ella es mi...eternidad, no me veo sin ella, y puedo asegurarte que mientras ella este a mi lado jamás, jamás necesitara nada, la protegeré con mi vida si es necesario, incluso si ella descubriera que no me amara algún día de la manera en que lo hace dejaría a su elección una vida en la que ella fuese feliz,...lo que quiero decir es, bueno... quiero pedir su mano, Charlie, y quisiera que lo aprobaras... —después de unos minutos de silencio en los que no sabía si sentir que mi pecho se llenaba de esa calidez que Edward provocaba en mí, o de preocupación porque a Charlie le hubiera dado un ataque de pánico...
— mira muchacho...Edward, veras...ella es mi pequeña, ¿lo entiendes?— dijo Charlie incomodo— yo entiendo... trato de hacerlo, pero es difícil, aunque supongo que no hay vuelta atrás... ¿cierto?
— así es señor, me temo que Bella ya me ha dado una respuesta — dijo Edward animado, escuche como mi padre se dejaba caer en el sillón y respiraba algo agitado
— en ese caso... mira se que Bella tiene suerte de tenerte y tu mucho mas por tenerla a ella... en fin yo...bienvenido a la familia Swan, será difícil, pero...probablemente sea lo mejor... cuídala Edward, es lo más valioso que tengo— dijo mi padre después de unos minutos
— lo hare señ..Charlie— corrigió Edward
— solo no me digas papa, ¿te parece?, no estoy preparado para eso aun — dijo Charlie mas entusiasmado, bueno al menos ya había salido de su fase de Zombi, fue en ese momento cuando me percate que había sostenido la respiración por varios minutos, tomé una bocanada de aire y entonces escuche la voz de Charlie— Vamos Bella, sé que estas escuchando todo esto, menuda sorpresa me han dado— dijo él y entonces mis mejillas adquirieron un color carmín, y con pasos algo accidentados llegue hacia donde estaban— podrías haberme dado alguna señal Bells, solo díganme que no seré abuelo...— dijo él adquiriendo una cara que hacia lucir más viejo, preocupado, mis mejillas alcanzaron el máximo de rubor y entonces solo alcance a negar rápidamente con la cabeza
— no, no, Edward...yo...nosotros no— dije de manera desorganizada y completamente avergonzada , entonces le dirigí una mirada a Edward para que me ayudara
— Charlie, soy de la vieja escuela, hago esto porque así lo deseo, no porque me vea obligado a hacerlo, respeto a Bella, y por eso quiero hacerlo bien...deseamos hacerlo bien— dijo Edward, mi padre exhalo un enorme suspiro y finalmente sus brazos se relajaron en el sillón
— bien pues no piensen en convertirme en uno pronto...por su propia seguridad - dijo el casi sonriendo
— oh...y Charlie, nosotros comunicaremos a Reneé la noticia, quisimos decirte a ti primero
— claro que ustedes le dirán, ni por el dinero del mundo yo lo haría, ¡suerte con eso!—dijo el relajado y volviendo a situar su vista en el televisor.
— me retiro entonces — dijo Edward , mi padre asintió y se despidió con la cabeza mientras Edward se levantaba, bien...había terminado, la noticia estaba dada, Edward estaba intacto y mi padre había regresado a su estado habitual , ¿eso era todo?, ¿no habría gritos ni reclamaciones?... agite mi cabeza y regrese al tiempo presente, Edward se levantó y lo acompañe hasta la puerta
— te espero arriba— me dijo mientras se acercaba a besarme— ¿Ves?, no fue tan difícil
— quitando la parte en la que casi quiero desaparecer de la vergüenza, ha salido...bien—le dije y cerré la puerta mientras él me dirigía una de sus sonrisas tranquilizadoras
Me encamine hacia mi recamara y desea buenas noches a Charlie esperando que los gritos vinieran ahora que Edward no estaba...mismos que nunca llegaron, decidí no poner a prueba mi suerte y me dirigí a mi recamara sin detenerme, cerré la puerta a mis espaldas y me recargue en ella, por supuesto Edward ya me esperaba recargado en la pared, su hermoso rostro iluminado por la luz de la luna que acentuaba su sonrisa
— te preocupas demasiado, Alice ha llamado— dijo él mientras se acercaba, tomo mis manos y las recargo en su mejilla...¿Alice, visión, llamado?— tranquila, no son malas noticias—dijo el como si pudiera leer mi mente , me llevo hacia el borde de la cama que ya estaba acomodada para recibirme
— ¿que..?— iba a preguntar apenas cuando él me pasó mi teléfono
— Reneé, Charlie no le ha dicho nada, pero le dijo que quizá sería bueno platicar contigo...— dijo él, levanté un ceja , en ese momento el teléfono comenzó a sonar...Alice, nunca se equivocaba, contesté rápidamente
La percepción de mi madre podría llegar a niveles incomprendidos, nunca había sido tan directa, apenas me había preguntado por mi salud cuando ya estaba preguntando como estaban las cosas con Edward, estaba preparada para las reclamaciones, los intentos de cambiar de idea, e incluso del rechazo de mi madre, pero nada de eso pasó, al igual que Charlie todo fue...tranquilo, después de una conversación de veinte minutos en los que Edward solo me observaba y pasaba su mano por mi cabello, mi madre dijo una cosa que me tranquilizo
— Bella, no tienes porque avergonzarte, los demás pueden pensar lo que quieran, tu eres la que toma las decisiones, y creo que...por alguna razón ajena a mis caprichos, eres lo suficientemente madura como para tomarla, y lo has hecho, creo que todo va a ir bien con Edward, él... te adora, solo basta ver la forma en que te mira, como te habla, la verdad es que no estoy tan sorprendida...
— Pero…
— ¿le amas? —pregunto ella interrumpiéndome
— Total e irrevocablemente, pero…
— Confía en tu instinto Bella, haz lo que creas correcto, ¿tienes alguna duda?
— No lo sé, es solo que esperaba que te molestaras, alguno de los dos … pero ni siquiera un grito he escuchado, estoy algo sorprendida, supongo
— ¿Así que Charlie no se ha molestado? — dijo sorprendida, aunque antes de que pudiera contestarle ella habló— ¿sabes? Creo que hay algo que hemos hecho bien tu padre y yo juntos …tú
— Reneé…— me queje avergonzada en ese momento escuche por la bocina como Phill llamaba a mi madre solicitando su ayuda
— Lo siento, tengo que irme , Phil ha quemado la cena una vez más, tengo que intervenir o quemara la casa, pero llámame pronto, quiero conocer a la madre de Edward, tal vez este igual de emocionada, oh! Hay tanto por hacer…— dijo mi madre entre emocionada y preocupada por el estado de la casa, me gire hacia Edward y sonrió al escuchar la emoción de Reneé al evento , le di un pequeño golpe con el codo…esperando que no me resultara un morete por la acción
— Claro, Esme estaría encantada de conocerte , nos vemos cuídate…te quie
— Te quiero Bella— termino mi frase y yo sonreí
— Lo sé, yo también— le dije y colgué la bocina
Edward aun recostado a mi lado hojeaba una revista sobre bodas que Alice había llevado unas horas antes, quería que ayudara en la selección de colores… aunque claro que no acepto ninguna de mis sugerencias, por ultimo decidió un tema que me pareció…aceptable, además su frase “¿Cuánto me quieres Bella?” que se traducía como un “cuanto estas dispuesta a oponerte a la decisión de un vampiro traumatizado con las celebraciones”, en fin como negársele, ella sabía lo que hacía, o al menos lo disimulaba bastante bien, una vez que tomó la decisión cerro la revista en mis narices y desapareció del lugar, mi presencia en la organización podría alterar el desarrollo de la fiesta… o al menos algo parecido dijo ella. Edward levanto su mirada cuando me acerque y levantó la revista frente a mí, en la pagina se observaba un diseño en rosa…no cualquier rosa, eran cientos de tonalidades rosáceas, cada una más irritante que la otra, y la modelo en la pagina se observaba como si en realidad fuese el día mas feliz de su vida, aunque por supuesto con esos colores probablemente a mi me ocasionaría un infarto, cuando mis ojos se conectaron con los de Edward, una mirada de irritación se cruzo por mis facciones, el sonrió…lo disfrutaba
— ¿Estás segura de esto? —dijo el sosteniendo frente a mí a la imagen “rosa”, yo levanté mi mano y la arranque de sus manos, inmediatamente la lance hacia atrás
— Estoy segura de esto— dije mientras me acurrucaba en sus brazos— del rosa…puedo prescindir — entonces me acerque a su boca y comencé a besarlo, mis manos inmediatamente se fueron hacia su espalda y la recorrieron, sus manos se sujetaron a mi cintura aferrándome, atrayéndome más hacia él, un ligero ruido algo accidentado salió de su garganta, mismo que provoco que sintiera que la temperatura del cuarto se había elevado por lo menos un par de grados, mis manos se permitieron continuar explorando su torso, cuando sentí sus fríos dedos chocando con la piel que cubría mi columna vertebral, mientras sus labios se ocupaban de mi cuello…en estas circunstancias no se me permitía pensar en otra cosa que no fuera Edward, pero sabía que había algo que no estaba bien, aunque pedirle que parara era lo correcto la nueva determinación de Edward en dejarse llevar ponía las cosas en mi contra… los papeles se habían revertido, claro, no es que no quisiera…pero no era lo que él en realidad deseaba… o al menos eso era antes
— Es..pe-era— le dije entrecortadamente mientras él estaba ocupado con mi clavícula, sentí como su frio aliento chocaba contra mi piel y escuche su delicada sonrisa, entonces siguió su camino por mi cuello hasta que finalmente estuvo frente a mí, al ver sus ojos, recordé aquella orden que mi yo interna…pero muy interna me repetía a mí misma “no es lo correcto, su alma...es importante para él , Bella”, esa orden parecía tan lejana, entonces reaccione, sujete sus manos e hice que soltara mi cintura, por supuesto él no se opuso , le abrace con fuerza y no pude reprimir un suspiro y un escalofrió al chocar contra su torso desnudo, se había quitado la camisa y ni siquiera lo había percibido hasta ahora…
— Lo siento— dijo el delineando mi mejilla con sus dedos— mira ahora quien tiene que controlarse… dame un segundo— dijo él y se soltó del abrazo, se giro y desapareció por un par de segundos, tal vez menos, tenía una frazada en sus manos, regreso a la cama y la acomodó en su pecho, levantó su mirada y abrió los brazos para recibirme— así esta mejor— dijo cuando me acurruque en sus brazos una vez más, tenía razón, el frio ya no era un problema, acomode mi cabeza en su hombro y el me paso un brazo por los hombros
— mi autocontrol es mayor a lo esperado… — dije suspirando, sin darme cuenta mis parpados comenzaron a cerrarse, el solo sonrió y se acercó a besar mi cabeza
— Descansa ahora mi Bella— dijo él despegando sus labios de mi piel, y fue lo último que recordé de ese, que parecía interminable, día…
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