Resignada conteste la llamada, no tenia caso no hacerlo

-Hola –le dije
-¿Cómo esta la chica mas linda del planeta? –Automáticamente me sonroje
-Bien y ¿Tu como estas?
-Viendo lo que más quiero en este mundo -¿Qué? Pensé frunciendo el ceño –Te ves adorable cuando te enojas Bella

Inmediatamente voltee en todas direcciones hasta que lo vi, estaba de pie en una esquina con una sonrisa espectacular, hermoso hasta lo imposible y él me observaba a mí, le sonreí  casi como si fuese un reflejo, perdiéndome en todas las sensaciones que desencadenaba mi cuerpo cuando estaba a mi lado, esa sensación de seguridad, de confianza era lo máximo. Cerró el celular y empezó a caminar en mi dirección

-Pensé que estabas ocupado –le dije cuando estuvo a una distancia a la que me pudiera escuchar.
-Afortunadamente termine lo que tenia que hacer en la universidad y bueno yo también tenia que venir a comprar mis materiales de estudio –dijo depositando un suave beso en mis labios mientras me abrazaba con pasión
-No será mas bien que me estas persiguiendo Edward –dije en son de broma mientras posaba mis brazos alrededor de su cuello y lo besaba nuevamente
-O eres tú la que me atrae hacia ti como si fueras un imán –dijo prácticamente contra mis labios y seguimos besándonos

Todo estaba tal y como debía ser, me enfoque en eso, sacando lo demás de mi mente, era mejor no pensar porque estaba totalmente segura que no podía ocultarle nada a Edward

-¿Tienes hambre?
-Eh… Si un poco –Mire la hora en mi celular y ya era mas de medio día
-Ok, almorcemos aquí, ¿Te parece? –Me pregunto
-Lo que tu digas –Dije mientras le daba un pequeño beso

Edward me tomo de la mano y caminamos juntos hasta el restaurante tan común para mi, entramos el sitio no estaba tan lleno, fuimos a una mesa al fondo donde nos sentamos, llego la mesonera que nos entrego los menús, yo veía detenidamente el mío para ver que me provocaba comer, la mesonera regreso para tomar nota de nuestra orden, Edward fue quien hablo

-Si señorita, yo quiero el plato especial del día y para mi hermosa novia una hamburguesa de pollo con papas fritas –dijo a la vez que me miraba intensamente y esperaba a que le confirmara que era lo que iba a comer, era sumamente abrumador cuando Edward hacia este tipo de cosas, definitivamente él era mi todo, lo amaba hasta las ultima célula de mi cuerpo, yo no pude responder nada solo me sumergí en su mirada y en el contacto de sus manos con las mías.
-Para tomar… -Dijo la mesonera
-Un par de coca colas –Dijo mi novio y la mesonera se retiro

Seguía observándolo, adoraba a Edward, en mi pecho se hinchaba mi corazón del amor rebosante que tenia, definitivamente él lo era todo en mi vida.

-Gracias –le dije
-¿Por que? –pregunto confundido
-Por todo, por estar en mi vida, por ser tú –le dije con una media sonrisa a la vez que me mordía el labio inferior y sentía como me sonrojaba, Edward se acerco hasta mí y me beso con intensidad

Comimos con calma, disfrutando del momento, yo tenía una enorme sonrisa prácticamente tallada en mi rostro, en serio ya no le daba importancia a Jacob, de hecho no entendía que hacia pensando en él, era totalmente absurdo, para que pensar en aquello que te ha hecho daño cuando ya tienes en tu vida a la persona que te hace bien, en ese instante tome una decisión, no iba a leer los correos electrónicos, no tenia sentido hacerlo, lo mejor era dejarlo en el pasado y para eso debía tener cero contacto con él y así lo haría, además este semestre era súper importante, me dedicaría a mis clases y a mi novio, nada mas importaba.

Terminamos de comer y Edward pago la cuenta, salimos y paseamos un rato por el puerto, no teníamos mucho que hacer en la universidad y debíamos aprovechar en tiempo que aun teníamos libres, cuando empezaran las clases tendríamos que vernos menos, al final de la tarde nos devolvimos, yo iba en mi auto y Edward me seguía en el suyo; llegamos al estacionamiento de mi universidad, Edward estaciono a mi lado, tome mis cosas del auto, baje y le coloque la alarma, me sorprendió mucho que Edward hiciera lo mismo, me acerque hasta él y lo abrace mirándolo al rostro, era tan hermoso y sus ojos azules eran lo máximo

-¿Te quieres quedar esta noche? –le pregunte dándole un dulce beso en los labios.
-Esa es la idea –dijo contra mis labios mientras profundizaba el beso

Cuando nos separamos no pude evitar reírme, me reí porque estaba nerviosa, a pesar de que llevábamos ya casi tres meses saliendo y lo conocía desde hace años y nuestra relación era seria; Edward y yo no habíamos estado juntos, él me dijo que quería esperar a que nuestra relación madurara y jamás me ha presionado al respecto, esto a mi me pareció lo mejor porque cuando empecé a salir con él recién había terminado con Jacob de una forma bastante dramática, ciertamente no dudaba de Edward pero era mejor darle tiempo al tiempo; mientras estuvimos en su casa de campo en las vacaciones siempre dormimos cada uno en su habitación, las veces que me quede dormida en sus brazos él me llevaba hasta mi habitación, así que esta seria oficialmente la primera noche que dormiríamos en la misma cama desde que empezamos a salir, ¿Era que Edward esperaba algo mas de esta noche? ¿O seria como siempre?, ¿Simplemente dormiríamos juntos como cuando éramos solo amigos?, en serio todo esto me puso sumamente nerviosa, mi novio me tomo de la mano y caminamos juntos hasta mi habitación.

Saque las llaves de mi bolso, abrí la puerta y entramos, encendí la luz y camine hasta la mesa para dejar allí mis cosas, Edward se sentó en mi cama, yo agradecí para mi fuero interno que mi compañera de cuarto no fuese llegado aun, por la hora que era esperaba que no llegara al menos esta noche, me di la vuelta y él estaba observándome, me veía de una manera tan diferente, me veía con deseo, esto claro me hizo ruborizar bajando la mirada automáticamente, Edward se rió sonoramente se levanto de la cama y camino hasta mí, tomo mi rostro entre sus manos y lo alzo para que lo viera a la cara, su rostro me decía tantas cosas, mi corazón latía rápidamente, mi respiración ya se hacia irregular, y el contacto de su piel me estremecía; me beso dulcemente y me perdí por completo en ese beso, al terminarlo Edward me abrazo con fuerza yo me apreté contra él, necesitaba sentirlo cerca de mi, saber de verdad que estaba a mi lado y que esto no era solo un sueño, un maravilloso sueño

-¿Qué tienes Bella? –Me pregunto
-Nada –Mentí, estaba súper nerviosa
-Ok, si no tienes nada, entonces ¿Por qué estas tan nerviosa Bella?
-No es nada –dije, no tenia mas nada que decir, puedes decir la verdad me dijo mi vocecita interior, torcí el gesto.
-Cálmate Bella, no pasa nada y no va a pasar nada que tu no quieras que pase –Me dijo y yo quede en shock, eso quería decir que él ya estaba esperando que estuviéramos juntos y me decía que ahora dependía de mí, que pasaría cuando yo quisiera

Pero Edward no me dio la oportunidad de decir nada porque empezó a besarme con dulzura, acariciando mi rostro, se separo para verme y esta vez fui yo quien busco sus labios, besándolo con intensidad, mis manos deseosas se aferraban a su cabello atrayéndolo mas a mi, Edward tenia sus manos en mi cintura, en mis caderas, en mi espalda, sus manos recorrían todo mi cuerpo, me separe de sus labios para poder respirar pero él no separo sus labios de mi piel, como pude lo lleve hasta mi cama indicándole que se acostara y así lo hizo, yo me monte en la cama también pero estaba encima de él.

Él empezó a besar mi cuello, me sentía mejor que bien, seguimos besándonos, yo empecé a quitarle la camisa y él también estaba quitándome la mía, ambos jadeábamos… Pero después de todo este tiempo que habíamos esperado, ¿Así iba a ser mi primera vez con Edward? ¿Era en realidad esto lo que yo quería? ¡Si! decía mi parte menos noble, ¡Oh vamos que sea la segunda vez especial! pensaba, pero no, algo me decía que esto no estaba bien, tenia muchas cosas primero que aclarar, algo no terminaba de encajar en la situación, entonces resignada pose mi rostro sobre su pecho, ambos tratábamos de controlar la respiración

-¿Qué? –Pregunto
-Esto… Esto no debería ser así Edward –Dije entrecortadamente por los jadeos, él me abrazo y me beso en el cabello
-Será como tu quieras que sea Bella, eres lo único que me importa, te quiero –me sumergí por completo en esas palabras, rodé para acostarme en la cama a su lado, lo abrace y él me abrazo a mi, respire profundamente feliz, llenando mis pulmones de su dulce aroma, con una sonrisa en mis labios
-Gracias –le dije –Yo también te quiero
-Cuando quieras –Respondió, con una sonrisa en sus labios, me alce para darle un beso
-Buenas noches –le dije
-Que duermas bien –dijo mientras me acariciaba el rostro, cerré los ojos y allí me quede, durmiendo en sus brazos…

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GUAO debo decirles GRACIAS, MIL GRACIAS por su apoyo constante por haber leído ASI EMPEZO y por seguir su continuación, son lo maximo de verdad gracias

Bueno me disculpan la demora pero entre que la pagina tenia fallos y lo super ocupada que estoy ahora en la oficina me tarde un poco en actualizar, pero finalmente les deje el capi, espero que les haya gustado y como siempre me dejen sus coments y votos XD

Saludos

Kroana =D