EDWARD POV

Teníamos una real y verdadera fiesta en casa. Habíamos empezado normalmente, con un vaso cada uno, como solían hacerlo los humanos… por lo que yo había visto. Bella, luego del primer sorbo de whisky y poner la cara más graciosa que haya visto, opto por acompañarnos con cerveza. Daba lo mismo, yo la convencería de probar algo más después…

De alguna forma que no podía recordar, habíamos terminado cada uno con una botella.

Yo tenía la de whisky, Alice hacia lo suyo con la de tequila, Jasper el con la de Coñac, Rosalie con la de Gin y Esme y Carlisle se habían inclinado por la vodka. Y de algún modo extraño, Emmett también tenía una botella de whisky… que había sacado de quien sabe dónde, y además a nadie parecía importarle.

Me llevaba un buen rato mirando a Bella y a pesar de no haber bebido casi nada, era evidente que el alcohol ya la estaba haciendo efecto. Mi lado perverso rio por dentro.

Se reía deliciosamente y hablaba mucho más de lo que recordaba… pero se veía divina. Había un leve rubor y un brillo peculiar en su mirada… y lo que era mejor… se atrevía a tocarme.

Al principio pensé que eran solo ideas mías, pero no. Primero comenzó con mi rodilla, presionando levemente y causando estragos en mi cuerpo. Luego subió… tan lento que nadie se percato. A estas alturas su mano se encontraba peligrosamente cerca de mi entrepierna, haciendo que mis manos temblaran como una hoja, pero lo extraño del asunto es que… me agradaba y no pensaba hacer nada por detenerla, como otras veces. Al contrario, ardía en deseos de que su mano subiera un poco más.

No sentía atisbo alguno del temor que siempre me inundaba con la cercanía de Bella, era extraño, pero me sentía bien… seguro. Y también feliz.

Era evidente que toda esta reacción la estaba causando el bendito liquido que bebía… en realidad era lo más extraño que había hecho y a este punto no sabía cómo me había dejado convencer. Es verdad que podía tragarlo, pero no tenía sabor a nada para mí, excepto la sensación ardiente que quedaba al beberlo… era como beber agua… pero yo ni eso necesitaba. Todos estábamos de acuerdo en eso y Carlisle decía que nos serviría para parecer más humanos si podíamos llegar a soportarlo bien. Probablemente habíamos perdido del todo el sentido del gusto después de nuestra transformación, a excepción obvia de la sangre… el resto simplemente no nos sabia a nada. Y estaba por pensar que tampoco nos causaba nada, pero todos reían…demasiado. Nunca había tanta risa en casa. Eso si era definitivamente extraño.

Creo que están un poco mareados – dijo Bella, de pronto

- ¡Qué va!- rio Alice

- Yo no siento nada… estoy igual – decía Rosalie, pero la amplia sonrisa en su cara la delataba.

- ¡No me lo creo, Rosalie sonríe! – lanzo Jasper

- ¡Cállate soldadito de plomo! – le respondió Rosalie

- ¡Ja! Soldadito de plomo… - rio Emmett

- De que te ríes tu, cerdo – gruño Jasper, tocado en su amor propio.

- ¡Oink, oink! – chillo Alice, imitando a un cerdito.

- ¡Hey tu, no te metas… enana compulsiva! –

- ¡Como que enana! – bufo Alice

- Compulsiva… - reí yo, entre dientes

- Oí eso reprimido – lanzo Alice

- ¿¡Que! – resople espantado

- No es reprimido, es virgen – aclaro Emmett

- Gracias hermano por la aclaración – gruñí

- Quizás ese no es el problema… puede ser impotente - lanzo Rosalie, como granada de mano.

Bella quedo pasmada… y yo quede perplejo. Pronto sentí como la furia me subía por el pecho.

- ¡Impotente! – lance, casi gritando – ¿Que sabes tú…? – pero me frene. De todas formas no tenia como demostrar lo contario.

- ¡Preguntémosle a Bella! – grito Jasper

- ¡Genial! – bufe, furioso

Bella me miro algo divertida, y no se veía molesta…

- Rosalie, no necesito demostrar nada, pero te aseguro que Edward no es impotente… lo sé – dijo mirándome y cerrándome coquetamente un ojo – existen otras formas de divertirse además de solo "hacerlo" – termino, solemne.

Yo la quede mirando asombrado. Ni siquiera se había sonrojado… pero me intrigaba lo que había dicho sobre esas "otras formas de divertirse" que se podrían hacer… ¿quizás podría mostrarme? Un momento, eso no lo pensé yo… ¿o sí? la volví a mirar y seguía sonriendo, sin un ápice de vergüenza… "¿Quién eres y que hiciste con mi Bella?" pensé.

Rosalie quedo muda y Emmett se comenzó a reír tanto, que se cayó del sillón de la risa.

- ¡Así se habla hermanita! – grito Emmett

- Quien lo diría… Ed no es tan tonto… dijo Jasper riendo

- ¡Vaya!- Exclamo Carlisle, quien se encontraba inusualmente silencioso

- ¡Oh Edward! – lanzo Alice, emocionada – no te conocía esa faceta…

- Mi niño… - murmuro Esme, emocionada.

- ¡Ya basta! – corte yo, tembloroso – busquen a alguien más a quien molestar –

De donde sacaría Bella esa idea. Quizás siempre había pensado en esa posibilidad…pero nunca me lo había dicho. Pensé en desmentirlo, pero solo sería peor… me molestarían el triple y Bella quedaría de mentirosa. Además sí que me gustaría que fuese verdad…

Me senté al lado de Bella, pasando mi brazo por sobre su hombro, dispuesto a detenerla si se le ocurría alguna otra defensa…

Ahora ya nadie bebía en vaso. Ni siquiera Bella, que parecía sentirse muy a sus anchas bebiendo cerveza desde la botella. Y yo… ¿qué es lo que sentía…? Me estaban invadiendo unas feroces ganas de abrir la botella de tequila que había en la mesa…

- ¡Vamos, hazlo! – me sorprendió Bella, pasándome la botella

- Bella, voy a creer que en realidad deseas emborracharme – le dije a modo de broma

- Quizás sea cierto – me dijo insinuante, acercándose más a mi

- Creo que el alcohol te está afectando – le dije, aunque me gustaba su actitud

- ¿Y a ti no te afecta? - me pregunto curiosa

- No lo sé, quizás un poco – admití, nervioso

- Me gustaría que te afectara… - me dijo sonriendo – ¿O quizás te gustaría que me afectara a mi?

- Como podrías pensar que yo… - comencé, pero me detuve de pronto. Al final tenía razón, no podía mentirle en eso.

- Bueno, te concedo eso – le dije – pero no creas que es para aprovecharme de ti –

- Qué más quisiera yo – me dijo suspirando – pero vamos, beberás mas… ¿por la ciencia?- cambio de tema rápidamente.

- No sé si será lo mejor, todos estamos actuando un poco distinto esta noche…-

- Es por eso que te lo digo – me dijo con un brillo extraño en los ojos – lo estamos pasando muy bien y dudo que esto se repita – murmuro

Estoy seguro que en otras circunstancias ni lo hubiese pensado. Obviamente me hubiera negado. Pero esta noche, todo era distinto, incluso yo. Sin contestarle, tome la botella y le quite la tapa, cerré los ojos y la empine de una vez…

Lo primero que note fue que el ruido que me rodeaba de pronto había cesado. Para cuando me di cuenta ya no había nada que beber… la botella estaba vacía. Deje la botella sobre la mesa y me puse a observar el porqué del silencio. Claro. Todos me estaban mirando.

- ¿Edward? – pregunto Carlisle, temeroso

- ¿Qué?- pregunte yo, contrariado

- ¡Edward! – grito Alice – menuda sed hermanito…

- Increíble – escuche que murmuraba Bella a mi lado

- ¡Eddy hermano, así se hace!

- Ya está bien- les dije yo - de alguna forma siempre consiguen ponerme de mal humor-

Y entonces fue cuando se les ocurrió.

- ¡Oh no, maldición! – alcance a murmurar