Bella POV

Subí a mi vieja camioneta rápido, Edward no me había dado mayores detalles, pero era evidente que algo sucedía en la casa Cullen… ¿Qué seria esta vez? Los nervios y la expectación me apretaban el estomago, Edward no sonaba tan tranquilo como siempre. Estaba segura de que no sería nada bueno.

En mi premura, salí vestida con lo primero que encontré, mis jeans viejos y sweater gris. Alice tendría algo que decir al respecto. Finalmente tendría que comprender que era una emergencia y lo último que me importaba era mi look.

Encendí mi camioneta y avance hasta el camino lentamente. "maldita chatarra" masculle, fastidiada por primera vez de la lentitud de mi vehículo. Ahora adoraría ser dueña de un flamante Volvo.

Para cuando llegue a la casa Cullen, ya habían pasado fácil por lo menos 30 minutos. Aparque y al bajar, vi como Edward salía a mi encuentro con el rostro afligido.

- "Bella"- me dijo al verme, como si yo fuese su tabla de naufrago.

- ¿Edward que sucede?- pregunte, consumida por la curiosidad.

- Es un nuevo… - dudo unos instantes – experimento Cullen – sentencio con voz agónica.

Suspire con cierto nivel de alivio. A estas alturas, un simple experimento no era nada trágico, yo que imagine hordas de vulturis, licántropos sedientos de venganza… un experimento no sería nada. Aunque bien podía equivocarme.

- ¿Qué experimento? – pregunte, curiosa.

Edward me tomo el brazo con suavidad y camino conmigo hasta la puerta de entrada. Vi como apretaba su mandíbula, y fruncía el ceño, tratando de buscar las palabras apropiadas.

- ¿Bella, que experiencia tienes con el alcohol? – fue la extraña pregunta que me lanzo a modo de respuesta.

Vaya pregunta. ¿Es que Edward realmente quería saber si yo bebía? ¿Por qué preguntaría algo así? ¿O sería que el…? Y de pronto, vi la luz. Experimento. Claro.

- Oh – lancé de pronto con el temor de la certeza.

Mire a Edward y su cara de tragedia… ¿Como podía ser aquello tan terrible? Vamos, el era un vampiro de 109 años, prácticamente indestructible… ¿con miedo a un poco de alcohol? Re{i de pronto por mi pensamiento.

- No le veo lo gracioso – dijo Edward, ceñudo y frustrado, probablemente porque desearía saber que era lo que pensaba.

- Edward, no es tan grave – le dije, calmándolo – si no quieres, pues niégate y ya.

- Tú conoces a Emmett – dijo con lentitud – Si llego a negarme a algo así, me estará llenando la cabeza con sus bromas estúpidas por algunas decenas de años – murmuro Edward molesto. Y luego agrego – Y no le tengo miedo a beber alcohol, pero no le veo el propósito -

- Pues entonces hazlo, vamos – le anime – Al menos será algo diferente en sus vidas luego de tantos años…- En realidad se me estaba ocurriendo una fantástica idea en donde existía la posibilidad de ver a Edward diferente, con algo de alcohol en el cuerpo… ¿Quién sabe? Dicen que el alcohol desinhibe y se hacen cosas que no se harían estando sobrios… Suficiente para mí.

- Vamos - le dije intentando tirar de él – Cualquier cosa yo estaré allí, además dudo que el alcohol sea letal para los vampiros… probablemente no suceda nada-

Estas palabras parecieron calmar un poco a Edward, quien me sonrió levemente y abrió la puerta de la casa.

- ¡Bella! – chillo Alice, al verme entrar, aunque su expresión cambio bastante al ver mi atuendo.

- ¡Hermanita! – grito Emmett – Ouch! ¿Qué? ¿Rosalie? – dijo sobándose las costillas.

Todos estaban allí. Incluso Esme. Vaya.

- Bella, bienvenida – dijo Carlisle, avanzando hacia mí, tan educado como siempre.

- Muy bien, gracias Carlisle – dije, tratando de ocultar mi ansiedad – ¿Que nos reúne?-

- ¿No te dijo Edward? – pregunto Jasper, intrigado

- Bueno, creo que van a experimentar algo…- dije, inocente.

- Podría decirse – dijo Alice.

Todos se miraban entre sí, dudosos. Sobre la mesa, cerca de Emmett y Rosalie, había dos o tres botellas de bebidas fuertes. Pude distinguir una de whisky entre ellas, de lo poco que conocía de licores. Charlie no solía beber tragos fuertes, aunque ocasionalmente bebía un trago o dos de whisky. Mire a Carlisle, quien debía ser el de la idea.

- No ha sido mi idea - dijo Carlisle, entendiendo mi mirada – pero creo que sería interesante ver lo que podría suceder… o verificar que no ocurre nada. De todas maneras comparto la idea como todos, excepto por Edward… dijo mirándolo – pero esperamos que tu presencia lo anime.

- Lo hare si es todos lo que quieren - , dijo gruñendo levemente- o para que dejen de pensar idioteces-

- A mí no me mires – dijo Emmett, con una sonrisa en el rostro.

- Precisamente por ti lo digo – murmuro Edward, mirándolo con rabia.

- Creo que Bella puede saber más de esto que nosotros – dijo Jasper, mirándome – Yo apenas recuerdo haber bebido alcohol, pero creo que cualquier experiencia no sería lo mismo ahora-

- Mi experiencia es muy escasa – reconocí – solo he visto beber a algunos amigos en Phoenix y a Charlie ocasionalmente…-

- No eres muy útil… - dijo Rosalie con la mirada de hielo.

- Ignora a Rosalie- me dijo Edward – No tienes que hacer nada, amor, solo quiero que estés como observadora…

- ¡No seas aguafiestas Ed! – dijo Emmett acercándose a nosotros… - Bella puede tomarse un trago con nosotros, no creo que le haga daño.-

- Bella no debe beber, ella es una dama – sentencio Edward.

Vaya, Edward estaba decidiendo por mí. No es que beber alcohol sea una de mis tareas favoritas, pero vamos, todo el mundo decidía por mi siempre…. ¿Es que yo no tenía derecho a opinión? Me comenzó a molestar un poco la idea y decidí llevar la contra.

- No tengo problema en acompañarlos- dije, con autoridad - por supuesto que beberé… solo una copa- añadí al observar la mirada ceñuda de Edward.

- Bella no debes- me dijo Edward suplicante. – No es digno de una dama-

- Vamos Edward, no es como si no lo haya hecho antes- me miro aterrorizado – Solo una vez ok, fue en un cumpleaños de Renee… y no morí por ello.- dije, tratando de parecer divertida.

- No me parece nada bien que bebas Bella, puedes… enfermarte – dijo tratando de convencerme.

- Nada sucederá, vamos, Alice también lo hará - me queje.

- Edward, es su decisión – dijo Esme, sorprendiéndome – Espero que no estés tratando de coartar sus decisiones-

- Edward la miro, asombrado tanto como yo. Algo debió decirle mentalmente que yo no capte, porque en unos momentos su expresión molesta cambio a serena y me miro con ternura.

- Puedes hacer lo que desees Bella. Lo que tú decidas está bien para mí. De todas formas te cuidare-

- Gracias – dije, mas hacia Esme que a Edward.

Todos se sentaron alrededor de la mesa, decididos a comenzar la experimentación. Edward me cedió un puesto moviendo la silla para que pudiera sentarme. Nadie movía un dedo, así que en vista de eso, decidí tomar la iniciativa.

- A ver, veamos – dije yo, sintiéndome importante- vamos a servir esto, así que necesitaremos vasos…-

- Yo voy por ellos – dijo Jasper, desapareciendo hacia la cocina a velocidad vampírica.

- También algo de hielo tal vez… -dije recordando a Charlie- Bueno, al menos para mí- dije al ver que todos me miraban divertidos.

- Bien, estamos sentados a la mesa, la idea es que tengamos algún tema de conversación…- trate de explicar. – así tenemos una excusa para beber…

- ¿Necesitamos una excusa? – pregunto Rosalie, seria

- Bueno, no realmente – dije – pero es como para… no sé, ¿amenizar?

- Estoy de acuerdo – dijo Carlisle apoyándome.

- Claro, así que empecemos - dije – Edward… ¿Edward? ¿Dónde diablos se había metido?-

Claro, entre toda la conversación, Edward había decidido desaparecer… no estaría huyendo ¿o si? No me lo imaginaba haciendo eso.

- Hace como dos minutos que salió de casa – dijo Emmett, concentrado en las botellas. – No sé a donde fue, yo no leo mentes, aunque me gustaría- dijo mirando a Rosalie, quien lanzo un bufido.

- Maldición- dije yo, frustrada.

- No importa, empecemos nosotros – dijo Alice, impaciente.

- Pero Edward…-

- Volverá - continuo Alice, sonriente – y no te imaginas donde fue ni lo que hará… Creo que te sorprenderá.

- Ok- dije, algo insegura aun, aunque más tranquila

Los vasos ya estaban dispuestos en la mesa y también había hielo. Seguramente Jasper lo había escuchado y lo hacía como atención a mí. Le sonreí levemente.

Rosalie de pronto, tomo una de las botellas y la abrió, sirviendo un poco en cada vaso, tomado la iniciativa en una forma que no esperaba.

- Hasta Rose está emocionada- dijo Emmett, con ternura, ganándose una furiosa mirada de la rubia.

- ¿No han bebido antes, verdad? – pregunte

- Como vampiro no – dijo Jasper

- Yo no lo recuerdo – dijo Alice – pero no lo creo-

- Nadie ha bebido como vampiro - corto Carlisle – Al menos que yo sepa- dijo, lanzando una mirada inquietante a los chicos

- Bueno, entonces que esperamos – dijo Esme, sonriendo.

- ¿Qué serviste Rosalie?- pregunto Alice, mirando su vaso con un dejo de repugnancia.

- Whisky – dijo ella, evitando mirarme.

- No me imagino bebiendo esto- dijo Jasper

- Imagina que es sangre – lanzo Emmett con seguridad- y mejor no respires.

Alice de pronto puso una cara extraña, como si mirase hacia el infinito. Había visto eso antes, estaba teniendo una visión.

- ¡Edward llegara en menos de cinco minutos! – grito Alice, con cierta emoción.

- Bien, pues yo quiero salir de dudas ahora – dijo Emmett.

Todo paso demasiado rápido para mis humanos ojos. Emmett tomo el vaso y de un solo trago vacio el contenido. Creo que se me abrió la boca sola, pero yo no era la única asombrada. Todos miraban a Emmett expectantes, con los ojos como platos.

¿Que pasaría ahora?