Edward POV

Seguí muy de cerca a Bella mientras entraba al internado…la mayoría de los chicos de la sociedad compartían la clase de Biología con nosotros, así que habrían testigos de sobra presenciando el show que iba a realizar mi rival en pocos minutos.

Bella ¿estás segura? –pregunté una vez más titubeante, y ella me miró con una mirada pícara que me hizo estremecer.

Sólo mira y aprende, pequeño. –me dijo

Ella recogió su cabello, se abrió el abrigo y se puso sus gafas de sol, llevaba la rosa en la mano y una pila de libros que sacó de su maleta escolar.

Una vez atravesó el umbral de la puerta, yo la seguí.

El grito de reprimenda por parte de la profesora marimacho no se dejó esperar.

Señorita Swan y señor Cullen ¿qué horas son estás de llegar a mi clase? –musitó, aunque su cara de enfado era más hacía a mí que hacia Bella.

Bella fingió haberse asustado con el grito de la profesora y dejó caer la pila de libros que llevaba en sus manos justo frente al pupitre de la marimacho.

Oh, lo siento mucho profesora…pero es que nos retrasamos. Edward me estaba ayudando con la tarea de Anatomía que nos asignó, pero en realidad sigo sin entender un par de cosas…Usted cree que pueda darme una tutoría después de la jornada escolar para afianzar más sobre anatomía…le pagaré por hora de ser necesario, pero necesito esas clases. –dijo con voz incitante, mientras los ojos de la profesora bailaban de un lado a otro.

Cla…claro señorita Swan, yo le doy todo lo que usted quiera…digo las clases que usted quiera, ahora pasen a sus respectivos asientos. –dijo un poco acalorada.

Yo no aguantaba las ganas de reír pero me contuve, porque si lo hacía toda la clase seguiría mi ejemplo y lo que menos queríamos era ser sacados del salón por desorden.

Di un par de pasos, para ayudar a Bella con los libros. Me posicioné justo a lado de la profesora y frente a Bella.

Permíteme ayudarte, Bella. –dije

Gracias Edward, pero creo que puedo yo sola. –dijo mientras se reclinaba, y mi vista se desvió justo a su escote.

Bella no llevaba sostén, lo que me dejaba una perfecta vista a sus pechos desnudos…y si yo tenía esa vista, se suponía que la profesora marimacho tendría la misma, y entonces caí en cuenta que todo era parte del plan.

Carraspeé un poco, para indicarle a Bella que era suficiente y ella lo entendió, me dio un par de libros que cargué hasta nuestra mesa y caminamos juntos hacia ella, pero antes de llegar se volteó para encarar a la profesora nuevamente.

Oh, cómo soy tan torpe…Señora Wilson. –dijo Bella

Señorita. –la corrigió ella

Señorita Wilson, esta rosa roja, era para usted y con todo lo que sucedió a la entrada lo pasé por alto…esto es porque nos perdone la llegada tarde a su clase tanto a Edward como a mí, le juramos que no vuelve a pasar. –musitó Bella con voz dulce

Oh señorita Swan, no se preocupe…todo está olvidado, pero que no se vuelva costumbre…ahora por favor, dividan el grupo en dos equipos, abran su libro en la unidad 6 y realicen el taller asignado, yo regreso un rato, tengo que hacer una diligencia urgente…Newton, quedas encargado del grupo. –dijo la Marimacho Wilson y salió

Una vez estuvo fuera, las risas a carcajadas y los silbidos no se hicieron esperar.

Oh hermanita…tu voz era tan excitante que llenaste el salón de lujuria, estuve a punto de sentarme en las piernas de Jasper y darle un beso de lengua. –dijo Emmett y todos estallamos en risa

Claro, claro Bella…tú provocas la tensión gay sexual con la señorita marimacho, y nosotros tenemos que soportar que Emmett salga del closet. –dijo Jasper rodando los ojos.

Lo siento chicos, pero merezco mi punto, en los retos, o ¿no? Rosalie. –preguntó Bella encarando a Rosalie

Claro Bellita…esto merece celebración…Cullen, a ver como superas eso, tienes un gran rival a tu lado, y no porque sea una chica lo digo, porque hasta los chicos quedaron encantados. –dijo Rosalie

Creo que tendré que hacer una gran hazaña para superarla. –dije

A ver  nena, ¿qué quieres hacer esta noche para celebrar? Lo que pidas…esto que acabas de hacer merece premio. –dijo Rosalie mirando atentamente a Bella

Esta noche no Rosalie…pero que tal el fin de semana…en vez de ir al club, vamos al Bosque Nacional Yosemite, tenemos tiempo que no lo hacemos, y necesito sentir la adrenalina de hacer Bungee Jumping, en el sendero oculto del bosque. –dijo Bella

Bungee Jumping…yo escuché bien…no, no esto era una broma de ella…ella no podía practicar ese deporte tan riesgoso…no sé a quién se le ocurrió la idea de convertir ese intento de suicidio en un deporte.

Edward, te has quedado pálido. –dijo Emmett dándome un porrazo en la espalda que me hizo regresar a la realidad.

No, no es nada. –dije

O es que acaso ¿nunca has practicado el Bungee Jumping? –preguntó Jasper

Me limité a no contestar.

Es un hecho Bella…el fin de semana viajamos a Yosemite…lo único malo de todo es James tendrá que acompañarnos. –dijo Rosalie con pesar

Mierda…que fácil es olvidarse que ese imbécil existe. –dijo Bella

Pero igual no importa Rose, que tal que lo incitamos a que salte y cuando su cuerpo vaya en picada cortamos su cuerda, y así nunca jamás lo volvemos a ver. –volvió a hablar Bella.

Adoro tu mente maquiavélica, hermosa. –dijo Rosalie a Bella acercándose cada vez más a su rostro.

Nosotros estábamos expectantes de lo que estás dos maniáticas iban a hacer…y no nos equivocamos, ellas se dieron un breve beso de labios…

Demonios chicas, no vuelvan a hacer eso jamás…es tan excitante, quela próxima vez podemos olvidarnos que estamos en un salón de clases. –dijo Emmett cubriendo su entrepierna.

Ellas solo rieron, mientras yo rodaba mis ojos.

La campana sonó, anunciando que la clase había llegado a su término. Pusimos los ensayos sobre el pupitre.

Bella, creo que se te pasó la mano con la marimacho, se fue toda la hora de clases al baño a deleitarse con su amigo el dedo y no ha vuelto. –rió Rosalie

Bella sonrió maquiavélicamente, se dirigió al pizarrón, tomó el marcador y escribió:

“Querida Señorita Wilson, en su ausencia, los chicos de la clase se encargaron de explicarme con lujos de detalles, las cosas que no sabía sobre Anatomía, y créame jamás las volveré a olvidar, tengo que decir que usted es una excelente profesora, porque enseñar a estos chicos a hacer ejemplos con sus propios cuerpos de lo que yo no lograba entender, la cataloga como la mejor profesora de todo el internado….Muchas gracias por brindarme su ayuda, pero creo que ya no la voy a necesitar…es más me voy a poner en práctica todo lo aprendido hoy para salir bien en los próximos exámenes…” con amor, Bella

Todos reventamos en risas, y salimos pronto de allí, antes de que se apareciera la marimacho…

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Hola chicas....cuentenme que tal les pareció este capítulo!!! espero sus comentarios...besos