Me desperté a la mañana toda adolorida… Estaba desnuda en la cama de Edward, y estaba sola… sentía a lo lejos cerrarse la ducha del baño. La puerta se abrió y Edward apareció en una toalla…

-          Hola – Dije

-          Hola – Dijo – como estas?

-          Adolorida – Dije.

-          Porque no te pegas una ducha antes de que bajemos a desayunar?

De golpe me llego a la cabeza sus padres…

-          No te preocupes – Dijo como leyendo mi mente – Cuando escuche que venían, baje a recibirlos y les dije que dormías en mi cuarto y que yo en el de huéspedes… ni si quiera se molestaron en corroborarlo …

Suspire aliviada y agarrando las sabanas me levante y me encamine para la ducha. Cuando llegue al cuarto de baño, me quite las sabanas y pude ver manchas de sangre en ellas. Mis piernas también estaban manchadas… deje a un costado las sabanas y me metí cuanto antes para asearme…

Cuando Salí, Edward ya no se encontraba en la habitación. Me vestí tranquila y cuando abrí la puerta , el se encontraba parado allí…

-          Que haces? – pregunte-

-          No quería molestarte. Quería dejar que te cambies tranquila…

-          Gracias – Dije.

-          Bella…  - Dijo dudando

-          Si??- pregunte

-          Anoche fue…

-          Anoche fue hermoso – Dije – pero quedo en anoche…

-          Estas segura? – Dijo.

-          Eres mi mejor amigo. Me ayudaste en esto y te lo voy a agradecer toda mi vida – Dije

Edward sonrió aliviado.

-          De acuerdo peque – Dijo abrazándome – Vamos a desayunar!

-          Vamos! – Dije haciendo de cuenta que nada paso….

Las cosas entre Edward y yo no cambiaron por suerte. El siguió su relación con Tanya, y yo con Jacob. Ahora estar con el no era un problema. Sabría que no demoraría mucho mas en estar con el… Esta noche saldríamos a cenar, por lo que veríamos como se desenvolvía la cosa…

Jacob paso por mi cerca de las 7. Estaba vestida semi casual. Tenia puesta una pollera corta, con unos buenos tacos y una camisa entallada. Por su puesto uno de los conjuntos comprados para estrenarlos con el… Luego de la cena fuimos a pasear al parque. Jacob siempre fue muy atento con migo, pero las urgencias de nuestros cuerpos siempre se hacían presentes. Caminamos por una senda del parque que estaba iluminado. Estaba casi desierto, pero por suerte no había peligro de estar allí… Nos sentamos en una banca y comenzamos a besarnos. Por supuesto comenzó a intensificarse. Metió su mano debajo de mi falda acariciando mi pierna…  yo roce levemente su miembro por arriba de su pantalón. Eso era algo que nunca antes había hecho, y pude ver por su reacción como estaba…

-          Bella… - Dijo.

-          Jacob – Dije de igual manera.

-          Estamos cerca de mi casa… – Dijo

-          De acuerdo – Dije riendo.

No demoramos mucho en llegar. Este chico si que tenia ganas – pensé. Entramos a la casa. Todo estaba oscuro. Su padre seguro dormía. Fuimos a su habitación. Cuando entre pude ver su cama toda revuelta, por el piso había ropa tirada. Deje mi bolso en la mesa de noche en el minúsculo espacio que había en todo lo que estaba allí… Había vasos semi vacios, había un cenicero con colillas de cigarrillo.

-          Fumas? – le pregunte.

-          A veces – Respondió.

No podía creer que no conociera eso de el… me gire para verlo y se estaba desprendiendo la camisa. Pude ver su pecho trabajado. Era realmente atractivo, tenia que darle eso… Sin darme tiempo a nada prácticamente se tiro arriba mio y comenzó a besarme. Nos caímos prácticamente en la cama. Desprendió mi camisa a una velocidad impresionante y masajeo mis senos. Sin sacarme la pollera, saco mi tanga y la tiro a un lado. Se estiro hacia su mesa de noche y saco de allí unos condones. Rápidamente se puso uno. Estaba por decirle que estaba con la píldora, pero lo descarte. Se introdujo en mi salvajemente provocándome dolor. Solté un grito ahogado. Comenzó a moverse dentro de mí llevando un ritmo acelerado. No pude evitar compararlo con Edward. Jacob no era muy cuidadoso en hacerme sentir especial… En ese momento comencé a pensar en Edward y en la noche que pasamos. Comencé a imaginármelo y de repente las sensaciones con Jacob comenzaron a intensificarse.  De mi boca comenzaron a salir jadeos y gemidos. Era placentero. Acariciaba su espalda, y cuando decía mi nombre la magia se acababa. Me daba cuenta que era con Jacob con el que estaba…  Jacob se estaba cansando, podía verlo.

-          Terminemos juntos – Dijo jadeando en mi oído.

Acelero más sus embestidas, y  allí aprendí algo nuevo… Aprendí a fingir un orgasmo…  El termino y se bajo de arriba mio. Mi cabeza comenzó a procesar preguntas. Se habrá dado cuenta que no soy virgen? Me cuestionara por ello? Porque tenia condones en su cajón? Cuando me gire para verlo, estaba dormido. Agradecí a Dios no haberle dado mi virginidad… comencé a pensar en Edward, y en que estaría haciendo… agarre de mi bolso mi móvil y le mande un mensaje de texto.

-          “Donde estas amigo? “

-          En casa de Tanya viendo películas… - Respondió.

-          Yo estoy en lo de Jacob…

-          Todo bien peque? – escribió.

-          No lo se. Quiero irme a casa, pero esta dormido… - Dije

-          Quieres que te busque? – dijo.

-          Por favor – escribí.

Me levante del lado de Jacob y recogí la única prenda que me había sacado. Mi tanga. La tome entre mis manos y dando un vistazo a la habitación Salí de ella. Estaba buscando el baño, pero no sabia donde era. Unos segundos mas tarde sentí la bocina del auto de Edward en la puerta. Acomode mi camisa, y Salí de la casa con mi tanga en la mano sin darme cuenta. La verdad quería irme de allí cuanto antes.

-          Hola Bells – Dijo en cuanto abrí la puerta.

-          Hola Ed, - Dije- Gracias por recogerme

-          No hay problema… Quieres que te lleve a tu casa?

-          Si no te molesta, prefiero dar una vuelta primero – Dije.

-          Lo que quieras preciosa….

Y salió de la casa de Jacob a toda velocidad. Me quede callada sin decir nada. Mi mente repasaba todo lo acontecido esa noche… cuando levante la vista, estábamos en el mirador del bosque.

-          Que hacemos aquí? – Dije.

-          Venimos a hablar… Obviamente te pasa algo. No estas bien. Vienes con tu ropa interior en la  mano y te callas… tengo que asumir lo peor? – Dijo mirándome.

-          No, no es eso – Dije agarrando la prenda y poniéndola en mi cartera… Es solo que estuve recién con Jake, y debo decir que no fue para nada lo que esperaba…

-          Que paso? – pregunto curioso.

-          Bueno… dije… quieres los detalles o solo la parte importante?

-          Los detalles – Dijo riendo.

-          Bueno… salimos a cenar, y caminamos por el parque. Nos sentamos en una banca, y una cosa llevo a la otra. Terminamos en su casa. Entramos a su habitación, y déjame decirte que este hombre no conoce lo que es la limpieza….

Edward rio ante mi comentario.

-          Sin previo aviso se tiro arriba mio, comenzamos a besarnos y sin quitarme la ropa, me bajo mis bragas, saco condones de su cajón y empezó con el acto así como así… debo decir que no fue nada cuidadoso  - Dije sonriendo.

-          No te gusto?

-          Para nada – Dije – No solo porque no llegue a ningún lado, si no porque no estaba allí…

-          Como que no estabas allí?

-          Bueno… en los únicos momentos en que sentí algo es cuando recordaba lo que había pasado entre nosotros…

-          De enserio?

-          Crees que signifique algo? – pregunte.

-          No creo – dijo luego de pensar unos segundos – Es lógico que compares. Es decir es tu primera experiencia…

Mire para afuera del auto pensando y asintiendo…

-          Osea que te quedaste con las ganas – Dijo riendo…

-          Si… pero el no lo sabe… - Reí yo también y provocó que el riera también…

-          No desesperes Bella… Es solo la primera vez que están juntos… veras que mejorara…

-          Eso espero – Dije.

Llevo un mechón suelto que tenia detrás de mi oreja.

-          A ti te paso con Tanya alguna vez?  - Pregunte.

-          Es diferente. Yo soy hombre. Sin importar que yo termino – Dijo riendo.

-          Sabes a lo que me refiero – Dije pegándole en el hombro.

-          Bueno… Si ella fingió no sabría decírtelo. Debe ser que me lo trague… - rio nuevamente.

-          Eres un idiota – dije riendo.

-          Estas mejor? – Pregunto.

-          Si, mucho. Gracias por esto – Dije

-          Siempre estoy y estaré para ti …

-          Lo se, gracias … - Dije.

-          Vamos?

-          Vamos!

-          Pero primero ponte tu ropa interior, no quiero dejarte en tu casa y que tu madre piense que te viole o algo…

Salimos rumbo a casa y saque de mi bolso la prenda para ponérmela. Edward me miro mientras me subía la prenda, y ese solo acto me excito. Como podía ser tan diferente con el? – pensé.

Me dejo en mi casa y lo salude con un beso en la mejilla, que debido a mi efusividad fue casi en la comisura de los labios…

-          Nos vemos mañana? – Dijo

-          Ok! – Dije saliendo del carro.