POV BELLA

Hacia ya tres meses; tres largos meses en los que mi pequeña, mi vida, mi princesa; Nessie... se había ido.

Todavía recuerdo aquel momento, en el que Carlisle nos dijo que se había ido. Me quería morir; lo había dado todo por ella, luche y luche... pero nada.

Me acuerdo la última conversación que tuvimos; ella tenía miedo, estaba asustada por su embarazo y pensaba que algo malo iba a pasar... y así fue. Yo no la creí; pensaba que solo sería miedo al embarazo, pero había algo más y ella lo sabía.

Ya casi no me alimentaba, tenía ganas de acabar con esta eternidad, lo único que me hacia seguir con vida era Edward y mis tres preciosos nietos. Eran realmente hermosos.

Ellos ya no crecerían más; su crecimiento se congeló; aunque tenían tres meses aparentaban diecisiete o dieciocho años.

Cada día les contabamos historias de Nessie, de sus travesuras y de lo especial que era.

Y estaba el... Alec.

Vivía aislado, no se relacionaba con nadie, solo con sus hijos; y sobre todo con Reneesme. Su preferida.

Necesitaba despejarme, estar sola por lo que decidí dar un paseo.

Sali de aquella casa atestada de sufrimiento y me dirigí al prado.

Apenas habían pasado unos minutos cuando capte algo.

No podía ser; su aroma, el de mi hija.

Esto era imposible... ella; ella... había muerto.

Me quede como una estatua, esperando a que ella apareciese. Quería abrazarla; tenerla entre mis brazos... pero no aparecía ¿tal vez era una alucinación?

En esos momentos empece a escuchar unos latidos; eran bastante fuertes; aquellos latidos...

- ¿Reneesme? - pregunte al vació

Nadie me contesto...

Cabizbaja me fui de aquel prado, solo era una alucinación

- Mamá 

Su voz; su maravillosa voz...

Me di la vuelta y la vi... tan hermosa como siempre; no había cambiado nada; su rostro estaba bañado por las lágrimas.

- Mi niña

Sin pensarlo dos veces me abalance sobre ella.

- Mamá - volvió a repetir entre lágrimas

- Reneesme, querida; ¿como estas? ¿que te ha pasado? ¿donde has estado durante estos tres meses?

- Mamá tranquilizate... y sueltame que me haces daño

- Lo siento hija; pero...

- Sientate y te contare todo.