POV NESSIE

Mi final se acabó, lo había dado todo por mi familia, había intentado protegerles de las garras de Aro, y creo que lo conseguí. Ahora el tenía todo lo que quería, me tenía a mi. El resto de mi existencia seria estar entre sus brazos, una amarga tortura, pero a la vez una dulce tentación. Algo complejo ,¿verdad?

Aun seguía en la inconsciencia, pero dentro de ella estaba consciente. Quería quedarme así para siempre; quería estar perdida en mi propia inconsciencia y no volver a ver más ese rostro macabro que tanto me deseaba. Pero tarde o temprano lo tendría que hacer; lo había prometido, había hecho un trato con el propio diablo.

Todavía lo recuerdo...

Flash-back

Todavía no había empezado la gran batalla. 

Me encontraba en el gran claro junto a Aro. Este me miraba con deseo y con satisfacción.

- Reneesme - dijo con un susurro intentando romper el amargo silencio - recapacita por favor. Piensa con claridad; ¿Acaso quieres ver a toda tu familia masacrada por tu culpa?

- Eso nunca - dije entre lágrimas

- ¿Acaso quieres que tus pobres niños me sirvan como guardia o simplemente que ellos acaben decapitados?

- No - dije con un profundo gruñido

- ¿Acaso quieres que el amor de tu existencia se enamore de otra y te deje completamente sola, que te abandone para siempre? Sabes lo que va ha pasar cuando se produzca la gran batalla, ellos dentro de poco vendrán, y mi guardia tambien, o por así decirlo parte de ella. y tambien sabes que puedo acabar con tu familia facilmente; siempre me acompaña la suerte querida, yo consigo todo lo que quiero. 

- No permitire que hagas nada a mi familia; no permitire que les hagas sufrir, no permitire que...

- Te entiendo perfectamente querida - dijo mientras me limpiaba las lágrimas - piensa que todo esto es un juego, si dices que si... por arte de magia me dejare ganar, e incluso haré que los lobos vengan y ayuden a tu querida familia; hare que tu familia quede como la principal vencedora, sin ninguna baja... pero todo esto tiene un precio mi dulce Reneesme, y ya sabes cual es el precio.

- Irme contigo - dije resignada

- Maravilloso - dijo mientras aplaudía - por fin te das cuenta querida; si tu te vienes conmigo tu familia quedara libre, nos dejaremos ganar... y seremos felices toda la eternidad - dijo este mientras me daba un dulce beso en los labios.

Y en ese momento empezó por mi tortura.

Fin flash-back

Todo estaba pactado, toda la batalla, la pelea con Diana, los lobos... todo. Y ha decir verdad no me arrepentía. Aunque estar en los brazos de Aro era una amarga tortura con la que tendría que convivir durante toda mi eternidad había algo que me reconfortaba; una dulce tentación; y esa dulce tentación era que Aro o uno de sus secuaces borraría la memoria a toda mi familia; borraria cada momento, cada situacion en las cuales habían pasado conmigo; es decir el me borraría del mapa, y por así decirlo empezaría una nueva vida. A mi tambien me lo ofreció, pero yo no queria, ya que un apoyo para seguir con vida eran ellos; recordar todos esos momentos que pase a su lado, un aliento calido que me daba fuerzas.

Unas manos frías recorrieron mi rostro. Este era el momento.

La hora de despertar.

- Reneesme. Despierta - dijo una dulce voz

Un momento... esta no era la voz que yo esperaba; esta era la voz de...

- ¿Mamá? - pregunte rapidamente mientras me abalanzaba sobre ella. Yo pensaba que la había perdido; yo pensaba que no estaría en este lugar, en mi habitación, yo pensaba...

- Cariño, tengo que decirte que me gusta tu despertar - dijo con una risa cantarina

- Jo mamá; yo pensaba que te había perdido, yo pensaba... - y en ese momento empecé mi llanto

- ¿Por que dices eso cielo? Tu nunca me perderas

- Mamá por todo lo que ha pasado con Aro... no entiendo como estoy en casa, no entiendo nada, ¿como esta Alec? ¿y mis niños?

La cara de mi madre era todo un poema; estaba realmente confundida, parecía como si no supiese de lo que estaba hablando 

- ¿Estas bien cielo? - dijo esta mientras me ponía una mano en mi frente

- Claro que estoy bien, mejor que nunca... pero contestamé

- Nessie no hay nada que contestar, no se de lo que me hablas. Debe de ser que todavía estas soñando; esto de dormir tanto...

- Espera un momento; ¿como que dormir tanto?

- Reneesme, has estado dos día durmiendo. Estabamos preocupados por ti; pero tu abuelo nos dijo que no pasaba nada; que eso era normal.

- ¿Dos días? - dije confundida

- Así es

- Pero mamá, ¿y los Vulturis?¿y Jake?

- Los Vulturis están en Italia, no sabemos nada de ellos desde aquella vez en la que vinieron para obtener información de ti, ya sabes cuando casi se produce la gran batalla. Y Jake esta en la reserva; tambien estaba muy preocupado por ti...

No me lo podía creer; todo esto había sido un sueño. Todo lo que había vivido, todo lo que había experimentado había sido un sueño.

Mi amor por Alec, mis niños... todo había sido tan real.

- Esto no puede ser verdad - dije mientras me levantaba de la cama

Me fui directa a la ducha, tal vez todavía estaba soñando.... tal vez...

Pasaron las horas y todavía no podía creer lo que me estaba pasando, yo quería volver a mi sueño, quería estar con Alec.

Me encontraba en el prado donde venía con Alec, estaba tan sucumbida en mis pensamientos que no me di cuenta de que el anochecer llegó. 

Es imposible no caer rendida ante el anochecer; siempre sucumbía en el largo sueño de la eternidad.

Mi caso no fue ese; intente luchar contra las sombras, intente no caer rendida ante el anochecer; y me di cuenta que lo conseguí.

Me desperté con un grito ahogado; estaba de nuevo en mi cuarto. Me encontraba confusa... ¿que me estaba pasando? hace unos segundos estaba en el prado y ahora esto... 

Mire por la ventana y me di cuenta de que estaba anocheciendo.

- Me estoy volviendo loca - dije en un susurro

- ¿Y eso? - pregunto una voz a mi lado. Mi corazón empezó a latir descontroladamente, mi respiración fue aumentando y en ese momento capte su dulce aroma.

- Alec - dije mientras me abalanzaba sobre el

- Menudo despertar tienes... ¿como estás?

- Bien, pero por favor; ¿que ha pasado? no entiendo nada...

- Si te digo la verdad todavía nosotros no lo sabemos; después de la batalla nos dimos cuenta de que Aro faltaba, de repente todos te miramos a ti, ya que estamos preocupados por ti, y de la nada este apareció Aro, intentaba secuestrarte, pero este cayó al suelo abatido en cuanto te tocó, y tu tambien con el. 

- Pero... ¿el esta muerto?

- Si, inmediatamente le matamos.

- Oh Alec...de verdad, todo esto es tan confuso; no entiendo nada, no se si esto es real, si estoy soñando... tengo miedo de que esto sea un sueño, entonces me despierte y no te tenga a mi lado.

- Eso no pasara 

E inmediatamente junto sus labios con los míos. Era la sensación más hermosa que había experimentado. El lo tenía todo, era mi salvador, mi ángel, mi gran amor, el y nadie más. Lentamente nos fuimos separando, y admire sus maravillosos ojos. El estaba algo confundido, y debía de ser a mi cara, ya que todavía no me creía si estaba soñando o no.

- Escuchame bien Reneesme Carlie Cullen; esto es real, esto no es ningun sueño. Esta es la propia realidad, en la que mi amor hacía a ti no se puede explicar con palabras. Durante toda la eternidad velaré por ti, por nuestros hijos, te querré hasta el final de mis días, y día a día te iré demostrando que esto no es un sueño. 

- Eso me suena a gloria - dije mientras le daba un casto beso en los labios

- Una eternidad es poco para demostrarte lo que siento, pero lo intentare - dijo mientras se reía.

- Tienes todo mi apoyo - le dije mientras que me ponía encima de el.

Ahora me di cuenta de que todo había sido una mala jugada de mi subconsciente. Desde que caí en la oscuridad en el prado, cuando pense que mi vida se había acabado gracias a Aro hasta el momento en el que me desperté junto a Alec; había sido solo un sueño; eso si que había sido solo un sueño. Y esto era la realidad; la dulce realidad. En la que mi vida estaba unida a la de Alec.

El anochecer; una etapa del día que me fascinaba. En la cual hace aproximadamente diez años le vi, a Alec. Todo comenzó cuando los Vulturis vinieron supuestamente a librar una gran lucha por mi; todavía me acuerdo cuando estaba sobre el lomo de Jake y empece a recorrer con la mirada a toda la guardia Vulturi, entonces mis ojos se encontraron con los suyos; unos ojos carmesí que me atraían; y en ese momento sentí que mi vida comenzaba; cuando vi a Alec por primera vez. Ahora entiendo la gran frase de ''muerta hasta el anochecer'' Porque cuando le vi, es como si todo ese tiempo antes de conocerle hubiese estado muerta; y en ese momento renací, en el anochecer.