(ESTE ES UNO DE LOS CAPIS MAS LARGOS...ESPERO LES GUSTE ESPERO SUS COMENTARIOS GRACIAS!)
Al día siguiente, no pretendía bajar ya que no sabia que actitud tomar, me encontraba en el barandal observando que en mis manos se hallaba la foto que no me atreví llevármela en mi primera visita, cuando increíblemente los rayos del sol chocaron con mi rostro, haciendo ver ese brillo natural de mi cuerpo mientras disfrutaba los cálidos rayos. En ese momento alguien toco mi puerta.
- Pase- musite con los ojos cerrados
Sentí que alguien toco la puerta pero no entraba, inmediatamente abrí los ojos y me di vuelta para saber quien era. Edward se hallaba al pie de mi puerta observándome como si nunca antes me hubiera visto, tenia en sus ojos algún de brillo que no terminaba de comprender.
- Que sucede? Es que acaso nunca has visto a un vampiro bajo el sol?- le pregunte
El sacudió un poco su cabeza como si se hubiera despejado de un pensamiento para poder proseguir la conversación mientras deslizaba una sonrisa
- Claro que si, es solo que es la primera vez que te veo bajo el sol y…
- Y?- dije
- Es que te ves tan…hermosa- musito de forma dulce
Yo inmediatamente me di vuelta y musite:
- Porque has venido?
- Quería decirte que hoy saldremos- inquirió cuando se colocaba a mi costado
- Perdón? Saldremos?- pregunte de inmediato
- Si, saldremos a inspeccionar la zona
- Con quienes iremos?
- Solo tu y yo
- Los dos?! Si claro, dudo mucho que Carlisle haya aceptado eso
- No tiene por qué oponerse?
- A no?, y sobre el pleitecito que hubo abajo
- Discusión que supiste manejar muy bien
- Ok, entonces te olvidas que para los demás soy peligrosa
- No para mi
- Pero pertenezco a los “Vulturis” y según ello no merezco consideración de nadie
- Me importa en lo mas mínimo lo que pienses los demás, yo sé quien eres tu en realidad y con eso me basta y me sobra
De pronto, el tomo la foto que estaba entre mis manos y musito:
- Yo no me equivocaba tenias un bonito color de ojos
- Tu crees?- le pregunte mientras miraba la foto
- Si, tenías unos ojos marrones muy preciosos, aunque recalco que lo sigues teniendo, aunque estos hallan cambiado de tono, a parte de un rostro…
Se acercó de un momento a otro, me sostuvo con la mirada, él me contemplo y dijo muy despacio
- Hermoso, y una sonrisa muy cálida y maravillosa
Yo baje la mirada y me aparte de él avergonzada, el esbozo una sonrisa mientras coloco sus manos en su bolsillo y dijo:
- Creo que deberías hacerlo mas seguido…
- No es muy propio de mi-dije mordiendo el labio inferior
- Si lo se pero no deberías ser tan egoísta ocultando esa maravillosa sonrisa que tienes además sonreír es saludable
- Lo tomare en cuenta
- Bien nos vamos?
- Ok- dije
Salimos de la casa, nos entramos al bosque y solos nos detuvimos cuando al frente de nosotros se encontraba el lago. Vi como Edward se dejo caer en el pasto y yo musite:
- Pensé que inspeccionaríamos el lugar
- Si pero eso te lo puedo enseñar después, que tal si conversamos un momento, total en la casa no hay mucha privacidad que digamos
Lo pensé un poco, solo me senté:
- De quieres hablar?
- De ti
- No, yo no tengo casi nada que contar
- Te equivocas- dijo mientras se sentaba- Cada vez que veo tus ojos es como si tuvieras muchas cosas que aun no las dices por temor
- El sol te ah afectado?
- Dime si estoy mintiendo?
- No responderé a ello
- Entonces no estoy mintiendo
- Yo no dije que si
- Pero el que calla otorga
Él sonrió y yo musite.
- Esta bien…no sé cual es el beneficio o interés de saber cosas de mí pero bueno adelante…pregunta
- Gracias…ahora disculpa que sea tan directo, pero aun tengo curiosidad por saber como llegaste a los vulturis, ellos… ¿ellos te convirtieron?-dijo las ultimas palabras cambiado por completo su voz de lo que estaba dulce ahora estaba muy serio
- No, fue otro individuo
- Por otro individuo debo suponer que lo conocías
Lo mire un poco, Edward definitivamente no podía saber la verdad, él no podía descubrir el secreto que me he reservado durante mucho tiempo.
- No, yo nunca lo conocí- mentí- sin embargo cada vez que me pongo a pensar en ello…pues lo recuerdo como si fuera ayer
Me voltee para ver el rostro de Edward y observe que estaba muy tenso, sabía que en mí mirada solo estaba la tristeza, y él musito:
- Tan presente tienes el día de tu transformación
- Bueno ese día siempre marcara el resto de mi existencia, como poder olvidarlo… recuerdo que salía de mi trabajo, mi reloj marcaban las 8:55 de la noche, tenia que tomar un taxi para llegar mas rápido, pero decidí irme a pie, camine hasta llegar a un callejón, sabia que si lo tomaba llegaría mas rápido y no preocuparía a René, así que no dude y camine por allí, solo me faltaba unos cuantos pasos para llegar a la calle mas próxima sin embargo…- me detuve mientras miraba al lago
- Que paso?
- Mi cuerpo salió disparado hasta una pared, trate de levantarme pero no pude, me había golpeado fuertemente la cabeza, y cuando me la toque estaba sangrando- hice un pausa para respirar el aire tan puro que se hallaba en el lugar- En ese momento veía todo borroso pero recuerdo que se paro delante mío, y con una estúpida sonrisa me dijo: “Me sirves, así que te advierto que esto dolerá un poco”, se acercó y me mordió la garganta finalizando así mi vida como humana
- Y después? Como reaccionaste?, que sentiste?
- Lo que tenia que pasar al despertar estaba al pie de un árbol, sentía como mi garganta me quemaba, tenia sed y fue ahí donde descubrí en que me había convertido, al principio no lo creía, hasta que fui dándome cuenta que hacia cosas que antes no podía, de pronto mi garganta me empezó a molestar y tenia que calmarla, para mala suerte escuche el latir de un corazón humano, rápidamente me dirigí hacia el aroma, se veía desorientado y perdido como yo, quería atacarlo, pero no pude, ese hombre no se merecía lo que iba hacerle, hui del lugar lo mas rápido posible hasta que encontré un venado, no dude mas y me abalance hacia él, desde ese momento cazo animales
- Entonces tu no…
- No, no cazo, a los humanos
- Pero si dijiste que no tomas sangre sucia
- Vamos Edward, tengo a mis padres vivos y aun así no los tuviera tu crees que osadía si quiera hacerle daños algún humano?
- Y como los Vulturis suponen que tu...
- Los vulturis podrán alardear que lo saben todo, pero hay ocasiones que no siempre llegan a enterarse de lo que sucede en verdad
- Ahora entiendo pocos secretos como Vulturi, pero mucho como Bella Swan- musito dándole el verdadero significado a sus palabras
- Así es
- Entiendo…sigue
- A decir verdad ya no tengo nada mas que decir, luego que me sucedió ello, me uní con un grupo pequeño por seis meses pero hubo un momento que no estaba de acuerdo con lo que él jefe quería hacer
- Acaso quería a atacar a un humano?
- Peor, una noche quiso transformar a una chica yo se lo impedí, tuve una pelea con él pero salí lastimada, perdí y fue ahí donde decidí huir jurando, que me vengaría algún día
Pude escuchar claramente el gruñido de Edward, sin embargo yo continúe
- Me encontraba desorienta y mas perdida que nunca, anduve por dos y seis meses sola, no tenia ningún lugar fijo siempre de aquí para allá, hasta que llegue a Volterra, encontrándome con Alec un miembro de los Vulturis, el me llevo hasta Aro, allí me hicieron algunas pruebas, descubriendo algo en lo cual de todo esta vida, es lo único que me agrada tener
- Que fue eso?
- Tengo un don único, los poderes mentales no funcionaban conmigo
- Un escudo- dijo sorprendido
- Si, así es- dije admirando una vez esa expresión cuando se enteran cual es mi don
- Los poderes de Jane y Aro, no funcionan conmigo
- Ahora entiendo muchas cosas
- ¿A que te refieres?- ahora yo era la confundida
- Te lo explicare luego…así que un escudo…vaya- dijo sonriendo mientras se quitaba un peso de encima- y como funciona
- Es un don como cualquier otro, nada espectacular es un escudo mental, tan fuerte supongo yo, que ningún “don que sea de ilusiones, leer la mente o cualquier otro” me afectaba, de alguna forma mi escudo lo bloquea
- Y tienes que sacar tu escudó a flote para poderte proteger?
- Bueno mi escudo me protege todo el tiempo sin necesidad que lo saque, en todo caso solo lo sacó a flote cuando veo que es muy necesario o cuando quiero proteger a alguien más
- Y eso al parecer esto les beneficiaba mucho a ellos
- Si enormemente me propusieron que me uniera , yo ya había dejado mi pasado atrás así que acepte y ahora soy lo que soy, una vampira a quien muchos temen y respetan- dije estas ultimas palabras con amargura
- Por como lo dices, no es muy agradable
- Y que parte puede ser agradable, es una historia llena de dolor e injustica que me condenaron seguir, que no pedí
No me di cuenta que me hallaba sobre mis pies, que mis puños estaban cerrados fuertemente y Edward estaba a mi lado. Él me voltio y me rodeo con sus brazos yo me quede sorprendida ante su reacción y la mía, yo no permitía que me toquen ni por “casualidad”, aunque en mi mundo eso no existe, no me moví para zafarme, muy por lo contrario me quede quieta hasta que musito:
- Tranquila Bella
- Es que no es justo, por que me sucedió a mi, nunca le hice daño a nadie
- Lo sé...sin embargo ahora estas aquí conmigo y ya no estarás sola
- Sabes, antes no recordaba muchas cosas sobre mi vida humana sin embargo al venir aquí y al ver el lago muchas imágenes vinieron a mi mente
- Me imagino que has debido extrañar mucho a tus padres, tu hogar, esas metas que querrías lograr, ese propósito en la vida y…
- Y me lo arrebataron todo en una noche, sin embargo lo que nunca pensé es que en algún momento todo lo que ame de verdad juntos con mis recuerdos, aun se conservaban intactos en mi mente teniendo al menos un consuelo…
Edward me abrazo con más fuerza, yo no pude más y apoye mi cabeza en su pecho, necesitaba este momento, el me acaricio mis caballeros y musito:
- Te sientes mejor ahora que has podido sacar toda esa pesadez?
- Si, a decir verdad, si
Yo di un largo y profundo suspiro, sentí como mis manos estaban colocadas sobre su pecho, me sentía tan protegida, entre sus brazos, que no quería que ese momento terminara nunca, luego recordé lo que dijo y pregunte:
- A que te referías, con que “ahora entiendes muchas cosas”
- Veras, yo tengo el don de leer las mentes y al verte por primera vez, tuve dificultades contigo, a decir verdad las sigo teniendo, antes no sabia del porque y era frustrante pero ahora ya sé que es ese escudo tuyo la razón por el cual no puedo leer tu mente
- Como te lo dije los dones mentales no funcionan conmigo
Él me sonrió un poco, estábamos tan a gustos hasta que de repente una pequeña brisa trajo un aroma totalmente distinto a lo que habíamos detectado la noche pasada, inmediatamente nos alejamos y nos pusimos en guardia esta vez no se no nos puede escapar. No era una alternativa no mucho menos una opción.
|