Bella

No  me lo podía creer, no podía ser verdad. MIERDA. Iba ha llegar tarde……..Mierda.

Salte de la cama, mejor dicho me caí de la cama….(como podía ser tan patosa) y fui directa a la ducha, al enjabonarme note ese escozor familiar en el hombro derecho, sonreí  y lo mire de reojo, la verdad es que cada vez estaba mejor, estaba curando bien, ya no me molestaba tanto  y la verdad es que cada día me gustaba más…mi tatuaje.

Volví a sonreír al recordar la fiesta sorpresa que me prepararon para despedirme, estaban todos y por supuesto “mis chicos” Sam, Quil, Seth y ….Jacob que fueron los que la organizaron. Fue genial y como no nos pasamos con el tequila, (prometo que nunca más volveré a beber…tequila), y no se de quien fue la brillante idea de hacernos un tatu los 5 y lo peor es que a todos no pareció una genial idea!!! (el alcohol es muy malo!).

Yo que odio las agujas, el dolor y la sangre (aunque ya no me afectaba tanto des de que tenia este trabajo) acepte hacerme el mismo tatuaje que mis chicos aunque al final el tatuador me lo hizo un poco más pequeño y algo mas femenino (cosa que le agradecería siempre!!!!!) fui la primera en pasar por la aguja y todos fliparon al verme el pequeño lobo aullando a la luna en el brazo, la verdad es que estaba orgullosa por no haber montado un numerito, después Sam, Quil, Seth y por ultimo..Jacob, al recordar lo que paso después de la fiesta se me borro la sonrisa  y me estremecí un poco. Nunca más volvería a beber sobre todo si eso conllevaba  un tatu y una “pelea” con Jake.

SE ACABO vasta de pensar más, ya no estaba en Forks y si no espabilaba  seguro que no iba a llegar y eso no me lo podía permitir.

Me vestí lo más rápido que pude, ni siquiera me seque el pelo  y corrí al metro, tendría que haber hecho caso a Charli y alquilar un apartamento más cerca.

Nada más sentarme en el vagón me sonó el móvil, había cobertura en el metro? Parecía que si, mire el móvil con cara de sorpresa al ver el nombre de Charli en la pantalla.

-          Buenos días, papa- dije sin mucho animo

-          Hola! Hija. Molesto? Estas ya en el trabajo?- dijo charli con tono un poco preocupado.

-          Bueno…..molestar no molestas…..estoy de camino..me dormí.-dije avergonzada.

-          Bella cariño, te lo dije, eres una dormilona, tendrías que….

-          Ya papa, ahora no, hoy no.  Vale?- le corte no quería tener que darle la razón.

-          Ok lo siento. Nerviosa?- su voz sonó comprensiva.

-          Un poco – admití- No se como me aceptaran mis nuevos compañeros.

-          Bella cariño, estas donde te has ganado estar, has trabajado muy duro para llegar a donde querías, sin importarte los sacrificios que implicara, sin…

Mi padre seguía hablando pero yo ya no lo le prestaba atención,  lo que me acababa de decir me había transportado al día que Jake acabo el instituto y me pidió que lo ayudara a sacarse las oposiciones,  recordé lo mucho que estudiamos y entrenamos. Yo iba a la universidad por  las mañanas (literatura i filología inglesa) y ayudando a jake  por las tardes, es lo menos que podía hacer  después de que el estuviera siempre a mi lado cuando Mike me dejo. Recordé la cara de Charli al decirle que yo también me presentaría a los exámenes y la que pusieron todos cuando acabe entre los primeros de la promoción!!!!.

-          Bella, Bella estas bien, Bella cariño!- grito Charli, sacándome de mis recuerdos, pero que me pasaba hoy!

-          Perdona Charli se me ha ido la cabeza a otro lado, perdona que me decías?- le dije

-          Nada déjalo… que tengas buen día  y tranquila que lo harás genial, sabes que hacer y no tienes que demostrar nada a nadie, vale?- dijo Charli intentando animarme.

-          Lo se papa pero no se…. Déjalo te llamare esta noche y te explico- no quería agobiar mas a Charli con mis tonterías y mis inseguridades.

-          Una cosa más Bella…. Jak…el te ha llamado o algo- Charli sonaba  incomodo.

-          No papa, des de la fiesta no sé nada de…. Jake y no tengo ganas de pensar en ello hoy- dije medio triste y enfadada.

-          Ok, no te molesto más, buena suerte hoy, un beso cariño.

-          Un beso papa, adiós.

Colgué el teléfono y deje vagar mis ojos por el vagón, y en ese momento fue cuando los vi… unos preciosos ojos verdes que… me miraban?  Serian imaginaciones mías.

Edward

Me desperté a la hora de siempre, otra noche sin dormir, al menos  sin dormir las horas que necesitaba y eso que me había quedado a dormir en casa de mis padres, que eso normalmente me funcionaba.

Ya hacia un año que Tanya me había dejado y realmente ya no sentía nada por ella…pero me costaba tanto dormir solo, pero me tendría que acostumbrar al fin y al cabo iba a ser  así el resto de mi vida.

Moví la cabeza para intentar alejar tanta tontería de mi cabeza o no sería capaz de ir a trabajar hoy, tenía una mañana repleta de reuniones.

Fui a la ducha y estuve más tiempo del que creía, cuando salí y vi la hora me di cuenta que tendría que correr o no llegaría.

Baje a la cocina y me tome un zumo rápido, más que nada para ayudarme a tragar la medicación de la mañana, que harto estaba de las pastillitas de los…, calma Ed que tienes para toda la vida, me dije a mi mismo.

-          Te vas a atragantar y tendrías que comer algo- me dijo Alice mi hermana pequeña dándome un beso en la mejilla.

-          Buenos días a ti también hermanita- dije fingiendo enfado.

-          Otra mala noche? No tienes muy buen aspecto- Dijo preocupada.

-          No, que va dormí bien, en serio- intente que mi voz sonara convincente pero no me creí ni yo mismo.

-          Ya…mientes fatal hermanito, ah! me dijo papa que tienes que pedir hora con tu médico que te tocaba revisión el mes pasado y no fuiste - dijo con pena.

-          Ok, bueno Alice me voy que no llego, dales un beso a mama y a papa de mi parte y si ves al tonto de Emett también- le dije dándole un beso y saliendo por la puerta.

-          Acuérdate de lo del médico- grito mi hermana desde la puerta.

Llegue justo al metro, me senté me puse mis cascos y empecé a escuchar Muse (realmente me gustaba ese grupo), no tenía ganas de pensar en lo que me había dicho mi hermana. Deje vagar mis ojos, nada interesante como todos los días. Nos paramos  y empezó a subir gente que se fue sentando, entonces fue cuando vi a la persona más preciosa que había visto jamás, tenía unos ojos chocolate que hipnotizaban y unos labios…. Sería mejor dejar de mirar total seguro que ya no la vería más, pero irremediablemente mis ojos iban a parar a su cara cada 2 segundos.

La vi coger el móvil extrañada y hablar con alguien, pero mientras hablaba me pareció ver reflejadas diversas emociones en su cara, sorpresa, vergüenza, enfado? Luego se quedo como pensativa unos segundos, como con nostalgia? y volvió ha hablar quedando un pequeña expresión de tristeza en su cara al colgar.

Mi corazón se apretó un poco al verla con esa cara, no me gustaba nada verla así, pero que estaba diciendo si ni siquiera la conocía!!!

Entonces fue cuando vi que ella me miraba y que al encontrarse con mis ojos se ruborizo un poco, realmente estaba encantadora con ese color en sus mejillas.

Bella

Baje del metro intentando localizar otra vez esos ojos, pero con el gentío me resulto imposible, pero que demonios me pasaba hoy, no volvería a ver esos ojos nunca más porque perder el tiempo…. Empecé a caminar rápido para no llegar más tarde.

Cuando llegue, me sonó el móvil, un mensaje, pero ahora no podía mirarlo, entre y fui a recepción.

-          Buenos días- dije con un hilo de voz

-          Buenos días, en que le puedo ayudar?- me pregunto una chica rubia muy guapa al otro lado del mostrador.

-          Hola – dije con un poco mas de convicción- me incorporo hoy y..

-          Ah! Hola- no me dejo acabar-tu serás mi nueva ayudante administrativa- dijo petulante- llegas tarde lo sabes, verdad, y….

-          Perdona creo que te confundes de persona- dije con un tono de voz más cortante, ella había sido realmente osca- soy la teniente Bella Swam del departamento de Bomberos del estado y me incorporo hoy a la sala de control y coordinación. Le agradecería me dijera donde tengo que dirigirme. Gracias.

Fue en ese momento cuando vi a mi desconocido de ojos verdes entrar por la puerta y dirigirse a los ascensores.