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Mystic Falls

Elena POV

Querido diario:

Las cosas en Mystic Falls han estado un poco movidas, he  tenido problemas con mi alimentación, no entiendo porque, pero no me es posible tomar sangre de animales, ni siquiera de una bolsa, mi cuerpo simplemente la rechaza si no la tomo directo de una persona, Stefan hace lo que puede por ayudarme pero en realidad es muy poco lo que puede hacer en estas circunstancias, por ahora Matt se ha ofrecido a dejarme alimentarme de él, dice que me lo debe, ya que por salvar su vida es que ahora soy un vampiro, se lo agradezco mucho, el que se trate de Matt de quien me alimento y no un desconocido me ha ayudado mucho a controlarme.

Han pasado más de dos meses desde la última vez que vi a Damon, después del incidente en la granja Young desapareció, una vez se hubo asegurado de que completara el cambio simplemente se esfumó y no lo he vuelto a ver o a saber de él desde entonces, aunque Stefan logró comunicarse con él no consiguió obtener ninguna información acerca de su paradero, lo único que nos mantiene en calma es que al parecer está bien, aun así Stefan y yo seguimos intentando hablar con Damon, aunque por diferentes razones.

Necesito hablar con Damon, había comenzado a recordar algunas cosas cuando desperté en transición, recuerdos sobre Damon y yo que él había borrado, aun no logró entender las razones que tendría Damon para hacer eso, lo que si se es que no tuve el valor de hablar con él y pedir explicaciones antes y ahora simplemente no puedo hacerlo, él desapareció sin decir nada llevándose consigo la oportunidad de aclarar todas mis dudas.

He pensado en hablar con Bonnie, pedirle que use un hechizo localizador como el que uso para encontrarme cuando Rose y Trevor me secuestraron, pero Stefan insiste en que debemos darle su espacio, lo entiendo, pero ¿Cuánto más tendré que esperar para saber la verdad? ¿Cuándo podré despejar todas estas dudas que no me dejan en paz?

Cerré mi diario, los recuerdos comenzaron a agolparse en mi mente de nuevo, venían a mi cada cierto tiempo, como una alarma que no me dejaba tener un momento de paz.

------ Flashback--------

Había tenido una pelea con Matt, él estaba planeando un futuro para nosotros, pero yo simplemente no me podía ver en un futuro a su lado, había llamado a mis padres para pedirles que pasaran por mí a la fogata que había organizado la escuela.

-Lo sé Bonnie, tienes razón, tu y mi madre la tienen, solo no me atrevo a decírselo, por lo menos no esta noche, te llamo luego- bajé la mirada para colgar el teléfono y revisar la hora, mis padres ya deberían estar aquí.

Al levantar la vista, me encontré frente a mí a un hombre vestido completamente en negro, tenía el cabello negro y lustroso, unos labios sensuales e invitantes y unos ojos de un azul profundo, llenos de desconcierto y anhelo, algo en su postura me decía que era peligroso y aun así no sentí miedo

-Katherine

-Em… no, am… - miré hacia atrás en busca de alguien que pudiera ayudarme en caso necesario, pero estaba completamente sola a excepción de este hombre- soy Elena

-Oh, tu, es que luces…- suspiró como tratando de recomponerse- lo siento, tu solo, me recuerdas mucho a alguien…- me miró detenidamente unos segundos antes de volver a hablar- soy Damon – dijo con una ligera sonrisa

- no es por ser grosera o algo así, Damon pero es un poco espeluznante que estés en medio de la nada

-mira quién habla, tú estás sola aquí – respondió con una sonrisa torcida

-es Mystic Falls nada malo pasa aquí – Damon asintió- tuve una pelea con mi novio- le dije señalando a mi espalda

-¿sobre qué? Si puedo preguntar- estrechó un poco los ojos al tiempo que levantaba sus manos en señal de rendición, suspiré

-la vida, el futuro, lo tiene todo planeado- respondí moviendo un poco la cabeza en señal de negación, no podía entender como después de tanto tiempo con Matt aun me aterrara pensar en un futuro a su lado

-¿y tú no lo quieres?- preguntó con una ligera sonrisa de suficiencia

-no sé lo que quiero

-bueno, eso no es del todo cierto, quieres lo que todo el mundo quiere…

-¿Qué? ¿Un extraño misterioso que tiene todas las respuestas?- lo reté

-Hmm. Bueno, solo digamos que he estado aquí por mucho tiempo- asentí para que continuara- he aprendido algunas cosas

-Entonces, Damon… dime ¿qué es lo que quiero?

-quieres un amor que te consuma, quieres pasión y aventura e incluso un poco de peligro- nos quedamos mirando por un momento, estaba perdida en sus profundos ojos azules

-Entonces ¿tú qué quieres?- pregunté, Damon suspiró, en ese momento sonó un claxon, miré hacia atrás y vi como se acercaba el auto de mis padres- esos son mis padres- cuando volteé de nuevo al frente Damon estaba más cerca que antes, su rostro a unos centímetros de mío y mis ojos trabados en los suyos.

-quiero que obtengas todo lo que estas buscando, pero ahora mismo quiero que olvides que esto pasó- dijo mientras sus pupilas se dilataban y regresaban a su estado original- no puedo dejar que nadie sepa que estoy aquí aun, buenas noches Elena- y desapareció

------ Fin Flashback--------

El sonido de la puerta de mi habitación me sacó de mis pensamientos, Stefan entró sonriéndome, instantáneamente me levanté dejando mi diario bien cerrado a un lado y lo besé

-¿alguna novedad?

-no, su celular sigue apagado

-me preocupa Stefan, se fue sin despedirse ni decir nada y hace casi un mes que lograste hablar con él y realmente no te dijo nada, sabes que tenemos la amenaza de la llegada del cazador de vampiros Stefan, vamos a necesitar su ayuda y lo sabes

-lo sé pero conozco a Damon, Elena, va a estar bien pero necesita tiempo, sabemos que podría reaccionar mal si lo presionamos demasiado

-sí, lo sé, pero aun así creo que al menos deberíamos saber donde esta

-lo sé, voy a seguir intentándolo, si no logro contactarlo en esta semana, te prometo que le pediré a Bonnie que haga un hechizo localizador ¿de acuerdo?

-está bien

Sabía que Stefan tenía razón, ya había sido testigo de sus arranques cuando descubrió que Katherine había estado libre todos estos años y que jamás le había importado Damon, sobre todo cuando ella le dijo que siempre había sido Stefan y que siempre seria él su única elección; no quería imaginar lo que podría estar haciendo ahora que le había dejado en claro que mi elección era Stefan, tal como Katherine lo había hecho. Pero necesitaba encontrarlo, necesitaba saber que iba a salir adelante y que lo superaría sin involucrar muertes humanas.

Forks

Bella POV

Estacioné el auto de Damon frente a la pequeña casa de color rojo que tanto se asemejaba a un granero, necesitaba tener esta conversación con Jacob, ya había estado postergándola durante la última semana y tenía muy en claro que no podía ni debía seguir haciéndolo.

Salí del auto y me dirigí a la casa, pero Jacob salió de ella antes de que pudiera acercarme 

-Hey- saludó caminando en mi dirección

-Hey

Un silencio incomodo nos rodeo mientras caminábamos en dirección a la playa, no tenía idea de cómo comenzar esta conversación, había demasiadas cosas que aclarar entre nosotros.

Al llegar a la playa nos dirigimos hacia un gran árbol blanco profundamente enraizado entre las rocas. Las raíces retorcidas se prolongaban hasta el borde del espigón. Parecían un centenar de tentáculos frágiles. No estaba segura de que fuera el mismo árbol en que Jacob y yo habíamos mantenido la primera conversación (con la que tanto se había complicado mi vida), pero lo parecía. Me senté en el mismo lugar que en aquel entonces y miré hacia el mar, ahora invisible. Sentí a Jacob sentarse a mi lado, suspiré.

-así que… eres un hombre lobo- afirmé, tenía que terminar con esto de una buena vez

-si- respondió con un suspiro, aun no me atrevía a mirarlo, continúe con mí vista al mar

- y esa es la razón por la que has estado evitándome- afirme de nuevo mirando al frente

-sí, Por una parte, se suponía que no tenía que revelarte nuestro secreto, eso era importante, pero por otra, no es seguro para ti. No tengo un control total sobre esto, Podrías resultar herida... si me enfado, si me disgusto más de la cuenta… lo que menos quería era dañarte, jamás me lo perdonaría, por eso decidí que lo mejor era alejarme de ti, tenía que protegerte de algún modo Bella

- entiendo Jake, así que… en el bosque, eras tú, tú me protegiste de Laurent- recordé aquel día que me parecía ya tan lejano, de no ser por Jacob estaría muerta y jamás habría sabido sobre Damon

- si…- suspiró – lo lamento si era amigo tuyo o algo así, pero estaba a punto de matarte, teníamos que eliminarlo - soltó de golpe - ¿no estás molesta por eso a si?

-no, Laurent no era amigo mío ni nada parecido… espera, ¿dijiste eliminarlo? Entonces, ¿ustedes lo mataron?- me tomo varios segundos procesar lo que Jacob acababa de decirme- Pensé que acabaría encontrándome... Le he estado esperando cada noche con la esperanza de que se conformara conmigo y dejara tranquilo a Charlie. Damon ha estado ahí pero eso solo me ha hecho preocuparme también por él. He pasado tanto miedo, Jacob. Pero... ¿cómo es posible? ¡Era un vampiro! ¿Cómo le has matado? Era fuerte y duro como el mármol...

Se sentó más cerca de mí y me rodeó con un brazo en gesto de consuelo.

-Fuimos creados para eso, Bella. Nosotros también somos fuertes. Desearía que me hubieras dicho que tenías tanto miedo. No tenías por qué.

-Tú no estabas ahí para escucharme -musité, sumida en mis pensamientos.

-Sí, cierto.

-un segundo, si ustedes mataron a Laurent…- sacudí mi cabeza en negación, de pronto sentía la garganta sumamente seca

- ¿Qué sucede Bella?- preguntó preocupado

- es solo… Hace una semana Damon se adentró en el bosque y, dijo que había encontrado el rastro de un frio, si ustedes mataron a Laurent hace más de un mes ¿de quién es el rastro? – en el fondo sabía la respuesta pero me negaba a aceptarla, estaba demasiado aterrada como para siquiera pensar en ella

-Resulta que eran dos. Creemos que su compañera nos tiene ganas. Según nuestras leyendas, los vampiros se encabronan mucho cuando matas a su pareja, pero ésta no hace otra cosa que alejarse a toda prisa para volver enseguida, y así una y otra vez. Sería más fácil quitarla de en medio si conociéramos su objetivo, pero su conducta carece de sentido. Sigue bailando al filo de la navaja, parece que estuviera probando nuestras defensas en busca de una forma de entrar, pero ¿adónde quiere entrar? ¿Dónde pretende ir? A Sam le parece que intenta separarnos para disponer de mayores oportunidades...

Su voz perdió intensidad hasta que empezó a sonar como si hablara al otro extremo de un túnel largo. No fui capaz de distinguir las palabras por más tiempo. Mi frente se perló de sudor y sufrí un retortijón en el estómago como si volviera a tener la gripe. Exactamente igual que si tuviera la gripe.

Me aparté de él a toda prisa y me incliné sobre el tronco del árbol. Las arcadas me convulsionaron todo el cuerpo sin resultado alguno. El estómago vacío se contrajo a causa de la náusea producida por el pánico, pero no tenía nada que vomitar.

Victoria estaba ahí. Me buscaba. Mataba extranjeros en los mismos bosques que Charlie estaba rastreando. La cabeza empezó a darme vueltas hasta marearme y volver a provocarme arcadas. En ese momento desee más que nunca que Damon estuviera a mi lado.

Jacob me sujetó por los hombros y evitó que me resbalara y cayera sobre las rocas. Sentí su cálido aliento en la mejilla.

-Bella, ¿qué te pasa?

-Victoria -respondí entrecortadamente en cuanto fui capaz de recobrar el aliento entre los espasmos de las náuseas.

-¿Quién? -preguntó Jacob - ¿Me oyes? ¡Bella, Bella! – me tomo del brazo y lentamente me ayudó a sentarme de nuevo

-No era la compañera de Laurent -gemí apoyada en su hombro - sólo eran amigos...

-¿Necesitas un poco de agua? ¿Un médico? Dime qué he de hacer —me pidió, frenético.

-No estoy enferma, tengo miedo... -le expliqué entre susurros. En realidad, la palabra «miedo» no abarcaba todo el abanico de mis sentimientos. Aunque sabía que ella vendría por mí en algún momento y que sabía que Damon jamás permitiría que me tocara, la certeza de que ella ya estaba aquí y buscando la manera de acercarse a mí era más de lo que había imaginado. Me dio unas palmaditas en la espalda.

 -¿Temes a Victoria? -Asentí con la cabeza entre estremecimientos.

-¿Victoria es la hembra pelirroja? -Temblé de nuevo y gimoteé:

-Sí.

-¿Cómo sabes que no era la compañera del que matamos?

-Laurent me dijo que ella era la pareja de James -le expliqué mientras movía la mano de la cicatriz de forma inconsciente. Jacob giró mi rostro hacia él y lo mantuvo firme con su mano enorme. Clavó su mirada en mis ojos.

-Bella, ¿te dijo algo más? Es importante. ¿Sabes qué es lo que busca?

-Por supuesto –susurré- me busca a mí. - Sus ojos se abrieron como platos y luego los entrecerró desmesuradamente.

-¿Por qué? -inquirió.

-Edward mató a James -Jacob me aferró con tanta fuerza que detuvo la nueva oleada de nauseas que se empezaba a formar. Su abrazo me mantuvo de una pieza - Victoria se ha obsesionado con él, pero Laurent dijo que ella pensaba que sería más justo matarme a mí que a Edward. Pareja por pareja. Supongo que no sabía, aún no lo sabe, que... -tragué con fuerza -que las cosas ya no son como antes entre nosotros.

-¿Es eso lo que sucedió? ¿Por qué se fueron los Cullen?

-Bueno, al fin y al cabo, no soy más que una humana, nada especial -le expliqué a la vez que me encogía de hombros imperceptiblemente.

Algo muy similar a un gruñido retumbó en el pecho de Jacob.

—Si ese idiota chupasangre es de verdad tan estúpido...

- por favor. No sigas. - Jacob vaciló y después asintió una vez.

-Esto es muy importante -repitió, ahora con aire profesional - Es exactamente lo que necesitábamos saber. Debemos decírselo a los demás ahora mismo, quédate aquí un minuto ¿de acuerdo?- se levantó precipitadamente y comenzó a caminar rumbo a unos arbustos que se encontraban a unos metros detrás de nosotros

-¿Adónde vas?

-Estaré de vuelta enseguida -me prometió. Luego se giró, para adentrarse en el bosque. Pasó fugazmente entre los árboles con la velocidad y la elegancia de un venado.

Sabía que debía decirle sobre esto a Damon, rápidamente saque mi celular del bolsillo trasero de mi pantalón y marque su número, Damon respondió al primer timbrazo

-¿Qué ocurre?- preguntó con voz preocupada

- tienes que venir a la reservación lo antes posible, hay algo que debes saber

- ¿Dónde estás? ¿Te encuentras bien?

- sí, estoy bien, estoy en First Beach

-estaré allá en un minuto, cuídate quieres- fue lo último que dijo y colgó el teléfono

De pronto una mano se poso en mi hombro haciéndome saltar.

-Estás realmente asustada, ¿no? -me preguntó. Asentí con la cabeza.

-No lo estés. Cuidaremos de ti y también de Charlie. Lo prometo.

-La posibilidad de que tú o Damon localicen a Victoria me aterra más que la perspectiva de que ella me encuentre a mí. - Se echó a reír.

-tienes que confiar un poco más en nosotros, es insultante- negué con la cabeza, había visto demasiados vampiros en acción, y la imagen de Damon siendo atravesado por esa rama aun rondaba mi mente

-¿A dónde fuiste?- inquirí. Frunció los labios y permaneció callado

- ¿Qué pasa? ¿Es un secreto?- Torció el gesto.

-En realidad, no, aunque es un poco extraño. No quiero que te dé un ataque.

-A estas alturas ya me he acostumbrado a lo extraño, ya sabes -intenté sonreírle sin demasiado éxito. Jacob me devolvió una enorme sonrisa con desenvoltura.

-Supongo que no te queda otro remedio. Vale. Mira, cuando adoptamos forma de lobo, podemos... podemos escucharnos unos a otros. - Se me desplomaron las cejas de puro desconcierto.

-No oímos los sonidos –continuó - pero escuchamos... pensamientos. De ese modo nos comunicamos entre nosotros sin importar cuán lejos estemos unos de otros. Es de gran ayuda cuando cazamos, pero, aparte de eso, también supone una molestia enorme. Resulta muy embarazoso no tener secretos. Es muy extraño, ¿verdad? – sacudí la cabeza

- se te da muy bien desenvolverte con lo extraño. Pensé que te iba a molestar.

-No es así... Bueno, no eres la primera persona que he conocido capaz de leer los pensamientos ajenos, por lo que no se me antoja tan raro.

-¿De verdad? Espera... ¿Te refieres a tus chupasangres?

-Me gustaría que no los llamaras así. -Se echó a reír.

-Lo que tú digas. Entonces, ¿te refieres a los Cullen?

-No, sólo... Sólo a Edward.- Jacob parecía desagradablemente sorprendido.

-Pensé que eran cuentos. He escuchado leyendas sobre vampiros capaces de hacerlo, dotados de esa capacidad adicional, pero siempre creí que se trataba de mitos.

-¿Hay algo que siga siendo un mito? -le pregunté con ironía. Puso cara de pocos amigos.

-Supongo que no.

-¿Acabas de convertirte en lobo hace un momento para hablar con Sam? —le pregunté con curiosidad. Jacob asintió. Parecía avergonzado.

- mantuve la charla corta, solo les dije que debíamos reunirnos aquí, que era sobre la pelirroja

- está bien, yo llame a Damon, me parece que él también debería saber esto- respondí- estará aquí en unos minutos

- sí, y hablando de tu amigo, que demonios es él, vi su rostro cuando…- su voz disminuyó

- si lo recuerdo- lo corté, no quería volver a tener la imagen de Damon con esa rama atravesándolo- Damon, es un vampiro- solté de golpe

- pero… entonces los Cullen…

- también son vampiros, solo que ellos son de la especie de los fríos, la de Damon es la… original por así decirlo- trate de explicar, aunque para mi aun era un tanto confuso

-genial, entonces hay mas especies de sanguijuelas- espetó con sarcasmo – así que son diferentes ¿cierto?- preguntó más calmado- es obvio que la piel de Damon no es dura como roca, ni brilla con el sol y por supuesto sus ojos no son ni rojos ni dorados… ¿en qué más se diferencian?- continuo casi hablando para él mismo.

- lo cubriste casi todo- respondí por lo bajo

-Damon… su especie, ¿matan personas?

Damon POV

Encendí mi celular, le había dado mi numero a Bella, ella había insistido en que debía hablar con su amigo el lobo a solas, pero después de ver que rápido el chucho perdía el control decidí darle un teléfono celular y mi numero, si algo pasaba o el chucho se molestaba de más me marcaría y estaría en un minuto a su lado.

Había pasado poco más de una hora cuando recibí una llamada de Bella, me apresuré a responder el teléfono sin dejar pasar un segundo timbrazo

-¿Qué ocurre?- pregunté a penas me coloque el teléfono en el oído

- tienes que venir a la reservación lo antes posible, hay algo que debes saber- se oía tranquila, lo cual era buena señal, pero eso no me detenía de preocuparme por ella

- ¿Dónde estás? ¿Te encuentras bien?

- sí, estoy bien, estoy en First Beach

-estaré allá en un minuto- dije- cuídate quieres- agregue al final un poco menos brusco, ahora que me había dicho que estaba bien, terminé la llamada, guarde el teléfono en el bolsillo de mi pantalón y me dirigí al sofá por mi chaqueta, estaba por salir de la casa cuando recibí una segunda llamada, tome el teléfono y contesté sin molestarme en revisar el numero que llamaba.

-¿paso algo?- respondí automáticamente preocupado

- finalmente respondes una de mis llamadas- respondió una voz familiar del otro lado de la línea

- Stefan, que desagradable sorpresa, debo recordar comprobar el número antes de responder la próxima vez- alegué

- me alegra escucharte hermano, al menos me dice que estas bien- la verdad era que a mí también me alegraba oír de él, ahora que Bella estaba en mi vida y que finalmente me había dado cuenta de que lo que sentía por Elena no era más que el amor que le tendría a una hermana podía escuchar de nuevo la voz de mi hermano sin ningún rastro de rencor, pero claro, jamás admitiría eso ante él.

-no tienes por qué preocuparte por mi san Stefan, como puedes notar aun no eh muerto, así que si me permites, tengo cosas más importantes que hacer en este momento- dije

- espera- me detuvo- Damon en serio necesitamos tu ayuda, hay un cazador de vampiros que se dirige a Mystic Falls y no sabemos cómo enfrentarnos a él, no podemos hacer esto solos Damon, se que debes estar enfadado conmigo pero por favor, ayúdame, no puedo hacer esto sin ti hermano- terminó Stefan, podía sentir la sinceridad y desesperación de sus palabras

- ¿sabes cuándo llegará al pueblo?- pregunté, necesitaba saber cuánto tiempo tenía para convencer a Bella de que viniera conmigo, de ninguna manera la iba a dejar aquí sola con un vampiro con sed de venganza al acecho

-no podemos saberlo con exactitud, tal vez una semana o tal vez menos, no lo sé- casi se podía sentir el alivio en su voz

- te veré en una semana Stefan

- gracias Damon, sabía que podía contar contigo

- si bueno, no te acostumbres… y Stefan, prepara el cuarto de huéspedes, tal vez lleve una pequeña visita conmigo- colgué antes de darle oportunidad de preguntar algo más

Me puse mi chamarra y Salí de la casa, me adentré un poco en el bosque y me dirigí a velocidad vampírica hacia First Beach, una vez ahí no me fue difícil encontrar el aroma de Bella, era simplemente inconfundible, lo seguí hasta llegar a donde se encontraba.

Me acerque aun por el borde del bosque detrás de ella, hasta que pude escuchar su voz.

- lo cubriste casi todo- susurró

-Damon… su especie, ¿matan personas?- preguntó el lobo, decidí responder esa pregunta yo mismo.

- si- respondí saliendo del bosque y acercándome a Bella- pero solo aquellos que no se saben controlar o los que simplemente disfrutan de hacerlo- continué arrogante- mi especie no necesariamente mata personas para alimentarse, podemos simplemente tomar lo que necesitamos de ellas y luego borrar el recuerdo de lo sucedido, la persona nunca llega a tener idea de lo que ocurrió y las heridas sanan rápido, como si nada hubiera pasado - dije con una sonrisa arrogante- Pero habemos algunos que bebemos de bosas de sangre que robamos de hospitales, así ninguna persona sale herida- terminé, Bella debía de haberle contado lo que era ya que no pareció sorprenderse.

-¿debería de preocuparme de tu presencia?- preguntó retándome con la mirada, y adoptando una pose defensiva- teníamos un tratado con los Cullen, ellos no debían cruzar la línea divisoria hacia la reservación o morder a un humano, de lo contrario habría consecuencias, aunque es claro que ni tu ni tu especie entran en el tratado, y que obviamente eres muy diferente a los fríos, tendrás que respetar por lo menos la reservación y sus habitantes, o nos veremos obligados a tomar medidas, así que te repito ¿debería de preocuparme de tu presencia?- vaya el chico tenía agallas, y sabía sobre los fríos, me pregunté cuanto más Bella le había contado

- yo diría que no, tengo suficiente sangre en mi nevera como para abastecerme por un mes, los que deberían preocuparse son los bancos de sangre de Seattle y Port Angeles – respondí con una sonrisa arrogante. El chucho estaba a punto de agregar algo más cuando su grupo salió del borde del bosque.

- bien, ¿qué era eso tan importante que tenías que decirnos Jacob?- inquirió el que aparentemente era el líder de la manada

-Sé lo que quiere la pelirroja —dijo Jacob, de golpe luciendo ahora mucho mayor que hace un momento

-¿Y? -preguntó uno de ellos. Jacob se puso serio.

-Pretende vengar a su pareja... sólo que no se trataba de la sanguijuela de cabello negro a la que hemos matado. Los Cullen se cargaron a su chico el año pasado, así que ahora ella va a por Bella.

No era ninguna novedad para mí, pero aun así sentí un escalofrío.

-ésa es la razón por la que los chupasangres han intentado burlarnos. El punto de mira de la pelirroja está fijo en Forks. – todo el grupo con excepción de el líder se quedaron mirando a Bella con la boca abierta durante un largo rato. Yo sacudí la cabeza.

-Excelente -dijo uno de ellos, por fin, y una sonrisa empezó a dibujarse en las comisuras de su boca-. Tenemos un cebo.

Con asombrosa velocidad, Jacob agarró una gran roca del suelo y se la tiró a la cabeza. La mano del chico relampagueó en el aire, más rápido de lo que habría creído posible, y atrapó la roca antes de que le golpeara en la cara.

-Bella no es ningún cebo Jared. – así que ese era su nombre, como si realmente me importaran sus nombres

-Ya sabes a qué me refiero -dijo Jared, impertérrito.

-En tal caso, tenemos que cambiar nuestras pautas -dijo Sam, haciendo caso omiso de la discusión entre Jacob y Jared-. Vamos a tenderle unas cuantas trampas, a ver si cae en alguna. Habremos de actuar por separado, aunque no me hace gracia, pero no creo que intente aprovecharse de que estemos divididos si es verdad que viene a por Bella.

Noté que Jacob miraba a Bella preocupado, sabía cómo se sentía, yo conocía esa mirada perfectamente, era la misma que tenía yo al mirar a Elena.

-No te preocupes por Bella, aquí estoy yo para protegerla- Jacob simplemente asintió

- no dejaremos que esa chupasangre se acerque a ti Bella, incluso si para eso tengamos que trabajar juntos tu…novio y la manada, aunque eso no nos agrade del todo.- no pude evitar sentirme bien cuando Jacob me nombró como el novio de Bella y que ella no lo corrigió, sino que tomo mi mano y la apretó un poco.

Edward  POV

Me encontraba rumbo a New Hampshire, después de poco más de cinco meses Alice y Carlisle habían logrado convencerme de que lo mejor para mí era tratar de distraerme, además al escuchar la voz rota de Esmee me había dado cuenta de cuánto los necesitaba así como ellos a mí, era por eso que ahora me dirigía a reunirme con ellos, con mi familia después de cinco meses.

Cinco meses, cinco largos y obscuros meses sin ella, sin la única luz lo suficientemente brillante como para iluminar completamente mi existencia, no sabía aun cuanto más podría aguantar sin tenerla a mi lado, pero debía ser fuerte y apartarme de su camino, eso era lo mejor para ella, tenía que mantenerme apartado de su vida y dejar que continuara su camino lejos de mí, lejos del mundo sobrenatural y a salvo.

Me desvié en una carretera olvidada y entre en el bosque, conduje hasta una gran casa escondida y estacione el auto, Esmee y Carlisle ya me esperaban en la puerta, sus pensamientos llenos de la dicha que les traía el verme de nuevo.

-me alegra tanto volverte a ver Edward – dijo Esmee abriendo sus brazos apenas estuve cerca de ellos, la abrase con fuerza, a mí también me alegraba estar de nuevo junto a mi familia, aunque mi felicidad nunca volvería a estar completa, pero debía hacer lo posible por olvidarme aunque fuera un segundo de eso y disfrutar de que estaba de regreso con mi familia

- es bueno tenerte con nosotros hijo- saludo Carlisle dándome un fuerte abrazo

- a mí también me alegra verlos,- de pronto fui atacado y caí al piso

-eres un estúpido- gritó Alice- nunca te vuelvas a ir entendiste- me reprendió mientras me daba un fuerte abrazo, una vez que pasaron las bienvenidas y los regaños nos sentamos en la sala, las cosas en la familia no eran muy diferentes de lo que eran antes de nuestra partida, Jasper aun se sentía culpable de que yo no estuviera junto a Bella en estos momentos, Alice trataba de consolarlo lo mejor que podía, Rosalie sentía pena por mi situación pero aun así pensaba igual que yo, que era mejor para ella seguir con su vida humana, Emmett por su parte pensaba que aun podríamos regresar y que yo podía ir con Bella, pedirle mil veces perdón de rodillas, convertirla y dejarme de tonterías, debo admitir que a veces envidiaba su manera de pensar, si tan solo las cosas fueran tan fáciles… pero no lo eran, para mi desgracia todo era mucho más complicado.

Estaba a punto de explicarles como había seguido un rastro de Victoria hasta Brasil, cuando de pronto un flashazo en la mente de Alice me sorprendió, la imagen no duro demasiado, solo lo suficiente como para torturarme por varias noches.

-Alice, ¿Qué fue eso?

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hola a todos se que he tardado mucho en mis actualizaciones no se cuando podre volver a publicar una cosa si es segura no voy a abanonar la historia espero que su paciencia haiga valido la pena,y haigan disfrutado el capitulo tanto como yo al escribirlo, porfavor dejen sus comentariosporque son lo que me inspira y motiva a seguir escribiendo por ultimo les informo que le estare avisano sobre mis actualizaciones en mi twitter @rosaliewolfvamp siganme

los amo