EDWARD POV.

El tiempo corre aunque sea imposible, hacía ya justamente dos años seis meses desde que la perdí, la última vez que la vi, fue justamente cuando estuvo en el hospital seis meses atrás de esta fecha… recuerdo bien ese día estábamos trabajando, Louis nos daba los últimos dos conciertos que daríamos, las fechas eran separadas y después de esto seguía un largo y merecido descanso, ellos se encontraban satisfechos, a mí la verdad me daba lo mismo, mi vida había perdido su sentido, solo era algo más que hacer. La llamada me saco de mis ensueños…

-Sr Swan… su hermana está en la línea uno dice que es urgente- él había presionado el speaker por esto escuchamos todo.

-Bien… Hola…- miro su reloj eran más de las 11 de la noche.

-Louis…- la voz correspondía a la de Renée, se oía sumamente angustiada.

-¿Renée que pasa?- correspondió a su angustia con un tono de preocupación, mientras Jasper se alteraba a mi lado.

-Es Bella…-al escuchar su nombre mi cuerpo reacciono, Jasper se levantó de inmediato de donde estábamos y nos acercamos al escritorio donde Louis se dejaba caer.

-Tía ¿Qué le pasa a mi hermanita?…

-Se puso mal, Phil la llevo a el hospital, yo estoy con Cathy, no puedo moverme de casa, necesito que alguien vaya con el.-dijo ella aprisa y yo sentí que mi vida se iba entre mis manos.

-Voy para allá no te preocupes Bella va estar bien, seguro la dan de alta enseguida… te dejo con Jasper en la línea…- tomo sus llaves y su saco.

-¡No, yo voy contigo!… ¡Estamos hablando de Bella!- insistió Jasper desesperado este negó.

-Te necesito con Renée, ella debe estar tranquila- le grito, salió de la oficina y yo sali detrás de él.

-Edward cualquier cosa me avisaras…-pidió y yo asentí, alcance a Louis rápidamente.

-Yo manejo…-le dije serio, este me miro extrañado pero su preocupación era más grande como para ponerse a discutir.

Cuando llegamos nos encontramos con Phil este hablaba con Renée, por lo que escuchamos, Bella permanecería internada, me sorprendió solo ver a Phil, pensé que estaría el tal Paul ahí pero no fue así, el doctor Gerandy nos comunicó que Bella había abusado ya de su cuerpo, que la presión la traía muy baja y preguntaba si habían notado su tristeza o algo que la mantuviera en ese estado Phil no supo contestar, así que le marco a Renée la puso en alta voz y escuche como se encontraba mi princesa, ella decía que estaba muy triste que el trabajo que ella tenía no la complacía en nada,  agregando que últimamente no comía bien o de plano no tenía hambre, el doctor le informo que la mantendría internada hasta tener una mejoría, Bella estaba sumamente delicada y al parecer ella no tenía alguna motivación para salir del estado en el que se encontraba, dijo que no había necesidad de que todos se quedaran a cuidarla pues tendría la atención necesaria, también dijo que esto era una crisis y que afortunadamente habían llegado a tiempo, pero no por eso era menos delicada o seria.

Louis hablo con Renée y le dijo que Phil regresaría con ella y que él se quedaría con Bella, en la mañana cambiarían turno para que Renée se quedara con ella la mañana y en la tarde estaría Jasper y el supliría por las noches, acepto con la condición de que le reportara cualquier cambio. Vi como Louis hablaba por teléfono con Jasper y yo me acerque al doctor.

-Puedo verla… -pedí, el miro a mis espaldas y accedió.

-Solo un momento, esta sedada, así que no reaccionara, después de 15 horas la trasladare a piso, acompáñame…- lo seguí hasta que llegamos al lugar- se prudente…-asentí.

Otra vez nos veíamos en la misma posición, que hace ya varios años, cuando la vi, mi corazón reacciono a su presencia, era como estar completo y respirar después de tanto tiempo de no hacerlo.

-Hola ¡Mi Cielo!- le di una sutil caricia- Estas aún más hermosa que la última vez que nos vimos…- no podía dejar de verla, me detuve en sus labios e hice lo mismo que esa vez la bese ligeramente, al retirarme pensé que se había despertado.

-¡Edward!- susurro, la mire directamente esperando que abriera sus ojos, pero nada paso un leve suspiro salió de su boca y ella siguió dormida, tome su mano y coloque mis labios en su mano.

-¿Pero que te ha pasado mi amor, porque estas así?… pensé que ahora que estaba lejos de ti, serias feliz.- me detuve  lo más que pude en mirarla, acaricie su rostro y en cada contacto parecía recobrar el mismo cielo, mi amor estaba ahí, mi corazón se había aferrado a ella, y no había forma alguna de negarlo, justo ahora mi cabeza gritaba: ¡Sera realmente imposible alejarte de ella justo ahora que la volviste a encontrar! ¡Le perteneces, aquí está tu razón más fuerte para vivir!

-Edward… -dijo Louis- debes irte yo…- oprimí su mano aterrado por separarme de ella pero no habría forma de que nadie me detuviera.

-Edward no te vayas… no me dejes sola… quédate conmigo tan solo un momento…-murmuro Bella desesperada, Louis me miro atónito y solo asintió.-Por favor…- suplico y una lagrima recorrió su rostro jamás abrió sus ojos, era increíble como la vida nos jugaba una muy mala broma pues parecía que ambos reaccionábamos a la presencia del otro o al menos me aferraría a esa idea.

-No me iré a ningún lado, aquí estaré para ti siempre, mi cielo…- bese su frente y en su rostro se dibujó una pequeña sonrisa, pasaron las horas, varias veces la cubrí de tiernos besos y dulces caricias, la cuide lo mejor que pude pero me quede dormido en la silla con su mano entre las mías.

-Edward, la van a pasar a un cuarto, para que este más cómoda…-asentí y me desperece, deposite un beso en sus labios y salimos de ese lugar para ver cuando la bajaran al cuarto-Gracias- me dijo.

-No tienes nada que agradecer, aun la amo con todo mí ser, he intentado arrancármela del corazón pero simplemente ella se niega a salir…- aquello era mi cielo y mi infierno, porque era feliz de amarla, pero odiaba hasta lo más profundo de mí ser por no tenerla.

-Si lo veo… parece que de su corazón aun no has salido-sonreí ante la posibilidad de esto, porque para ser honestos cuando despertara quizá ella cambiaria de opinión.

-No lo sabemos…- conteste con una sonrisa triste y fui sincero- ¿Sabías que antes de subirme a ese avión yo estaba dispuesto a dejar todo y quedarme hasta que ella se fuera conmigo?- la reacción sorprendida de Louis, me dejo fuera de combate, yo sonreí- ¡Me la hubiera robado y quizá las cosas no serían lo que son ahora!

-Edward tú debes saber que…-empezó a decirme el pero no lo deje seguir.

-Para tu fortuna, Bella siempre hace lo correcto…- baje la mirada y mire como se acercaba una camilla y en ella venia Bella, me acerque a ella desesperado por su cercanía.

-Aun no has sabido ¿qué paso en esas fechas?- replico Louis mientras, yo de nuevo tomaba mi lugar, Renée que en ese preciso momento llego me escucho.

-Claro que lo sé, como no saber lo que paso y lo que hice- ambos me miraron atónitos y Renée me miraba asustada, reconocí la misma mirada en mi madre.

-Perdóname…-soltó ella y yo la mire sin comprender su disculpa.

-Renée ¿De qué te disculpas?-pregunte y ambos me miraron sin entender- en mi defensa puedo decirte que jamás engañe a Bella, yo no podría hacer eso, la amo más de lo que puedas imaginar, antes podría decirte que la amaba más que a mi vida pero ahora…- guarde silencio y fije mis ojos en el rostro de Bella- puedo decir que mi vida tiene belleza y es solo por su existencia.

-Edward, mira lo que pasa es que…-dijo Renée pero la interrumpió el doctor.

-Buenos días…- saludo, tomo la carpeta de Bella y empezó a checarla- Bien, ahí vamos- se acercó a Bella y le dijo- ¡Necesito que luches! Vamos Bella tu abuelo no querría que tu vida terminase.

-¿Cómo la ves Gerandy?-dijo Louis y el levanto la vista de Bella, me miro y respondió.

-Los medicamentos han actuado pero aun asi falta que Bella de batalla, tú has sido de ayuda…-dijo mirándome- Lo que realmente me preocupa es cuando despierte, no deseo alterarla y no sé cómo estén las cosas, desearía que no hubiese nada que la perjudique.

-Eso no es problema…-dije respondiéndole- Yo no estaré aquí para alterarla, ella estará tranquila.

-No creo que debas irte, Bella esta mejor gracias a que tú estás aquí- me dijo Renée.

-No creo que sea lo recomendable Renée…-dijo Louis- Bella aún tiene mucho encima, y no sabemos cómo va a tomar esto- me miro y me dedico una gesto de disculpa- No es que no quiera que estés aquí, pero desearía manejar las cosas con Bella, justo ahora ella…- no lo deje seguir.

-Es nuestra prioridad.-concluí, y yo tampoco quería solo que me viese asi, yo aún tenía mucho que arreglar, sin mencionar que ahora ella tenía novio y quizá preferiría que él estuviese con ella.

Ella paso 13 días en el hospital de los cuales yo pase seis noches con ella, Louis me comento la mejoría de ella, el doctor Gerandy y el parecían estar de acuerdo a que se debía gracias a mi presencia, Jasper entraba a verla y platicaban por horas, al parecer este la cuidaba por las tardes, mientras que Renée lo hacía por las mañanas y Louis y yo lo hacíamos por las noches, pronto deje de verla, pues ella no necesito los sedantes de las noches, así que nuevamente me separe de ella, me di cuenta que ella se había vuelto mi droga, en el instante que buscaba nuevas cosas de ella, después de esos días me mantenía conforme, con los reportes de Jasper, no sé cuánto duraría aquello pero al menos estaba seguro que aprovecharía cada segundo que me fuera regalado.

JASPER POV.

Hoy estaba ahí al lado de mi hermana, el que ella estuviese ahí era algo desquiciante, había protestado por el hecho de que Edward no estuviese cuando ella despertara, pero los demás parecían convencidos de que para Bella esto sería lo mejor.

-No deberías irte…-le dije a Edward que se encontraba apoyado en la cama con la mano de Bella entre las suyas.

-Jasper… yo estoy aquí, solo porque me necesita, pero estoy seguro que cuando despierte deseara ver a Paul.

-¡Ese imbécil!- proteste más molesto, nunca había detestado a nadie pero el tal Paul simplemente no lo tragaba- Valiente novio tiene, mira que no se ha parado por casa de Renée y menos le ha llamado.

-Lo que sea Jasper…- dijo esta vez apartándose de ella- Bella dejo de pertenecerme.

-Aun asi, si tú supieras las razones por las cuales te digo esto, pensarías lo mismo que yo.

-Pues entonces se claro y dime las cosas, porque justo ahora te pareces a Renée y al mismo Louis que me dicen cosas que no entiendo.

-No es algo que me corresponda decirte, además estoy seguro que Bella me mataría- dije dirigiéndole una mirada a Bella, de pronto mi hermana comenzó a inquietarse- ¿Bella?

Ambos nos acercamos, al escuchar el pitido de las maquinas, Edward se colocó cerca de ella y comenzó a cantar suavemente para ella, esto pareció tranquilizarle, una enfermera entro y empezó a checar las maquinas.

-Despertara pronto…-dijo dándonos una sonrisa- guarden la calma, quizá ella escucho algo que no le gusto y por eso el holter comenzó a sonar, sean razonables no la alteren recuerden que ella tiene conciencia.

Pasaron dos horas más en las que nos mantuvimos en silencio, Edward se recostó a su lado y la abrazo.

-¡Dios me duele dejarte!- murmuro presionando sus labios en su frente- Si alguna vez quieres saber lo mucho que te amo, dirígete a una venta y cuenta las estrellas del cielo…- beso sus labios ligeramente y se apartó de ella.

-¿Qué pasa?- pregunte al notar que ponía distancia entre ellos.

-Su sueño ya es menos profundo, debo marcharme- le di la espalda a Bella y lo mire sintiéndome impotente.

-No puedo ni darte las gracias, sería insuficiente hermano- le di un abrazo, tenía un amigo como ninguno otro.

-Jasper…-dijo Bella quejándose, ambos nos giramos Edward salió a prisa de la habitación.

-Si hermanita…-ella suspiro y abrió sus ojos- ¡Vaya por fin!- exclame eufórico abrazándola mientras ella me miraba aturdida.

-¿Edward?- pregunto y yo la mire si ella lo quería aquí le llamaría sabía que él estaba afuera, escuchándole- Jazz…

-¿Qué pasa linda?- insistí y ella miro a su alrededor.

-¿Cambiaste de perfume?- dijo aun confundida, yo sonreí y negué- Debí haberlo soñado- volví a negar y ella agrego- No deberías estar…

-¡Ah no Bella! Señorita lo se todo, y por nada del mundo me podrás apartar- su cara reflejo miedo- asi es me entere de todo lo que paso y ¿creo que sabes a qué me refiero?- la mire fijamente y ella desvió su mirada, comenzó a llorar- Bien ahora dejemos esto de lado, debes recuperarte.

Después de que mi hermana saliera del hospital, nos dimos a la tarea de recuperar el tiempo separados. A la semana de esto fue cuando empezamos a hablar de lo que habían sido nuestras vidas durante este tiempo lejos, logre que Louis le quitara la seguridad, ahora era yo el que la cuidaba.

-Siento mucho que pasara esto con María…- dijo a modo de disculpa por la lejanía de ambos.- debí haber estado para ti en ese momento.

-Quien iba a saber que me engañaría… bueno si lo sabía, pero todo cambio desde…- cerré la boca ante su cara de dolor, ella sabía perfectamente a que me refería- bueno al menos no me case con ella, imagínate que hubiera sido de mi con ella, sin mencionar que después de que termine con María me entere que se había hecho el aborto.

-Eso es lo más cruel que hizo… no sé cómo pudo hacer aquello y mirarte a la cara.

-Te acuerdas cuando fuiste a la casa ese día y hablamos, y yo te dije que ya no tenía ningún problema…- ella asintió- en ese momento fue que se hizo el aborto.

-Si recuerdo esos días, fue cuando la fiesta de la disquera, tu parecías realmente desesperado… agradezco que Alice estuviera contigo- al pronunciar el nombre de Alice se puso triste.

-¡Oh! Vamos, pasaron muchas cosas…-dije tratando de animarla- pero bueno eso es el pasado- ella asintió de nuevo- ahora dime cómo es que te va a ti con… Paul…- el tipo simplemente no me caía, como era posible que mi hermana se encontrara en tal estado, se suponía que cuando tu tenías una pareja al menos algo te hacia feliz, pero no a mi hermana, ella simplemente no era la misma, su cálida sonrisa y el brillo de sus ojos se habían perdido en alguna parte del camino.

-Paul… él es lindo… ¡Humm! Trabaja mucho, le gustan los autos, podría decir que es su gran pasión.

-¡Bellita no te pedí una descripción!, que déjame decirte es un poco austera, te pregunte ¿Cómo van las cosas, si eres feliz, si lo amas?- ella miro a otro lado.

-Él es un buen chico, a veces me hace reír, y bueno ahora trabaja toda la semana lo veo menos que en un principio, pero me parece bien- otra vez se negó a contestar mi pregunta, así que decidí no presionarla, y pregunte otra cosa.

-¿Te gustaría ir al cine conmigo?- ella sonrió- ya sabes como una cita- bromee, ella rio- Pienso robarle la novia a Paul, sabes debí haberme enamorado de ella es tan hermosa- ella sonrió irónica y me dio un zape.

-¡Tonto!... No soy nada hermosa, baje del pedestal en que me tenían- me quede en shock al escuchar esa declaración- además tu y yo en una relación seria raro, tu eres mi hermano…

-A ver, a ver, explícame lo del pedestal no lo entendí- de esta explicación no se iba a escapar.

-Bueno, pues Paul me ha dicho que no soy nada hermosa, vaya digamos que soy común, creo que así me ve la gente, solo que todos ustedes se empeñaron en decirme que yo era bonita y él fue más realista, de hecho según sus palabras yo no le gustaba- una oleada de furia recorrió mi cuerpo que le pasaba a ese imbécil, como se atrevía a decirle aquello, es más si no le gustaba ¿Qué hacía con ella?

La realidad era que mi hermana era una mujer atractiva ante los ojos de muchos hombres, jamás la habíamos engañado, era una chica con la cual salías y provocaba la mirada de muchos, mi familia estaba consiente de aquello, por eso eran los celos de Louis, o los de Emmet que se había convertido en otro de sus protectores y ahora me salía con esto, ¡No! esto era algo que ese imbécil pagaría, pues se había encargado de afectar su autoestima, si él se creía horrendo no tenía por qué hacer sentir así a mi hermana.

-Jazz…- tomo mis manos que había cerrado en puños y agrego- ¿pasa algo?, no has dicho nada y deje de hablar desde hace un rato…

-Nada es que me acorde, de una piedra en el zapato- dije a modo de explicación, cambie de tema nuevamente- Entonces que… ¿Sera posible que la señorita Isabella Swan salga con este gran partido?- dije a modo juguetón, ella sonrió.

-Ok tenemos toda la semana, menos los fines de semana, Paul viene a buscarme y si no me encuentra, créeme no es nada agradable.

-Isabella… ¿es en serio?- no podía creer se comportaba como si fuera su padre, ella no era así.

-¿A qué te refieres?- me miro confundida.

-Te comportas como si fuera tu papa… acaso tienes horarios como la cenicienta… Ni a Renée le dabas tantas explicaciones.

-Ha cambiado tanto desde la última vez… no te imaginas cuánto.

-¿Si?… ¡No me digas¡… casi no se nota…- dije irónico y sarcástico ella nuevamente me dio un zape y sonrió.

Desde ahí empecé a hablar con ella y salir en la semana a veces esto era difícil pues Bella ponía mil barreras, pero pensaba que era mejor ahora estar cerca, el tema Edward no se tocaba solo me evadía. Pasaron los meses y un día Edward me pidió lo acompañara, a casa de su abuela Elizabeth según este quería ver a Alice y era el momento perfecto para que yo reapareciera en su vida. Después de nuestro regreso y que ella decidió marcharse no la volví a ver hasta ese día, cuando llegamos no estaba en casa y su abuela puso atención en Edward me sentía incómodo, sentía como que sobraba, me hice tonto viendo la televisión en lo que ellos hablaban, en ese momento, escuche su sonrisa.

-Vamos Sue, no fue tan malo…- reía divertida.

-No niña, no vuelvo a salir contigo, me traes de una tienda a otra, deberías pedirle a mi nieta que vaya contigo… Sí que te acompañe Leah, sería lo mejor para ti.

-Pero a ella no le agrado, y tú me quieres aunque sea un poquito- dijo Alice abrazándola.

-¡Ay mi niña! Bueno me voy a la cocina seguro tu abuela espera la comida…- me incorpore y ahí estaba ella viendo sus compras, su cabello llegaba arriba de su busto, ondulado muy sutilmente, vestía un lindo vestido amarillo de tirantes arriba de la rodilla y usaba unas sandalias doradas, la veía de espaldas aún no se había girado.

-Mary… ven linda…- dijo su abuela, ella volteo y se encontró con mi mirada, se veía espectacular, no podía creer lo que mis ojos veían, su rostro era el mismo de siempre pero lo encontré realmente hermoso, sus ojos verdes, me dejaron sin aliento, y mi corazón salto en mi pecho enloquecido, sonreí sin poderlo evitar, verla era realmente mágico, ella completaba mi persona.

-¿Jazz?… ¿pero cómo? ¿Tú que…- en eso salió Edward y la abrazo- ¿Tú qué haces aquí?

-¿Aun me odias?-contesto Edward- Pensé que ya habíamos arreglado todo- ella sonrió y le dio un beso.

-No menso… es solo que me impresiono verte aquí, bueno verlos-rectifico viéndome a mi.-Jasper, que milagro, wow ¿cómo están?... y María…- se acercó, me abrazo y me dio un beso en la mejilla y se alejó lo más que pudo de mi- ¿Dime cómo van?– mi mueca de desagrado alerto a Edward.

-El y María ya no son nada… hermanita creo que…- ella solo siguió desconcertada

-¡Ups! Lo siento… -frunció el ceño dejando ver su vergüenza- Yo no… cambiemos de tema… ¿Cómo esta Bella?- pero ese tema incomodo a su hermano, aun así conteste.

-Hace unos cuatro meses que la volví a ver y todo porque se enfermó llego a dar en el hospital la internamos, pero ya está un poquito mejor...- su cara se tornó triste creo que los tres pusimos la misma cara, su abuela llamo la atención.

-Pues deben estar con ella ¿no creen?... se dice que si son amigos deben de estar en las buenas y en las malas…- los tres nos miramos sin saber que decir y ella corrigió- Bueno digámoslo así, un hermano, su mejor amiga y el hombre que la ama con todo su corazón, una familia…- explico el cuadro que representábamos antes- ¿No entiendo que hacen aquí los tres?

-Abuela, no…- dijo Edward, visiblemente incomodo

-¡Cállate Edward! No soy tonta, ¿Cuándo vas a pelear por lo que quieres, por lo que amas?, ¡qué bonito!- señalo a sus nietos y agrego- los dos se han dejado vencer, ya no pelean, los desconozco, y te incluyo Alice vean a su alrededor y tengan el valor de dar la cara e iniciar la batalla, aprendan un poco de los Swan, son fuertes ¿verdad Jasper?

-No creo que lo que hacemos se llame fuerza, solemos equivocarnos más de lo que se imagina- y eso era verdad- para muestra, ahí estaba lo que hicimos y por lo cual sufríamos.

-¡No me equivoco!, han seguido con sus vidas y han hecho lo correcto o ¿me equivoco?- negué la realidad era que habíamos, recuperado varias cosas, por lo menos nuestra familia y eso era porque Bella me había insistido en que llevara las cosas por la paz, los amigos ese ya era otro tema- lo ven, mira Jasper estos dos se ven y se tratan como extraños, te aseguro que tú y tu hermana no son así…

-No… de hecho…- mi celular comenzó a sonar, el tono indicaba un mensaje o llamada de Bella, tome el celular y vi era un mensaje de mi hermana “Donde estas Jazz, estoy sola y aburrida”- si me permiten…

Llame a mi hermana, deje a la familia Cullen hablar aquello era incómodo, hable dos largas horas con ella hasta que llego el idiota de Paul, y la familia Cullen seguía con su discusión. Colgué cuando me voltee, la vi mirándome…

-¿Tan mal están las cosas… que te ponen a gritar?- no me percate que lo había hecho.

-¡Es solo que ese… pendejo me saca de mis casillas solo eso!… perdón no debo descargarme.

-¿Pasa algo?- dijo Edward, mirándonos intrigado.

-Nada… es Jasper, que me está contando de sus rollos, ya sabes a veces sirve desahogarse

-¡Ajam! Si ya sabes yo y mis broncas- la mire agradecido, siempre cubriendo mis espaldas.

Convivimos el resto del día entre bromas de su abuela hacia ellos, que yo coreaba con mis risas, ella era divertida tuve la oportunidad de disfrutar, de una tarde en la que volvíamos a ser los mismos que éramos, claro solo faltaba Bella, ya que todas las historias comenzaban con “Mary e Isabella hacían…” debíamos irnos ya era de noche y teníamos un viaje largo por delante, Edward comenzó a despedirse, su abuela lo llamo unos minutos más para decirle algo a solas, Alice me acompaño a la puerta.

-¡Te vez realmente hermosa!…- solté de pronto ella me sonrió, mordió sus labios- Realmente te vez maravillosamente hermosa… ¿En qué momento perdimos el contacto?

-Humm, Jasper yo…- puse mi mano en sus labios para callar lo que fuera a decir, la quite de ellos para seguir mi tacto por sus mejillas, algo vio en mí que sonrió y yo imite su sonrisa, me acerque a ella, lentamente y justo cuando me vi decidido a besarla, ella desvió la dirección de su cara, y me dio el beso en la mejilla, me confundí ante mi reacción, Edward salía y ella solo me dijo- no te pierdas… podrías venir más seguido.

-¡Vámonos!… -dijo Edward un poco malhumorado, mientras ella sonreía.

-¡Adiós Gruñón! ¡Cuídate mucho hermanito!- lo abrazo subimos al auto esta vez yo maneje… el trayecto traía una nota amarga, por mi parte no quería separarme de Alice, al verla comprendí cuanto la necesitaba, sin mencionar mi reacción al querer besarla me tenía aturdido y Edward no sabría decir, antes de salir se veía bien, pero algo debió decirle su abuela que saco su mal humor.

ALICE POV.

Llevaba ya dos años cuatro meses con la abuela Elizabeth, aquello me había servido después de todo lo que pasamos, después de lo de Jake, debo reconocer que al perderlo nunca imagine que recuperaría a mi hermano, fue realmente extraño pero desde ese día Edward y yo volvimos a tener una relación similar a la que teníamos, a veces nos costaba ser pacientes el uno con el otro, pero si, podía decir que todo era mejor. Recordé como había llegado ese día a la casa y yo estaba hecha un mar de lágrimas porque Jake y yo habíamos terminado, no le dije mucho la verdad, aun lo que había vivido con Jake quería que fuese solo mio.

Me sentí reconfortada al tener a Edward conmigo, mi hermano me había hecho falta y justo ahora comprendía las palabras de Jacob, pero aún quedaba mucho por recuperar, al menos mi persona estaba mucho mejor y eso se debía a Jacob, él había hecho hasta lo indecible por mantenerme con la fuerza que ahora tenía.

-¿Por qué intentaste besarme?- dije para mí, recordando la actitud de Jasper- De algo si estoy segura, jamás volverás a romperme el corazón- dije al notar que no me había dolido- ¡Gracias Jake!- dije mirando al cielo- ¡Jamás dejare de quererte!- me encontraba en el jardín cuando mi abuela llego.

-Alice pequeña… ¿Cómo te fue el día de hoy?

-¡Bien Nina!…- conteste dándole un beso y un abrazo a mi abuela.

-¿No crees que debes volver a casa?- negué e hice un puchero.-No creas que me molesta tu presencia, no es así, disfruto al estar contigo… pero tus padres te extrañan y Esme te necesita más que nunca.

-Nina… yo solo no se… no me siento lista… son muchas cosas… me siento mal por la forma en que me comporte con mama, aun con las muchas veces que Bella me pidió recapacitar… no sabría cómo reaccionar o comportarme, temo volver a ser la misma de hace poco.

-Mi pequeña… tu madre cometió un error, y en ese punto tuviste razón, ella no debió pensar en solucionarle la vida a tu hermano, ve  ahora creo que él está peor que antes de estar con Bella, he hablado con tu madre y está muy arrepentida.

-Lo sé, me lo dijo la última vez que vino y me sentí fatal- baje la mirada- No sé qué pase con Edward aún no se ¿Por qué no le dice la verdad?

-Mi niña, mi Mary, debes saber algo, quien nos ama jamás nos deja ni nos olvida, siempre perdonara nuestros errores así es el amor…regresa a casa pequeña, Edward te va a necesitar.

-Pero Nina... yo tengo miedo de regresar, aquí me ha ido bien, además simplemente no me he metido en problemas… Y quizá Edward decida venirse para acá cuando sepa la verdad.

-Si… no tienes amigos, casi no sales, y cuando sales solo te llevas a Sue contigo, mi niña debes disfrutar tu vida… enamórate, busca a él afortunado… ama y permite que te amen.- tomo mis manos y agrego- Con respecto a Edward, él debe decidir lo que le convenga, si se equivoca una vez más solo trata de apoyarlo.

-¡No el amor no… eso no es para mí!… Las últimas veces fui engañada quizá no elijo bien y bueno eso es verdad… me enamoro de quien no debo… y los que se enamoran de mi simplemente no los puedo amar, como debería.

-Humm Jacob se sintió amado eso puedo asegurártelo… y lo de enamorarte de quien no debes, hablas por ese chico que vino con tu hermano verdad… Jasper- me quede muda ella rio- La familia Swan tiene elementos que intrigan y seducen, a mi familia de manera instantanea, debo reconocer que es muy atractivo.

-¡¡Nina!!- grite y ella me sonrió.

-Bien e Isabella, era muy bonita cuando pequeña, aun la recuerdo de aquí para allá contigo, la última vez que la vi fue cuando vino con tu hermano a avisarme que se casaban, ella me pareció muy centrada, justo lo que necesitaba tu hermano, además de ser preciosa, dejemos de lado la religión eso no importa si hay amor verdadero, y ellos lo tenían, aquí no importaba cuanto tiempo duraría, lo que importaba es que lo disfrutaran… lamentablemente, no se los permitieron, hable con tu madre y me comento lo último que le pidió a Bella…

-¿Cómo dices?- la mire extrañada, había pasado algo más esto si ya era una locura.

-No quiero que te enojes…- me advirtió y negué con la cabeza- ella le pidió a Bella, que hablara con tu hermano y lo convenciera que ya no lo quería para que el siguiera su vida, la chica le dijo cosas que la hicieron pensar…- me reí así era Bella- la muchacha le dijo que ya no tenía nada, pero aun así fue y hablo con tu hermano, Bella no pudo dar una muestra más grande de su amor hacia tu hermano, mira qué no decirle nada de tu madre, otra hubiera sido y le hubiera dicho todo lo que tu madre hizo, por lo que Esme comenta que le dijo tu hermano y por lo que yo hable con Edward la última vez que vino, Bella no dijo nada, se preocupó, por la familia y los mantuvo unidos, bueno le faltaste tu…

-Ella es mi mejor amiga…- sonreí ante el recuerdo de mi amiga- Aunque a veces la volvía loca, aceptaba todas mis locuras y sí, tenía el don para que Edward fuera otro, alguien muy especial, sabias que tu nieto se volvió todo un romántico…- mi abuela sonrió.

-Tu abuelo también lo era, pero solo se es así cuando el corazón ama y es amado, es en ese momento, cuando todo cambia, créeme vi esa mirada en alguien más y es justo para ti…

-Humm… - estaba embelesada con su forma de hablar del amor, que solo agregue- ¿Sí, y como no me he dado cuenta? vamos ¿dime quién es?- si ella pensaba en Jasper eso era descartable.

-¿Por qué no lo buscas tú?, regresa pequeña y busca a tu amor, créeme es para ti.

-¡¡¡Ay Nina!!! ¿Qué cosas se te ocurren?…- rodé los ojos y sonreí, ella me miro segura.

-Si… pero lo harás, y también me harás un favor…- la mire extrañada- busca a Bella, ayuda a tu hermano, estoy segura que esos dos al verse volverán, un amor como el de ellos no se olvida tan fácil.

-Nina no creo que eso sea posible…- murmure, pues no sabría cómo manejarme con ellos.

-Lo es, tanto o más real que el amor que tú tienes, por Jasper, aunque lo niegues…-afirmo y yo hice una mueca- Es tiempo de volver a casa, y reconciliarte con los tuyos y ser lo que siempre han sido.

A las dos semanas decidí regresar a casa, había terminado la carrera pero no me veía trabajando en esto, mi padre me dio la oportunidad de pensar y tener un tiempo para mí, mi madre estaba feliz con mi regreso, limamos aún más nuestras asperezas, por otro lado a los pocos días de mi regreso, mi madre quiso hablar con Edward, pero este se encontraba en su plan soy un desastre y no me importa. Me encontré con un Jasper muy diferente al que había dejado de ver, empezamos a hablar un poco pues este y mi hermano no se separaban, claro ahora me andaba con pies de plomo en ese tema, solo trataba de ser una amiga y eso se debía a que yo había conocido mi realidad en cuanto a Jasper se refería.

Empecé un plan en el cual idee la forma correcta para soltar la bomba que se le venía encima a Edward, mi madre estaba empeñada en decirle las cosas y como ella había dicho no pararía hasta que él lo supiera. Todo estaba listo, era tiempo de actuar, tenía miedo pero él me tendría a su lado.