JASPER POV.

Nettie paso esa tarde hablando de María al  parecer esta estaba por volver a Forks, no había una fecha, pero ella regresaba, había preguntado por mí o al menos eso entendí. Nettie le había comentado lo que todos sabían, que me había vuelto un mujeriego y que no tenía una relación fija, al escuchar esto me reí, pues ella ignoraba que yo estaba con Alice.

-¿De qué te ríes?- pregunto Nettie, me encogí de hombros y negué.

-Si claro… Jasper el soltero- dijo Emmet en tono irónico.

-Bueno, ¿No te da gusto tener noticias de María?- insistió esta.

-Digamos que me da gusto por ella- conteste y Edward hizo un gesto de fastidio.

-¡Ay! Edward… se me olvidaba, ¿Cómo vas con Tania?- al parecer esta chica tenia curiosidad por temas que a nosotros nos desagradaban.

-¿Tania?- pregunto Edward y esta asintió- Pues no sé, yo con Tania nunca tuve una relación de pareja.

-Por favor, muchas veces los vi en el antro besándose… ¿Cómo puedes decir que no tenían nada?-reprocho visiblemente molesta por la actitud de este.

-Es verdad, jamás fuimos pareja, no sé qué te haya dicho ella pero el hecho siempre fue ese, no quisiera oírme patán pero la realidad es que ella era la que me besaba y yo bueno… Tú me entiendes verdad.

-Ósea que me estás diciendo que Tania solo era un buen polvo.

-Jamás, simplemente te estoy diciendo la verdad, no tengo por qué negar algo que es real, ella y yo jamás fuimos pareja, si eres buena apreciando yo no la buscaba por lo regular ella siempre me buscaba a mi…- en eso estaba Edward, pero su celular sonó- Un minuto…- contesto el celular, al muy idiota se le escapo una sonrisa que no pasó desapercibida por Nettie.

-Vaya al parecer le llama una chica…- afirmo Nettie mientras que Emmet y yo sabíamos de quien se trataba- Me da la impresión, de que él está enamorado, se le ve la mirada como cuando estaba con tu hermana Jasper…- Emmet tomaba agua en ese minuto al escucharla, escupió el líquido, yo me reí de él y le di unas ligeras palmaditas tratando de disimular.

-¿Bella?- dije y ella asintió- Bueno la verdad no lo había apreciado, pero quizá sea Esme, ya sabes cómo adora a su hijo.

-No, date cuenta- lo observo nuevamente, y Emmet quería soltar la carcajada, pero la disfrazo con un absceso de tos- ¿Estas bien Emmet?

-Si… es solo que no sé qué me paso- dijo este ya serio.

-Oye, y tu como lo llevas con Irina.

-Irina y yo terminamos hace ya unos meses atrás, nos vemos pero creo que ya solo como conocidos- respondió Emmet restándole importancia, en eso Edward regreso y se sentó, con una cara que no correspondía a alegría precisamente.

-¿Paso algo?- pregunte.

-Nada solo que nos veremos en su casa…- comprendí de inmediato a quien se refería.

-Vaya… insisto lo que les dije hace unos minutos a ustedes… ¿Edward cómo se llama ella?- Nettie paso su mano por sus cabellos y agregó con una sonrisa suspicaz- ¡Te trae loco!…- algo noto en el que se emocionó aún más- o por Dios más que eso.

-Mi madre…- replico Edward extrañado y confuso, Emmet soltó una carcajada y varios comensales nos miraron confundidos.

-Si claro, a tu mama le contestas tan feliz e ilusionado, por favor Edward no me creas estúpida.

-No lo hago…- la miro serio con su muy usada forma de ser tan inaccesible- Es simple, tengo que ver a mi madre, al parecer, mi  hermana se quiere casar…- en ese minuto repetí la acción de Emmet y escupí el líquido que había bebido.

-¿Pero qué les pasa?- dijo Nettie visiblemente inquisitiva, Edward me dio unos ligeros golpes en la espalda.

-Nada ya te dije, solo estamos impresionados de volver a verte solo eso.- respondió este.

-Pues bien…- miro su reloj- diablos no me percate de lo tarde que era, en mi trabajo me van a regañar debo irme.

Se levantó como un auténtico torbellino, y me sentí desesperado porque se marchara para que Edward me explicara lo que hace unos minutos había dicho, se despidió de nosotros y cuando estuvo tres mesas lejos de nosotros.

-¿Y para cuando es la boda Jasper?-dijo Emmet a carcajada abierta.

-No lo sé, pero sería agradable que Edward me explique que fue eso…-solté serio.

-Bella…-soltó este muy intrigado- dice tener mucho trabajo, me ofrecí a esperar hasta que terminara e irnos juntos a casa, pero me dijo que no podía pues tenía que ir con Renée y que no sabía cuánto se iba a demorar.

-Seguramente mi tía, le pidió que fuera a verla…-conteste pero el negó nuevamente.

-No… Bella estaba agitada, me daba un pretexto tras otro, juraría…-miro a lo lejos analizando su llamada.

-¿Piensas que Bella te mintió?-pregunto Emmet.

-No es que me mienta… es más bien como si tratara de ocultarme algo-soltó Edward seguro.

-Piensas que ella y Alice acudan a ver a Kate…-asintió ante mi propuesta.

-Es más como una corazonada…-replico y yo también pensé lo mismo.

-La cuenta…-pedí y un mesero la trajo a la mesa revise y de mi cartera extraje el efectivo-¡Quédate con el cambio!- me levante de la mesa y Edward copio mi movimiento.

-Oigan, oigan… con calma ¿qué les pasa?- protesto Emmet.

-Estamos a 20 minutos del trabajo de Alice, llegaremos a tiempo para impedir que ella llegue con Bella- replique molesto.

-Paren, ellas no harían eso…-para ese momento ya nos hallábamos en el estacionamiento.

-Emmet, no quiero que Bella vaya para allá, no creo que Paul esté listo para esto, estoy seguro que al verla pensara que ella está ahí por el… no quiero que mi hermana se vea en un dilema.

-Pues eso no es lo que piensa Bella…-atajo Emmet-Vamos piensen con la cabeza no sean viscerales.

-Bien… Vamos por Alice ella sale en aproximadamente 30 min- propuse, me relaje quizá Emmet tiene razón.

En cuanto llegamos vi el auto de mi novia estacionado, como Edward llevaba su auto, yo manejaría el auto de Alice y Emmet se iría con él.

-Ahí, está la muñequita…-dijo Emmet feliz al verla salir de pronto un tipo que no lograba reconocer se le acerco tomo su rostro y deposito un beso en su mejilla, yo note la dirección del beso y este iba a sus labios solo que Alice giro el rostro y evito el contacto, yo estaba fuera del auto, con Emmet deteniéndome.

-Tranquilo…- me dijo Edward.

-Tu sí que estas mal…-replique atónito- estas vuelto loco de celos por pensar que mi hermana este con Paul y llegamos y veo esto y me dices: “TRANQUILO”.

-Te lo digo porque Alice lo evito, es evidente que ella lo noto, más vale que no armes un problema aquí.

-Calma hermano, aquí viene Alice…-dijo Emmet y se adelantó a ella con una sonrisa- Mi linda y preciosa Alice.

-Hola Emmet, ¡que sorpresa!...-dijo al vernos ahí, saludo a su hermano y cuando llego justo a mi lado- Hola amor…

-Me puedes decir quien carajos es ese tipo que intento besarte…-le solté enfurecido, evitando su saludo, ella me miro confundida y asustada era seguro que era por mi reacción.

-Jazz… no es nadie, es solo un tipo que no entiende, la palabra “NO”.

-No entiende o ¿no quieres que entienda?-proteste igual de molesto, ella me iba a responder pero no la deje seguir- Claro… seguro te sientes bien al ver que otros te hagan sentir deseada y bonita, en vez de decirle al idiota de tu novio lo que pasa y ponerle un alto.

-Jasper te estas descontrolando…-replico Edward.

-¡NO!... déjalo hablar-contesto Alice molesta- ¿Qué más piensas Jasper?- me encaro furiosa.

-Nunca pensé que me engañaras así, nunca pensé que tú fueras como…-no termine la frase porque ella me dio una bofetada.

-¿Cómo María?-replico furiosa los ojos los tenia ribeteados de lágrimas- Eres un imbécil, jamás seria así…

-Alice… vamos pequeña, tranquilicémonos- la atajo Emmet- Ven será mejor que yo te lleve a casa, dame las llaves del auto- ella accedió, se dirigieron a su auto y justo cuando subieron sentí caer mi realidad.

-¿Qué dije?-replique y Edward, me soltó molesto y subió a su auto.

-Te quedaras ahí o nos vamos ya-respondió, subí en el auto aturdido, vi como Emmet salía del estacionamiento y Edward le siguió- Los celos son malos consejeros…

-Yo solamente no lo vi venir… yo quería moler a golpes a ese imbécil.

-Sí y lo entiendo, pero en vez de no hacer eso y relajarte, te desquitaste con ella- dijo y volteo a verme enojado- Mi hermana jamás llegara a ser como María y te voy a dejar claro algo, si la vuelves a comparar o si la vuelves a lastimar de esta manera, ya no te voy advertir, yo seré el que te de una golpiza que recuerdes toda tu vida.

Asentí sin oponerme, debía reconocer que él tenía razón nadie emitió palabra alguna en el trayecto, cuando llegamos baje del auto pero él no lo hizo, lo mire confundido y el solo agrego.

-Iré por Bella, la acompañare con Renée en cuanto terminemos allá regresaremos a casa- asentí vi como Alice se dirigía a la casa a toda carrera seguramente no quería ni hablarme- Deja que mi hermana se tranquilice iré por Bella seguramente Alice necesita de ella.

Me aleje del auto y Emmet estaba en la puerta, Edward acelero el auto y se dirigió a su destino.

-Vaya idiota que eres…-replico Emmet molesto- Todo el camino se vino llorando, me dijo que no te había dicho nada porque ella sabía que te pondrías así y la verdad no quería darle importancia a algo que no lo merecía, me dijo también que si ella notaba que no podía con la situación te lo diría y nos pediría ayuda…

-Lo siento…-replique cabizbajo y avergonzado.

-A mí no me pidas perdón ella es la que merece esa disculpa.

-Lo se…-me encamine hacia su habitación, y no me importo la petición de Edward, toque- Alice… por favor, necesito hablar contigo.

-Lárgate Jasper, déjame en paz…-contesto con la voz rota por el llanto.

-Necesito hablar contigo, pequeña por favor perdóname yo…- ella abrió la puerta y al ver su rostro me sentí el peor imbécil de todos.

-¡TE HE DICHO QUE TE LARGUES DÉJAME EN PAZ!- me empujo con fuerza, trate de contener sus manos, pero ella simplemente me esquivo, la seguí escaleras abajo- EMMET-llamo y este abrió sus brazos de manera protectora- ¿Dónde está Edward?

-Tranquila pequeña…- respondió este dirigiéndome una mirada de déjala en paz- Fue por Bella, regresara en un rato más…- froto su mano en su espalda a modo de consuelo me quise acercar pero esta vez Emmet no me lo permitió- Porque no vamos a tu habitación y ahí los esperamos.

-No quiero que Jasper vaya allá…-dijo ella sin darme la cara, Emmet articulo un “dale un respiro”.

-No iré a molestarte… pero después cuando estés más tranquila deseo hablar contigo.

-Vámonos Emmet…-tomo la mano de este y sin mirarme se fue a su habitación.

Pasaron más de tres horas en las que ni Edward ni mi hermana llegaban a la casa, supuse que mi tía los habría detenido, estaba en la sala aguardando que Bella llegara y me ayudara a hablar con Alice.

BELLA POV.

El día había comenzado como los demás, ya tenía todo listo, le había llamado a Kate avisándole que iría a visitarla, solo quedaba un solo punto por resolver… Edward… esto iba a ser difícil, ya desde ayer le había dicho que no podríamos comer juntos, pues Maggie había pedido comer conmigo, esto no era del todo cierto, pero necesitaba sacar mi trabajo y de paso salir temprano para ir a ver a Kate.

-Bella…- llamo Maggie sacándome de mis pensamientos, levante la mirada- Vamos a comer…

-No puedo, debo terminar esto si deseo salir temprano, Natasha se ha dedicado a llenarme de trabajo.

-Pues si ya veo, pero no por eso no comerás- replico ella- Iremos cerca de aquí, en cuanto termines podrás regresar y seguir.

Suspire y asentí, ella tenía un poco de razón, aparte tenía que recoger el regalo de Kate y llamarle a Edward, nos encaminamos al lugar y ella puso un tema de conversación, el cual de verdad casi no escuche me mantuve en la conversación, con: “Si, no, y después, pienso lo mismo”, esas eran mis respuestas después de terminar mi comida, me disculpe y decidí llamarle a Edward.

-¡Hola!...-solté sin saber que decir.

-Mi cielo, te he extrañado todo el día…-respondió el, percibí su alegría y me sentí fatal al decirle lo que le iba a decir- No sabes las ganas que tengo de besarte y tenerte entre mis brazos.

-Humm… yo también-respondí sintiéndome fatal.

-Pasa algo- afirmo no pregunto, siempre sabía que era así- Mi cielo ¿estás bien?

-Si… y no…- cerré la boca unos segundos y el espero a que siguiera- Lo que pasa es que no podré verte a la hora de mi salida, tengo que ir a ver a Renée.

-¿Por qué lo dices?... bien puedo ir y llevarte con Renée-replico tranquilo.

-Edward tengo demasiado trabajo, debo ir a otro lugar del trabajo y de ahí voy a salir directo a casa de Renée.

-Dime donde es… y voy allá por ti.

-No… es que es más complicado así, por que mejor no nos vemos en la casa, además debo ayudar a Cathy con algo y te digo no sé cuánto me tarde.

-Bella… no puedes irte sola a la casa, prefiero ir por ti.

-No lo hare, tomare un taxi para llegar a casa…- replique tenía que convencerlo, sino no podría ir a ver a Kate.

-Hagamos esto, si terminas temprano lo de tu trabajo me llamas y voy por ti, sino nos vemos en casa de Renée.

-No es necesario…-insistí, sabía que el tiempo lo tenía limitado y seguramente cuando yo estuviera con Kate, Paul llegaría e insistiría en llevarme a casa- Espérame en casa, amor te prometo que te avisare si se me hace tarde, si es así me quedare con mamá.

-Bella iré a casa de Renée por ti…-siempre tan necio, me dije- es más, pasare a comprar unas cosas y te daré tiempo para que termines lo que tienes que hacer, ya mañana es fin de semana y no quiero estar sin ti, ha sido una semana larga.

-Ok, está bien…-accedí, supe en ese instante que tendría que hacer las cosas rápidamente, así que agregue- pero tómalo con calma, no te apresures yo te llamo en cuanto termine.

-Está bien amor, nos vemos en un rato más…-soltó el desconfiado- Te amo…

-Yo también…-respondí, sabiendo que le había ocultado mis actividades, aun cuando él me había dicho que no lo haría- Te extrañare mucho…

-Yo te necesito siempre…-sonreí como tonta al escucharlo, él siempre era tan dulce-Te amo mi cielo…

-Yo también te amo, bueno nos vemos luego, Bye.

Odiaba ocultarle cosas a Edward pero esto era algo que quería hacer, además Paul últimamente se comportaba mucho mejor que antes, no iba a haber problema alguno. Regresamos como había dicho Maggie, llame a Kate para confirmarle que iría a su casa, por lógica ella se emocionó, hace mucho que no nos veíamos y la verdad yo también estaba emocionada por verla. De la nada sonó mi celular, me gire a tomarlo.

-Si…-dije distraída.

-Hola Bella…-acto seguido, me quede helada- ¿Cómo estás?

-Bien…-respondí en shock- y a ti…-respondí sin poder decir su nombre, lo sentía tan ajeno.

-Mi madre, me dijo que iras a la casa a ver a mi hermana-dijo Paul- y pues yo ya salí de mi trabajo y me preguntaba si no te molesta que yo te lleve.

-Humm, yo… bueno es que yo- me trabe, me sentía incomoda, pero también el y yo habíamos terminado, así que…

-Vamos no soy un demonio, no te hare nada…-soltó triste, de inmediato me sentí fatal porque yo era la que le había hecho daño.

-No es eso…- respondí más tranquila y la verdad mi voz se oyó culpable- Lo que pasa es que debo ir a recoger el regalo de Kate y pues…

-No hay problema, yo puedo llevarte y de ahí nos vamos a mi casa-insistió en el mismo tono.

-Ok…-accedí- te veo entonces a las 6.

-Bien nos vemos en un rato mas.-dijo alegre y yo me sentí incomoda.

El tiempo corrió a prisa y yo, me apresure a terminar mis labores, justo a los 5 minutos antes de la 6 yo ya había terminado y solo esperaba a que fuera la hora exacta para salir. Al salir me despedí de Maggie y baje por el ascensor, enfrente ya estaba estacionada la camioneta de Paul, el estómago me dio un vuelco y me sentí con miedo, no supe porque pero así me sentía. Paul descendió del auto con una sonrisa, mientras que yo lo miraba y por dentro sentía pavor.

-Hola preciosa…-me dijo dándome un beso en la mejilla, me abrazo, cuando se separó me miro y agrego- Vamos Bella, parece que hubieras visto un fantasma.

-No, es solo, que estoy agotada- dije y me separe, él intento tomar mi mano pero lo evite- ¿Podemos irnos?- replique esquive su mirada y agregue- Renée me espera.

-¿Tu madre y tu aún tienen problemas?- asentí solo por compromiso, porque la relación entre ella y yo había mejorado muchísimo y ya no era lo mismo desde que Paul y yo estábamos juntos.- Tienes que llegar temprano…-afirmo cuando ya estábamos en el auto y yo asentí.

Comenzó a manejar fuera de ahí y yo me mantuve antisocial y taciturna, encendió la radio, justo como cuando las últimas veces que salí con él, me sentí repitiendo un patrón y la verdad era demasiado incómodo.

-Bella conduzco y no sé a dónde nos dirigimos- dijo con una sonrisa, solté un suspiro y sonreí a medias.

-Tienes razón, vamos al centro comercial que está a 20 minutos de aquí.

-Bien, a sus órdenes señorita- sonrió y empezó a dirigirse al lugar.

Cuando llegamos fuimos a recoger lo que hacía falta, el hablo de trivialidades y trate de seguir la corriente lo mejor que pude pero me sentí incomoda por alguna razón no podía sentirme tranquila, sin mencionar que desde que salí de la oficina me sentí vigilada, llegamos a su casa y baje rápidamente del auto, pareciese que me hubieran dicho huye.

Ya en su casa su madre me saludó efusivamente y me dijo que me extrañaba, que todos lo hacían en especial Paul, afortunadamente en ese instante llego Kate, al verme entendió de inmediato la situación subí con ella a su habitación y le entregue sus regalos, uno iba de parte de Alice y otro era de mi parte.

-¡Esto esta genial! muchas gracias- me abrazo- ¿Cómo estás?- me dirigió una mirada que entendí al vuelo.

-Bien, todo va bien- sonreí al recordar a Edward.

-¡Vaya! Estas muy contenta- soltó con una sonrisa divertida- ¿Pero y como le hiciste para venir?

-Si lo estoy…- baje la vista y no pude no sentirme culpable- Me escape…-sonreí avergonzada- solo espero que no se dé cuenta y si se da cuenta espero que me entienda.

-¡Estás loca!- dijo soltando una carcajada que yo imite- Pero esta genial verte.

-Eso mismo digo yo…-la abrace impulsivamente, estaba feliz de verla. Nos reímos por un rato ella pareció feliz con sus obsequios y me pidió agradecerle a Alice, después de un rato de risas en el que su madre estuvo conviviendo, vi mi celular y me percate de la hora.

-Tienes que irte…-dijo Kate triste y su madre se despidió de mí.

-Si, lo que pasa es que Renée me espera en casa- ella soltó una carcajada ante mi comentario, me abrazo y al oído me dijo.

-Es Edward verdad…-afirmo sonreí y rodé los ojos a modo de respuesta- Cuídate mucho y salúdame a todos.

-¿Lista Bella?…-dijo Paul, que había estado con nosotros, asentí- Mama en un rato regreso.

Cuando salí de su casa me sentí impaciente, el tiempo había corrido y yo no le había hablado a Edward, el seguramente ya debía estar con mi madre y al ver que no había llegado estaría, preocupado solo pedía que no me llamara.

A los pocos instantes mire por el espejo retrovisor del auto de Paul, y mis ojos se quedaron pasmados al notar un coche que conocía a la perfección, me sentí morir al verlo, no iba cerca de Paul pero me di cuenta que él había estado siguiéndonos. Solté un suspiro, totalmente aterrado, vi como Edward notaba que ya lo había visto.

-¡Rayos!...-murmure y Paul me escucho.

-¿Se te olvido algo?- pregunto Paul y yo negué- Ya casi llegamos a tu casa, yo quería platicar contigo de…- el sonido de mi celular lo hizo callar.

-Si…-respondí, lo más relajada posible.

-¡Estas metida en un gran lio!- dijo serio- Despídete pronto, deseo irme a casa cuanto antes- corto la comunicación, se escuchaba furioso.

-Está bien mama ya casi llego…-solté con el mismo tono asustado, aun cuando sabía que nadie me escuchaba en la otra línea.

-Creo que no podré hablar contigo verdad- dijo Paul y yo asentí – Bueno quiero que pienses en nuestra relación yo quisiera…

-Paul… lo siento, ya te dije que no puedo y tampoco quiero, no quiero regresar.

-Vamos, Bella hace un rato la pasamos bien- dijo y aquí me pareció escuchar a Jasper y a Edward decirme “Te lo dije”.

-Paul… no te confundas, creo que he sido clara y lo siento pero no puedo, perdóname- afortunadamente ya habíamos llegado a mi casa, tome mis cosas pero no estaba preparada para lo que este iba a hacer.

Me tomo por las manos y me acerco a él besándome, con mis dos manos lo empuje furiosa, e intente pegarle, decidí bajarme, furiosa como estaba, ni siquiera le di tiempo para nada, entre en mi casa y Renée venia bajando las escaleras debía recomponer mi ánimo.

-¿Bella?- pregunto Renée, mientras mi cabeza apunto ¿Quién más puede ser madre? ¿Superman?

-Si mama soy yo…- respire profundamente porque yo sabía que en un momento más estaría en problemas, mi madre me saludo- Aquí esta lo que me pediste.

-Gracias hija…-tomo lo que le ofrecí y solo pregunto- ¿Edward viene por ti?- asentí, sin decir palabra alguna- ¿Fuiste a ver a Kate?

-Si, ella se quedó muy contenta con mi visita.

-Y Paul… ¿Cómo lo tomo?-pregunto mi madre, pero no necesite responder- Ya veo…

Escuchamos un auto estacionarse al frente de la casa y yo solo suspire, acomode las cosas que traía y subí las escaleras.

-Mama podrías abrirle a Edward, en un momento bajo…

Corrí al baño, me encerré y escuche como Edward saludaba a Renée, me lave el rostro esperando calmarme un poco, lave mi boca me sentía mal, al saber lo que había provocado solo esperaba que Edward no hubiese visto que Paul me había besado, salí a mi habitación y tome las cosas que necesitaría para el fin de semana.

Cuando baje, ahí estaba él, su mirada era seca y severa, me despedí de mi madre, podría jurar que noto la postura tensa de ambos, Edward seguía contemplándome sin despegar los labios, tomo mis cosas y se despidió de mi madre, cuando salió Renée solo lo soltó.

-Está molesto…- me encogí de hombros y solo salí-Cuídense- grito mama, él abrió mi puerta y la cerro sin decir nada.

Camino a su lugar, se puso el cinturón de seguridad y se limitó a conducir, de vez en cuando me dirigía una mirada severa, me acobarde a la espera de un regaño que no se producía, sabía que él no tardaría en decir algo, así que conté mentalmente hasta llegar al 150, pero nada ocurría, empecé a desesperarme retorcí mis dedos en señal de nerviosismo, el volvió a mirarme tomo una de mis manos y solo le dio un ligero apretón.

-Hola…-saludo por fin, pero en su voz note su ira contenida, espere a que siguiera pero no lo hizo.

EDWARD POV.

Después de dejar a Jasper en casa me dirigí hacia donde estaba Bella, si ella salía de la oficina yo la llevaría al lugar que necesitaba y de ahí podríamos ir a casa de Renée, eran exactamente las 5:30 de la tarde cuando llegue, pregunte por ella en vigilancia y me dijeron que aun permanecía en el lugar me ofrecieron avisarle pero yo me negué y aguarde a que saliera.

Al poco rato una camioneta conocida se estaciono 4 autos delante de mi quedando enfrente del lugar de salida, no podía dar crédito al ver de quien se trataba como era lógico descendió del auto y dirigió su vista al elevador.

La rabia, los celos y la furia se apoderaron de mí, ¿Qué hacia ese imbécil aquí? Gritaba mi cabeza, al verla el corrió a su encuentro, emocionado le dio un beso en la mejilla y la abrazo, note a Bella aterrada, su rostro daba la impresión de estar aturdido, pude notar que él le dijo algo y ella le contestaba pero se apartaba de su contacto, así que supuse que necesitaba de mí.

Descendí del auto y justo cuando me iba a encaminar el tomo sus cosas y le abrió la puerta del auto, Bella subió sin oponerse.

-¡Maldita sea!-gruñí furioso al verla acceder, subí al auto- Así que por eso no querías que viniera por ti…-bufe y comencé a seguirlos, no lo hice de cerca pues no quería que ella me viera y se molestara conmigo.

Llegue al centro comercial, y los seguí al parecer Bella acudía al mismo lugar que Jasper y yo las habíamos traído para comprar cosas, ahí tuve mi respuesta, ella iría con Kate, pero ¿Por qué demonios había pedido que el fuera por ella?

Pude notar que ellos regresaban al estacionamiento en todo ese momento me percate como él deseaba acceder a ella, varias veces la abrazo y Bella rompió el contacto, la tensión de estos actos cada vez me hacía perder más y más la cabeza, deseaba romperle la cara y llevarme a Bella lejos de él, pero una vocecita en mi cabeza gano la batalla diciéndome: “Imagina que Bella se dé cuenta y actúes de esta manera cuando ella te ha pedido la comprendas, si lo haces ella se alejara de ti y se molestara…”mi respuesta era:  “Puedo perderla, prometí no ser como él”.

Llegamos a otro lugar, supuse que era su casa pues Bella bajo rápidamente sin esperarlo, en efecto ella tardo el tiempo necesario para hacerme perder la cordura, ya no aguantaba deseaba ir y tocar, sacarla lo más rápido posible y si nuevamente el golpearlo aparecía entre mis favoritas cosas por hacer. Cuando la vi salir la note angustiada revisaba su celular, seguramente ella pensaba en mí, en que no había llamado para saber de ella, lo que Bella ignoraba es que yo estaba aquí.

Nuevamente subió al auto de Paul, y los seguí de cerca esta vez no fui para nada cuidadoso, estaba que rabiaba de furia y no podía contener mi persona, reconocí el trayecto en un punto, íbamos a casa de Renée, me aproxime al auto de Paul y Bella fijo sus ojos en el espejo retrovisor notando mi auto, hubo un momento en el que ella se encontró con mi mirada, descendí la velocidad y tome mi teléfono marque el número y al segundo tono contesto.

-Si…-respondió realmente asustada era como si ella hubiese notado mi ira.

-¡Estas metida en un gran lio!- dije serio- Despídete pronto, deseo irme a casa cuanto antes.

Corte la comunicación, la cabeza me dio vueltas a mil por hora al escuchar cómo me había respondido, ella me tenía miedo. Este hecho hizo que mi cabeza  frenara en el acto, jamás habría deseado que ella me tuviese miedo, jamás hubiese deseado ese sentimiento, aun cuando ella sabía cuán furioso estaba siempre sabía qué hacer, si algo amaba de ella, era justamente eso, su forma de encararme y hacerme ver cuando rebasaba sus límites.

No llegue hasta casa de Renée me limite a esperar que el saliera de ahí, no tardó mucho en salir a los 5 minutos lo vi salir, se veía un tanto frustrado, freno el auto de golpe y golpeo el volante, pensé que se iba a regresar pero algo lo hizo dudar y siguió su camino, cuando se alejó yo me aproxime a la casa, respire profundamente  y toque la puerta.

-¡Hola Edward!- me saludo Renée – Bella baja en un momento, ¿Cómo va todo?

-Bien, Esme te manda saludos- conteste serio ella lo noto.

-Gracias… Pero me refiero a Bella- aguardo una respuesta que no obtuvo- Mi hija siempre te ha amado a ti, por favor nunca lo dudes.

-No lo hago…-la mire confundido, ella sonrió, negó y acaricio mi rostro de manera maternal.

-Te diste cuenta que Bella vio a Paul…- volvió a sonreír ante mi gesto frustrado- Los celos, jamás se pueden ocultar, lo único que yo te puedo decir es que mi niña jamás ha mirado a nadie como lo hace contigo.

Escuchamos el ruido de que alguien bajaba las escaleras, cuando la vi no pude evitar sentirme enojado, era difícil negarlo y mas cuando ella me lo había ocultado, ella se despidió de Renée la vi nerviosa y tensa, seguramente aun tenia en la cabeza lo que le había dicho hace unos momentos por teléfono, sin decir palabra alguna me despedí de Renée, me dirigí al auto abrí su puerta y la ayude a subir después me dirigí a mi lugar, encendí el auto y me puse en marcha.

El silencio se mantuvo firme, de reojo la mire varias veces y no podía hacer que las palabras salieran de mi boca de manera racional, estaba molesto y no por que estuviera con ese, sino porque  no me lo había comentado ¿Por qué ocultarme las cosas? En una de mis tantas miradas la note tensa e insegura con un miedo desquiciante, se retorcía las manos sin poderlo evitar.

¿Pero quien rayos era esta mujer y que había hecho con mi Bella? Esta no era ella, si hubiese sido ella seguramente me hubiera dicho mil cosas antes de ponerse así, era la que me conocía, como era posible que ahora mostrara esto, nuevamente pensé ¡oh no por favor, no pienso volver atrás!

-Hola…-salude rindiéndome a ella, aunque mi genio siguiera desatado, trataba de contenerlo con todas mis fuerzas, pero no pude seguir hablando.

-Yo… amh…-tartamudeaba y paso una mano por su cabello-Bueno, todo estuvo bien- clave mi mirada en ella, mentía y ella lo sabía, gruñí por lo bajo y aferre mis manos al volante- Edward, estoy…

-No me digas “estoy bien”- respondí molesto, ella calló de golpe- Puedes imaginar, lo cerca que estuve de cerrarle el paso para bajarte de su auto, o siquiera de tocar la puerta de su casa porque no salías.

-¿Me seguiste?- soltó aquello incrédula y molesta- ¿Cómo es posible…?

-¿Qué esperabas que hiciera?- no la deje terminar, y ella me miraba sorprendida y molesta- No me mires así, no cuando tú no me dijiste las cosas, no me tuviste confianza- le reproche.

-Te dije que lo haría, jamás te mentí…- está bien, me lo había dicho.

-¿Y por qué no me lo comentaste cuando te llame en la tarde? ¿Por qué mentirme con que estarías ocupada?

-Otra vez no te mentí, lo único que hice fue no salir a comer para poder salir a mi hora e ir a ver a Kate, además dudo mucho que decírtelo hubiera servido de algo, o ¿acaso me hubieras dejado ir?-pregunto y yo me frustre y negué enérgicamente a su pregunta- Lo vez… esto era algo que debía hacer.

-No estoy de acuerdo, te lo dije Bella, y sin embargo no me tomaste en cuenta- conducía a toda velocidad a la casa tratando de aferrarme a la coherencia en el solo hecho de conducir.

-¿No te tomo en cuenta?- soltó molesta- Tú no estás diciendo esto- de pronto lo note, la había hecho enojar- Claro que lo hago, también lo hice de esta manera para no tenerte preocupado a cada segundo por lo que pasaba cuando yo estuviera ahí, jamás pensé que me seguirías, ¿Acaso no me tienes confianza?

-Sabes que eso es una completa estupidez, yo confió en ti- solté molesto, por la observación tan desacertada de Bella- ¿Cómo puedes siquiera pensarlo?

-Y entonces que fue lo que hiciste ahora, porque no entiendo cómo fue que tú estabas intentando no tocar su puerta, eso me dice que sabes donde vive.

-No confió en el, y lo sabes, y no te estuve espiando, te creí solo quise llegar a verte, te quise sorprender y llevarte con Renée, pero el sorprendido fui yo- soltó el aire de golpe y clavo en mí su mirada, seguí explicándome- Llegue justo antes que…-me atragante las palabras- y lo vi, salí del auto dispuesto a ayudarte, pero mi sorpresa fue peor al verte acceder a su contacto y ver cómo te llevaba con el, ahí fue cuando me di cuenta que me habías…

-¡Por Dios!…-exclamo sin dejarme terminar de hablar- ¿Acaso estas loco, o piensas matarnos a ambos?-dijo mirando el tablero del volvo- ¡Edward detente! Si quieres matarte puedes hacerlo solo…-baje la velocidad y me orille, parando el auto por completo, nos faltaban escasos 5 minutos y estaríamos en casa, ella abrió la puerta y descendió del auto, imite su movimiento, estábamos de frente al lago y ella comenzó a dirigirse a él, la seguí- Siento mucho haberte preocupado y ocultarte las cosas…- se giro y me miro con añoranza y tristeza, de la nada se acercó y me abrazo, no pude resistirme a esa actitud y con los puños cerrados aun por la cólera del día, ceñí mis brazos en su cuerpo.

-¿Preocupado?- solté, esa no era  la palabra, estaba loco de celos- Bella, sabes bien lo que pienso y eso no quiere decir que no confié en ti, así que por favor…

-Pero sabes que no debes preocuparte, sabes que puedo defenderme …-dijo ella, pero algo en sus ojos me decía que aquello era solo una forma de tratar de calmarme, entrecerré los ojos y ella nuevamente cedió- Ok… esta bien te daré la razón en el punto en el que Paul aun esta aferrado a su idea…-me tense al escucharla y sin querer la apreté mas a mi, cerré los ojos evitando su mirada, porque estaría seguro que empezaría a protestar- Edward…- me llamo, pero no le hice caso- Mírame por favor- pidió, puso sus manos en mi rostro.

-Bella… dime por favor que no intento nada- dije sin mirarla, pero ella no respondía, oculto su rostro en mi torso al sentir esto abrí los ojos-¡Pero qué demonios!-proteste apartándome de ella y despotricando por lo bajo, me dirigí hacia el auto de espaldas le dije- Debemos irnos, esta obscureciendo cada vez mas rápido- extendí mi mano sin mirarla y ella la tomo sin decir nada, sentía su mirada fija en mi, y sentí como emanaba frialdad por cada poro de mi cuerpo, la ayude a subir al auto y me dirigí a mi lugar.

Encendí el auto y el stereo se encendió dejando como música de fondo “Audioslave- Like a Stone”, me petrifique en el minuto, escuche sin avanzar y deje fluir la letra de la canción por mis sentidos, recordando así mis noches mas negras, cuando Bella no estaba y eso me mataba, justo a mitad de la canción gire mi rostro y pude corroborar que ella estaba a mi lado, no se lo que ella vio.

De pronto ella se había acercado a mi y comenzó a besarme, sentí como de parte de ambos estaba la necesidad por demás implícita, la incomodidad del auto no fue problema ya que ella hábilmente, se acercó a mi quedando en mi regazo, no me importo mucho el hecho, la necesitaba tanto que deje de pensar, seguía besándola, y la acerque mas a mi con una mano, con la otra apague el motor del auto, dejando el stereo encendido y siguiendo mi impulso.

-Te amo, Edward-murmuro entre mis labios, abrí los ojos y pose mi mirada en la suya- No soporto esto, no me gusta discutir contigo, por favor te suplico que me…- no la deje seguir, volví a besarla de pronto el beso paso de ser necesitado a transformarse en pasión pura.

-Bella…-justo llame entre sus labios, cuando me di cuenta que no era el lugar apropiado- Amor podríamos parar…-dije con voz entrecortada por la excitación del momento. Esta mujer me estaba matando, y en segundos encendía en mí diferentes deseos.

-¿Quieres parar o debes parar porque estas molesto?- dijo visiblemente agitada, sonreí ante su pregunta, y negué enarcando una ceja- Se que no es justo que haga esto, pero de verdad yo te amo, te necesito, jamás podría amar a alguien mas- me volví a derretir ante sus palabras y volví a besarla, ella soltó una risilla por lo bajo, al notar mi respuesta.

-No quiero parar…- dije en sus labios- Creo que ya no estoy tan enojado, pero…- ella aparto ligeramente su rostro del mio y mordió su labio inferior- No hagas eso…-proteste besándola, ella lo sabia era una invitación a mi tentación.

-Por favor… ya no estés enojado- me rogo con voz dulce- Quiero que sepas, que tu y solo tu haz ocupado mi mente y mi corazón, olvida lo de hoy, te prometo ser mucho mas consiente y confiare en ti con todo lo que decida hacer.

-¿Olvidar lo de hoy?-proteste mientras seguía besándola, justo en este momento no deseaba olvidar esto, siempre que discutíamos, todo terminaba de manera que ambos nos dábamos un tiempo racional para pensar las cosas y que nuestros genios se calmaran, pero ahora eso no estaba pasando- No… no quiero olvidar.

-¿Qué dices?- se apartó de mí, me miro buscando algún enojo por mi parte, pero ya no lo había.

-¿No te has dado cuenta?- pregunte incrédulo a que no notara la situación, sonrió- Exacto ya no estoy enojado, en lo absoluto- dije a modo de respuesta, ella sonrió nuevamente y se incorporo quedando su espalda en el volante, al recargarse pego con el codo y el claxon la hizo estremecerse ame, su reacción- Me encanta mi auto…-solté con una risa picara- si así va a ser cada vez que discutamos por mi esta bien.

-¿Esperas discutir a cada rato conmigo?-respondió contrariada.

-Tienes razón…-puse un debo en mi boca y la mire pensativo- Hay que probar sin que estemos enojados y también mas alejados de la urbanización.-ella soltó el aire de golpe y sonrió- aunque si me gusto que pudiéramos terminar así nuestra discusión…-puse una mano en su mejilla y la acaricie tiernamente- Mi cielo, quiero que entiendas algo, no me gusta que estés cerca de ese…-me atragante y busque un adjetivo que reflejara poca hostilidad- Tipo…-solté y ella noto mi estado, quería hablar y no la deje- Me pone fatal saberte cerca de él, porque no quiero que te haga daño, se también que será casi imposible que no te acerques a él, lo se, solo te pido por favor me digas las cosas, no me importa si me afecta o no, prefiero estar preparado para cualquier cosa, antes que ignorarlas.

-Lo siento… sé que no debí, pero todo salió de una forma que no esperaba- entrecerré los ojos y ella lo noto así que se explico- La mama de Paul le aviso que iría a ver a Kate, después me llamo diciéndome eso y la verdad me negué, pero después me sentí mal por hacerlo sentir fatal y por eso accedí a que me llevara, pero te aseguro…

-Estabas muerta de miedo…-solté aquello completando su frase, no me equivoque porque ella asintió- Lo se, te vi y me sentí listo para protegerte, creo que eso fue lo que me hizo perder la cordura, el ver que tu estabas mal, pero no entendía como podías irte con el.

-Lo siento…- repitió una vez mas, sentí como se estremeció y en su mirada note temor, volví a besarla, esta vez lo hice con ternura y con mucho amor, esa fragilidad que aun mostraba no me agradaba.

-¡Tranquila!...-musite en sus labios- ya estas en casa…-ella sonrió feliz al escucharme.

-Y no sabes cuanto amo estar en casa…-se acurruco en mis brazos y suspiro contenta- Por que esta es mi casa…-murmuro apretándose junto a mi pecho.

-Te amo…-respondí con fervor besando sus cabellos- Debemos irnos…-le dije, ella seguía sin moverse- Lo se tampoco quiero irme, pero paso algo en casa.-se apartó de mi, me miro intranquila - Jasper y Alice discutieron y estoy seguro que mi hermana te necesita.

-¿Que fue lo que paso?- me encogí de hombros- Vamos dime que paso…

-Jasper tuvo un ataque de celos y…- ella frunció el ceño al escucharme- Es que alguien trato de besar a Alice, realmente… No paso nada pero…

-¿Por qué le das tantas vueltas?- suspire y la mire seriamente.

-Bella no lo puedo juzgar…- ella suspiro- menos cuando yo estaba igual que él hace unos momentos- medite las cosas y puse mi dedo índice en mi boca- Aunque sabes que, no se como es que terminamos así…- le indique su posición y la mia, ella frunció el ceño triste y arrepentida, yo solté una carcajada- ¡Luces tan enloquecedoramente culpable!

-Perdón…- volvió a repetir cabizbaja- Si deseas que no haga esto no lo hare.

-No quiero que vuelvas a ocultarme nada y la verdad no estoy muy en contra de que todas nuestras discusiones terminen así …- le señale el hecho- me refiero que a pesar de todo pudimos hablar las cosas y no nos separamos por cualquier discusión, eso me gusta, creo que encontramos la receta, para cualquier conflicto, hablarlo nos hace bien- ella sonrió tiernamente- creo que debemos llegar a casa- puso un puchero tan adorable que me derretí - Está bien, por mí no regresemos…- inicie un beso lleno de pasión y ella lo sintió, mis manos viajaban por su espalda hacia su cintura, después se pasaron por sus muslos y ella soltó un muy leve gemido en mis labios.

-Yo creo que mejor….- murmuro agitada en mis labios- si… nos… vamos- logro decir, pero esta vez yo ya no estaba tan dispuesto, mi celular comenzó a sonar y yo no le preste atención, estaba muy entretenido besando delicadamente su cuello- Demonios…- dijo ella tomando el celular, detuve sus manos- Edward, déjame contestar, debe ser importante…- estaba realmente excitada, por mi toque, solté sus manos y ella suspiro antes de contestar, mientras yo seguía entretenido- Teléfono de Edward Cullen- dijo ella tratando de mantenerse serena, de pronto la perdí, pareciese que quien hablo la hizo desconectarse del momento-  Claro en un segundo se lo comunico…- la mire extrañado- Es de la productora…-dijo entregándome el teléfono.

Conteste rápidamente, y ella se apartó de mí, negué mirándola pero ella rodo los ojos y volvió a su lugar. Lo que me faltaba, contestar una llamada de trabajo, tuvimos que irnos, cuando llegamos, Bella fue hablar con Alice, al poco rato, vi a mi hermana mas serena. Bella me había comentado que le hizo ver que Jasper se había equivocado, y que lo mejor era que hablasen, total lo mas importante era que se amaban y no había por que sufrir, aquello surtió el mejor efecto posible.