BUENAS NOCHES CHICAS, COMO SIEMPRE SALUDANDOLAS Y AGRADECIENTO QUE NOS SIGAN ACOMPAÑANDO, A PESAR DE LAS LARGAS ESPERAS QUE LES HACEMOS PASAR. POR OTRO LADO KRIS_9, BIENVENIDA, MIL GRACIAS POR TU COMENTARIO, ACOSTUMBRO LEER CADA COMENTARIO QUE ME DEJAN, YA SEA CORTO O MUY LARGO, TODOS LOS VALORO MUCHISIMO, ME ENCANTA SABER DE TOD@S USTEDES, POR OTRO LADO ME  TU COMENTARIO, ES TODO UN HONOR QUE CONSIDERES QUE ESCRIBO BIEN, ME ENCANTARIA LEERTE, CUANDO PUEDAS DEJAME UN MP Y ESTARE LEYENDO TUS HISTORIAS, ASI COMO TAMBIEN MIS COMENTARIOS... BUENO ES HORA DE DEJARLAS LEER, CHICAS MIL GRACIAS, SE LES QUIERE MUCHO Y NOS LEEMOS EN LOS COMENTARIOS...

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EDWARD POV.

Faltaba una hora para que Bella llegara, hoy le había insistido que se llevase el auto, pero no quiso, según ella podría llegar fácilmente a la productora, de alguna manera debía convencerla para que accediese a ese minúsculo detalle, además ya tenía en mente comprar otro auto, y el que ella pudiese moverse con libertad y seguridad me importaba.

-¡Buenas tardes mi amigo Edward!- dijo Curtis sacándome de mis pensamientos.

-¡Vaya!- me levante de mi silla impactado y lo salude- ¿Qué te trae por aquí?

-Un proyecto, muy alocado en el que tú me ayudaras- le ofrecí asiento y fruncí el ceño.

-Pues tú dirás…- dije sentándome, el tomo la foto que estaba en mi escritorio.

-Es fácil, la quiero a ella…- dijo moviendo la foto de Bella en sus manos, lo mire de mala manera- me gusta y la quiero.

-¿De qué rayos estás hablando?- proteste molesto- No te voy a permitir que te pases de listo…- bufe molesto.

-¿Pasa algo?- dijo Franco entrando, con gesto tranquilo y mirándome inquisitivo.

-Soy Curtis…- dijo este extendiendo su mano hacia él.

-Se quién eres mi esposa trabaja en tu escuela, aun asi es un placer conocerte, soy Franco Dalmau.

-Bien, dime algo…-Curtis suspiro y nuevamente tomo la foto de Bella en sus manos- ¿La conoces?- Franco asintió- ¿Dónde la localizo? Nadie me dice dónde puedo localizarla, y John trabaja aquí pero no está, asi que me quedaba Edward, pero como puedes ver esta en su pose envidiosa.

-Buenas tardes…- dijo Bella mirándonos a los tres, pero yo vi a Curtis.

-Basta con desearlo para encontrarte muñeca- dijo este acercándose a ella- ¿Qué necesito para que me cumplas un deseo?

-¿Disculpa?- respondió Bella, retirándose de su toque.

-Mira es simple…- este suspiro y paso un brazo por sus hombros, mientras Bella lo miraba intrigada- Quisiera que cantes para mi… quiero que cantes una canción conmigo para mi nuevo disco- ahí me relaje, por un minuto mis celos quedaron de lado.

-Tú sabes que lo que hice en la escuela de canto fue por el puro placer de ayudar y disfrutar.

-Mira hagamos algo, escucha esto y dime si te agrada- dijo este agitando un cd, Bella solo asintió- ¿Podemos utilizar una de tus cabinas?- me pregunto y yo asentí.

Caminamos mientras Curtis le ofrecía la letra de la canción a Bella, esta comenzó a leer con calma, nos sentamos en la cabina y escuchamos la mezcla, Curtis canto para ella y a Bella pareció agradarle la letra, Franco a su lado ya estaba como pez en el agua e hizo varios comentarios que Curtis acepto.

-¿Por qué yo?- pregunto ella de pronto y Curtis se sonrió.

-¿Por qué no?- le regreso seguro- nadie como tú para complementarla- suspiro- ¿Qué dices? ¿Te interesa?

-Si…- respondió ella con una sonrisa- Pero te propongo algo- el asintió y espero- escúchame cantando esto y después decide ¿ok?

-Como quieras…- dijo restándole importancia y se sonrió- ¿tienes tiempo?- le pregunto y yo rodé los ojos.

-¿Edward?- pregunto ella, dos pares de ojos me miraron sin entender el por qué ella se dirigía a mí.

-Hagámoslo…- respondí.

Curtis comenzó a darle instrucción, la escucho cantar a capella, y este ya estaba más que emocionado, sabía que no iba a parar hasta grabar, asi que este sería un fin de semana muy largo, Franco sugirió algunos cambios que este acepto de inmediato. Había contado con pasar solos el fin de semana, ya que Jasper y Alice habían decidido salir y pasarlo solos, pero no cabe duda que mis planes se fueron al carajo con esta situación.

Cerca de las 2 de la mañana partimos a casa, Bella estaba agotada, asi que no hicimos nada más que llegar y descansar, mañana ella tendría un día muy pesado.

No sé cómo escuche ruido a mí alrededor, no tenía ni las más mínimas ganas de abrir los ojos. Bella puso su dedo índice en mis labios y los recorrió con ligereza, no me moví, escuche su risa, en vez de mirarla la imagine.

-Despierta dormilón…- dijo con ternura y deposito un beso en mis labios.

-Sera muy difícil para ti que me saques de la cama…- proteste sin abrí los ojos y la atraje hacia mí, me acurruque con ella en mis brazos, sentí su cabello mojado en mi rostro y abrí los ojos- ¿Por qué demonios te levantaste?

-Porque tengo un compromiso y no pienso dejarte en ridículo- respondió girándose, yo cerré los ojos- ¿Qué debo hacer para que abras tus lindos ojos?- dijo pasando sus manos por mi rostro.

-¿Qué te parece, quedarnos aquí y no movernos en todo el día?- propuse.

-Te lo cambio, para el próximo fin de semana- ofreció y yo negué- ¿Qué hare para que me veas?- musito- ¡Ya se!- dijo en un tono divertido.

Sentí sus labios cerca de los míos, me reí y negué, pero ella no desistió en su objetivo, con suma lentitud los movió, seguí sin moverme, ella se separó ligeramente y deposito un beso en mi mejilla y después sentí sus labios deslizarse por mi cuello y ahí quedo mi resistencia, abrí los ojos de golpe, la tome por la cintura y la puse en la cama.

-Eso no es jugar limpio…- proteste- sabes que asi menos saldrás de esta casa.

-Logre mi objetivo- dijo con una sonrisa divertida- buenos días cielo- me miro coqueta.

-Esta dicho, hoy no salimos…- dije y comencé a besarla, el momento se rompió con el repiqueteo del teléfono.

-Es hora de irnos…- afirmo parando el beso. Se incorporó con facilidad y agrego- te espero en la cocina- después tomo el teléfono y saludo, dejándome en la habitación.

Quince minutos después yo baje a la cocina, mientras ella servia el desayuno, ni siquiera le pregunte, me imaginaba quien era. Salimos en un silencio cómodo, esto era lo que me gustaba de nuestra relación, no necesitábamos llenar los espacios con comentarios absurdos. Llegamos a la productora y Franco como Curtis ya estaban listos, cuando nos vieron llegar ambos miraron nuestro agarre de manos, y entrecerraron los ojos, yo me hice el desentendido y nos pusimos a trabajar.

Se aplicaron los nuevos arreglos y comenzamos a grabar, Curtis pidió que grabase Bella primero, pero Franco y yo le sugerimos que lo hiciesen juntos, se repitió varias veces pero no le gustaba, decía que faltaba algo, fue ahí cuando lo note, mire el piano y vi lo que faltaba.

-Déjame intentar algo…- pedí y ambos asintieron, me fui a la otra cabina, con otro equipo y les pedí me grabaran tocando el piano.

Justo pasaron dos horas, cuando regrese a la cabina en la que ellos estaban, Bella y Franco, estaban grabando a Curtis.

-¿Qué tal se escucha con esto?- pregunto Franco.

-Me gusta esta mezcla…- aporte al notar la diferencia.

-Bella lo sugirió- dijo Franco mirándole sonriente.

-¿Desde cuándo compones?- dije mirándole.

-Es culpa tuya y también de John…- se encogió de hombros- parece ser que su influencia sirve más de lo esperado- le restó importancia.

-Bueno no es solo eso, si dices que tomaste clases de canto y música, es normal que sepas- dijo Franco encogiéndose de hombros.

-Traje esto…- dije presionando el botón del micrófono, para que me oyera Curtis, el salió de la sala de grabación y entro donde estábamos, le mostré las partituras- Pensé que esto quedaría… es algo muy sutil, supongo que habrá que integrarlo, claro si es que te agrada.

-Bien, intentémoslo…- suspiro contento- Vamos Bella- le dijo y la encamino- Y que ¿no tocaras el piano?- dijo mirándome, yo rodé los ojos y asentí.

Pasaron más de tres horas ahí adentro, ya me estaba volviendo loco, ya me habían grabado a mí tocando el piano, la música estaba lista pero ellos aún no grababan la voz.

-¡Tengo hambre!- grito Franco, pasando sus manos por su rostro- No tengo nada en contra del perfeccionismo, pero él me supera- dijo señalando a Curtis, su celular vibro- Te quedas a cargo, Lía llego- asentí y se salió.

-Tomemos un receso…- dije al ver como Curtis se equivocaba, el asintió.

Vi salir a Bella y mucho después a Curtis, la puerta a mis espaldas se abrió, ella deslizo sus brazos por mis hombros y me abrazo, recargo su barbilla en mi hombro y suspiro.

-Voy a pedir comida- dijo Marshall salió, yo asentí.

-¿Cansado?- dijo Bella cuando me deje caer en el respaldo y suspire.

-Se suponía que tendríamos este fin de semana de diferente manera- agregue sin mirarle.

-¿Estas molesto?- negué- Bien, porque no me gusta verte enojado- se puso delante de mí y sin importarle nada, puso su mano en mi nuca, me atrajo hacia ella y me beso, no pude evitar reírme- asi me gustas más.

-Ya que estamos en la hora de las complacencias- dije sentándola en mis piernas- ¿Qué quieres comer?- ella se encogió de hombros- Escoge algo y mandare por él.

-¿Lo que yo quiera?- dijo enarcando una ceja, mirándome divertida, yo asentí- Humm… pues eso será muy sencillo- sonriente acerco su boca a mi oído y agrego- te quiero a ti.

-¿Por qué me haces esto?- proteste frustrado, riéndome nervioso al sentir como comenzó a depositar besos en mi cuello- ¡Rayos!- bufe ahogado y sin aguantarme la bese con necesidad, estaba tan sumergido en el beso que un carraspeo nos hizo separarnos.

-Yo les traía algo para comer, pero creo que ustedes no tienen apetito…- dijo Lía mirándonos inquisitiva- bueno al menos no del apetito requerido.

-Asi que eso se traían- dijo Franco divertido- ¿Por qué diablos nadie sabe esto?

-Por qué Bella y yo queríamos mantenerlo un rato asi- conteste mirándolos serio.

-Por nosotros ni te preocupes, tu secreto está a salvo- respondió Lía y Franco asintió.

Pero ya no pudimos hablar más, Curtis entro y comió con nosotros, pasado un buen rato, todo volvió al punto responsable, justo a eso de las 7 de la mañana acabamos de grabar, cuando salimos, nadie tenía ganas de nada, creo que todos queríamos lo mismo, solo una cama y descansar.

Cuando llegamos a la casa yo  me encamine a mi habitación, no quería ni moverme, pero aun asi decidí bañarme y cambiarme, quizá esto ayudaría para que descansara, pasaron 50 minutos y de Bella ni sus luces. Fui a buscarla, quería ver si ella ya estaba descansando y si era asi yo simplemente me acomodaría a su lado, pero vaya sorpresa me lleve al ver su habitación vacía, pronto el olor a comida, lleno mis fosas nasales y me dirigí a la cocina.

-¿No se supone que deberías estar dormida?- le rete, ella se giró y me sonrió con ternura.

- Me duche y se me quito el sueño y como tú estabas en lo mismo, decidí venir a hacer la comida- dijo encogiéndose de hombros.

-Tenía pensado comprar comida, no pensé que tuvieras ganas de cocinar- señale- Bella mañana tienes que ir a trabajar, llevas dos días sin dormir todas las horas requeridas. Deja esto…- dije tomando los utensilios de cocina que tenía en las manos- vamos a la cama.

-Bueno al menos déjame recoger- yo bufe y negué, pero ella huyo de mí y comenzó a correr por la cocina, recogiendo todo a su paso, cuando trataba de alcanzarla ella hábilmente me esquivaba.

No fue hasta que termino de recoger aquello, cuando nos fuimos a la cama. Me acurruque junto a ella y la tome por la cintura, mientras que mi rostro lo enterré en su nuca, aspirar su aroma era sensacional para mí, esto me hacía sentir completo y realizado, no me faltaba nada y tampoco necesitaba nada.

-¿Crees que esto durara?- su pregunta me hizo abrir los ojos de golpe, me incorpore un poco y la gire para que me enfrentara.

-¿A qué te refieres?- pregunte tranquilo, pero su gesto angustiado y triste me alerto.

-No me hagas caso…- musito abrazándome con fuerza.

-¿Qué pasa?- pregunte al notarla tensa, ella negó, la observe con detenimiento y en su rostro descubrí la misma angustia que ella mostraba cuando tenía una pesadilla- Has tenido pesadillas- afirme, ella asintió- ¿Por qué no me has despertado?

-Porque cuando despierto solo te miro y eso me tranquiliza- suspiro.

-Debes estar tranquila, te lo dije jamás te dejare…- le prometí, ella me beso- ahora debes descansar- dije y ella asintió.

-Dime que me quieres…- pidió y yo sonreí.

-No te quiero…- ella frunció el ceño- Te amo…- la sonrisa que me devolvió no me tranquilizo, pero fingí tranquilizarme- Si te pido que te cases conmigo ¿Qué me responderías?

-¿Qué?- dijo impactada- No es cierto…- protesto- creo que el que necesita dormir eres tú, no yo.

-Sabes que eso no es cierto- dije riéndome por su visible incomodidad- la realidad es que te amo y te lo dije Bella, serás mi esposa.

-Ya veremos- respondió desviando el tema- sabes que no necesitamos tocar ese tema, podemos seguir como estamos y eso jamás modificara mis sentimientos hacia ti.

-De acuerdo, descansemos-suspire- Solo una cosa más- ella me miro- No tardare en adornar nuevamente tu dedo con el anillo.

-¿Cuál anillo?- respondió confundida- se supone que tú los extraviaste.

-Eso es lo que tú crees, jamás perdería algo como eso…- afirme, ella bufo y negó, la vi dudar y agregue- ¿quieres verlos?

-¡NO!- dijo fuerte y claro- dejémoslo asi…- comencé a reírme divertido- No me parece gracioso- se quejó.

-A mi si…-suspire, la abrace y deposite un beso en sus labios- Te amo, aunque no quieras casarte conmigo- ella iba a repelar pero no la deje- es hora de descansar- sentencie.

No dijimos nada más, dormimos alrededor de cinco horas, cuando despertamos Jasper y Alice aun no llegaban, comimos y seguimos descansando, llegada la noche aparecieron ambos sonrientes y felices, platicamos con ellos lo que habíamos hecho y después todos decidimos irnos a descansar.

ALICE POV.

Llevábamos ya más de un mes y medio yendo con Lía Y John, de hecho a Bella le habían ofrecido trabajo ahí, pero ella decidió pensarlo a conciencia antes de aceptar, la propuesta se mantendría abierta para cuando decidiese tomarla. Edward, Jasper y Emmet habían empezado a trabajar mucho más al parecer mi hermano regresaría a los escenarios después de una larga ausencia, yo no paraba entre el trabajo y la escuela bueno mis horarios eran bastante accesibles a partir de las 5:30pm tenía libres las tardes, mi jefa era genial y lo mejor se había encariñado conmigo, le encantaba guiarme y enseñarme lo cual a mí me beneficiaba.

Jasper había llegado por mí, este día había salido más tarde, pues mi jefa estaba preocupada por la salida de una nueva colección, así que me había pedido apoyarla.

-Hola preciosa…- Jasper se acercó me beso ligeramente en los labios y tomo mi portafolio de diseños- Pronto llegaremos a casa y descansaras amor…- abrió la puerta del auto y me ayudo a subir, sonreí al ver su actitud me encantaba cuando me consentía, él era verdaderamente dulce, no tenía que decirle las cosas el analizaba la situación y simplemente actuaba.

-Ya te dije que TE AMO…- dije cuando él estaba saliendo de ahí, él sonrió, detuvo el carro y me beso.

-Tanto o más te amo yo…- sonreí, pero esta vez el beso se cargó más necesario y pasional, pude entender su estado de ánimo, en ese minuto sonreí y él se separó- Mejor nos vamos, me urge llegar a casa…

Puso música y empezó a manejar, nos mantuvimos en un silencio cómodo, trate de descansar en el trayecto a casa, cerré mis ojos y dormite, justo cuando llegamos el presiono dulcemente mi mano, cuando abrí los ojos ya estábamos en casa, pude ver el auto de Edward, estacionado así que supuse que ya habían llegado, estos dos todo este tiempo se notaban tranquilos y muy felices, no entendía por qué no habían regresado, eso sí salían como siempre para darnos nuestro espacio y cuando estaban juntos siempre los veías abrazados, mi hermano siempre cubría de caricias y dulces besos el rostro de Bella, claro sin llegar a los labios.

Bajamos del auto en silencio, caminando tomados de la mano, Jasper abrió la puerta muy despacio, pues yo empecé a besarlo, así que no emitimos ruido alguno, entramos en sumo silencio, pero algo nos sacó de nuestra burbuja.

-No puedo creer que propongas esa pareja…-dijo mi hermano riéndose, Jasper y yo nos giramos y el agrego- ¿Rose y Jacob? Lo dices en serio…-Bella asintió ella estaba recostada bocabajo en la colchoneta de espaldas a Edward, mientras que este estaba recargado en el sillón de espaldas a nosotros - abría más acción entre Jacob y una morsa…- replico carcajeándose, Bella se giró solo mirándolo a él, sin percatarse de nuestra presencia.

-¿Estás diciendo que Jake no es divertido?-pero el solo negó y siguió riéndose- Jake es un chico fantástico, es tierno y muy dulce todo un caballero…- tomo el libro que se encontraba a los pies de mi hermano.

-Digamos que si… ¿pero sabes una cosa?- la tomo por la cintura y la giro acercándola a él, su cuerpo de ella quedo recargado en su torso y el unió sus frentes, Jasper me miro y yo solo me encogí de hombros pero lo que nos dejó aún más estáticos fue lo siguiente-Dios mío… estar tu y yo juntos, es perfecto…-Bella se recargo en las piernas de mi hermano, mordió su labio inferior y esbozo una sonrisa, mientras que el quitaba el pelo de su rostro- Este ha sido el mes más maravilloso que he tenido en mucho tiempo…

-¿Tú crees?- dudo Bella- seguro que hay algún momento que supere este mes…

-Quizá…-respondió mi hermano-lo reconozco… Sí, hay un momento que pueda superar este pero aun así ha sido contigo…- Bella coloco su mano en su rostro deslizándola por su cabello, Jasper y yo seguíamos estáticos ¿cómo que llevaban un mes juntos?- No me puedes ganar el alegato y lo sabes…

-¿Ah no?... Con lo que tu ignoras amor yo escribo un libro…- Bella se aproximó y lo beso, el beso se hizo bastante profundo e intenso, Jasper tomo mi mano y nos encaminamos hasta la sala, sin decir nada, mientras ellos seguían besándose, Jasper carraspeo, y ambos se separaron, Bella se sonrojo, al vernos bajo la mirada, Edward se giró cuando nos vio solo se rio.

-Buenas Noches… ¿No les había presentado ya a mi novia?- señalo a Bella con una sonrisa, yo me reí ante la cara de esta- Les presento a Bella el amor de mi vida…- esta sonrió avergonzada y solo levanto los pulgares a modo de saludo, después paso su mano por su cabello.

-Isabella…- reprocho Jasper, poniendo una cara seria, que después cambio en una sonrisa al ver la cara de esta.

-¿Llevan un mes juntos y yo apenas me doy cuenta?- proteste, me acerque a ellos y abrace a Bella- ¿Cómo pudieron ocultarme algo así?... No esperen ¿Cómo no lo note?...

-Creo que Jasper te abstrae más de lo que piensas…-dijo mi hermano en una carcajada.

-¿Pero yo tampoco lo note?- replico Jasper, sentándose en el sillón mientras que yo me sentaba en la colchoneta y me recargaba en sus piernas.

-¿Es que acaso no te pasa lo mismo hermanito?- replico Bella con una sonrisa- Además hemos guardado esto solo para nosotros, creo que esa es la razón, por la cual no lo notaron.

-Si… hasta ahora… ¿Cómo pudieron mantenerme al margen? ¿Acaso no confían en nosotros?

-Si les tenemos confianza pero aun no teníamos pensado decirlo…-contesto Edward.

-Bueno, es claro que eso fue culpa de tu hermano… -dijo Bella defendiéndose, Edward enarco una ceja divertido- Si él no me hubiera atraído hacia el creo que no hubieran visto nada…

-Ahora resulta que él fue el que te beso…-ataco Jasper defendiendo a Edward y este solo choco su mano a modo de agradecimiento.

-¿Estas de parte de él?- dijo Bella en una fingida contrariedad, ambos se rieron y yo ataque.

-Si… claro y tú te sacrificaste mucho al besarlo…- repuse, Jasper y Edward se rieron ante la cara de Bella y mi acusación.

-¿Tú también?- se levantó con el mismo aire de contrariedad fingida, camino dos pasos y tomo un cojín del sillón, lanzándomelo en la cara- ¡TRAIDORA!, lo esperaba de él…- señalo a Jasper- no de ti…-Los tres comenzaron a reírse de mí, me incorpore tome el cojín.

-Esta me la pagan…- empecé a pegarles a los dos mientras que Bella reía, ambos tomaron una almohada, y comenzaron a defenderse.

Bella solo nos veía y sonreía ante el conflicto de almohadas que ella había originado y ahora se encontraba solo como espectador riéndose, los tres volteamos a verla, ella comprendió lo que se le venía encima, salto el sofá y tomo una almohada, antes de que pudiera girarse para defenderse, Edward ya la tenía por la cintura, para que no escapara.

La guerra de almohadazos, se hizo cada vez más divertida, dos amoldadas perecieron en la batalla, las plumas empezaron a caer con cada golpe, nuestras risas se intensificaron, de alguna forma, Bella y Jasper terminaron en el suelo, pero ambos se pusieron de acuerdo y nos tumbaron en el suelo, parecíamos niños pequeños, disfrutando del momento, con los últimos golpes salieron las ultimas plumas, terminamos rendidos en el suelo riéndonos sin parar, Bella había acabado debajo de Jasper, la cabeza de este estaba en su abdomen, mientras que Edward tenia las piernas enredadas en las de Jasper y las mías yo repose mi cabeza en el torso de mi hermano, reíamos divertidos.

-Estuvo sensacional…- dijo Bella con la voz entrecortada.

-Si de verdad interesante cuanto tiempo tenía que no destruíamos las almohadas hermanita- pregunto Jasper.

-Ustedes los Swan deben reconocer que esta batalla fue ganada por nosotros…-replico mi hermano, yo asentí y gire mi rostro para ver a Bella y Jasper, estos se miraban, de manera cómplice.

-Ya quisieras…- dijo Jasper incorporándose para seguir el ataque esta vez formando equipo con Bella, fueron más rápidos y audaces, nos tomaron por sorpresa. Cuando Edward y yo empezamos a decir basta, ellos dejaron la ofensiva.

-¡Al ataque!- grito Edward incorporándome, los perseguimos por toda la casa con los cojines del sillón en mano y ellos igual, el timbre sonó y nadie se movió para abrir, fue cuando me percate, que la persona que hacia el aseo seguía ahí, seguimos corriendo, tras ellos llegamos a la sala y nos paramos en seco cuando, vimos entrar a Louis con mi mama y mi papa.

-¿Pero qué paso aquí?...- mi madre nos miró desconcertada, mientras que Jasper le proporcionaba otro almohadazo a Edward. Nos reímos como niños al verlos ahí parados viéndonos como si hubiéramos hecho, una travesura reprobatoria, como si fuéramos sus niños pequeños.

-Bien… venimos a ver a los adultos que viven en la casa y me encuentro con Isabelita y Allie, cubiertas de plumas ya que Edward y Jasper se han dedicado a desplumar a nuestros angelitos…- dijo Louis sonrió, Bella lo abrazo y yo copie su gesto.

-Mama… Papa… ¿Qué los trae por aquí?- respondió mi hermano sacudiéndose el cabello.

-Ya lo dijo Louis, veníamos a visitarlos… veníamos a ver si cenábamos juntos- dijo mama, en eso sonó el timbre los cuatro nos miramos extrañados, nuevamente salió abrí la muchacha, cuando entro Emmet y Rosalie la seguían.

-Vaya nos perdimos la fiesta…-dijo Emmet al vernos.

-¿Van a salir?- pregunto mi padre.

-NO…-contestamos los cuatro a coro, lo que provoco que nos riéramos estúpidamente.

-Nosotros venimos de visita…-aclaro Rosalie sonriendo.

Se quedaron a cenar por supuesto, Jasper y Bella se dedicaron a cocinar mientras, que yo y Edward recogíamos el desastre de la sala, Louis nos miraba entre risas, mientras que mi madre acudió con los Chefs de la noche a supervisarlos, justo terminamos cuando ellos acabaron con la elaboración de la cena. Cenamos y platicamos de cuando éramos niños y la imagen que les habíamos proporcionado esta noche, los recuerdos estaban fluyendo sin mostrar trazo alguno de amargura, fue una cena muy familiar.

BELLA POV.

Los días comenzaron a pasar con suma fluidez, todos teníamos algo que hacer, pero de alguna forma nos manteníamos unidos. El trabajo ya me estaba sacando de quicio, pero mi problema persistía, yo no podía renunciar ahora, no cuando Phil aun no encontraba un trabajo, por ahora nos manteníamos con mi sueldo y con las ganancias de la hacienda, puedo decir que no vivíamos mal, pues Phil también aportaba dinero, era algo que él había ahorrado, pero me preocupaba en sobremanera que pasaría cuando este se acabara.

-Isabella, puedes venir un momento- me llamo la hija de mi jefe, desde su llegada todos los trabajadores habíamos sufrido un extremo dolor de cabeza, la chica era totalmente intolerable.

-¿En qué puedo servirte?- dije al entrar en su oficina.

-Mira, quiero que cheques estas facturas y que también vayas a las sucursales y veas como van las cosas para iniciar el inventario, después necesito que hagas estas cartas y para finalizar necesito que me cheques un boleto de avión, de España para Forks…- asentí tomando todo aquello, tenía bastante trabajo y esto remataria para que nunca acabase, justo cuando iba a salir ella agrego- Isabella las cosas son para hoy, no te quiero ver distraída.

-¿Disculpa?- le regrese atónita.

-Sí, me refiero a que dejes de escuchar música y te centres en tus actividades…- declaro con despotismo.

-Jamás he fallado en mis entregas y sabes que cumplo con todo lo que se me ordena- repele.

-Lo que sea, vete a trabajar- me ignoro olímpicamente y me trato de forma detestable.

Quise gritar, pues su padre jamás había sido asi con ninguno de sus empleados, el comprendía todo y era un hombre amable con sus trabajadores, peros sus hijos Vivian con un toque de superioridad insufrible, se creían tan perfectos que esto desataba muchas guerras, pero por lógica nosotros al ser empleados no podíamos hacer mucho, por no decir nada. Termine todo lo requerido cerca de las 7:30, estaba agotada, pero cumplí con todo, aún tenía que ir con mi madre y llevar algunas cosas que mi hermana necesitaría para la escuela.

-¿Todo bien?- pregunto mi madre y yo negué- ¿Siguen las cosas mal?- me pregunto preocupada, Phil se acercó.

-Esa familia logra ser insufrible- respondió el- mi viejo amigo, no ha podido controlar jamás a sus hijos- aporto Phil, escuchamos como un auto se aparcaba, este se asomó- Llego Edward…- sonreí con facilidad.

-Hola…- dijo cuándo Phil le abrió la puerta- ¿Cómo están?

-Bien…- respondió mi madre respondiendo el saludo de Edward, después se giró y me miro- Debes pensar las cosas Bella, si esto ya te está superando es mejor que salgas de ahí- Edward frunció el ceño y me miro preocupado.

-Sabemos que eso no lo puedo hacer- replique parándome de mi lugar- voy a mi habitación, por unos libros- le dije a Edward y este asintió.

-No me gusta que mi hija este asi, cada vez la noto más fastidiada- dijo mi madre.

-Yo ya trabaje con ellos y el ambiente es insoportable- respondió Phil, yo estaba parada en la puerta de mi habitación escuchándolos- La hija de mi amigo, es una muchachita que no tiene ni la menor idea de lo que este trabajo representa, el ambiente es pesado y a eso anéxale que los tres hijos desconfían de todos, sufren de delirio de robo, creen que todos los pueden robar, son tan avariciosos que asusta.

-Pues lo único que sé es que quiero que mi hija este bien- respondió mama y yo deje de escucharlos, ahora no podía darme el lujo de quedarme sin trabajo, no podía, fin del tema.

Cuando salimos de casa de mi madre, Edward intento tocar el tema, me dijo que podría trabajar en la productora y que podría hacerlo como la publicista que era, pero esto no me parecía justo, yo quería tener un trabajo que ganase por mis propios méritos, no quería tener trabajo porque mi novio o alguien más me los regalara. ¡Si, lo se soy testaruda! Pero seamos realistas ¿a quién le gusta que le regalen las cosas? Pasaron dos días más cuando recibí la siguiente sorpresa.

-Buenos días…- dijo una mujer a en la entrada, pero yo seguí en lo mío, seguramente Natasha la atendería- disculpa…- toco mi puerta- Busco a Catalina…- cuando me gire solté el aire de golpe al verla- Isabella Swan, ¿tu aquí?- inquirió divertida y arrogante.

-¡María!- grito la hija de mi jefe- ¡Prima!- asi que yo fui la que ayudo a su regreso, pensé justo cuando ella le llamo prima- Isabella ¿pasa algo?- dijo molesta.

-No te preocupes prima…- respondió María- Isabella y yo nos conocemos.

-¿De dónde la conoces?- interrogo está señalándome con fastidio y altivez.

-Pues ella es nada más y nada menos que mi cuñada…- cuando dijo esto yo la mire incrédula, mientras la otra la miraba confundida- ¿recuerdas a mi último novio?

-El chico rubio, de ojos color aceituna, que era sumamente caballeroso y tierno contigo…- dijo admirada y esta le asintió- ¡No lo puedo creer!- me miro de arriba abajo incrédula- Pero, tú me habías comentado que él tenía dinero y que trabajaba con gente del medio artístico.

-Y lo hace, mis amigas me han dicho que lo sigue haciendo y que ahora le va cada vez mejor- afirmo María.

-Si es asi, ¿qué hace ella aquí?- bufo contrariada- Si tiene dinero como es que busca un trabajo.

-Con su permiso…- dije harta, tratando de evitar que mi boca se soltara y dijera algo que me hiciese perder mi trabajo.

Paso alrededor de una hora y media, donde se dedicaron a criticarme, solo las veía hablar divertidas, me señalaban y se divertían a carcajada abierta, después de un rato mi jefe le pidió algo a su hija y esta le pidió esperarla unos 20 minutos, asi que María fue a molestarme.

-Y… ¿Cómo te va?- dijo sentándose en las sillas que quedaban de frente a mi escritorio.

-Bien- conteste sin mirarle, trate de sumergirme en mi trabajo.

-¿Por qué siento que no me toleras?- pregunto, yo bufe y me reí irónicamente.

-Para nada, es solo que estoy en mi área de trabajo y no puedo darme la libertad de descuidarlo- respondí fingiendo cortesía.

-Tío…- dijo María viendo como este se acercaba a mi oficina.

-Isabella, ¿ya tienes los estados de cuenta que te pedí?- dijo saludándola de beso sin decir nada más entregue lo que me pedía.

-Señor, aquí tiene también estas facturas, se deben pagar a más tardar el jueves y también ya elabore los cheques de estas- dije poniendo las cosas en las manos, el asintió- Le recuerdo que tiene cita con su médico dentro de una hora.

-¡Ya se me había olvidado!- respondió el miro su reloj y negó- ¡Que haría sin ti!- dijo mirándome con una sonrisa amable.

-Tío, pídele a Isabella que me atienda, dice que como tiene trabajo que hacer no lo puede hacer, y Catalina no regresa hasta dentro de 20 minutos…- puso un falso puchero, de esos que le ponía a Jasper.

-¿Cuál es el interés en ella?- le respondió mi jefe.

-Tío ella es hermana de mi novio ¿Lo recuerdas?- le regreso, mi jefe se quedó frunciendo el ceño y ella agrego- Fue conmigo a tu aniversario de bodas- ahí mi jefe asintió.

-¿Es tu hermano?- me pregunto, yo asentí- Pero hija, no se supone que tú y el terminaron hace mucho- protesto el, y yo aplaudí su ocurrencia.

-Si tío, pero yo sé que el aún me ama, solo necesitamos volver a vernos y ya verás- afirmo esta, mientras yo sentí como mi gesto se volvía atónito ante su afirmación- Por eso deseo hablar con Isabella.

-Isabella…- me llamo Maggie y me sentí salvada por la campana- ¿Me acompañas?- vio al jefe y agrego- Señor, hay un problema en una de las sucursales y necesito que Bella me ayude.

Este asintió, y no dejo marchar, cuando salimos le agradecí a Maggie pero esta me dijo que no había ningún problema que solo me sacaba para quitarme a María de encima. Ella me dijo que la conocía de años atrás y sabia cuan insoportable podía ser. Se lo agradecí enormemente, cuando regresamos de nueva cuenta a la oficina, Catalina y María salían, dijeron que volverían más tarde y yo desee que no lo hiciera, ya que hoy Jasper vendría por mí y no era un encuentro que quisiese propiciar, la quería lejos, lo más lejos que se pudiese de mi hermano y de mi familia.

JASPER POV.

El fin de semana pasado habíamos descubierto la relación de Edward y Bella, misma que mantuvimos en secreto ya que ellos tenían razón ellos dirían las cosas a su tiempo, pero eso no fue lo único que iba a pasar, o al menos yo no me lo esperaba. Estaba afuera del trabajo de Bella, esperándola como siempre que me tocaba venir por ella.

-¡Súbete al auto!- dijo mi hermana fuerte y alto, se veía furiosa, yo le fruncí el ceño, pero aun asi le obedecí, Bella furiosa no era mi persona favorita- ¡No sé qué rayos busca! ¡Bruja!- balbuceo.

-¿Qué paso?- solté justo cuando encendí el auto.

-¡Solo arranca el maldito auto!…- respondió en un siseo, no quise preguntar, cuando llegamos a casa espeto- No quiero que vayas más por mi…- me dejo mudo, Edward la miro igual, mientras Alice la seguía hasta su habitación.

-¿Qué fue lo que paso?- me pregunto Edward, yo me encogí de hombros- Venia muy molesta.

-No sé qué le paso, cuando llegue me grito que me subiese al auto y me apremio en salir de ahí- Alice bajaba con gesto confundido- No te dijo nada- afirme y ella negó.

-Solo me dijo que quería estar sola…- respondió Alice- pero esta que no se aguanta ni ella sola.

-Bien dejémosle tranquilizarse- respondió Edward.

Cuarenta y cinco minutos después escuche el rugido de dos motos, me asome y ahí estaban John y Stefan. Alice fue abrirles pero ellos no se pasaron, se me hizo muy raro, pero después todo se aclaró al ver a Bella bajando las escaleras, por su vestimenta deduje que andarían en moto.

-Bella…- dijo Edward, pero esta levanto una mano y negó- Déjame ir contigo.

-Dame un respiro ¿quieres?- se soltó, fue rauda y directa a la salida, salimos detrás de ella cuando ella dijo- Stefan…- extendió su mano hacia él, mientras él nos miró dubitativo- No harán, ni dirán nada…- sentencio ella segura.

-Bella no hagas esto- dijo Edward serio- quedamos en algo.

-Lo sé, pero esto lo necesito…- protesto ella arrebatando las llaves de la moto de manos de Stefan- Además, él me cuidara, estaré perfecta.

-No, te vas a ir y mucho menos en esto- se puso delante de la moto- sé que estas molesta y esto no…- Bella parecía bramar, todos notábamos que faltaba poco para que ella estallara.

-Hermano, déjale ir- dijo John con tono tranquilo, mediando el terreno- ella estará segura, yo me encargo.

Bella ya estaba lista, se acomodó en la moto y Edward seguía mirándole incrédulo, lo aparte, era mejor darle su espacio, lo que le paso en la oficina la tenía fuera de sí y se estaba tratando de controlar para no explotar con nosotros.

-Bella…- llamo John con autoridad, ella lo miro- lo haremos como siempre, solo tómalo con calma y fíjate lo que haces, recuerda que esto es igual a un arma- esta le asintió aburrida, le hizo una seña a Stefan y ellos se arrancaron- guarden la calma, la hare polvo y se las regresare tranquila.

-Averigua que le paso…- dije y el negó divertido- tú lo sabes- no pregunte, el asintió- ¿Y?...

-Tuvo un día muy difícil en el trabajo y para rematar la humillaron- respondió John- y ella se contuvo porque sabe que necesitan el dinero en su casa.

-Pero hay más- asevero Edward y John asintió.

-Lo demás, no se los puedo decir- suspiro y se acomodó en su moto- los dejo, debo alcanzarlos.

Asi se marchó, pasaron alrededor de tres horas y fue cuando Bella regreso, venia sumamente tranquila y se disculpó con todos, sabía que Edward estaría molesto y fue con él. Al poco rato lo vi más tranquilo, pero me dijo que ella no le había explicado todo, de hecho me dijo que le había extrañado que Bella le pidiera un auto, cuando el no pudiera ir por ella, cosa que no había aceptado, al menos no hasta hoy. Deje correr la situación, de alguna manera esta era la nueva Bella y debíamos aprender a convivir con ella.

Nuevamente Bella y Alice se habían enfrascado en sus trabajos y también en sus clases, aparte de las de baile comenzaron a tomar clases de yoga, Alice había buscado esta opción para que Bella lograse canalizar su ira de otra manera, nosotros nos mantuvimos en el trabajo que se nos venía, tomando las cosas con calma y con el tiempo necesario.

Habíamos llegado a la casa con Emmet, este se podría decir que últimamente ya vivía en la casa, fue otro que descubrió que Bella y Edward habían regresado y también no dijo nada a nadie, como acostumbrábamos acudíamos a buscarlas, a la habitación de Alice o a la de Bella, esta vez estaban en la computadora, hablando vía chat con una chica.

-Hola cariño…-salude a Alice, después salude a mi hermana- ¿Qué hacen?

-Estamos hablando con Kate…-respondió Bella, Edward beso ligeramente a mi hermana.

-¿Quién es Kate?...-pregunte.

-Jazz no te acuerdas de ella…-replico mi hermana yo negué- Es la hermana de Paul…- Edward puso una mueca al escuchar ese nombre y yo la secunde.

-Ella es genial… apenas llevo unas semanas hablando con ella y me parece una chica de lo más divertida…-respondió Alice.

-Si… la hermana es genial…-dijo Edward, yo le dirigí una mirada confundida, el explico- me he metido en la conversación sin querer, y he tenido la oportunidad de hablar con ella.

-Humm… a lo que me llevaba…-Bella se incorporó y camino hasta Edward que estaba sentado en la cama-Edward, ya casi es su cumpleaños y quiero ir a verla.

-Y supongo que si vas te encontraras con Paul…-protesto este un tanto contrariado.

-Quizá… no lo sé… Edward… es mi amiga y la quiero además es su cumpleaños.

-Isabella…-replico todos hacíamos lo mismo cuando algo nos molestaba de ella, utilizar su nombre completo indicaba que eso no nos gustaba-Sabes perfectamente bien lo que pienso de eso…

-Y tú sabes muy bien mi postura…- replico ella- no me voy alejar de ella, además Paul parece que está manejando mejor la situación, no creo que se anime mucho a hacerme enojar, sabe perfectamente que estallo a la menor provocación.

-NO… ni hablar, no quiero que vayas…- dijo este ya más enojado.

-Estoy de acuerdo con Edward, Bella…- apoye la opinión de Edward, varias veces había escuchado las llamadas que este le hacía y el tipo aun deseaba recuperarla- No puedes asegurar que el simplemente va dejar pasar la oportunidad.

-Por favor… se lo que les digo, sé que si voy no pasara nada, me voy a dirigir a Kate, ella es la que realmente me interesa, además ya le conté la situación, todo lo que me paso con Paul y ella está al tanto de todo, estoy segura que ella se alegrara de verme.

-No dudo de la alegría que le puedas dar a ella, dudo de él, y lo sabes…- negó nuevamente Edward.

-Vamos… Edward lo sabes, YO TE AMO A TI...- dijo mi hermana aplicando un puchero y poniéndose de forma tierna y dulce- además si voy tienes la seguridad de que cada minuto que pase lejos de ti lo hare extrañándote…- acaricio su rostro y lo beso en los labios, rodé los ojos al ver la carta que ella estaba ocupando.

-Eso me suena a chantaje…-dijo Edward, ella sonrió y nuevamente lo beso.

-¿Funciona?...-retiro su rostro, vi como Edward bajaba sus defensas.

-No, no vas Isabella…-replique ahora yo, a mí no me podría convencer, yo era su hermano y me preocupaba por ella al igual que Edward, ella borro la sonrisa de su rostro, al escucharme y Edward musito un “Gracias”.

-¿Por qué no?- Alice se levantó de la mesa- Oigan es el cumpleaños de Kate y tenemos regalos para ella, además no me gusta quedarme con ellos y lo sabes Jasper…-me reprocho poniéndome una cara de enojo- Kate me ha pedido ayuda para arreglarse ese día y yo no le voy a fallar…

-Ósea que irían las dos juntas…- dije molesto, lo que menos quería era a mis dos amores cerca de ese tipo- ¡NO, NI HABLAR!

-Alice se racional… el tipo me odia, ¿Cómo crees que vaya actuar cuando escuche tu nombre?-dijo Edward mirándola con calma- sin mencionar la actitud que tome con Bella.- Alice solo nos miraba, sin saber que decir.

-Es por eso que iré sola…-Edward negó- es que no les estoy pidiendo permiso, solo les estoy diciendo que necesito verla.

-No es lo correcto… lo sabes… estas tentando a la suerte, tu que pensarías si de nuevo tu ex acude de nuevo a tu casa piensa un poco…- contesto Edward, Bella hizo una mueca de molestia se incorporó, y nos miró a ambos.

-Pues tampoco fue correcto lo que le hice…- replico ella con voz triste- Tengo que tratar de componer las cosas, de alguna manera lo quise y estuvo conmigo cuando más lo necesite…- Edward se encogió ante el recuerdo de esos días, mi hermana siguió hablando- Se lo debo, además sé que puedo recuperar mi amistad con él.

-Sabes que eso no está a discusión, pero ahora es muy pronto para que vayas, yo no me opondría si no supiera que aun él está enamorado de ti…- refuto Edward- Además tu no hiciste nada, el sabia de la situación y aun así acepto, debes de dejar de cargar con culpas que no son tuyas.

-¡Claro que no!, yo sé lo que hice.

-¿Quieres seguir discutiendo por el?- Edward la miro ya serio algo noto Bella que solo negó- Pues entonces no hay necesidad de seguir discutiendo esto.

-Necesito ver a Kate…- Bella se sentó a su lado y tomo su rostro, pero este nuevamente negó.

Ni Alice ni yo dijimos nada aparentemente, esta era una discusión de dos, en la cual vi como Edward podía ganar, así que lo dejaría solucionarlo.

-No sabes cuánto me arrepiento de haberme ido sin ti…- de pronto la atmosfera se tensó en la habitación, Alice se giró y nos vio, aquello también le dolía a ella.

-Pero tenían que hacerlo…-dijo Alice con voz triste- de todas formas eso ya es pasado.

-Sí, pero si la hubiera llevado conmigo, ahora no estaríamos discutiendo esto, no tendrías la necesidad de ir o de sentirte mal por él.

-Pero no hablamos de él, es Kate… has hablado con ella, y sabes bien que todo estará bien.

-¿Realmente no te das cuenta de lo importante que eres para mí? Lo de las motos es una cosa pero esto- negó, Bella hizo un mohín, al igual que ella el aplico un golpe bajo- ¿Tienes una idea de cuánto te quiero?

-Lo único que se es cuanto te quiero yo…- repuso mi hermana. el suavizo un poco su expresión y sonrió a medias- Por favor… No te estoy pidiendo permiso, solo quiero que lo sepas.

-Entonces si me lo pones así tendré que detenerte.

-Eres imposible…-replico mi hermana un tanto frustrada.

Alice insistió con el tema pero simplemente no la deje, me enoje con ella y le plantee la situación a lo que ya no pudo decir nada, mi alegato discurrió en como mi hermana había estado tiempo atrás, realmente ambas eran lo suficientemente tercas. En la semana cuando nos dirigíamos a un restaurante a comer Edward, Emmet y yo nos encontramos con Nettie.

-¡Jasper!- grito al verme- vaya pero si es el dúo dinámico…- abrazo a Edward y este solo sonrió por cortesía- es la semana de los reencuentros ¡No lo puedo creer! ¿Puedo sentarme con ustedes a comer?- nos miramos, Emmet y Edward asintieron, ella se sentó y comenzó a hablar- ¡Dios no lo puedo creer!, mira apenas ayer me acorde de ti y venos hoy aquí.

-¿De mí?... – replique confuso, no sabía a donde quería llegar Nettie.

-Si a que no sabes quién me llamo, preguntando por ustedes….-  Edward se encogió de hombros y yo negué- Vamos no puedes olvidarte de ella…- me recalco viéndome a los ojos.

-Pues no tengo idea…- respondí sin entenderla.

-Por qué no mejor nos dices y te dejas de adivinanzas- dijo Edward.

-Bien, prepárate…- toco la mesa como si tocara un tambor- ¡MARIA!- grito, la expresión se me descompuso, el escuchar su nombre, me dolió y no por ella sino por la pérdida de esa personita que no tenía la culpa de lo que su madre le había hecho, sin mencionar que yo había ido a buscarla, nunca logro verme pero yo si la vi, ella estaba con un tipo, su nueva conquista, recuerdo haberme dado media vuelta  y regresar a casa. Esa fue la última vez que la vi, pues ella termino nuestra relación vía telefónica y yo no le di importancia, pero aun podía sentir muy dentro de mí la ira contenida y el odio que jamás logre expulsar en su presencia y tenía muchas ganas de hacerlo.