EL FINAL DE TODO

Hoy era el día donde podría ser que muera, estaba preocupada, y todos lo notaron, tal vez esta sería la última vez que estaría con mis amigos, Los Cullen, mis padres, Edward……

Sentía ganas de llorar cuando pensaba en los últimos.

Por una parte mis padres en estos días me dieron el amor que alguna vez me faltó, los amaba con mi vida.

Edward. Él era mi soporte sin él no cabía algún lugar donde yo fuera feliz.

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Todos los vampiros fuimos a un claro cercano, donde Alice había visto que aquí estarían en unos minutos, todo parecía felicidad, tristeza, nostalgia, esperanza, y amor, entre todos. Mis padres estaban abrazando, demostrándose el amor que sentían el uno por el otro. Edward estaba abrazándome y diciéndome lo cuanto que me amaba…Eran momentos donde yo era muy feliz.

Todos se tensaron, y sentí el olor de los Vulturis.

Habían llegado, y estaban muy felices que digamos.

Aro y Caius encabezaban la tropa, eran unos 45 vampiros. Aro y Caius se pararon y tenían sombras en su rostro, estaban dispuestos a matar.

-Ohhh, que emoción unos amigos reunidos- habló Aro-jjajajaja, no saben lo que están haciendo. – hizo una mueca en el rostro-Solo diré algo simple, los dejaré vivos, si vienen conmigo mis guardias e Isabella, Marcus no me interesa, solo los quiero a ellos.

-NO- gritamos los chicos y yo.

-Ohh, eso es una mala respuesta- hizo una sonrisa maquiavélica- Cheallse-Oh Dios, Cheallse manipulaba el sentimiento, podía hacer que se rompieran nuestros lazos. Usé el don de escudo mental.

No pasó nada y Aro sabía que yo era la razón.

-No quería hacer esto pero ….- Miro a los vampiros, y todos ellos entendieron lo que trató de decir.

Pasó muy rápido, los guardias y súbditos de los Vulturis, corrieron, y nosotros también.

Para proteger puse el Escudo Físico, además del mental que tenía, los lobos salieron en ese momento del escondite que habían elegido para ver si se hacía la lucha.

Todos peleaban, los guardias no se podían acercar cada vez que lo hacían los tumbaba el escudo, Pero nosotros si podíamos atacar, veía a mi familia decapitar a eso vampiros, como también a los lobos desgarrarlos hasta matarlos, yo estaba parada en el medio nadie me podía hacer nada, era una arma mortal y ellos lo sabían.

Toda esa guardia murió y solo faltaban Aro y Caius, trataron de escapar pero fui más rápida, Mi padre fue por Caius, era su venganza, no vi lo que hizo pero solo vi su cabeza de Caius rodando por el suelo. Aro, él era mi presa, iba a ser maquiavélica, quería que sufriera, hice que sintiera un dolor como si estuvieras en el mismísimo infierno, luego que sintiera la humanidad, deseé con mi don, poder otorgar eso, que sea humano.

No sabía cuánto tiempo había estado vivo Aro, siglos, no le iba a ser un humano con la edad que aparentaba, si no uno con la edad de cuánto tiempo había estado “vivo”.

Vi como su piel se hizo arrugas, se estremeció y vi el dolor reflejado en su rostro, solo por un mísero momento sentí pena, pero luego se fue, ye en ese momento él murió.

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Los rumanos estaban saltando de alegría, habíamos derrotado a los vulturis.

En unos días vampiros de todo el mundo venían, y daban su agradecimiento. Fue algo inesperado pero ellos mismos nos proclamaron “reyes”, digieron por nuestro valor lo éramos, nos reusamos a eso, pero ellos digieron que nosotros éramos sus salvadores.

Más o menos los que pagamos pato, fuimos Edward y yo, porque todos nos habían dicho que nosotros éramos los indicados para dar una nueva era para los vampiros, igual que más daba, no iba decir que no me gustaba, además yo haré algunos cambios.

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Habían pasado unos meses y Edward y yo éramos los “reyes” de los vampiros, aunque yo seguía viviendo en la casa Cullen.

Edward y yo habíamos hecho algunos cambios, pero respetábamos la ley de seguir que los vampiros fueran en secreto, o un poco así, pero era justo que los vampiros que querían se relacionaran con humanos o de otra especie, pero con responsabilidad, y claro cuando cazaran no debían ser tan despiadados, que buscaran solo a los malos, como había hecho Ed un tiempo, no matar a cualquier persona, solo a los desgraciados.

Todos estaban felices con eso, y ya estaban acostumbrándose a las nuevas peticiones de nosotros, ya que no obligaríamos a nadie hacer lo que no quiere.

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Edward me iba a llevar a un día de campo, según él quería pasar un poco más de tiempo conmigo, como si no pasáramos mucho, pero igual me encantaba estar así con él.

Yo estaba comiendo una manzana, Edward estaba un poco misterioso y nervioso, eso me recordó a nuestra cita donde me pidió ser su novia.

Ahhh, que lindos recuerdos.

-Bella -Si?

-Este yo quería decirte algo

-¿Qué cosa?

- Yo- y se puso a un lado de mí y sacó un amillo de su bolsillo- Bella, bueno sabes que te amo, y yo quiero estar contigo por toda la eternidad, ¿quieres ser mi esposa?

- Yo…-Sonreí- Sí

El sonrió, íbamos a casarnos!!!!!

Este sería el final, solo faltaría el epílogo, espero les haya gustado. ls agradesco a:

 KRIS_9,YUSALE,LULUSITAFELIZ,NENAMADILINDA y ELIZABETNICOLE

Espero leannn....

Tambien a las que me leen silenciosamente.

Byeeeeeeeeeeeeeeeeeeee, pronto publico mi otra historia se llamará " Por la corona", cuídense =D