Hola niiñas!! Disculpenme De verdad por Tardar Tanto no ha sido mi intenciion!!
Dios Este Capitulo :D Es decisivo, pronto... :D
Mejor esperare a que sigan leyendo jej!
Son de lo mejor, las mas especiales, las mas maravillosas y Mejores, no se ya de que manera darle las graciias, sin ustedes nada de esto seria posible!
A las Lectoras de bodas, disculpen tambien, el tiempo a jugado en mi contra, pero les prometo actualizar antes del fin de semana!
Les dejo este capitulo bastante largo para recompensar la tardanza!
y las kiero invitar a que visiten mi pagina en fanfiction acabo de escribir un 2shot Bastante especial espero puedan verlo y dejarme su comentario por aki, les dejo el link!
Mia!
Votos y comentarios super importantes!
este capitulos dedicado a todos ustedes, pero en especial a mi duva hermosa que hoy es su cumpleaños, t adoro!
xoxo: LiiBiiThaA!
Respire profundamente, de ahora en adelante yo no importaba, mis sentimientos no podían controlarme, estaba en juego algo más importante que mi propia vida, el bienestar de bella y nuestro bebe; mire de nuevo la hoja y todo parecía estar bien, sus signos vitales, el tamaño de nuestro bebe, parecía todo en orden, mi diosa era muy fuerte, seguramente estaba intentando mantenerse calmada y alimentarse bien, para cuidar a nuestro angelito, solo de imaginármela con un pequeño bulto en su vientre sentía que los pedazos de mi corazón volvían a unirse, sería maravilloso poder acariciarla, abrasarla a mi cuerpo y evitar que se alejara de mi.
Aleje cualquier melancolía de mi, dentro de poco tendría a mi bella junto a mi y podría llenarla de amor y cuidados, cumplir sus caprichos, porque no descansaría hasta que eso sucediera, el infeliz que tenia a mi niña creía que esta noticia iba a debilitarme, pero estaba equivocado, me había dado las fuerzas para luchar con más ímpetu, sin descanso, ahora lucharía como fiera por mi familia.
La puerta se abrió y levante la vista, Ángela entro ayudando a Charlie por el brazo, camine hasta ellos y soporte su peso, las ojeras de Charlie eran peores que las mías, y su rostro estaba derrotado y lleno de dolor, ahora que sería padre podía entender a que grado era su sufrimiento, solo de pensar que mi pedacito de bella, le pasara algo, sentía ganas de morirme.
Alguna noticia? – pregunto ella sin ganas.
Dude, pero hable por fin – sí, he recibido noticias de bella – el rostro de Charlie se levanto y me miro casi con lagrimas en los ojos, apretó el agarre de mi brazo.
Noticias?, habla Edward, dime que sabes de mi bella – exigió, mientras me jalaba.
Tranquilos, se que bella está bien, pero no sé donde pueda estar aun – dije contrariado.
Pero cómo?, Edward, se claro te lo suplico – me rogo Ángela.
He recibido un paquete, contenía dos sobres, uno era una carta anónima y el otro un análisis clínico, asi pude saber que bella está bien – explique.
Quiero verlo – dijo Charlie alterado.
Le tendí la hoja del anónimo, Ángela y Charlie la leyeron atentamente y miles de sentimiento se plasmaban en su rostro, no sabía si sería prudente decirles que bella estaba embarazada, seria un golpe terrible.
Infeliz – murmuro Charlie – es claro que se trata de una venganza, y es alguien que nos conoce muy bien – concluyo.
Pero quien?, todos los posibles sospechosos han sido investigados – dijo Ángela entre lagrimas.
Estoy seguro de que no estamos viendo algo – aclare la garganta – hay algo más que tienen que saber – comente.
De que se trata – preguntaron al mismo tiempo.
Verán… en el análisis clínico, yo, al parecer bella esta embarazada – solté al fin.
Embarazada? – Repitió Charlie, mientras caminaba al sillón y se dejaba caer – mi niña esta embarazada – sollozo.
Mire a Ángela y las lagrimas salían si cesar en sus ojos negros, pero una ligera sonrisa se asomaba en sus labios, ella estaba feliz al igual que yo porque mi angelito venia en camino, pero la ausencia de bella, nos estaba torturando.
Si..ii – mi voz se quebró – lo decía muy claro en los análisis, nuestro bebe tiene cerca de tres meses – repetí con melancolía.
Dios, porque – sollozo Charlie – mi niña debe de estar muy asustada, además su estado, estás seguro de que ella y el bebe se encuentran bien – me miro suplicante
Si, al parecer todo está bien – agache la mirada.
Edward… - Ángela sonrió y se limpio las lagrimas – yo también tengo noticias para ustedes – ambos la miramos fijamente.
Que sucede? – mi corazón palpito inquieto.
Cuando veníamos en camino, me han hablado del hospital, Tyler a despertado – un extraño sentimiento de esperanza afloro en mi interior, sería posible que todo estuviese formándose, de tal modo que pudiera encontrar a mi alma?.
Gracias al cielo, esas son muy buenas noticias – Charlie aclaro su garganta – tal vez el pueda decirnos donde esta bella? – dijo esperanzado.
Iré a verlo – saque las llaves de mi auto impaciente y comencé a caminar.
Edward, espera – grito Ángela.
Cualquier noticia les aviso –grite sobre mi hombro.
Arranque mi auto y esquive a los reporteros como pude, unas ansias terribles se apoderaron de mi, impidiéndome pensar con claridad, sabría algo Tyler?, podría darme esa pista que finalmente me llevara a encontrar a mi amada?.
Estacione mi auto y baje casi corriendo, cuando llegue a la recepción pregunte por la habitación y me indicaron el numero, subí las escaleras corriendo y cuando vi la habitación, un doctor Salía de ahí revisando el historial.
Doctor, buenos días, me podría informar el estado del paciente- pregunte ansioso.
Buenos días, es usted familiar? Pregunto-
No, mi nombre es Edward cullen, soy familiar de la señorita Swan – conteste.
Oh, ya veo señor cullen, disculpe – dijo apenado – el paciente ha salido del coma, pero su estado es delicado aun, por el momento está despierto, pero no es bueno alterarlo, ni sofocarlo – explico.
Me permitiría verlo unos minutos – pregunte expectante.
Señor cullen, el paciente no está en condiciones de ser sometido a n interrogatorio aun – dijo receloso.
Lo sé, mire yo soy médico, y no haría nada para dañar la salud de Tyler, solo quiero verlo unos minutos – intente convencerlo.
Si, lo sabía, conozco muy bien a su padre, y solo por eso se lo permitiré – acepto – pero solo unos minutos, y sea prudente por favor – dijo serio.
No se preocupe, gracias – conteste.
El solo asintió y entre en la habitación, había estado demasiadas veces aquí, esperando inútilmente que Tyler despertara y ahora que lo había hecho, sentía terror y esperanzas, dos sentimientos demasiado opuestos.
Tyler estaba tendido en la cama, lleno de cables que regulaban su estado, sus golpes habían desaparecido, solo su fractura continuaba presente, por falta de rehabilitación, me acerque a el y verifique que todo se encontrara bien, y al parecer asi era, era un milagro que hubiese despertado, después de estos meses, había perdido la esperanza de que eso sucediera.
Jo…ven Edward – me llamo y gire inmediatamente.
Tayler, como estas? – pregunte preocupado, apenas y podía abrir los ojos, intento incorporarse, pero lo detuve, estaba demasiado débil.
No te muevas, estas demasiado débil – lo ayude a recostarse de nuevo.
Joven… la señorita bella – jadeo.
Respira, cálmate y cuando estés más tranquilo habla por favor – le pedí.
Respiro profundamente y tranquilizo su respiración, yo estaba frenético y desesperado, pero sería todo peor si Tayler volviera a caer en coma, sería mejor esperar unos minutos, y así fue.
Ya me siento mejor – susurro.
Estas seguro? – pregunte.
s..ii- balbuceo.
Tyler recuerdas lo que paso aquella noche – mi pecho se estremeció.
Re…cuerdo lo que sucedió antes, después todo es muy borroso – dijo contrariado.
Puedes decirme lo que recuerdas? – insistí.
Yo.. recogí a la señorita bella es su casa… llevaba un vestido rojo, se… vei…a más hermosa que nunca – su mirada estaba perdida, no pude reprimir una punzada de celos, por que el pudo verla asi, tan perfecta como me la imaginaba, cuando yo solo me quede vacio y perdido, con el anillo que debió adornar su dedo en las manos.
Continua – le pedí.
Me.. Pidió que la llevara a un restaurante del centro y.. así lo hice, estábamos.. Bastante cerca, cuando una camioneta negra comenzó a seguirnos… la señorita bella, estaba asustada, me rogo que los perdiera… le juro que intente perderlos, pero no pude – sus manos comenzaron a temblar.
Tranquilo, tranquilo, - intente calmarlo, pero yo me caía en pedazos al escuchar por primera vez lo que realmente había pasado, el temor que había experimentado mi niña.
No… quiero hablar – dijo más relajado.
Continua – dije.
Ella.. hizo una llamada, pero en ese momento la camioneta nos golpeo… - recordaba la voz de bella desesperada, pidiéndome que la escuchara, esas palabras habían resonado en mi mente estos meses, eran demasiado dolorosas – no pude mantener el control, lo último que recuerdo fue que me estrelle contra una pared… después perdí el conocimiento, el dolor era demasiado – asentí.
y.. después de eso?, cuando te encontré dijiste que ellos se la habían llevado Tyler, te suplico que intentes recordar – dije como pude.
Hubo unos momentos en los que recupere el sentido… pude ver como abrían la puerta trasera, dos hombre entraron… - un gesto de dolor se plasmo en su rostro.
Pudiste reconocerlos, hablar por favor - estaba al borde de la desesperación.
No!, ellos tenían el rostro cubierto, uno era alto y fornido y el otro más delgado, lo único que resuena en mi mente son sus voces – dijo desesperado.
Tranquilízate – no sé si fue más para mí o para el – dime por favor que dijeron – lo observe fijamente.
Todo es demasiado confuso… pero uno le dijo al otro que sería muy generoso con ellos, que no tenían de que preocuparse… y el otro hombre dijo que era el mejor negocio que había hecho – finalizo y me quede estático.
Al… algo más? – pregunte.
No, lo siento, pero es ese momento perdí el conocimiento, hasta hace unas horas que desperté – sus ojos se llenaron de lagrimas.
Tranquilo Tyler, estarás bien – murmure.
No es eso, no se da cuanta. Yo… no pude ayudarla – sollozo – permití que nos acorralaran y ahora ella…
Es mi culpa, si yo… hubiese ido por ella, jamás la habrían alejado ni un centímetro de mi, los hubiese matado con mis propias manos – dije con odio.
La puerta se abrió y voltee el doctor nos miro y me indico con gesto acusador que saliera.
Tyler te agradezco mucho lo que me has dicho, tengo que irme, necesitas descansar – dije lo mas tranquilo que pude.
Perdóneme, yo no pude…
No fue tu culpa – apreté su hombro y Salí.
Todo bien señor cullen? - pregunto.
Si doctor, muchas gracias – respondí amablemente.
Espero que le haya servido de algo – palmeo mi hombro.
Yo también – dije y Salí.
Conduje sin rumbo fijo por las calles, las palabras de Tyler me inquietaban, ahora si estaba seguro que se trataba de alguien que nos quería lastimar, las pistas eran demasiado claras, nunca habían pedido dinero, ni ningún bien, solo se conformaban con el dolor que nos infundían y el miedo
En ese momento recordé algo que estaba pasando por desapercibido y tal vez sería la prueba que por fin me llevaría hasta mi bella, no pensé en informarle a la policía, ellos no habían ayudado en nada, yo encontraría a mi bella por mis propios medios.
Tome mi móvil y marque el número.
Bueno – contestaron.
Hola chars Habla Edward Cullen – informe.
Cullen?, vaya es un placer saludarte – dijo animadamente – me entere de lo que sucedió lo siento mucho, si algún día puedo ayudarte con algo - ofreció mas serio.
Es por eso que te llamo, necesito un favor enorme - pedí.
Por favor amigo lo que sea – respondió.
Veraz… - le conté resumidamente todo lo que había pasado, intentando que mi pecho no supurara de dolor, después narre rápidamente lo del paquete de la mañana.
Hermano es horrible – dijo con amargura.
Esa palabra no se compara – dije – por eso necesito tu ayuda – repetí.
Soy todo oído – respondió.
Tu en la agencia tienes acceso a todas las cámaras de vigilancia, la casa de se encuentra en una zona muy lujosa, así que creo imposible que ninguna cámara pudiera captar quien dejo el paquete en la puerta – supuse.
Tienes razón, precisamente, estoy localizando una cámara de seguridad en la entrada principal, averiguare de quien se trata y te veo en 20 minutos aquí – dijo seguro.
Muchas gracias – dije esperanzado.
Conduje hasta la agencia hasta donde hacia unos meses apenas trabajaba, ellos eran expertos en seguridad, me habían instruido adecuadamente, volviéndome prácticamente un arma mortal… solo habían olvidado algo, enseñarme a luchar contra un fantasma, porque eso era el maldito que tenia a mi familia, un fantasma que me torturaba, pero al que pensaba ponerle un rostro lo antes posible.
Llegue a la agencia y enseñe mi identificación, aunque no era necesario, era bastante conocido por aquí, me conduje hasta el centro de operaciones y allí me esperaba chars.
Edward – me dio un fuerte abraso.
Chars, has logrado averiguar algo? – pregunte impaciente.
Asintió – las cámaras lograron captar al sujeto, y ahora mismo se está imprimiendo el informe – mi corazón casi se vuelca de ansiedad, necesitaba conocer hasta el mas mínimo detalle de lo que ocurría.
Tomo los documentos y los leyó – bueno al parecer se trata de toda un fichita – recalco – su nombre es Quil Ateara, tiene 30 años y ha estado detenido en varias ocasiones, por intento de extorción, estuvo un año en prisión por asalto a mano armada y ahora realiza trabajo comunitario para evitar ir a prisión por condenas acumuladas – finalizo.
Ya veo – dije pensativo, pensando que por fin las cosas encajaban – tienes alguna dirección – pregunte.
Si, aquí viene la dirección de su casa, que está muy cerca del bar donde trabaja – me tendió la hoja – que piensas hacer Edward? – pregunto
Solo quiero darle una pequeña visita – conteste.
Ten cuidado Edward, ese tipo es peligroso - me advirtió.
No te preocupes, yo también suelo serlo – le recordé.
Lo se, no por nada eres el mejor elemento que ha trabajado aquí, pero aun asi esa clase de tipos no juegan limpio, lleva un arma contigo – abrió uno de los cajones y me tendió una pistola – úsala solo en un caso extremo – me advirtió.
De acuerdo – accedí, guardándola dentro de mi saco.
Mucha suerte amigo – me tendió la mano.
Gracias, te debo una – me despedí y Salí.
Observe las indicaciones y conduje al barrio de mala muerte donde se encontraba el dichoso club, lo esperaría hasta que saliera, no me importaba cuanto tardara, estaba seguro de que el tenia respuestas para mi, y haría lo que fuera por obtenerlas, pero no era tan estúpido como para irme a meter a la boca del lobo, a veces la paciencia era la mejor aliada.
Unas horas después, observe un tipo de mala facha salir del lugar, mire la foto de la investigación y parecía ser el mismo, discretamente lo seguí hasta que llego a un área de departamentos en ruina, entro y lo seguí, escondiéndome detrás de las paredes de los departamentos, casi legando a la azotea , tomo una llave y la introdujo en una puerta llena de grafitis y entro, pensé en la manera de entrar ahí sin ser pillado.
Tome un billete de 100 y lo deje en el suelo, después toque a la puerta y me escabullí hasta una pequeña barda casi junto a la puerta, observe como abrió y busco con el ceño fruncido de quien se trataba, cuando vio el dinero en el suelo, se rostro gélido, fue sustituido por uno sonriente y ambicioso, tal como lo pensé se agacho a recoger el billete y fue cuando actué.
Golpee uno de sus talones haciéndole perder el equilibrio, lo tome por el cuello y con la otra mano lo inmovilice, intento zafarse y golpearme pero estaba atrapado en mi agarre, lo conduje al departamento y cerré la puerta.
Quién demonios eres – grito, mientras se movía.
Eso no importa – respondí – lo único que debe importarte son las respuestas que me darás –dije fríamente.
Respuestas… sobre que – exigió.
Dime, quien te ordeno dejar un paquete hoy en la mañana – se quedo quieto por un minutos.
No se dé que habla – dijo serio intentando zafarse.
A no? – apreté el agarre de su cuello y lo escuche jadear, pero no era duelo de mis actos.
Será mejor que cooperes o tendré que obligarte - pegue mi pecho a su espalda y el entendió perfectamente de que hablaba.
Va…mos amigo, no es para tanto – reconocí el rastro de miedo.
Nada pasara si hablas pero si no…
Está bien – accedió – pero suéltame – reí sin gracia.
Habla de una vez – exigí.
Un tipo me pago para que dejara ese paquete en la puerta, me dijo que solo tenía que dejarlo y escabullirme, pero yo no sé nada – dijo al instante.
Quieres que te crea?, dime quien era él? – pregunte.
No lo se, un tipo que llega a menudo al bar, yo solo soy barman ahí, se acerco y me pidió que no preguntara nada, solo se que tiene un auto rojo descapotable, siempre llega en el al bar – dijo como pudo.
Mientes, sabes mas – grite.
No, te juro que no, es todo lo que se – comenzó a toser.
Sabes que puedo matarte en este preciso momento – amenace.
No se nada, lo jur…o – su voz se hacía mas pastosa.
Apreté mis puños y lo empuje con todas mis fuerzas, se estrello contra una mesa, rompiendo los cristales, sus ojos estaban rojos y fuera de las orbitas, intento incorporarse pero casi se cae, estaba a punto de perder el conocimiento y luchaba contra ello.
Mas te vale que hayas dicho la verdad – lo amenace y Salí, intentando calmar la furia que me inundaba.
Entre a mi auto desesperado e intranquilo, había pensado que todo se arreglaría que podría llegar a bella, pero cada vez todo parecía mas confundo, tenía una pista, pero no sería fácil seguirla, conduje hasta un lugar en el que encontraría un poco de paz, donde habían personas que compartían mi dolor, y a las que había abandonado bastante los últimos días.
Estaciones mi auto y me extraño no ver la vieja camioneta a fuera, baje con paso desgarbado y la vi sentada en aquel viejo porche.
Mi corazón se estremeció, me recordaba tanto a mi bella, se gestos, sus facciones, era un ángel al igual que ella, pero se veía mal, sus manos sostenían su barbilla y su mirada estaba perdida, me sentí tan mal de verla sufrir.
Ariadna – grite captando su atención.
Levanto el rostro hacia mí y sonrió, corriendo hasta donde me encontraba y abrasándome – Edward, que alegría verte, tienes noticias, por eso has venido? – pregunto ilusionada.
Yo.. No aun, pero pronto nena – intente mantener la compostura.
Me miro con ojos tristes – crees que ella esté bien? – asentí.
Lo está, de eso estoy seguro – respondí.
Como lo sabes – indago.
He tenido algunas noticias de ella y parece estar bien – conteste.
Cuéntamelo por favor – dijo suplicante.
Ven vamos a sentarnos – la tome del brazo y nos dirigí al porche.
Cuando estuvimos ahí respire profundamente – dejaron un ánimo en casa de bella, y ella está bien – asegure.
Unas lagrimas se asomaron por sus ojos – lo siento – las limpio – es solo que… por que tuvo que pasar esto Edward, no tuve tiempo de conocer más a bella, de estar con ella – balbuceo.
Ei, ya habrá mucho tiempo para estar con bella nena, te prometo que pronto la tendremos junto a nosotros – intente sonreír.
Pareces muy seguro – comento.
No podemos perder la fe, estaríamos traicionándolos – dije tranquilo.
Traicionándolos? – pregunto confusa.
Si, ari, bella esta embarazada – sus ojos se abrieron desmesuradamente.
Pero… como – pregunto.
Nena, eso ya lo debiste ver en el colegio – intente hacer una broma.
Yo, si lo se – se sonrojo – solo que es genial Edward, como te enteraste – pregunto incrédula.
Han mandado unos análisis, en el anónimo, fue muy fácil saberlo – explique.
Sin decir más, me abraso eufóricamente – Edward vas a ser papa, y yo tía – sollozo.
Si nena – la abrase fuertemente.
Nos quedamos un largo rato ahí abrasados, de cierta manera la noticia de mi angelito me había dado más fuerzas, solo de imaginarlo entre los brazos de mi amor, sentía ganas de luchar.
El sonido de un auto me sobresalto, alce la vista y me quede pasmado, un auto rojo descapotable se estacionaba frente a mi volvo, el conductor bajo y resulto ser el tipo ese Phil, el esposo de renne.
Y ese auto – pregunte a Ariadna.
Papa lo compro hace un tiempo, ahora tiene un nuevo trabajo, y gana bastante bien – me conto.
Lo mire fijamente intentando controlar mis emociones antes de cometer una locura, tal vez solo se trataba de una coincidencia, tal vez me estaba volviendo paranoico de tanto dolor, pero una parte de mi me gritaba que viera lo obvio.
El hombre hiso un ademán con la mano y entro a la casa serio, su mirada era helada, aleje la vista incapaz de reprimir mi furia.
Desde cuando tiene tu padre este trabajo – pregunte.
Un par de meses, mas quizás – respondió.
Y de que se trata – indague.
No lo sé, nunca habla de ello – mi estado de alerta se activo.
Ari, tengo que irme pequeña, te prometo que vendré a verte pronto – dije y me pare de golpe.
De acuerdo, cualquier noticia me hablas – dijo ansiosa.
Claro nena - la bese en la frente y Salí casi disparado a mi auto.
Sentía unas ganas enormes de volver y aplastar a ese hombre, pero para mi mala suerte no tenía pruebas, necesitaba conseguirlas, además, si daba un paso en falso, el avisaría a los raptores y podrían lastimarlos… no, tenía que ser prudente.
Regrese donde Ángela y Charlie y les conté lo que había dicho Tyler, sus rostros decayeron de nuevo y me fue imposible concederle las esperanzas que había creado este día, no tenía ninguna seguridad, solo mi estúpido corazón que palpitaba como loco, y me decía que creyera.
Dormí un par de horas en la habitación de mi amor, dejándome envolver por su precioso recuerdo, saboreando el olor de su perfume, soñando despierto, desperté muy tempano, con un solo objetivo, seguiría a infeliz ese, hasta que encontrara las pruebas suficientes.
Me estacione afuera de su casa, a una distancia oportuna, cuando por fin salió, lo seguí discretamente, en mi auto, no me sorprendió mucho ver a donde se dirigía… al mismo bar donde había estado ayer, ahora estaba totalmente seguro de lo que pasaba….
Ese infeliz, basura, maldito, había vendido la libertad de bella, seguramente por unos miles de dólares, sentía tanto odio dentro de mi, que por un momento saque el arma de mi chaqueta y estaba dispuesto a atravesarle la cabeza, pero algo dentro de mi logro controlarme, lo necesitaba, necesitaba a ese malnacido para encontrar a bella, para saber a quien se la había vendido.
Ahora podría comprender las palabras en el anónimo, teníamos al enemigo cerca de nosotros todo el tiempo, el aviso en el momento oportuno, informo sobre nuestros planes, por su culpa mi vida estaba destrozada, al igual que la de todas las personas que amaban a bella, reprimí las lagrimas de coraje y las sustituí por las de odio, pero también rogué atraer un estado de tranquilidad, no me permitirá poner en peligro a mis seres más amados.
Minutos después salió de bar, nervioso, seguramente el tal quil le había contado de mi visita, y estaba enterado de mis sospechas, arranco su auto y acelero a toda prisa, lo seguí por las calles intentando pensar claramente, cuando llego a su casa bajo casi corriendo y yo hice lo mismo, no podía permitir que huyera.
Toque la puerta y no se escucho respuesta, así que insistí, mientras sacaba mi arma, di la vuelta a la casa y la puerta del patio trasero estaba abierta, entre sin hacer ruido y me percate de cada espacio, subí las escaleras lentamente, con mis sentidos completamente agudizados, llegue hasta una recamara pequeña y ahí descubrí a la señora renne y a Ariadna amarradas, corrí inmediatamente hasta ellas para ayudarlas, pero sentí un fuerte golpe en la espalda, que casi me tumba, el tal Phil me miraba lleno de odio y con un arma me apuntaba directamente.
No tienes salida – lo amenazase.
Yo creo que si, si los mato a todos, nadie podrá culparme.- río.
Matarías incluso a tu hija? – presione.
Si tuviera que hacerlo, tenlo por seguro, ahora ve junto a ellas – exigió.
Creíste que no me daría cuenta basura, te vas a arrepentir toda tu vida – me moví cuidadosamente.
Edward – Ariadna y renne me miraban asustadas desde el suelo, tenía que sacarlas de ese lugar.
Pon las manos en la cabeza - ordeno y así lo hice.
Que pasa Phil? – le grito renne.
Cállate o serás la primera – dijo iracundo.
Pero.. Que pasa, porque nos haces esto – sollozo, abrasando a Ariadna.
Era dinero demasiado fácil, no podía dejar pasar la oportunidad – gruñí.
No… entiendo – dijo ella temblando.
Eres estúpida?, yo ayude en el secuestro de tu adorada hija, yo di las señales, indique el momento y el lugar donde estaba – declaro.
Co…mo pudiste, eres un infeliz - esta intento levantarse pero este jalo el gatillo y me apunto a la cabeza.
Un movimiento en falso y lo mato, y después a ustedes – amenazo.
Se carcajeo – fue tan fácil, la ingenua venia todos los días a contarte sus planes como “buena hija” sin darse cuenta que se estaba entregando sola – sentía mi sangre arder y mis manos temblar de odio.
Dime quien la tiene? – pregunte.
Crees que soy estúpido?, jamás lo sabrás – eso fue todo lo que necesite, en un ágil movimiento golpee su pierna y se pudo escuchar el chasquido del hueso al romperse, el disparo se estrello contra la ventana haciéndola añicos, el intento incorporarla pero lo golpee en el estomago sacándole el aire, Ariadna gritaba audiblemente y eso me desconcentro un momento, que el aprovecho para darme un puñetazo, lo mire lleno de odio y salte encima suyo, golpee su rostro hasta que casi me quedo sin fuerzas, tome el arma y la puse en su frente, su rostro era impasible y de sangrentado, quería acabar con el, desaparecerlo.
n…o me mates – suplico.
Donde esta bella!!! – grite.
Yo…noo – apreté el gatillo.
Edward detente – una voz ya un poco familiar me grito, pero no le hice caso – Edward, te ordeno que te detengas, sabemos la verdad, no hagas esto – grito de nuevo el agente Peterson.
Donde… esta – mi mano temblaba de tanto coraje.
El.. me pago, yo nunca quise… - se excuso.
Edward quítate de encima hijo, hemos detenido al otro tipo – comento, intentando convencerme.
Negué – tienes 3 segundos para contestarme o te matare, no importa si voy a prisión –amenazase.
El.. fue el – tosió – yo, tu lo conoces – comento.
Quiero su nombre – presione, tomándolo por el cuello.
Ja.. Jacob Black – respondió.
En ese momento todo tuvo sentido para mi, había sido un ciego, no había visto donde tenía que ver, ese maldito, siempre había sido el, nunca debí haber creído en la investigación. Nunca debí de haber dejado de perseguirlo, tendría que haber sabido que él se había llevado a mi bella.
Algo dentro de mi me reconforto y al mismo tiempo me aterro, el nunca se había resignado a que bella, no lo amara y lo creía capaz de todo, capas de las perores cosas, y lo peor… el tenia en sus manos a mi familia, y yo temía por su bienestar.
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