Perdóneme señorita – dijo Tyler muy avergonzado
No te preocupes – contesto Ángela – pero llévanos ahora mismo al hotel, el doctor tiene que revisar a bella.
Y la limosina comenzó a andar a toda velocidad; siempre lo había dicho estos paparazis acabarían con mi vida, pero mientras tanto lo hacían ya tenia un brazo muy adolorido.
Tranquila bella, ya casi llegamos – me tranquilizo angela.
Y en ese momento Tyler abrió la puerta y me saco en brazos de la limusina; comenzó a correr hacia adentro pidiendo ayuda, pude sentir a angela correr detrás de nosotros y hablar con la recepcionista. –si señorita necesito un doctor urgente – casi le grito. –sígame por aquí- le contesto la recepcioncita.
Me condujeron a un cuarto blanco y muy espacioso – recuéstala ahí Tyler – le ordeno angela.
En un momento viene el doctor – nos informo la señorita.
Gracias – dijimos todos al mismo tiempo.
Hay bella – comenzó a sollozar angela – todo es mi culpa, si no te hubiese sacado del hotel, nada hubiese pasado, me siento tan mal.
No, no angie, para nada fue tu culpa – dije secando sus lagrimas con la mano que tenia buena.
Si yo te sonsaque y mira ahora – señalo mi mano que estaba totalmente roja y con sangre.
No fue mi culpa – dijo Tyler – si no hubiese acelerado, es todo mi culpa yo venia manejando… perdóneme señorita bella…
Ya basta – le grite a los dos – no fue culpa de nadie, fue un accidente provocado por esos paparazis, otra vez me provocaron un incidente, ellos son los únicos culpables- dije mientras destilaba odio por mi boca
Otra vez? – pregunto angela sorprendida; era cierto ella no sabia de mi incidente en el hotel con mi desconocido. – es que ya te había pasado algo por su culpa? – ahora se veía preocupada.
Yo solo pude agachar mi cabeza – bella, contéstame – dijo un tanto molesta.
Ya no podía seguir ocultándole lo que me había pasado.
Buenas tardes – dijo una voz masculina – señorita Isabella Swan? – pregunto mientras se acercaba.
Era un hombre de unos cuarenta años aproximadamente, pero su belleza era descomunal, no pude evitar que me recordara a… no bella concéntrate- me auto regañe.
Soy el doctor Cullen – dijo con una sonrisa – me contaron que tuviste un pequeño accidente – yo asentí – me permiten unos minutos – dijo acercándose a mi, que estaba rodeada por angela y por Tyler.
Claro- dijeron los dos, y angela me miro, dándome a entender que teníamos una platica pendiente.
Me lo contaras luego – me miro expectante, yo solo asentí.
Ambos salieron de la habitación mientras el doctor se acercaba ami y tomaba mi brazo entre sus manos, yo grite de dolor.
Tranquila bella, tengo que revisarlo, para descartar una fractura – me miro un poco preocupado.
Disculpe – fue lo único que pude decir.
Comenzó a revisar mi brazo y a colocar una extrañas mezclas sobre el, el olor me estaba mareando un poco, pero no podía dejar d pensar en lo que le contaría a angela, ella era mi mejor amiga y claro que confiaba en ella, pero lo de mi desconocido era algo que no podría hablar ni con migo misma, además ella se preocuparía mucho, asi que mejor le contaría todo pero a medias.
Listo señorita – dijo el doctor cullen, sacándome de mis pensamientos.
Como esta? – pregunte expectante.
Tranquila isabella no hay nada de que preocuparse, solo fue el golpe por eso te duele y esta hinchado, no hay fractura solo un leve desgarre de un tendón pero estará bien en unas semanas; solo tendrás que llevar esta férula y muy pronto estará muy bien- sonrió ante eso.
Gracias – aunque me dolía mucho, me sentía muy feliz de no preocupar a nadie con algo grave.
De nada, me encanta trabajar con jóvenes como tu, mis hijos tienen aproximadamente tu edad – su sonrisa se ensancho, me recordaba mucho a mi pobre Charlie cuando alguien hablaba de mi, mi pobre viejo como lo extrañaba.
Tiene hijos – me comió la curiosidad
Si, tengo tres, o no es decir cinco- y comenzó a reír- veraz mi hijo mayor y mi hija menor están casados y sus esposos son también como hijos para mi, y mi otro hijo el de en medio esta soltero aun – hizo una pequeña mueca.
Le molesta que su hijo este soltero? – que indiscreta me estaba volviendo
Oh, no isabella, es solo que es un gran hombre, muy valiente y muy guapo diría yo – me guiño un ojo – y me es casi imposible creer que no pueda encontrar a el amor de su vida como yo lo hice con su madre – sonrió al mencionar a su esposa.
Pues si el es como lo describe, no creo que pase mucho antes de que alguien le robe el corazón – robar, al pensar en esa palabra recordé a mi desconocido, sonreí, el pensaba que había entrado a robar a su habitación y ahora tenia razón quería robarme sus besos, sus sonrisas y sus miradas, quería tenerlo cerca, que me…
Isabella – el doctor cullen me saco de mis pensamientos y se lo agradecí.
Disculpe – me sonroje – me distraigo fácilmente.
No te preocupes hija – sonrió – estas lista para salir? – pregunto
Si claro, gracias otra vez – le tendí mi mano buena y el la acepto.
Ha sido un placer – dijo despidiéndose levemente con la mano.
Este hombre era realmente bueno, si su hijo era la mitad de lo guapo y amable que el era, no podía imaginar siquiera como estaba solo.
Bella – escuche a angela y Tyler llamarme, angela corrió a mi lado inmediatamente.
Como estas? – me dijo con ojos llenos de preocupación.
No te preocupes angie, esto bien te dije que no era nada – le giñe un ojo.
Pero… que te dijo el doctor? – pregunto ansiosa.
Solo el golpe y un leve desgarre, que en un par de semanas todo estará bien – dije con un agran sonrisa, para que mi angie no se preocupara mas.
Bells , mi amiga – y comenzó a llorar
No angie, no llores, o me vas a hacer llorar – pero me miro a los ojos y no pude evitar romper a llorar junto con ella y la abrace – te quiero - le dije
Yo también – me dijo
Ya no llores por favor, mejor vayamos a la habitación necesito descansar – jale su mano y la conduje a mi habitación.
Bella – me llamo angela mientras subíamos por el elevador.
Si dime – la mire.
Me contaras a que te referías hace un rato, cuando decías que no era el primer incidente que te provocaban los reporteros – me pregunto mirándome fijamente.
Mmm angela yo… - tenia miedo de su reacción.
Bella te ruego me digas la verdad, sabes que puedes confiar plenamente en mi – ella tenia razón, tenia que contarle.
Si tienes razón, no es que no confié en ti, es que ya me conoces, soy un poco rara – le sonreí y ella asintió, para que continuara.
Veras… anoche cuando me despedí de ti y venia camino a mi habitación, escuche que alguien me seguía – angela me miro con terror – no te preocupes – dije tratando de tranquilizarla – era solo un reportero, que me venia siguiendo, ya sabes como me molestan, entonces Salí corriendo u tanto desesperada y entre en una habitación sin fijarme… y ps… había un hombre allí, que me recrimino, pensando que quería robarle – no, yo no podía contarle lo que había sucedido con mi desconocido, eso era algo demasiado mio, lo quería guardar solo para mi – no te preocupes no me lastimo, solo fue un gran susto – angela tenia una expresión en su rostro que no podía descifrar.
Bella, por que no me habías contado esto – dijo molesta.
No quería preocuparte, ya estas demasiado estresada, además te digo que no paso de un susto – trate de arreglar las cosas.
No Isabella, pudo haber sucedido, esto ya es demasiado – su mirada era muy sombría – además de tu manager soy tu mejor amiga y siempre he intentado protegerte, necesito que me cuentes cuando estas cosas sucedan – agache la cabeza, ella tenia razón, siempre cuidaba de mi y se preocupaba.
Perdóname angie, tienes razón fui imprudente – casi sentí una lagrima caer por mi mejilla.
No bella, no estoy enojada con tigo – me miro tiernamente – es con esos reporteros con los que esto mas que enfadada – su mirada se congelo de nuevo.
Además lo que sucedió hoy fue el colmo – la rabia se notaba en su voz - pusieron en peligro nuestras vidas y tu saliste lastimada – ella tenia razón, era ya el colmo.
Si lo se – fue lo único que pude decir.
Bella – me llamo y la mire – se que tu siempre has estado en contra de eso, pero ya no es seguro que andes sola por las calles o lo pasillos, ya sobre paso los limites .
No Ángela por favor … - ella me interrumpió.
Esta decidido bella – dijo en tono seguro, y yo sabia que aunque siguiera discutiendo, ella no cambiaria de opinión.
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