Niñas Mil Graciias x Su apoyo, y perdonen mi ingratitud, Saben ke las adoro, Espero segiir Recibiendo sus votos y comentarios, saben que me motivan a seguir adelante, este capi demaciado emotivo para mi (lagrimas).

apoyen mi otro fic bodas por encargo, que se pondra candente cada vez mas, y este tmbiien, saben que me gustan las sorpresas!

mil besos

Be…lla – su voz se quebró al decir mi nombre.

Intente hablar y decir algo, pero las palabras no salían de mi boca, eran tantas las sensaciones, pero lo que pensé mas claro sentir… rencor, no existía solo era un enorme anhelo.

Sus ojos azules se avían vuelto vidriosos repentinamente, quería correr y abrasarla, pero estas dudas, este enorme miedo me lo impedía.

Bella, que haces aquí? – hablo por fin.

Mire a Edward en busca de palabras o algún estimulo que me devolviera la voz, sonrío dulcemente, tu puedes bella – me repetí.

Yo… eh, no quería, molestar… perdón por… venir, yo solo – tartamudeaba como una idiota sin duda los nervios me tenían acorralada.

Mama de donde conoces a bella? – pregunto Ariadna – por que nunca lo avías mencionado? – me miro a mi y después a Ariadna de nuevo, la duda estaba reflejada en su rostro.

Bella, pasa por favor – sonó casi como un susurro.

Apreté la mano de Edward y lo conduje hacia la sala, ahí estaba sentado desparramado en el sillón con una cerveza en la mano un hombre rubio de tez clara, bestia unos vaqueros gastados y una playera sport, este era el esposo de mi madre.

Se levanto del sillón y nos miro, sus facciones eran duras, me asusto un poco, de este hombre provenían lo gritos y las amenazas que se avían escuchado.

Quien demonios son – dijo groseramente.

Ariadna agacho la mirada apenada y Edward me apretó contra su costado de manera protectora.

Ariadna, ve a tu habitación por favor – pidió mi madre.

Pero mama yo… - la interrumpió.

No escuchaste señorita, ve a tu habitación – dijo seria.

Frunció el ceño y me miro, corrió hasta donde estaba y me abraso – espero no te vayas sin despedirte – dijo triste.

Nunca haría eso pequeña – susurre.

Con permiso – dijo antes de salir.

Renne te estoy esperando – exigió el hombre.

Ella dudo, pero al fin hablo – Phil ella… tengo que hablar con ella antes de decirte algo – explico.

El hombre la miro molesto y después se acero a ella y la tomo por el brazo – sabes que no me gustan los juegos – casi grito.

Edward me soltó y camino hasta ellos – suéltela – exigió.

El hombre lo miro confundido, yo casi temblaba ante la escena, el hombre era alto, pero sin duda mi ángel lo sobrepasaba  con todos esos músculos tan bien definidos.

Quien te crees para meterte en los problemas que tengo con mi esposa – recrimino.

Le he dicho que la suelte, solo un cobarde trata de esa manera a una dama – el hombre gruño, pero la soltó.

Esta bien? – pregunto Edward.

Si gracias – contesto – podrían dejarnos solas unos minutos – Edward asintió y miro al hombre, este parecía enfurecido por la petición.

Mas te vale que tengas un a buena explicación – dijo antes de salir de la sala.

Edward se acerco a mi y me beso levemente en los labios – estaré afuera mi amor, llámame si necesitas algo – asentí y sonreí levemente, mientras el salía dejándome sola, frente a mi fantasma.

Quieres sentarte – ofreció.

Asentí levemente y me senté en el sillón, ella hizo lo mismo quedando solo a unos centímetros míos.

Estas aquí en busca de repuestas? – pregunto.

Asentí levemente – por que? – dije al fin, la preguntas que Abia formulado en mi mente muchos años atrás.

Porque te abandone, porque nunca regrese, porque todos estos años he estado al pendiente de tu

Vida y por que nunca te busque? – las lagrimas corrieron sin cesar por sus ojos y por los míos, podría ser verdad lo que decía, le importaba realmente?.

He vivido todos estos años en zozobras, explícame todos mis porqués – suplique.

Asintió levemente – bella, desde que naciste, elegí ese nombre para ti, por que eras las cosa mas hermosa que yo tendría en mi vida – me miro dulcemente, tanto que mi corazón casi dolió – yo era muy joven apenas tenia 20 años, pero no dude nunca de tenerte, te ame desde que supe de tu existencia… pero la relación con tu padre no era la mejor, el era mayor y quería cosas diferentes, los problemas cada vez se fueron haciendo irremediables, lo único que compartíamos era ese inmenso amor por ti – dijo afligida.

Tu,,, me amabas? – pregunte con incredulidad.

Mas que a nada – respondió al instante.

Entonces… - no pude formular una pregunta.

Bella, nada fue tu culpa, fue mía, mi cobardía me alejo de ti y me condeno a vivir fuera de tu vida – sollozaba, solo quería abrasarla.

Miedo a que?, dímelo – le rogué entre lagrimas.

Aclaro la garganta – una noche Salí de compras, tu apenas tenias cuatro años y Charlie te estaba cuidando, me quede conversando con unas personas y se me hizo bastante tarde, caminaba hasta casa, tenia tantas ganas de verte – intento sonreír pero el dolor estaba plasmado en su rostro – cuando yo… casi llegaba, me vi interrumpi…da – las palabras salían tropezadas de sus labios, en un impulso tome sus manos, suaves y con arrugas, pero mantenían ese calor anhelado, ella me miro fijamente.

Si… si esto es difícil para ti, podemos esperar – ofrecí al ver su dolor.

No – apretó el agarre de mis manos – tengo que decirte la verdad bella, necesito que entiendas – susurro.

Te escucho – conteste – que mas sucedió aquella noche – pregunte.

Suspiro – alguien me intercepto, y me detuve, fue tan sorpresivo que hasta se me cayeron las bolsas, cuando alce la vista frente a mi se encontraba un rostro muy conocido, demasiado conocido – gruño – lo salude y cuando contesto pude notar el aliento alcohólico que Expedia, intente retirarme, pero no me lo permio – cerro los ojos – me tomo por la fuerza y me llevo a un lugar obscuro – mis ojos se abrieron de par en par – grite bella, intente de todas las formas posibles suplicar, pero todo fue imposible, no pude defenderme, abuso de mi – dijo entre lagrimas.

Estaba horrorizada, me sentía desamparada y dolida, me dolía verla sufrir – que paso después? – pregunte alterada.

Yo… llegue a casa como pude, me sentía la mujer mas sucia del mundo, pero quería verte mi niña, quería abrasarte, aunque me muriera de la vergüenza, no sabia como enfrentaría a Charlie, como podría mirarlo a los ojos después de lo que había pasado – negó – cuando llegue tu estabas ya en tu cuna dormida, te abrase y quería quedarme ahí abrasada a ti para siempre, pero te solté cuando tu padre llego, como siempre con sus reclamos y sus problemas, lo obligue a bajar a la sala, me sentía tan mal, no quería discutir, pero el insistía y llego el momento en que no pude mas, le grite, me desquiete con el, lo hice participe de todo mi dolor, le dije que me iría, que te llevaría conmigo – me contó – no lo acepto, el te amaba demasiado y me dijo que me fuera, pero que jamás te llevaría, tenia que irme bella, volvería por ti eso era lo único que tenia claro, pero en ese momento necesitaba huir – estaba destrozada, mas de lo que yo lo estaba.

No pude evitarlo mas tiempo, me abalance sobre ella y la abrace, apretándola contra mi, no quería que se fuera nunca mas, ella Abia sufrido la peor de las aberraciones que le puede pasar a una mujer, ella también me sostenía entre sus brazos dejando caer sus lagrimas sobre mi cabello.

Por que no volviste nunca mama, lo que sucedió fue horrible – solloce contra su hombro.

Que mas quería yo mi bella, que volver a tu lado, pero yo no tenia familia en forks y esa noche tuve que tomar un autobús hasta Portland donde vivía una amiga, volvería por ti después de aclarar mis pensamientos – contesto – mi amiga me ayudo, pero no pude volver dos días después como quería, no tenia dinero, no tenia nada mas que a ti; cuando por fin pude juntar dinero suficiente para el autobús, ya había transcurrido casi dos semanas, me moría de ganas de ver tu carita otra vez – se separo de mi y acaricio mis mejillas – pero al llegar las cosas no eran como esperaba, todos me miraban de una manera horrible, y murmuraban cosas, pero nada me importaba solo tu, llegue en un taxi hasta la puerta de la casa y toque el timbre, cuando Charlie salio paso lo que menos me esperaba, no quería un festín de su parte, pero el desprecio con el que me miraba no era justificado, no me permitió siquiera acercarme al porche, le rogué me dejara verte, pero no me lo permitió, luche casi me meto a la fuerza, pero sus palabras me dejaron estática en la puerta – agacho la mirada.

Me grito que ya sabia lo que había pasado aquella noche, no podía creerlo, pero al parecer tenia una idea distorsionada de los hechos, el pensaba que tenia un amante y que me quería lejos de ti, intente negarlo, explicar de todas las maneras que era mentira, pero no escuchaba razones – sonrío pero lo menos que estaba era feliz – al parecer alguien me vio aquella noche, parada frente a ese hombre, le dijeron a Charlie que entre por voluntad propia a ese lugar obscuro y me había entregado a el por gusto – parecía asqueada – Charlie no escucho razones y yo no podía contarle la verdad, lo destrozaría, me amenazo con pelear tu custodia y no permitirme verte, pero yo no queria eso para ti mi niña, no quería que te vieras envuelta en pleitos y disputas, no quería que sufrieras – me miraba con tanto amor, quería reconfortarla de cualquier manera.

Por eso te fuiste? – Pregunte – para que yo no sufriera eso? – asintió.

Tuve que irme, no quería que fueses juzgada por los actos de los que me acusaban, Charlie te cuidaría y te amaría, aunque se me destrozara el corazón, tu bienestar era lo mejor para mi – susurro.

Tome su rostro entre mis manos – mama, lo que mas dolió fue tu ausencia, no sabes cuanto te necesite, cuanto te extrañaba, esa vieja foto es lo único que me quedo de ti – dije entre lagrimas.

Perdóname, mi niña, pero no me arrepiento, no cuando veo en lo que te has convertido, eres una buena mujer, hermosa y talentosa, has logrado tantas cosas, siendo tan joven – dijo dulcemente – todos estos años mirándote en fotos y después en la televisión, siento que s un sueño tenerte a qui – sonrío ampliamente.

Nada ha sido igual sin ti – bese su frente.

Nos quedamos abrasadas mucho tiempo, tantos años pensando que mi madre no me amaba y todo Abia sido crueldad por parte de la vida, malas decisiones y alguien desalmado que la Abia lastimado hasta el grado de despedazarla, ella me amaba, pero estaba sola y desprotegida

Como pudiste estar al tanto de mi todos estos años? – pregunte contrariada.

Un hombre al que trate poco, pero siempre fue muy amable conmigo, accedió a ayudarme después de ver mi desesperación, Harry un amigo de Charlie – reconocí el nombre inmediatamente.

Harry Clearwater? – pregunte sorprendida.

Si, me mude a Portland, el me enviaba fotos periódicamente, ahí podía estar al pendiente tuyo, mirar como crecías – sus ojos brillaban.

En ese momento comprendí por que siempre el señor Clearwater insistía en tomarme fotografías, el siempre estaba ahí en todos mis cumpleaños, con su cámara lista para retratarme, jama subiese pensado que eran para mi madre.

Después te casaste y tuviste otra hija – murmure.

Si, conocí a Phil en la gasolinera donde trabajaba, el era mecánico, era amable y quería casarse conmigo, después de tantos años sola necesitaba el apoyo de un hombre, así que accedí a casarme con el, le ofrecían un buen trabajo en Miami, que no podía rechazar – frunció el ceño – no sabes cuanto me costo alejarme de ti, pero estaba embarazada y tenia que hacerlo, hable con Harry y me dijo que seguiría enviándome fotos y contándome de ti – tomo mi mano – y después cuando me entere que vendrías aquí, fui tan feliz, podría verte de nuevo – dijo esperanzada.

Mama, por que no me buscaste – pregunte ansiosa.

Creí que me odiabas, no me atreví, tuve miedo – agacho la mirada.

Mama, jamás podría odiarte, jamás – dije sinceramente.

Lose, tu eres demasiado buena, el hecho de que estés aquí lo demuestra – señalo.

Fue… Edward quien te busco, yo no me hubiese atrevido, tenia miedo también, miedo de que no me quisieras – dije temerosa.

Te amo mi niña – dijo firmemente.

Ahora lo se – sonreí ampliamente.

Edward, es el joven que vino contigo? Pregunto.

Si, el es mi novio, gracias a el, te encontré – le conté.

Es un joven muy guapo y amable, dice Ariadna que salen hace poco – sonreí – gracias a ella se muchas cosas sobre ti, se la vive en Internet mirando fotos tuyas – movía la cabeza.

Ella es muy linda, me alegra tanto tener una hermana – su rostro se ilumino – mama no quiero que se alejen de mi, las quiero en mi vida a ambas, dime que estarán – después de saber toda la verdad no podría olvidarme de ellas.

Bella, estas segura?, tu tienes una vida establecida y… - la interrumpí.

Ustedes ya son parte de mi vida, por favor – suplique.

Claro que estaremos, siempre que nos necesites, esta niña se volverá loca cuando se entere de la verdad, no sabes cuanto te idolatra – ambas reímos.

Y Charlie, como crees que lo tome? – su pregunta me tomo por sorpresa.

El tiene que entender mama, tiene que saber la verdad – explique.

No bella, no lo lastimes después de tanto tiempo – dijo preocupada.

Mi padre tendría que entender, acababa de reencontrarme con mi madre después de tanto soñarlo, y tenia una hermana, a la que ya quería, mi madre era inocente y lo demostraría.

Mama necesito que me digas la verdad… se que es difícil, pero dime, quien fue ese maldito que te ataco – lo odiaría siempre por haber arruinado mi vida y la de mis padres.

Hija, tu también sufrirías yo… - tenia que saberlo.

Por favor? – la mire suplicante.

La indecisión se marcaba en su rostro, pero después de un largo rato pareció acceder.

El era Billy Black – la mención de ese nombre me dejo en shock, Billy Black, el padre de Jacob, el mejor amigo de mi padre Abia sido el causante de mi infelicidad.

Billy Black – dije llena de odio, quería matarlo, destruirlo, era un desgraciado igual que su hijo.

Bella, tranquilízate – suplico mi madre.

No puedo – dije entre lágrimas – ese maldito, pregonaba ser nuestro amigo y destruyo nuestras vidas – dije amargamente.

Lo se, pero con los años aprendí a perdonarlo, estaba borracho, su esposa estaba muy enferma – la mire confundida.

Como puede decir eso – me levante exaltada del sillón – abuso de ti, nos destruyo a todos – casi grite.

Hija, ven – me tendió sus brazos, los tome después de respirar un par de veces – te tengo aquí junto a mi y tengo a Ariadna, no necesito rencores, ni mas sufrimientos – me abraso.

Yo si – susurre.

Lo ignoro y siguió abrasándome – mama, tengo que irme a casa, ya es muy tarde – me separe levemente de ella, sus ojos se entristecieron aun bajo la obscuridad pude notarlos.

Esta bien mi bella, cuídate mucho – beso mi mejilla.

Hablare con mi padre y vendré mañana a verte, quiero hablar alunas cosas contigo – dije seria.

Estaré aquí siempre esperándote – contesto.

Caminamos a la salida tomadas de la mano, me dolía dejarla después de este día tan difícil.

  Edward estaba afuera platicaba animadamente con Ariadna, su padre estaba en una silla al otro lado fumando.

Edward levanto la vista cuando me miro y sonrío de esa manera tan hermosa y deslumbrante cuando me miro salir de la mano de mi madre, nos acercábamos hasta donde estaban, solté la mano de mi madre y lo abrace.

Que hermosa imagen – susurro e mi oído.

Soy tan feliz – conteste.

Yo también – beso mi mejilla.

Mire ami madre, sonreía – el es Edward – lo presente.

Ella lo abraso – es un placer joven – dijo tiernamente.

El placer es todo mío, quería conocerla – contesto el.

Ya me dirán de donde se conocen? – pregunto Ariadna.

Te lo explicare mas tarde hija – dijo mi madre – ahora bella ya se va – Ariadna frunció el ceño.

Volverás?? – pregunto apresurada.

Claro que si, tu y yo aun tenemos mucho que platicar – dije mientras acariciaba su mejilla.

Renne, quiero cenar – grito Phil su esposo, mientras entraba a la casa.

Adiós – abrace a mi madre – adiós mama – susurre bajito, para que Ariadna no pudiera escucharlo.

Adiós hija te quiero – susurro igual.

Edward se despidió y subimos al auto, me grave en la mente esa linda imagen, mi madre abrasaba a mi hermanita mientras se despedían con la mano, una lagrima escapo de mi mejilla.

Edward no dijo nada en el camino, talvez se daba cuenta de lo absorta que estaba, detuvo el auto y lo mere, sus ojos eran curiosos y expectantes.

Bella, por favor cuéntame que paso, casi me quedo sin uñas amor – señalo sus manos, no pude evitar reírme de el.

Ven aquí – lo llame.

Rodee su cuello con mis manos y lo atraje cerca de mi – me has dado el regalo mas importante que he recibido en mi vida – acaricie su cuello con mis dedos.

Tú me regalaste tu amor, no hay manera de poder corresponder a eso – susurro contra mis labios.

Si lo hay – conteste.

Jale su cuello y pegue sus labios a los míos, suaves, deliciosos y ansiosos se movían contra los míos, su aliento, su sabor, mi ángel me abraso por la cintura y me pego mas a su calido cuerpo, era tanto el amor que sentía por esta perfecta creatura, que quería disolverme en sus besos.

Era feliz por haber encontrado a mi madre y descubrir que tenia una hermanita, mi novio era el mas sexy y maravilloso hombre del mundo y lo amaba con locura, solo Abia algo pendiente, algo que me haría completamente feliz… que mi padre aceptara la verdad sobre mi madre y destrozar a Billy Black.