Akii el Segundo niiñas,

VOTOS Y COMENTARIOS EL ALIMENTO DE MI INSPIRACION...

les dejo mi correo siempre es un placer platicar con ustedes

fashionista_losoy@hotmail.com

si me agragan porfavor dejenme un mensaje o un comentario aqui, para que sepa que son ustedes, he tenido problemas con ciertas personas desagradables, y no puedo aceptar a cualquiera, asi que avisenme de antemano.

xoxo: LiiBiiThaA! 

Estaba en casa, pero era algo extraño, no era mi casa en Miami, si no de nuevo me encontraba en forks, todo era justo como lo recordaba, tan familiar, por un momento tuve miedo, creía estar en un avión junto a Edward y ahora me encontraba aquí sola, camine desesperada escaleras arriba, en busca de alguna respuesta, pero no encontraba nada, de pronto entre a la habitación que había sido de mis padres, todo parecía como siempre vacío, busque a Charlie por todas partes pero no estaba, de pronto una suave y melodiosa música comenzó a sonar a mis espaldas, gire inmediatamente, reconociendo la melodía.

Frente a mi se encontraba una mujer alta y de piel traslucida como la mía, ojos azules y cabello rubio, algunas arrugas se cernían en su frente debido a la sonrisa que me regalaba.

Sentí desesperación y emoción a la ves, esta imagen era por la que había sufrido mi vida entera y la que Abia añorado cada vez mas.

Mama – susurre.

Bella, mi niña ven conmigo – extendió sus brazos hacia mi.

Quería recorrer la distancia que nos separaba y abrasarla, pero seguía congelada en el mismo lugar.

Mama  -solloce.

Que tienes mi niña, por que lloras? – sus facciones se fruncieron.

Mama, te he extrañado tanto, por que te fuiste? – pregunte entre lagrimas.

Mi bella adorada, tuve que hacerlo – las lagrimas caían por sus mejillas.

Te he extrañado tanto – confesé.

Yo también mi niña, ven conmigo – volvió a extender sus brazos hacia mi.

Ahora si no pude mas, me ofrecía ese calor maternal que toda la vida Abia añorado, acorte la distancia, pero para mi mala suerte tropecé y no pude alcanzarla, cuando alce la vista ella Abia desaparecido, me sentí desesperada, la Abia perdido de nuevo, sin poder abrasarla siquiera.

Mama – grite entre sollozos – regresa te lo suplico – rogué.

Bella – una voz me llamaba, pero no era la voz de mi madre.

Amor… despierta – dijo de nuevo.

Sentí un movimiento brusco y desaparecí.

Abrí los ojos violentamente, todo había sido un sueño, como tantas veces, las lagrimas

comenzaron a caer por mis mejilla, y mi respiración era agitada.

Mi amor que sucede – gire la vista Edward me miraba y la preocupación se extendía por todo su rostro.

Acorte la distancia y me abrace a su pecho – solo fue una pesadilla – dije como pude.

Sus brazos me rodearon completamente – tranquila amor, todo esta bien, estoy aquí – acariciaba mi cabello.

Me tranquilice un poco, tenia razón el estaba junto a mi y estaba segura en sus brazos.

Quieres contarme que paso – susurro.

Es.. que fue horrible amor – lo mire – veía a mi madre y corría junto a ella y de pronto desaparecía – solloce.

Tranquila, fue un sueño  - beso mi frente.

Lo se y eso es lo que me asusta, estuve tan cerca de ella – confesé.

Me miro tiernamente, con ese brillo de dulzura en los ojos – no sabes lo que daría por que tu madre estuviese junto a ti – murmuro.

Tranquilo mi amor, ella se fue, me abandono sin importarle nada – acaricie su rostro – tu haces suficiente con estar aquí, junto a mi y amarme como lo haces, es lo único que quiero – sonreí levemente.

Si, pero tu madre ha dejado un vacío en ti amor, unos que solo ella puede llenar y no quiero que sufras – explico.

Me acerque a sus labios y los rose levemente – no quier que sigamos hablando de ella, ahora estamos juntos y vamos a casa es lo único que me importa – susurre.

Frunció un poco el ceño – tienes razón, pronto estaremos en casa – respondió.

Que hora es? – pregunte.

Cerca de las diez de la noche – contesto – pronto aterrizaremos – me sorprendí.

Dormí tanto?, unas 7 horas? – el sonrío.

Si mi vida, dormiste profundamente, como un bebe – sonreí.

Mire sus hermoso rostro en la tenue luz del avión – cuando llegue a casa no dormiré nada – susurre.

Una enorme sonrisa de acentúo en sus labios – mmm, es una invitación? – pregunto.

Tal vez, digo si quieres… - insinúe.

Pensaba ir a casa y dormir profundamente, pero me estoy viendo sumamente tentado – susurro en mi oído.

Pues puedes ir a tu casa a dormir, yo me quedare sola en mi habitación, con ese pijama negro que casi no cubre nada – lo rete.

Gruño – me acabas de convencer y mira que soy muy difícil – murmuro.

Reí – si eres demasi ado difícil – me burle.

No me culpes, te amo y te deseo más que a nada – acaricio mis mejillas.

Te entiendo perfectamente – acaricie sus labios.

Acorto la distancia entre nosotros y me beso, sus suaves labios se amoldaron perfectamente a los míos de una manera dulce y concisa, rodee su cuello acercándolo mas a mi y probando su aliento embriagador.

“pasajeros favor de abrochar sus cinturones, en unos minutos aterrizaremos en la ciudad de

Miami” – dijo el piloto.

Nos separamos, con la respiración un poco agitada y sonreímos, Edward abrocho mi cinturón de seguridad y después hizo lo mismo con el suyo, tomo mi mano y la acariciaba suavemente.

Aterrizamos depuse de unos minutos y vi por fin a Ángela, al parecer no era la única que había dormido todo el camino.

Llegamos a mi casa en su auto, no quise que llamáramos a tyler, solo quería llegar a casa lo mas rápido posible y ver a mi padre.

Entramos y todo estaba muy callado, casi me estremecí de estar de nuevo en casa, parecía ser tanto el tiempo que Abia estado lejos.

Sue estaba en la cocina y cuando me miro sonrío y me abraso fuertemente – señorita bella, que alegría me da verla por fin – Sue se Abia quedado a dormir en casa, la mayoría de los días desde mis partida, le Avia rogado no dejara solo a mi padre.

Sue como estas? – correspondí a su abraso – como esta mi padre? – pregunte.

Estamos muy bien, el la espero mucho tiempo, pero se fue a dormir hace una hora, hoy fuimos al parque y estaba muy cansado – explico.

Vaya, me hubiese gustado verlo – conteste – pero mañana, iré a despertarlo temprano – sonreí.

Sue saludo a Ángela y a Edward – joven Edward me alegra muchísimo verlo de nuevo, regresa a trabajar? – pregunto.

Eh, no Sue, Edward es mi novio – conteste feliz.

Novios, eso es maravilloso, yo sabia que arreglarían sus diferencias, son una pareja tan hermosa – Edward y yo nos miramos.

Gracias – contestamos.

Ángela, quédate aquí, no quiero que te vayas sola a esta hora – comente.

No te preocupes, no quiero molestar – enarque una ceja.

Aquí tienes tu habitación – conteste.

Bueno, me quedare, por que se que nunca te ganare – se rindió – iré a descansar entonces – contesto.

Que descanses angie – la abrace.

Igualmente – nos miro divertida, se despidió de Edward y se fue.

Edward cargo nuestras maletas a mi habitación y las dejo en un rincón y se recostó en la cama, comenzó a desabrocharse la camisa y el pantalón, hasta que quedo en boxers.

Me tendió una mano, indicándome que lo acompañara.

Tengo que ir al baño – me justifique – ahora vuelvo – sonrío y asintió.

Tome mi pijama y entre al baño.

Me lave un poco la cara y me peine; después cambie mi ropa por el provocador conjunto negro, me coloque perfume de noche y Salí a la habitación.

Edward seguía en el mismo lugar, pero sus ojos estaban cerrados y sus respiración era acompasada.

Mi ángel si Abia quedado dormido mientras me esperaba, se veía tan tierno así, que me mataría antes de despertarlo.

Camine hasta la cama y me recosté junto a el, procurando no despertarlo, tome una manta y lo cubrí y depuse hice lo mismo conmigo, le di la espalda intentando quedarme dormida, cuando sentí sus brazos envolver mi cintura y su cuerpo pegarse a mi espalda.

Perdón, me dormí un momento – susurro en mi oído – pero, me alegra haberme despertado – me estremecí.

Mi amor, descansa, de que te estas cayendo de sueño – conteste.

Nunca estaría tan cansado como para perderme esto – sus manos recorrieron la tela de la diminuta pijama.

Me gire, para quedar frente a el – no hay prisas, estoy aquí, tenemos toda la vida para amarnos – susurre.

Sonrío – tienes razón, además tu también tienes que descansar – comenzó a acariciarme.

Creo que dormí suficiente – bromee.

Si pero muy incomoda, intenta dormir – me abrazo mas fuerte contra su cuerpo.

Comenzó a tararear nuestra canción y sonreí al instante, una extraña pesadez me invadió por completo, respire su dulce aroma y me perdí en el, en su piel, en su voz, las sombras se apoderaron de mi cual ladronas.

Desperté entre los brazos de mi ángel, la claridad de la mañana se colaba por la ventana, mire a

Edward aun dormía tranquilo, me quede un rato mas así entre sus brazos, acariciándolo levemente.

La puerta de mi habitación se abrió y me senté al instante en la cama, papa entro con una enorme sonrisa en el rostro – bella, mi ni… - lo mire fijamente y luego ambos giramos la mirada, hacia Edward que estaba prácticamente medio desnudo en mi cama.

ISABELA MARIE SWAN, ME PUEDES EXPLICAR QUE SIGNIFICA ESTO – grito Charlie enojado.

Edward se sobre salto y despertó, miro a Charlie en el umbral de la puerta y se puso de pie inmediatamente – señor Swan – miro hacia abajo y se percato que aun seguía en boxers, sentía un calor abrasador inundar mi cara; tomo sus pantalones del buró y se los puso rápidamente.

Señor Swan yo… - Charlie lo miro con odio.

ESTOY ESPERANDO UNA EXPLICACION ISABELLA – me miro fijamente.

Papa, espérame afuera un momento – suplique – ahora salgo y te explico – frunció el ceño.

Esta bien – dijo no muy convencido, pero salio de la habitación.

Escondí mi rostro entre mis manos, no Abia sido la mejor presentación del mundo, ahora Charlie odiaba a Edward, por haber deshonrado a su niña, demonios!.

Bella, yo lo siento amor, yo no quería que las cosas fueran así – Edward hablaba apenado.

Me levante de la cama y lo abrace muy fuerte – tranquilo mi amor, Charlie tiene que aceptar que ya no soy una niña y que nos amamos y vamos a estar juntos – conteste.

Si, pero ahora me odia – agacho la mirada.

Ya veras que se le pasa, cuando te conozca te va a adorar igual que todos – bese su mejilla.

Es que quería hacer las cosa bien y todo salio mal – hizo un lindo puchero.

Nuestra relación no es convencional recuérdalo, pero aun así estamos juntos, es lo importante – acaricie su mejilla.

Quiero hablar con tu padre, explicarle que mis intenciones son las mejores – sonreí.

Lo se, eres un caballero, pero creo que debería explicarle yo primero, no quiero quedarme sin novio – dije asustada.

Pero bella… - lo interrumpí.

Por favor, solo déjame explicarle, después podrás hablar con el – dudo.

Esta bien – accedió por fin – solo por que tu así lo quieres – lo bese levemente.

Te amo, todo estará bien – sonrío.

Yo más – me beso en los labios.

Me cambie la pijama por unos jeans y una blusa rosa, al tiempo que Edward se vestía, me arregle el cabello y me maquille levemente, mire a Edward que me observaba fijamente, parecía asustado.

Tranquilo amor, no es un ogro solo es mi padre – trago en seco.

Si fuese un ogro no me preocuparía – sonreí – pero tu padre es tu única familia y si el no me aprueba – tenia que despejar sus dudas.

Eso no sucederá y ahora mismo iré a hablar con el – me acerque y bese sus labios.

Te amo – susurro.

Yo mas – Salí de la habitación.

Charlie estaba sentado en la mesa de la cocina, tenía sus dedos en el puente de la nariz y el ceño fruncido.

Papa – me miro sombrío.

Siéntate bella – dijo mas calmado.

Me senté el la silla junto a las suya, esperaba los gritos en cualquier momento.

Bella, me puedes explicar quien es ese tipo y que hacia en tu cama medio desnudo? – me sonroje inmediatamente.

Bueno creo que es un poco obvio – casi se atraganta con el café que estaba bebiendo – mira Edward es el hombre que amo y el me ama de la misma manera – explique.

Pero por que no me lo presentaste primero? – pregunto.

Las cosas entre nosotros nunca han sido convencionales, estuvimos separados desde hacia tres meses, desde que me fui de gira – me miro confundido.

Desde cuando lo conoces – dude.

Una semana y media antes de tu accidente – respondí – Edward era mi guardaespaldas – abrió lo ojos.

Te sedujo mientras trabajaba para ti? – dijo alterado.

Las cosas no son así, nos enamoramos desde antes que lo supiéramos, coincidí con el cuando estaba en Londres, fue una sorpresa para ambos, cuando supimos que trabajaría

para mi – enarco una ceja.

Estas segura que no se acerco a ti por interés, tal vez lo sabía desde antes – suspire.

Papa el es Edward Cullen, dime si te suena el apellido – lo pensó un momento.

Cullen, del doctor Carlisle Cullen? – asentí.

Es su padre – pareció sorprendido – así que no veo el tenga necesidad alguna de mi dinero – negó.

Si, su fortuna es inmensa – susurro.

Papa, ahora crees que de verdad nos amamos – pregunte.

Tu si lo amas, pero… el, por que no estuvo contigo en forks apoyándote – reí sin felicidad.

Claro que el estuvo conmigo – me miro confundido – el fue a forks conmigo y me apoyo en eso momentos difíciles, estuvo junto a mi en tu operación.

No entiendo bella, por que se fue, o donde estaba cuando yo desperté, nunca mencionaste nada – explico.

Mordí mi labio – es mi culpa, yo lo lastime, lo obligue a alejarse de mi, lo eche de mi lado, justo cuando me dijeron que estabas bien – una lagrima rodó por mi mejilla, era difícil recordar.

Por que hiciste eso bella, si lo amabas por que lo hiciste – pregunto.

No podía contarle la verdad a Charlie, era un dolor pasado, ahora todo estaba bien, y no quería lastimar a Charlie.

Tuve que hacerlo, pero no quiero recordarlo… después regresamos aquí y me fui de gira – me miraba consternado – todo este tiempo lo he seguido amando y el ami, fue a buscarme papa, fue hasta Londres a buscarme, me perdono – susurre.

Bella, por que dejaste a Edward? – negué.

Algún día te lo contare papa, pero ahora no, ahora estoy feliz, te tengo a ti, a Ángela y a

Edward junto a mi, las personas que mas amo – sonreí.

Me alegra que seas feliz hija, pero por que no hicieron las cosas bien – frunció el ceño – yo aun te veo como mi niña – se sonrojo.

El quería hacer las cosa bien, quería conocerte y pedir tu permiso, pero yo lo convencí de que se quedara – dije avergonzada – no tienes idea de lo lindo que es papa, es inteligente y amable, tiene grandes convicciones, es un hombre maravilloso, se niega a aceptar la fortuna de su padre, el quiero luchar y lograrlo el solo – Charlie sonrío.

Bueno, donde esta ese joven tan maravilloso que describes – lo abrace fuerte.

Gracias papa, no sabes lo importante que es para mi tu aprobación – dije feliz.

Tu felicidad es lo único que importa, hija – susurro – ahora quiero conocerlo – lo bese en la mejilla.

Sue – grite.

Apareció por la puerta – dígame – Charlie sonrío tontamente cuando la vio, se me hizo muy extraño.

Puedes decirle a Edward que venga – asintió.

Ahora le digo – contesto.

Gracias – mire a Charlie de nuevo, no despego su vista de ella, hasta que se fue.

Te la pasaste bien con Sue, estos meses – pregunte.

Eh, Hem, si, ella es muy amable – tartamudeo.

Algo mas? – pregunte.

De que hablas bella – dijo sonrojado.

Nada, olvídalo – lo averiguaría con Sue.

Edward entro a la cocina con ese andar lleno de gracia, parecía un poco preocupado, le sonreí para animarlo y decirle que todo estaba bien.

Señor Swan, soy Edward Cullen – dijo mientras le tendía la mano a Charlie, este la tomo.

Llámame Charlie Edward – dijo amablemente.

Charlie, quiero disculparme por lo que paso hace un rato – dijo apenado.

Tranquilo, bella ya me lo explico todo – Edward me miro confundido, le guiñe un ojo – dice que se aman – comento Charlie.

Así es, amo a bella con toda mi alma y soy afortunado de que ella me corresponda – me estremecí, mi ángel, nunca dejaría de sorprenderme.

Lo eres, mi bella es muy especial – dijo mi padre.

Mas que eso – contesto Edward – por eso quería pedirle su permiso, para que bella sea mi novia – sonreí.

OH, Edward, bella ya es una mujer y puede decidir, pero te agradezco me tomes en cuenta, si ella es feliz contigo, yo no tengo Ningún problema – Edward sonrío y me miro.

Claro que si, quiero ser tu novia – me levante emocionada y lo bese, se escuche como alguien tosían.

Tranquilos muchachos, este viejo, va un poco lento – reímos todos.

Ahora si era completamente feliz, aunque siempre me aria falta mi madre, ya estaba acostumbrada a vivir sin ella, y tenia personas que si me amaban y me apoyaban.

La semana paso muy rápido, Edward Abia regresado a casa de sus padres, estaba esperando le asignaran un nuevo jefe, la idea no me gustaba demasiado, no lo vería tan seguido y estaba mas que acostumbrada a tenerlo junto a mi, aunque no vivíamos juntos, por que no era bueno abusar de la comprensión de mi padre y la idea de tener al novio de su hija viviendo con ella, no era muy reconfortante para el; Edward y yo pasábamos todas las tardes juntos, paseando o íbamos al cine o a bailar, estábamos viviendo nuestra relación como un verdadero noviazgo, aunque el las noches el entrara a escondidas a mi habitación y nos amábamos con locura, con pasión y sobre todo con ese amor que nos invadía lentamente.

Mañana teníamos una reunión en casa de los Cullen, ellos querían conocer a mi padre, los extrañaba, no Abia tenido oportunidad de verlos desde mi regreso y ahora que Edward y yo estábamos juntos de nuevo, ellos volvían a ser parte de mi familia.

Edward me Abia prometido una sorpresa para después de la reunión, así que me sentía un poco ansiosa y preocupada, el sabia que odiaba las sorpresas.

Que tendría entre manos Edward Cullen?.