(Ola Niiñas Dsculpen por No subiir Ayer, Estoii en FiiNales y el estress Se hace presente en mii Viida, Graciias por sus votos y comentarios, son muy liindas, graxiias por el apoyo, ladydawn Entiiendo mui bien lo que te pasa, se como se ponen Los papas Cuand uno se diiviierte un Pokiito de mas jeje... no estes trisite aunque no veras luna nueva ese dia, puede iir al dia siiguiiente, lo importante es que ya pornto la veras y te deleiitaras jej, espero Les guste mucho este capiitulo ya proto continuara la historia, solo les stoii dando un break jeje Las adoOro Graciias por leerme, Dejen comentarios y votos. xoxo: LiiBiiThaA"" )

Cuando llegue al hotel seguía demasiado afectado, necesitaba saber mas sobre aquella desconocida mujer, que me estaba volviendo loco.

Tenía que saber algo, cualquier cosa, cualquier indicio que me ayudara a encontrarla, de pronto una idea ilumino mi mente, que tonto era como no se me había ocurrido, sabia algunas cosa que podrían ayudarme; ella era alguien importante o por lo menos influyente, eso estaba claro, además estaba en este mismo hotel, sino como es que se había metido a mi habitación, tendría que buscar alguna manera de descubrirlo.

Tome mi celular y marque el numero de mi padre, tenia que verificar a que hora lo vería, para que no sospechara nada de mi plan, el teléfono sono y el contesto.

Bueno? – dijo.

Papa, soy yo, solo quería preguntar a que hora nos veremos para comer – pregunte.

Lo siento hijo – su voz sono apenada – tengo que atender una emergencia aquí en el hotel – concluyo.

Oh, no te preocupes, entonces… nos vemos en la cena? – me alegre.

Si, esta bien, tengo que irme ya llego mi paciente – dijo.

Esta bien, espero todo salga bien, hasta en la noche – dije y el colgó.

Genial ahora tendría tiempo suficiente para investigar sobre mi desconocida; camine hacia la recepción, me concentre mentalmente, tenia que lograr que la recepcionista me diera alguna información; demonios!, no estaba, me recargue del mostrador esperando su llegada.

Puedo ayudarlo señor? – escuche una voz femenina detrás de mi.

Gire y hable – Si señorita, la estaba esperando, necesito su ayuda – la mire muy fijamente, ella pareció ponerse un poco nerviosa.

ee.,, si disculpe, estaba atendiendo una emergencia – dijo tartamudeando, seguramente la misma de la que papa me hablo – pero, dígame por favor, en que puedo ayudarlo – pregunto amablemente.

Necesito que me diga el nombre de un huésped del hotel – dije seguramente – es muy importante para mi – casi sonó como una súplica.

Disculpe señor – dijo apenada – yo no puedo… - la interrumpí.

Por favor, es muy importante – ejercí todo el poder de mi mirada y ella pareció ceder.

Mmm, esta bien, me puede decir el numero de la habitación – pregunto, pero yo no sabía ni siquiera eso, iba a ser mas difícil de lo que había imaginado.

Es que… no se en que habitación esta – conteste.

Disculpe señor, no puedo ayudarlo entonces – me entristecí demasiado, si tan solo supiera esos 3 números, ahora podría estar otra vez junto a ella, pero al parecer no tenia tanta suerte.

Mire, ella tiene una limusina negra -  dije esperanzado – es lo único que se, además parece ser un huésped muy distinguido.

Limusina negra? – Pregunto la recepcionista, yo solo acento – la única limusina que se encuentra en el registro, es de la habitación 999 – contesto, mi esperanza volvió.

Me podría decir su nombre? – pregunte feliz, será que por fin podría saberlo?, me miro con duda, - por favor, es muy importante – suplique.

Esta bien, espere un momento – sonreí y espere, mientras ella verificaba en la computadora, parecieron ser los segundos mas largos de mi vida. – disculpe señor, el sistema no funciona bien – dijo y casi jadee – no puedo acceder a los nombres de los huéspedes – concluyo.  

Bueno, no era tan malo, por lo menos tenía un numero de habitación, tenía una esperanza de encontrarla.

Bueno, muchas gracias, es usted muy amable – le dije a la joven – no se como agradecerle.

No es nada señor, estamos para servirle – contesto y me retire hacia la habitación 999.

Durante el transcurso por el elevador estaba muy nervioso, como nunca lo había estado, que le diría cuando estuviera frente a ella, mirando sus hermosos ojos chocolates, seguramente no podría volver a contenerme y la tomaría en mis brazos; camine hacia la habitación muy decidido, cuando me encontré frente a la puerta, toque decididamente; volví a tocar la puerta, pero nadie respondió, espere mucho tiempo, pero nadie salió; me dolió un poco no haberla podido ver, pero no perdía las esperanzas, volvería a buscarla mas tarde.

Baje hasta mi habitación y entre, me tumbe sobre la cama un poco cansado, no solo físicamente, también mentalmente, hoy había tenido demasiadas emociones juntas y todas tenían un solo rostro, el de mi desconocida, poco a poco me fui quedando dormido, con su rostro en mi mente.

El sonido de mi celular, me despertó de golpe, lo saque de mi pantalón y conteste.

Bueno – dije un poco somnoliento.

Hijo, estás en tu habitación? – reconocí la voz de mi padre.

Si, aquí estoy, que sucede – pregunte.

Es que pensé que saldríamos a cenar – dijo – y ya es un poco tarde, pensé que me llamarías – concluyó.

Oh, si papa, lo siento me quede dormido – dije apenado – pero te veré en el restaurante en 20 minutos – sugerí.

Si me parece bien, hasta entonces – dijo.

Adiós – colgué.

Me levante de la cama y me cambie de ropa, me puse unos vaquero y una playera negra un poco informal, Salí de mi habitación y entre en el elevador, no pude evitar preguntarme si ella estaría ya en su habitación, estaba un poco desesperado por verla, pero ahora tenía que ir a mi cena con papa; llegue al restaurante y salude a mi padre.

Hola hijo – dijo y me dio un abrazo – lamento haberte abandonado hoy – lucia muy apenado.

No papa, se que tuviste muchos compromisos, te entiendo – conteste.

Si en realidad fue un dia muy atareado – frunció el ceño.

Que sucedió? – pregunte.

Una joven tuvo un pequeño accidente de tránsito – me conto – salió un poco lastimada de un brazo, pero al parecer no fue nada irreversible.

Que pena, espero que se recupere-  dije.

Si yo también, ella era muy amable Edward – me miro fijamente – es la clase de muchacha que me gustaría para ti hijo, además era muy hermosa – me guiño un ojo.

Otra vez con eso papa .-  dije riéndome.

Es que… a veces estas mucho tiempo solo – dijo triste – me gustaría que encontraras alguien con quien compartir tu vida hijo – palmeo mi hombro.

Te prometo que cuando menos lo imagines te sorprenderé  - insinué, no pude evitar que el rostro de mi desconocida viniera a mi mente – algún día encontrare alguien perfecta para mi – concluí.

Eso espero – sonrio y no comento nada mas.

Cenamos tranquilamente, conversando de cualquier cosa, no podía esperar a que la cena terminara y salir corriendo al encuentro de mi desconocida.

Me despedí de mi padre y camine hacia los elevadores, me dispuse entrar cuando vi como un hombre arrebataba el bolso de una señora, no pude evitar enfurecerme y Sali corriendo detrás de el, llegue hasta la calle persiguiendo al hombre, un par de cuadras después me abalance sobre el y lo inmovilice, llego la policía y me pidió que los acompañara como testigo del robo, accedí casi a la fuerza, aunque ya era demasiado tarde como para ir a verla.

Pase casi toda la noche en la comandancia, telefonee a mi padre para no preocuparlo y le conté lo sucedido; la noche fue pasando muy rápido, estaba ansioso y triste, me había hecho muchas ilusiones todo el día y todo había salido mal, no sabía que era lo que ella tenia, pero no podía sacarla de mi mente.

Cuando por fin me dejaron irme, fui directo al hotel, subi a a mi habitación, me tumbe sobre la cama y caí rendido.

Desperté por la mañana con un dolor de cabeza espantoso, eso de desvelarse no era tan bueno, me desvestí y entre al baño, tome una larga ducha para relajarme un poco y Salí a vestirme; hoy tenia planeado ir a verla por fin, tenia que lucir muy bien, tome un pantalón negro de vestir y una camisa azul, intente peinar mi cabello, pero eso era imposible, asi que lo deje como estaba; Lucia muy formal, esperaba a ella le pareciera atractivo.

Sali de mi habitación y baje en el elevador, camine hasta la recepción y me percate de que estuviera la misma recepcionista de la noche anterior; para mi suerte era ella, asi que me acerque y salude.

Bueno días señor – contesto con una sonrisa.

Disculpe, yo sé que es demasiado pedir, pero… ahora si me podría ayudar con el nombre que necesito? – pregunte esperanzado.

He, si al parecer el servicio ya funciona – sonreí, por fin, no lo podía creer.

Comenzó a buscar en la base de datos del hotel, mientras yo casi me comía las uñas de nervios.

Si aquí esta – dijo – la habitación número 999 esta registrada a nombre de Sony bmg – concluyo.

Sony bmg? – Pregunte confundido – como es eso posible – dije casi ahogado.

Si, esto generalmente ocurre, cuando alguno de sus artistas se hospeda con nosotros, los registran a nombre de la disquera – concluyo.

Me quede un poco impactado, ella era cantante?, era eso posible, además de hermosa y perfecta, era famosa?.

Y no me podrías decir el nombre de ese artista? – la mire con suplica.

Señor yo… - la interrumpí.

Por favor, es muy importante – dije tomando su mano, ella vio algo en mi mirada que la hizo ceder – Bueno… tengo entendido que allí se hospeda Isabella Swan. – concluyo.

Isabella Swan…. Repitió mi mente mil veces, que nombre tan hermoso, tanto como lo era ella, ya no era mi desconocida, era mi isabella, a la que tanto necesitaba conocer y tener cerca, la que había volcado mi vida de cabeza en tan solo dos días; ahora si sabía algo de ella, ahora podría acercarme a ella como un hombre.

Muchas gracias Señorita – le regale mi sonrisa mas sincera – no sabe lo mucho que me ha ayudado – ella agacho la mirada apenada.

No es nada, es un placer ayudarlo – contesto.

Gracias, subiré a verla – murmure para mi mismo, no se como ella lo escucho.

Señor, ella ha salido desde temprano, según tengo entendido, regresaran hasta mañana – mi mundo se callo a mis pies, no era posible, el destino ahora se empeñaba en que yo no la conociera, era un asco.

Oh, está bien, gracias – dije dando la vuelta, desganada mente, subí cabizbajo por el elevador hacia la habitación de mi padre, toque la puerta y papa salió; me abraso un poco efusivo y me dijo que se alegraba de que estuviera bien, después me informo de algo que me puso mucho mas triste de lo que ya estaba.

Lo siento hijo, nuestro vuelo sale en la tarde – dijo, después de informarme que teníamos que regresar a Miami, el tenía que regresar por una cirugía que tenía que realizar y yo había recibido una llamada de la agencia diciendo que pasado mañana tenía que ir a a conocer a uno de mis posibles nuevos jefes.

Tuve que acceder, aunque me doliera mucho no poder conocerla, tal vez algún día la volvería a tener frente a mi, o tal vez no, pero esperaba de todo corazón que sí; subí a  mi habitación, prepare mi maleta y arregle mis cosas, mire el reloj y ya tenía que encontrarme con mi padre en el lobby, recorrí la habitación con la mirada y pude recordar la noche en la que ella entro aquí, la noche que la tuve entre mis brazos, cerré los ojos y Sali. Me encontré con mi padre y subimos al auto que no llevo al aeropuerto, esperamos y luego abordamos en el vuelo 68 hacia Miami, cerré mis ojos intentado quedar dormido, con una sola imagen en mi mente… la de Isabella Swan.