El domingo paso rápidamente, sin ningún evento especial, recibí llamadas de mi madre y Sean, al ultimo tuve que narrarle exactamente como me había ido en la fiesta,  me tiro una o otra indirecta  sobre Edward, a las cuales respondí tratando de  mi disimular mi interés y felicidad al haber compartido una noche con el.
Lunes por la mañana  llegue temprano a mis clases de matemática, me senté en mi lugar de siempre, mientras todos mis demás compañeros entraban y se ubicaban.
El profesor entro muy serio, dejo sus cosas en el escritorio, seguido se dispuso a dar su clase, pero antes de que empezara la puerta se abrió, y apareció mi chico ángel en la puerta, vestía unos vaqueros negros, una camiseta azul, pegada a su torso, y un abrigo negro que le quedaba súper bien, se quedo allí en el umbral mirando al profesor.
-buenos días, profesor- le dijo Edward
-así que el señor Cullen nos ah dado el honor de venir a clases, luego de una semana de no asistir-  le respondió el profesor con ironía dirigiéndose al salón completo
Edward no se inmuto, solo se quedo allí viendo serio al profesor, esperando que este le diera permiso de entrar.
-que espera pase y tome asiento- le dijo el profesor señalando la mesa a mi lado.
La mira de Edward primero se poso en el asiento vacío, dio unos pasos, y dirigió la mirada a mi, en cuando me vio, sus facciones demostraron sorpresa, que luego se convirtió, en  una sonrisa torcida, de esas que me habían dejado sin habla anteriormente, mi cara no reacciono, seguí impresionada de verlo allí, ahora seria mi compañero, no solo eso, si no que estaría a mi lado.
Tomo asiendo puso su mochila al suelo, espere que me saludara, pero no me volvió a ver, solo  dirigió su atención al profesor que seguía viéndolo, empezando su explicación para la clase.  Su aroma acaricio mi olfato, era tan irresistible de todas manera, ¿Por qué no me había saludado?, claro, tal vez  el rato que pasamos en la fiesta no había significado nada para el, ni siquiera me consideraba una amistad, que tonta en pensar que algo cambiaria, me consumí en la explicación del profesor, que duro unos minutos,  luego este escribió una practica  en la pizarra, nos dio la instrucción de realizarla sentándose en el escritorio y puso la atención en documentos.
Comencé a copiar, cuando sentí  algunas miradas de Edward en mí, primero pensé que estaba neurótica, pero esa sensacion continuaba, ignore un rato más, pero no resistí la curiosidad, y lo volví a ver.
-hola bella- me dijo con su sonrisa
-ho ho hola- le dije tímidamente
- me estas asustando, me estas siguiendo o algo por el estilo- me dijo serio
-¿yo? No no nada de eso- le dije contestándole un poco acelerada
-bella estoy jugando contigo, no hablo enserio- dijo entre risas pasando su sexi mano por su sexi cabello. Claro que estaba jugando conmigo, ese movimiento debería ser ilegal pensé.
-ah ok- le dije regresándole una sonrisa apenada
- no te salude hace rato porque ya me gane empatía del profesor y no quería causarte problemas- me susurro
-ah. Entiendo- le conteste- pensé… - le dije pero quede en media frase- nada nada- le dije
-¿pensaste que no te hablaría?- me dijo confundido-
-bueno no se- le dije encogiéndome de hombros
-no haría eso bella, no soy así- me dijo mirándome a los ojos- además ¿eres mi amiga o no quieres serlo?-me dijo mirándome a los ojos
Dios esa mirada, provocaba que me quedara sin habla, realmente era una buena persona, amiga el quería ser mi amigo, y eso era maravilloso,  me quede hipnotizada por su mirada, pero me di cuenta que el estaba esperando una respuesta. Así que hice un esfuerzo máximo para conectar mi cerebro con la lengua.
-claro- pronuncie rápido
Que bueno realmente eres muy agradable, me la paso bien contigo, me gusta ver como te sonrojas por todo- me dijo provocando que me sonrojara y el soltara la risa por ello.
La clase paso rápido, cuando el timbre anuncio su final,  cuando recogíamos nuestras cosas, el profesor se acerco a Edward,
-Señor Cullen, no crea que eh pasado por alto sus ausencias de la semana pasada, tome- le dijo entregándole unas hojas- debe traerme esas practicas para mañana si no quiere tener problemas con mi clase- le dijo muy serio
El tomo las hojas y las ojeo-Profesor pero es demasiado- dijo Edward asustado-
-entonces le aconsejo señor Cullen que empieza a hacerla lo antes posible- se dio vuelta y se marcho
 Edward se quedo allí con las hojas, me volvió a ver  con ojos de niño al que le habían quitado un dulce, y luego se encogió de hombro, salimos juntos del salón y se despidió ya que nos tocaban clases separadas, camine hasta mi salón entre.
Al terminar, empezaba mi hora libre,  así que me fui al jardín, escogí un árbol, y me senté en el césped recostándome a este, saque un libro consumiéndome  en el. Al fondo escuchaba como los chicos del equipo entrenaban, lo deducía por sus gritos y el sonido del silbato.
-hola Bella te buscábamos- me dijo una vos, sacándome de mi lectura. Era Alice y Rosalie que se acercaban a mí.
-hola chicas – las salude
Rosalie se sentó  rápidamente junto a mí, y miro curiosa mi libro, Alice la imito saco su set de maquillaje del bolso y empezó a retocarse.
-esto es agradable – dijo Rosalie
-si, deberíamos hacerlo mas seguido- dijo Alice, yo nada más las miraba sorprendida, y extrañada de la actitud.
-bueno ahora parece que lo seguiremos asiendo, porque aparentemente a bella le gusta leer- dijo Rosalie señalando mi libro.
-porque pones esa cara Bella- me dijo Alice
-no es nada, solo me sorprende su actitud hacia mi, recién me acaban de conocer hace unos días- les dije entregándoles una sonrisa tímida.
-nada de eso Bella, hemos decidido que serás nuestra tercer mosquetera- dijo Alice soltándolo con alegría.
-ignórala- me dijo Rosalie sonriendo- simplemente te consideramos una de nosotras- me dijo  dándome un golpecito con el hombro, yo solamente les sonreí.
Estuvimos allí, toda la hora libre, hablando sobre trivialidades y contando un poco de nosotras, cuando llego la hora de almuerzo nos dirigimos a el comedor, que ya estaba abarrotado cuando entramos, compramos algo de comer y caminamos hacia la mesa de siempre,  ya no era incomodo para mi, me había acostumbrado y la gente ya no lanzaba miradas curiosas al verme con ellos, realmente los consideraba mis amigos, además de que eran muy divertidos, mas Emmet que parecía un niño extremadamente grande. Tomamos asiento,  bromeando entre nosotras, los chicos entraron al comedor unos minutos después, y si Edward venia con ellos, fueron por su comida y se reunieron con nosotras.
-¿ahora almuerzas con nosotros?- me dijo el sonriendo, mientras se sentaba a mi lado
-ella siempre almuerza aquí, lo sabrías si nos acompañaras- le soltó Emmet  sentándose al lado de Rosalie y sonriéndome
-pero lo hago ahora- dijo Edward sonriendo
-estas extraño hermano, estas medio bipolar- le dijo Alice con ojos entrecerrados
-estoy bien- le dijo probando un bocado
El almuerzo paso tranquilo, bueno eso parecía hasta que Thania y Demetri dieron su entrada, tomados de la mano y justo cuando pasaban por nuestra mesa, se detuvieron, Thania tomo a su chico del cuello y empezó a besarlo con furia, todos volvimos a ver como reaccionaria Edward, el cual estaba serio, y su expresión se iba poniendo cada ves mas furiosa, apretó la mano que tenia sobre la mesa con fuerza. Me preocupaba lo que podía pasar, enserio podía empezar una pelea, sin pensarlo puse mi mano sobre la suya, provocando que el me volviera a ver, sus ojos se clavaron en los míos con duda, así se quedo hasta que se fue calmando, su mirada ya no era de furia sino de tristeza, le sonreí, a lo que el respondió y asintió con la cabeza. Los demás que habían visto todo, me miraron y sonrieron como dándome las gracias yo simplemente seguía comiendo mientras la pareja del espectáculo se alejaban.
-que  exhibicionistas indecentes- dijo Rosalie
-hipócrita- le lanzo Alice a Rosalie
-ey Alice no molestes- le dijo Emmet riendo y abrazando a su novia
Edward les dio una sonrisa forzada, me volvió a ver  se acerco y me susurro un tierno –gracias- que provoco que me estremeciera
Termino el almuerzo, me dirigí a mi última clase del día, la cual paso rápidamente, cuando  caminaba hacia mi camioneta, recordé que tenía que devolver un libro de la biblioteca que había sacado la semana anterior, me devolví, no se veía nadie por el colegio,  estaba muy silencioso.
Entre a la biblioteca, una señora me atendió en el mostrador,  me lleno firmar la hoja de entrega, le di las gracias y al girarme, lo vi, era Edward estaba solo, parecía un poco estresado, con sus manos se  tomaba al lado de la cabeza y miraba fijamente un cuaderno,  me quede observándolo por unos segundos, camine hacia la salida, debatiéndome conmigo misma entre volver o salir de ahí, frene decidida, respire y me dirigí directamente hacia el.
-hola- le dije
-bella- me dijo sorprendido- ¿que haces aquí?
-dejando un libro- le explique- ¿y tu?
-este maldito trabajo, no puedo no se hacer los ejercicios- me dijo señalándome el cuaderno
- no debiste faltar- le dije
-si lo se, si no llevo esto el profesor no me aprobara estoy seguro- me dijo preocupado
-es fácil, mira- le dije mientras le corregía su  ejercicio.
-bella sabes hacerlos- me dijo sorprendido y feliz
-si, son bastante fáciles- le dije encogiéndome de hombros
-ayúdame por favor- me suplico
-¿como?-  le dije sentándome a su lado
-explícame como hacerlos- me dijo con ojos de borrego
-¿esos son los ojos de Alice?- le pregunte
-si, ¿funcionan?- me dijo con una hermosa sonrisa que hizo que mi corazón empezara a moverse mas rápido de lo normal
-ok te ayudo- le dije riéndome
-eres mi ángel- me dijo Edward provocando que quedara en shock, si supiera lo que significaban esas palabras para mi.
Realmente, Edward era muy inteligente, con solo explicarle una ves, comprendió la idea general, y solo tuve que supervisarlo un rato para corregirle algunos pequeños errores, no duramos mucho, menos de una hora ya había terminado todo su trabajo, cuando cerro su trabajo me miro, sonrió y levanto las manos- LO LOGRAMOS- me dijo levantando las manos
-tu lo hiciste solo, yo solo mire- le dije  sonriéndole
-como que no, eres mi ángel salvadora, la mejor profesora- me dijo abrazándome, sentí que cada uno de mis músculos se convirtió en piedra, no pude moverme, hablar, respirar, pestañear nada absolutamente nada.
Me soltó, tomo sus cosas, y volvió a verme de nuevo- ¿te pasa algo?- me dijo extrañada
-no no nada- solté rápidamente
-¿nos vamos?- me dijo tomando mis cuadernos también
-puedo llevarlos- le dije
-como crees, déjame ser caballeroso- me dijo caminando
Me acompaño hasta mi auto, me regreso mis  cuadernos, me volví hacia el para despedirme, y note que estaba, incomodo, como indeciso, debatiéndose algo, pero aun así su expresión era hermosa.
-¿Qué l?- le dije asustada
-bella-me dijo, tomo aire de nuevo- ¿bella me consideras tu amigo?
-si Edward  claro- le dije
-es que quería que hicieras algo por mi- me dijo acercándose a mi peligrosamente
Tenerlo así de cerca, me dejaba sin habla, podía pedirme todo mi dinero, simplemente una mirada tierna y caía rendida a sus pies. Al ver que no respondía,  suspiro
-solo te lo pediré, tu decides si lo haces o no, sin compromisos ¿ok?- me dijo
-ok- le dije
- cuando hablamos en la fiesta, me hiciste pensar muchas cosas, quiero pelear por Thania, me dijo, pasaron unos segundos de silencio, -bueno, es que tuve una idea, que tal vez funcione, pero te incluye- me dijo
-aja- le dije
-bueno iré al grano,  creo que la única manera de que ella se de cuenta lo que siente por mi, y perdió, es que me vea superarla- me dijo frenando
- no sabes que olvídalo- me soltó
-Edward dime- le dije seria
Dudo un segundo- bueno me ¿ayudarías a darle celos?- me dijo rápido viendo el piso
-celos ¿Cómo? – le dije súper desubicada, que clase de celos podía yo provocarle a Thania
-pues haciendo creer a la gente que sales conmigo-
-¿porque yo?
-porque eres mi amiga, además de muy agradable, confió en ti-
- ¿Edward quien va a creer que tú sales conmigo?-
-¿Por qué no?- me dijo extrañado
-una persona como tu no saldría con una como yo
-bella no digas eso, eres una chica muy linda y excelente persona, no quiero que vuelvas a decir eso- me dijo muy serio
Me sonroje al máximo, yo  asiendo creer a la gente  que salía con Edward, nunca en mi vida me habían hecho una propuesta de ese tipo, mire a Edward sus ojos me veían esperanzados, esos ojos me hipnotizaban, no me creía capaz de decirle que no en nada a Edward.
-¿Qué tendría que hacer?-
-bueno, salir conmigo, acompañarme a algunos lugares, dejar que te abrace, tome de la mano en ocasiones- me dijo sonriendo
Lo mire asustada, no había otra cosa que me hiciera mas feliz que lo que estaba narrando Edward aunque fuera una farsa.
-tranquila, no  te pediré que me beses, respeto eso- me dijo
Mire sus labios, rojos carnosos, hermosos, deseables, si supiera que me moría por probarlos, mas que probarlos comérmelos.
-prometo que nos divertiremos, ¿Qué dices?- me dijo con sus ojos de borrego
-mmmm… ok- le dije mientras mi corazón se quería salir de mi pecho
-siii- me dijo abrazándome
Le respondí el abrazo, sentir su cuerpo con el mío, era la mejor sensación, su aroma me inundaba, se separo y me sonrió
-eres la mejor, mi ángel salvador- me dijo
Solo pude sonreírle.
-¿entonces empezamos mañana?- me pregunto
-eh bueno-
-ok, dame tu numero- me dijo entregándome su celular para que lo anotara- y dame el tuyo-
Le entregue mi celular, intercambiamos número
-enserio bella muchas gracias- te lo pagare
-eso hacen las amigas ¿no?- le dije
-eres la mejor amiga de todas- me dijo besándome la mejilla- hasta mañana- me dijo alejándose
-si claro la mejor amiga – me dije a mi misma subiéndome al auto

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aca les dejo chicas :S sorry a las que no pueden ver los primeros caps no se a que se debe....  espero que les guste... me gustaria que comentaran y votaran gracias por su apoyo... besos chauuu--- bueno digamen que opinan de el giro de la historia