Niñera por toda la eternidad

Autor: Meli-ch
Género: Humor
Fecha Creación: 03/10/2009
Fecha Actualización: 30/10/2011
Finalizado: SI
Votos: 64
Comentarios: 169
Visitas: 130850
Capítulos: 12

 

Bella es una niña de cinco años que escapa de su casa al ser maltratada, ¿que pasara cuando encuentre la casa de los Cullen? ¿Podra sobrevivir en una casa llena de vampiros? o mejor dicho ¿Podran siete vampiros sobrevivir con una niña pequeña?

 

Si quieren saber, lo unico que deben hacer es entrar y dejar sus comentarios y votos ^^

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 8: Capitulo 8

 Capitulo 8

 

EDWARD POV

 

Ya han pasado siete días desde que dejamos a Bella en el orfanato. Siete días en que la casa no había sido lo mismo, ni siquiera nosotros podíamos volver a nuestro ritmo de vida. Por más extraño que pareciera la pequeña nos había cambiado todo, por más mínimo que fuera.

 

La llamamos todos los días para saber como estaba, pero ella no quería contestar el teléfono, ni una sola vez. Se excusaba diciendo que estaba haciendo cosas importantes.

 

-No entiendo que es lo que le pasa a Bella- dijo Ángela una vez que se sentó en nuestra mesa. Por extraño que pareciera a ella no le intimidábamos y a nosotros no nos molestaba su presencia.

 

-¿Te ha dicho por que no quiere atender nuestras llamadas?- pregunto Alice con suma preocupación.

 

-No- sacudió su cabeza-. Siempre esta sentada en la biblioteca coloreando o viendo algunos libros, otras veces solo se sienta en la ventana por horas- continuaba diciendo Ángela con la misma preocupación que Alice-. Los otros niños se han cansado de invitarla a jugar, pero ella les dice que no, o los ignora, hasta que ellos desistieron de seguir invitándola.

 

-¿Ha llamado su madre?- pregunto Rosalie, haciendo que Ángela la mirara por unos segundo con incredulidad, siempre lo hacia cuando Rosalie le dirigía la palabra.

 

-Si, ella ha llamado. Pero Bella tampoco le contesta.

 

-Eso es extraño- dijo Jasper, provocando que Ángela se sintiera cohibida, en cierto modo no la intimidábamos, pero si la incomodábamos.

 

-Hemos llamado a una psicóloga para que la viera. Pero dice que esta en perfecta condiciones, simplemente esta encaprichada, por que la han dejado sola, que es una forma de llamar la atención y salirse con la suya…

 

-Bella no es de esas niñas- interrumpí inconcientemente.

 

-Eso también había pensado yo- me apoyo Ángela con una sonrisa- Bella es un niña muy madura para su edad, no muestra signos de encaprichamiento ni nada por el estilo.

 

-¡Ya se!- grito Emmett asustándonos a todos- ¿Por qué no vamos a visitarla? A lo mejor ella esta así por que no la vamos a ver.

 

-Creo…que sería una buena idea- con esas simple palabras de Ángela hicieron que la sonrisa de mi hermano creciera aun mas.

-Entonces esta decidido- dijo Emmett en el momento en que sonaba el timbre.

 

-Bien, nos vemos luego- saludo Ángela y se marcho.

 

-No creo que sea buena idea- dije mirando a Emmett.

 

-¡Oh, vamos, Edward!- dijo levantando sus manos exasperado- Se que te mueres por verla, como todos nosotros, además sabemos que la esta pasando mal. ¿Quién te dice que cuando nos vea su humor cambie?

 

-Como también puede empeorar-contesto Jasper.

 

-Son unos aburridos- Emmett se levanto de la mesa con su bandeja de comida sin tocar y la tiro al basurero- No se ustedes, pero yo iré.

 

Vimos como Emmett y Rosalie caminaban de la mano fuera de la cafetería, clave mis ojos en la mesa y trate de encontrar los pros y los contras de ir a ver a Bella.

 

-Yo que ustedes iría- murmuro Jasper- Me gustaría ir, pero van a haber demasiados niños… y aun no me siento preparado. Pero ustedes deberían ir, quizás Emmett tenga razón, quizás- Beso a Alice en la cabeza y tiro su almuerzo para luego marcharse por el mismo camino que nuestros hermanos.

 

-Quiero verla- susurro Alice.

 

-Yo también.

 

-Entonces por que no te ver ir con nosotros- me miro a los ojos.

 

-Por que no seré capaz dejarla de nuevo.

 

Me levante y deje a Alice sola, había hablado de más, pero con toda la verdad.

 

No soportaría separarme una vez más de Bella.

 

ALICE POV

 

Llegamos a casa y vi como Edward se marchaba a su habitación murmurando un “hola” a Esme, ella lo contemplo preocupada y luego me miro.

 

-Iremos a ver a Bella- sabía lo que me iba a preguntar, así que me adelante a contestar.

 

-¿Él no quiere ir?

 

-No es eso- sacudí mi cabeza-. Edward realmente la quiere, demasiado.

 

-Ya veo…-fue lo único que murmuro Esme, luego salio corriendo, prácticamente, a la habitación de Edward para hablar con él.

Emmett estaba sentado en el sillón mirándome impaciente.

 

-¿Y bien?- pregunto alzando una ceja- ¿Cuándo vamos?

 

-Ahora mismo- dije riendo, era tan divertido ver a Emmett comportarse como un niño.

 

Se paro de un salto y corrió hacia la cochera, me gire para saludar a Jasper, este me dio un fuerte abrazo, me deseo suerte y me pidió disculpas por no acompañarme. Le entendía perfectamente y no necesitaba disculparlo por nada, si él no se sentía cómodo no lo obligaría a que viniera.

 

Cuando llegue a la cochera ya me esperaban Rosalie y Emmett dentro.

 

-¡Vemos Alice!- me apuro tocando constantemente la bocina del auto.

 

Subí de un salto, no alcance a cerrar la puerta cuando me di cuenta de que el Jeep había arrancado y ya íbamos por mitad del camino de la calzada.

 

-Estamos ansiosos ¿he?- dije burlándome, pero la verdad era que yo también lo estaba.

 

Con su alocada forma de conducir llegamos pronto al orfanato. El jardín estaba lleno de niños corriendo y jugando en los juegos. Aparcamos el Jeep en la entrada de la casa.

 

-¡Señor, señor!- grito un niño sacudiendo el pantalón de Emmett.

 

-¿Dime, pequeño?- se acuclillo para quedar a la altura del menos.

 

-Algún día nos podría llevar a dar un paseo- señalo el Jeep. En ese momento me percate de que varios niños se estaban reuniendo al lado del Jeep y lo miraban con adoración y sus bocas estaban abiertas.

 

-¡Claro, enano! Cuando quieras- palmeo la cabeza del niño y camino hacia donde estaba Rosalie, quien tenía una mirada dulce y un poco cristalina.

 

-De seguro serias un padre hermoso- susurro dándole un beso en la mejilla.

 

-¿Tu crees?

 

-¡Oh, por favor!- interrumpí exasperada-. Vinimos a ver a Bella, no a probar las habilidades paternales de Emmett.

 

-Eso lo dices por que estas celosa- dijo Rosalie aforrándose al brazo de Emmett, rodé mis ojos y golpee la puerta de la casa.

 

A los pocos segundos nos abrió Elizabeth, la abuela de Ángela. La viejita nos miro unos segundos y luego nos regalo una enorme sonrisa.

 

-Ustedes son lo que cuidaban de Bella- dijo- Ángela me dijo que vendrían pero no los esperaba tan pronto- abrió la puerta para que pasáramos-. Aunque a ustedes dos no los conozco.

 

-Ellos son mis hermanos, Emmett y Rosalie- dije señalándolos, ambos saludaron cortésmente a la abuelita.

 

-No saben lo feliz que me pone que vengan a visitarla, ha estado rara desde que llego.

 

-Lo sabemos, nos lo contó Ángela.

 

-Si…-agacho la cabeza y se puso a jugar con su delantal-. Es extraño, por lo general los niños suelen estar así unos días, pero ella lleva toda la semana y no muestra intención en socializar ni nada.

 

-¿Dónde esta ahora?- pregunto Emmett.

 

-En la biblioteca, estaba dibujando. Por aquí- nos hizo un ademán con la mano para que la siguiéramos, guiándonos por los antiguos pasillos, hasta que llegamos a una habitación que tenía una gran puerta de madera.

 

La habitación estaba decorada especialmente al ambiente de los niños, las paredes estaban empapeladas con dibujos de animales y letras, había pequeños estantes con libros y cuentos, varias mesitas y sillones, pero no había nadie allí.

 

La anciana camino por entre medio de los estantes, la seguimos y pudimos ver a Bella sentada, dándonos la espalda. Estaba apoyada en una pequeña mesita coloreando unos papeles.

 

-¿Bella? Tienes visitas- le dijo la anciana.

 

-Estoy ocupada. Que vengan otro día - dijo Bella sin moverse ni un milímetro. Su voz sonaba normal, no mostraba tristeza o enojo, pero me destrozo ver que no le interesara que se preocuparan por ella.

 

-¿Bella?- la llame. Ella se giro rápidamente para verme, sus ojitos chocolate se agrandaron y llevo sus manos a su boquita. Si yo fuera capaz de llorar lo estaría haciendo desde hace rato.

 

-¡Alice!- grito y corrió hacia mí dándome un fuerte abrazo. Rápidamente la envolví con mis brazos.

 

-Los dejare solos- dijo Elizabeth con voz ahogada.

 

-¡Hey! Nosotros no contamos- dijo Emmett fingiendo estar ofendido.

 

Bella miro por mi hombro a mi hermano y enseguida estiro sus brazos para que este la alzara, cuando lo hizo la tiro por los aires.

 

-¡Emmett!- gritamos a unísono con Rosalie y nos apresuramos a ver si Bella estaba bien, estaba de mas decir que nos quedamos sorprendidas cuando la vimos reír a carcajadas en las manos de Emmett.

 

-Los extrañe mucho- dijo Bella limpiando las lagrimas de sus ojos a causa de la risa.

 

-¿Entonces por que no contestabas nuestras llamadas?- dijo Rosalie reprendiéndola un poco.

 

-Por que realmente estaba ocupada- Dijo sentándose en un silloncito-. Estaba haciendo dibujos para todos, quería hacer dibujos de los lindos momentos que había pasado con ustedes, para mostrárselos a mi mama. También estaba haciendo dibujos de los momentos lindos que pase con mi mamá y mi papá, para dárselos a ustedes. ¿Saben? Estas cosas llevan su tiempo- dijo señalando una pila de dibujos, eso nos hizo soltar una carcajada.

 

-¿Esta también es la razón por la que no atiendes a tu mamá?- pregunte.

 

-Sip- asintió con la cabeza enérgicamente.

 

Nos quedamos toda la tarde con Bella charlando y jugando, aparentemente estaba bien, no le seguimos preguntando por su extraño comportamiento, en algún momento lo diría. Pero me di cuenta de que mientras hablábamos ella miraba constantemente la puerta, como si estuviera esperando a alguien, entonces entendí, ella esperaba a Edward.

 

-Edward te manda saludos- dije para ver su reacción.

 

-Oh, bueno, díganle que yo también- volvió a su tarea de hacer sus dibujos, intercambie miradas con mis hermanos, realmente le afectaba que Edward no estuviera ahí.

 

De la nada la puerta se abrió, nos giramos para ver quien era y nos quedamos boquiabiertos.

 

-¿Y si me los das personalmente?

 

Bella se tenso al escuchar la voz de Edward, como si fuera en cámara lenta, se giro para mirarlo y sus ojos se llenaron de lágrimas. Se quedo petrificada unos segundos, como si no creyera lo que estaba viendo, hasta que finalmente corrió a los brazos de Edward y lloro en su hombro.

 

Estaba tan concentrada en Bella que no había tenido ninguna visión de la repentina llegada de Edward.

 

-¿Por qué no viniste antes?- pregunte.

 

-Estaba haciendo unos llamados- dijo acunando a Bella quien no paraba de llorar.

 

-¿A quien llamaste?- pregunto Emmett.

 

-Bueno…digamos que llame a la mamá Bella, hablamos de su extraño comportamiento y accedió a dejárnosla a cargo hasta que vuelva.

 

-¿En serio?- pregunto Bella con voz ahogada por el llanto.

 

-Si, siempre y cuando estés de acuerdo con ello.

 

-¿Puedo?- pregunto levantando la mirada hacia nosotros.

 

-Es tu decisión Bella- conteste-. Pero sabes que estaremos más que encantados.

 

Mas lagrimas siguieron saliendo de sus ojitos, mientras se aferraba al cuello de Edward.

 

Sabía que entre ellos había una conexión especial, pero por alguna razón no veía un futuro feliz para ellos.

 

EDWARD POV 

 

Sabía que había cometido un error en cuanto llame a la mamá de Bella, sabía que estaba haciendo mal cuando me subí al auto para ir al orfanato y me di cuenta de que no podía dar paso atrás cuando Bella corrió a mis brazos llorando.

 

Pero ya no me importaba, quería estar con la niña. Ella algún día se iría definitivamente y nunca más la volvería a ver, ahora solo tenia unos días para tenerla a mi lado, luego la dejaría marchar y, como sea, tendría que sacármela de la cabeza.

 

-Te dejaremos con Bella, iremos a empacar sus cosas-me dijo Alice en su mente, mientras dejaban la habitación.

 

-¿Por qué no contestabas nuestras llamadas?- pregunte acariciando la cabeza de Bella.

 

-Tu nunca llamabas- se separo de mi para mirarme enojada- Tampoco me dijiste adiós cuando me dejaste aquí, era como si ya no te importara.   

 

Estaba verdaderamente gracioso verla de brazos cruzados y el ceño fruncido, golpeando con el pie el suelo.

 

-Es que…-baje la cabeza para ocultar mi sonrisa, no podía aguantar estar serio- .Era, es…duro dejarte. No fue mi intención hacerte sentir mal.

 

Bajo sus brazos y me envolvió de nuevo en ellos, tener su cuerpito pegado al mío me daba la mas grande de las satisfacciones. Bella se había convertido en lo más importante para mí, la quería de una manera que nunca imagine que podría sentir.

 

Era como si hubiera despertado en mí el amor de un hermano mayor o el de un padre, algo que jamás sentí, por que nunca experimente ninguna de las dos cosas.

 

-Te extrañe mucho- dijo con voz ronca.

 

-Yo también- murmure contra su pelo, abrazándola un poco más fuerte.

 

-¡Nosotros ya terminamos de empacar las cosas! ¿Y ustedes aun siguen abrazados?- grito Emmett atrás de nosotros.

 

Ignorando completamente a mi hermano, alcé a Bella y fuimos directamente hacia la puerta de la salida, no sin antes despedirnos de Ángela y Elizabeth.

 

-¿Vendrás a visitarme, Ángela?- dijo Bella.

 

-Bueno…

 

-Tienes que hacerlo o si no, no te ayudare a que tengas una cita con Edward- soltó Bella hacinado enrojecer a Ángela.

 

-Estas invitada cuando quieras- le dije haciendo que su sonrojo se pronunciara aun más, también provoco que Emmett riera a carcajadas, poniendo a Ángela aun mas nerviosa.

 

-De acuerdo-balbuceo.

 

Salimos de la casa con varios niños saludando a Bella, esta se despidió de ellos. Alice me acompaño en mi auto sosteniendo a Bella.

 

-Esos dos no tiene remedio- murmuro Alice, mire por la ventana y vi como el Jeep coleaba por la calzada del orfanato a toda velocidad, automáticamente bloqueé los pensamientos de esos dos.

 

-Realmente no te vi llegar-Me dijo Alice en su mente-. Estoy tan concentrada con Bella que no veo nada que no sea ella.

 

-Te entiendo- dije en voz baja, para que Bella no me escuchara.

 

Cuando salimos del orfanato tome la mano de Bella, a diferencia de la ultima vez, tenía una enorme sonrisa en su pequeña carita, igual que Alice y yo.

 

Pronto llegamos a casa, baje las cosas de Bella y nos encaminamos hacia la entrada. Apenas subimos los escalones del porche la puerta se abrió repentinamente y algo pesado se colgó de mi cuello.

-¡Edward, te he extrañado tanto!

 

Esto no podía estar pasando, no ahora.

Capítulo 7: Capitulo 7 Capítulo 9: Capitulo 9

 
14439461 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10757 usuarios