Q: Kristen y tú teníais una química genial, así que, ¿cómo vosotros, chicos, la desarrollasteis?
GH: Creo que fue por estar alrededor del otro durante las 4 semanas antes de que empezáramos a grabar. Estábamos todos en la misma habitación todo el día, cada día. Repasamos el material, y estuvimos leyendo muchas de las escrituras. Eso fue un tiempo para que compartíeramos con los otros, como cualquier cosa que hubiésemos encontrado.
También, Walter compartió con nosotros lo que había descubierto en su búsqueda. cada día, todos los días, éramos Sam, Kristen y yo en ese apartamento con Walter, escuchando jazz, leyendo. Era un vestíbulo de estudio grande, así que ahí es de donde vino.
También, ella no es una persona difícil con la que llevarse bien. Ella es realmente genial, y realmente dedicada a esto. Cada persona que estuvo en esto fue genial, y aceptó a los demás como a una familia.