Edward
No podía creer que mi mujer no nos recordara era lo peor que me podía pasar en la vida no podía entender que había pasado llamamos a un médico y nos dijo que no sabía aun si era temporal o para siempre solo esperaba que los recuerdos regresaran
pasamos dos semanas más en el hospital me entere que una mujer había salvado a emmet y que estaba en casa con rosalie y se habían hecho grandes amigas ella necesitaba trabajo así que pensaría seriamente en darle trabajo en la empresa a mí y a mi mujer nos hacia falta una secretaria pero ahora con bella así no creo que pueda contar con ella para saber si puedo contratarla o no ya le darían de alta a bella del hospital ella no se sentía segura todavía con nosotros así que solamente se limitaba a decir que si
- puedes decirme algo sobre mí – dijo mirándome íbamos en el coche a nuestro departamento con nuestra bebe los chicos nos habían dado espacio así que podía pasar el dia con ella tranquilamente y con mi bebe
- bueno eres diseñadora- dije – tenemos una empresa de joyas es más tuya que mía pero tus papas quisieron unirla así que nos obligaron a casarnos – dije mirándola pero no quería decirlo así ella me miro asombrada
- de verdad nos casamos porque nuestros padres lo dijeron – dijo mirándome
- bueno no y si – dije en ese momento habíamos llegado al departamento la niña se había quedado con samanta que se estaba quedando en un departamento bajo a nosotros que estaba pagando ahora que rosalie le daba algo por cuidar de ian y nosotros también por cuidar de sofí
- no entiendo puedes explicarme
- ya nos habíamos conocido antes – dije mirándola – nos habíamos enamorado y estábamos muy felices porque nos íbamos a casar
- y que – dijo mirándome
- tenemos una niña de dos años – dije mirándola ella abrió los ojos y empezó a soltar un poco de lágrimas- que pasa- dije mirándola y tomándola de las manos
- no puedo creer que no recuerde a mi propia hija – dijo llorando y enterrando la cabeza en mi pecho
- tranquila bella la recordaras a todos nos recordaras- dije mirándola y abrazándola contra mi pecho
Entramos al departamento y samanta estaba jugando con sofí haciéndole caritas-
- hola samanta- dije mirándola
- señor – dijo mirándome
- dime Edward- dije ella era aún más joven que bella y yo solo tenía 20 años así que para ella nosotros estábamos viejos
- hola- dijo bella de mi mano sin soltarla eso me hacía sentirme mejor
- hola seño bella – dijo sonriente cuando bella vio a Sofía sus ojos brillaron ya sabía que decían que el instituto maternal jamás se olvida y al parecer era verdad
- puedo cargarla – dijo mirándome
- es tuya – dije besando su mejilla –ella se sonrojo y me miro
Camino a ver a nuestra hija que al verla le estiro sus bracitos ella sonrió cargándola y empezando a jugar con su dedo y besaba su mano me quede mirándolas y samanta se despido de nosotros disimuladamente me quede mirándolas con una sonrisa en mis labios y ella me miro
- es una niña muy hermosa – dijo mirándome
- se parece mucho a ti – dije mirándola
- si tiene mis ojos – dijo mirándome sonreí mirándola y ella me miro con dulzura
- tiene que comer- dije mirándola
- puedo – dijo apenada- puedo darle la comida
- claro que si – dije dándole el biberón – eso es levántale un poco la cabecita solo un poco
le dio la comida mientras la niña la miraba fijamente tomándole la mejilla sonreí viéndolas y acariciándolas gracias a dios la casa solo tenía dos habitaciones y un sofá muy pequeño dudo mucho que ella me dejara dormir en el sofá así que podía al menos dormir con ella abrazados
Luego de darle la comida a la niña comimos nosotros y le seguí platicando ella quería ver si tenía algún diseño de ella así que le mostré la libreta
- eres muy buena para los caballos y todo lo demás estabas terminando uno para mi hermana – dije mostrándole el libro de dibujos – querías pasarlo a un lienzo – dije era una torre Eiffel
- es hermoso – dijo mirándome
- y estos son del trabajo tú haces los diseños y lo mandas a la empresa para que los desarrollen
- vaya no puedo creer que son míos -. dijo mirándome
- pero lo son
Nos quedamos hablando un buen rato
- quieres ver alguna película – dijo mirándome
- claro – dijo nos fuimos a mi cuarto le señale su armario y se metió al baño para vestirse era tan raro que no se vistiera frente a mi porque siempre lo hacía es más dormíamos desnudos
Cuando salió del baño se acostó en la cama puse la película y nos acostamos me deje el pantalón para no incomodarla vimos la película cuando se quedó dormida en mi pecho y yo con ella sentí que por fin estaba en mi lugar
BELLA
ya habían pasado 3 meses desde que estaba en la casa y no tenía muestra de recordar sabía que emmet era mi hermano y amaba a mi hermano pero como eso un hermano Edward me conto que tenía dos caballos y los tenía en la casa de mis padres mientras buscábamos nuestra casa en este tiempo conocí de nuevo a mi mama era una mujer dulce y muy tierna pero Charlie swan no me inspiraba nada de confianza cuando me pidió que lo abrazara lo hice sintiéndome rara e incómoda, Edward que puedo decir de él era el hombre perfecto paciente y muy amoroso dormía con él todas las noches y me sentía bien pero incomoda porque me gustaba mucho le conté a mis cuñadas con las que tenía una relación muy cercana a ellas me decían que era normal pero no nos habíamos besado desde que llegue a la casa y me moría por hacerlo
- bella- dijo mi cuñada Alice
- hola Alice como estas- dije mirándola
- bien con jasper estamos muy felices porque nos vamos ir a vivir juntos por fin y porque esta noche nos quedamos con mi hermosa sobrina
- que- dije mirándola desde que había visto a Sofía no quería separarme de ella era mi hija y la amaba pese a que no la recordaba
- si Edward nos pidió el favor- dijo sonriéndome sonreí mirándola amaba a mi cuñada con el poco tiempo que tenia de conocerla estaba terminando su dibujo extrañamente la pintura no la olvide y de verdad quería pasar tiempo a solas con Edward
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