Robert Pattinson no quiere fans

Robert Pattinson, más conocido como Edward Cullen, el protagonista de «Crepúsculo», no quiere ni oír hablar de la palabra «fan». Desde que el joven protagonizara el famoso film -a finales de año llegará a los cines la segunda entrega, «Luna Nueva»-, el vampiro más sexy de la pantalla sólo piensa en regresar a su casa en Londres y alejarse de las admiradoras americanas, a las que tacha de «obsesivas».

Después de que el londinense fuera atropellado por un taxi cuando intentaba huir de un grupo de seguidoras a la salida de una librería de Manhattan, los productores de «Remember me», la película que ha rodado a lo largo de todo julio, exigieron la máxima discreción a todos sus empleados.

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La productora dio estrictas órdenes a su equipo acerca de cómo actuar tanto de cara a la prensa como a la presión de las fans. Eso incluía «no dirigirse a la prensa para nada», no tener a nadie alrededor cuando se hablara de temas de rodaje ni ofrecer ningún detalle de los días de grabación, contando siempre que se está rodando algún anuncio o capítulo de la serie «Law & Order». «Esto es ridículo. Trabajé con Jennifer Aniston y ni por asomo se asemejaba a esto. La gente mayor no sabe ni quién es. Son sólo los adolescentes que literalmente gritan su nombre cuando le ven, lo que hace que el rodaje se haga imposible. Tuvieron que contratar más seguridad», declaró uno de los miembros del equipo a la revista «OK».

Pero los intentos por mantener «oculto» a Pattinson no han terminado de dar sus frutos. El pasado martes estuvo un grupo de admiradores hasta seis horas esperándole para poder verle. Pero el actor decidió no salir ni a saludarlas. Según ha informado «Radaronline», alguien del equipo ha explicdo que Robert no pretendía romper el corazón de sus fans, sino que el actor está tan concentrado con su trabajo en la película que no quiso salir a comer por lo que hizo que le trajesen la comida.

Fuente: Portaldenoticias.com