Pov:Tanya
Si, Paul estaba conmigo pero la felicidad no podía ser completa, no hasta que me deshiciera de mi trofeo de vanalidad, así es el trofeo era Demetri, despues de haber recapacitado me daba cuenta que el no era más que una estúpida obseción y con ello había dañado a más de uno, no podía enmendar el daño, y tampoco quería hacerlo pero algo era seguro: hoy liberaría a Demetri de mi tortura.
Lo llamé y contestó al segundo tono
-Dónde rayos estas Tanya?-
-Este sobre eso, solo llamo para pedirte que hablemos-
-Pues si me dices donde estas talvez pueda ir y hablar no crees?- su tono sarcástico casi logró enfurecerme pero recordé que todo esto solo era para estar con Paul así que dejé de lado mi histeria y le indiqué donde estaba.
Al pasar treinta minutos exactos el estaba tocando a la puerta del hotel en el que lo había citado.
-Y bien de que quieres hablar-
-Iré al grano Dem, estoy de verdad enamorada de Paul, y se que lo que voy a decir no va a solucionar en nada el daño que te hice pero de verdad espero que sirva de algo el decirte que estoy sinceramente arrepentida, quisiera haberte evitado este dolor pero ya cometí el acto así que solo me quedan dos cosas, pedirte perdón lo cual ya hice y decirte que por fin te dejo en libertad, no te retendré más, no volverás a verme, no volveré a entrometerme en tu vida ni en la de tu familia, será como si nunca hubiera existido-lo vi detenidamente y en su cara hallé sorpresa coraje y lástima, nada me importo yo solo quería devolverle su libertad y le pedí perdón lo demás era cosa suya.
-Por qué hasta ahora Tanya?-
-Porque hasta ahora valoré al verdadero amor-
-Pero con ello me privaste a mi de mi verdadero amor, sabes que mi hermano me declaró la guerra para luchar por el amor de esa mujer?-a estas alturas él ya estaba de frente a mi reprochandome a la cara cada uno de sus reclamos.
-Si es tu verdadero amor estarán juntos pase lo que pase, si no entonces descubrirás que no te ama tanto como creías-y sin darle oportunidad a un reclamo más salí del lugar solo para dirigirme a mi felicidad segura y eterna.
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