Bella

Vaya ese chico de verdad me habia puesto nerviosa y trataba de disimularlo pero no lo lograba ya que Edward que iba a mi lado me observaba por el rabillo del ojo y tenía cara de querer preguntar algo, pero era tan cobarde que no se atrevía-reí para mis adentros.- alce la mirada para mirar a Edward y sonreírle pero cuando lo hice, otra mirada más oscura se cruzo con la mía y sentí como pasaban por mi rostro diferentes colores, las manos me sudaron al cien por ciento y mis piernas amenazaban con doblarse pero algo lo impidió, alce la mirada para ver como Edward me rodeaba con su brazo y me atraía hacia él.

El chico miro a Edward y después me miro a mí para mover la cabeza de lado a lado y sonreí hacia el suelo. Eso me puso aun más nerviosa. Entre a mi clase de Matemáticas con el señor Thomas, me senté en las mesas de en medio y observe como Edward me miraba para tratar de sonreí cosa que devolví, después desapareció.

Era extraña la sensación que tenia dentro de mí y mi estomago también estaba de acuerdo conmigo. Entonces cruzo la puerta, lo mire con la boca abierta y trague saliva con dificultad, era tan guapo, tenía el cabello corto y oscuro, sus ojos café oscuro se clavaron en mi y después en el lugar desocupado de mi lado al cual camino sin ningún problema, vestía todo de negro y hacia que se viera mas musculoso como también más alto. Mi estomago se revolvió y sentí como si quisiera vomitar per después esa sensación cambio cuando mi corazón latió como si dentro hubiera un tambor.

-Hola-dijo alguien a mi lado y de nuevo los colores pasaron por mi rostro-Mi nombre es Steven-estiro el brazo-¿Cuál es tu nombre?

Gire mi rostro no muy segura de mi misma y sonreí en respuesta.

-Me llamo Bella-estreche su mano.

-Mucho gusto Bella, espero y podamos conocernos.

Fue tan dulce y tan tierno que cuando nos saludamos sentí como si una descarga de energía eléctrica pasara por todo mi cuerpo y me puso a un más nerviosa, ahora si sabía que extraño movimiento tenía en el estomago y a eso solo podía llamarse Mariposas en el Estomago.

El profesor empezó la clase presentándose y haciendo que cada uno de nosotros se presentara, fue algo incomodo ya que cuando me toco a mí, casi caía con la mochila de una chica que en mi vida habia visto o bueno no sabía cuál era su nombre. Después de nueve alumnos que se presentaron. Fue el turno de Steven. Camino muy seguro de sí mismo y se presento a la clase con delicadeza y con seguridad, parecía un modelo caminando de regreso a su lugar y después sonrío cuando me miro.

-Bella, Bella-alguien me hablaba y voltee cuando reconocí la voz de Jessica Stanley-Bella se te está cayendo la baba-paso su mano por sus labios-Cuidado.

Me puse roja y agache la cabeza cuando escuche como estallaba en risa. Jessica era una chica demasiado amistosa y a pesar de que es la segunda al mando del equipo de porristas, ella era diferente con todos, no se creía la gran cosa y mucho menos sentía que todos éramos menos que ella, para ella todos eran igual. La clase termino rápida porque lo único que hicimos fue presentarnos y ver la forma de calificar del profesor cosa que me pareció fácil. 60% examen, 20% trabajo y tareas, 10% asistencia y 10% participación. Era pan comido.

-¡Bella espera!-alguien gritaba mientras caminaba hacia el carro de Edward. Gire el rostro y hacia mi corría Steven.

-A hola Steven, ¿Qué sucede?-esto iba demasiado deprisa, primero lo conocía y me ponía nerviosa y ahora me llama para esperarlo. Vaya este sí que era mi día.

-Bella estaba pensando si te gustaría que te llevara a tu casa o si te gustaría dar una vuelta conmigo- eso hizo que se me salieran los ojos y mis cuencas salieran rodando hacia el desagüe.

Mire a Edward que ya se habia salido del Volvo y tenía el ceño fruncido, le dije que esperara y el torció la boca. Cosa que no me gusto. ¿Qué era lo que le pasaba? Primero me rodea con el brazo cuando mire a Steven y él me miro y después hacia una mueca desagradable cuando platicaba con el ¿Qué demonios tenia? Era una buena pregunta. Mire a Steven que se estaba impacientando.

-Lo siento Steven pero es que tengo cosas que hacer en la tarde y ademas tengo que llegar a tiempo hacer la comida, mi madre trabaja y pues soy la responsable de todo.

Me miro y apretó los dientes, después me sonrió.

-No te preocupes Bella, será otro día- se alejo de mí mientras que alguien me chiflaba y supe que era Edward que se estaba impacientando.

Camine hacia donde estaba Edward y me subí a su carro, le sonreí y él me devolvió la sonrisa un poco seca, estaba molesto pero no sabía porque o bueno si sabia y es que el odiaba esperar pero nunca se habia comportado de esa forma conmigo.

-Edward.

-Mmmm-no me miro y siguió observando la carretera.

-¿Qué te pasa? Te encuentro algo molesto.

-Nada Bella, no me pasa nada es solo que estoy un poco cansado y estoy pensando en hacer algo para la noche-dijo y a mí se me prendió el coco (Ósea la cabeza) para divertirnos en la noche. Iba hablar pero Edward comenzó y no me dejo-Creo que saldré con Tanya-se me cayó la mandíbula.

-¿Por qué?-pregunte-A ti ni te agrada Tanya, piensas que es una cabeza hueca-rio.

-Porque ya es tiempo de que salga con alguien, ¿no crees? Ademas hasta Emmett pensó que era Gay imaginare que estaran pensando los demás.

-Pero de cuando acá a ti te importa lo que piensen los demás-dije un poco molesta-Hoy íbamos a estar juntos, ¿Ya se te olvido?

-No Bella, pero no puedo estar contigo toda la noche o que-me miro-¿quieres que salgamos?

Lo pensé durante un momento y pues no era mala idea ademas estar con Edward era muy bueno y siempre que estaba con él hacía que me divirtiera…lo quería tanto. Y con tal de alejarlo de Tanya porque sé muy bien que si el sale con ella puede que pierda a mi mejor amigo por siempre, saldría con él.

-Sí pero hay que avisarles a Alice y a Emmett junto con Rosalie y Jasper.

-Claro no pensaras que no lo iba hacer, ¿verdad?

Sentí que mis mejillas se encendían y empecé a reír como loca. Lo mire y él me acompaño con sus risas, solo espero que no haya malinterpretado mi comentario, lo que menos quería es que Edward pensara otras cosas que no eran.

-Ahora cambiando de tema-comenzó y lo mire-¿Qué quería el chico nuevo?

-Pues-recordé lo que habia pasado-¿para qué quieres saber?

-Hay Bella recuerda que todo nos contamos y no creo que esta vez sea una excepción, ¿verdad?

Bueno el tenía mucha razón, desde que tengo memoria, Edward y yo siempre nos hemos contado hasta lo que nunca creímos que fuera verdad y esta vez también lo haría pero me daba una gran vergüenza platicarle sobre esto, mas cuando se que él podría reírse.

-Pues quería traerme a casa y también invitarme algo-conteste siendo muy sincera.

Paro el coche y observe como se ponía rojo, me miro y su rostro era la viva imagen del enojo.

-¡Esta loco o que le pasa!-grito-Si apenas te conoce ¿Por qué demonios quiere invitarte algo?-pregunto.

-Cálmate Edward estas siendo muy exagerado y no te pusiste a pensar ¿Qué quiere conocerme?-sonreí.

-¿A ti? ¿Para qué?-volvió a arrancar el carro.

-¿No me crees capaz de conquistar a un hombre?-pregunte un poco ofendida.

-No, bueno eso no quise decir pero es que se me hace extraño Bella, no me fio de este chico.

-Déjame a mí criticar eso y después te digo.