Forks, Washington.
Pov: Tanya.
Paul era muy bueno en la cama, debía admitirlo pero el amor de mis amores sin duda era Demetri, era lo único que yo de verdad amaba en este mundo, también amaba a mis hermanas pero sin Demetri nada tenía sentido.
-Estas pensando en él cierto?-debía reconocer que Paul además de guapo, sensual y bueno en la cama era un hombre muy intuitivo.
-Así es-le regalé una sonrisa, el me gustaba y mucho y lo que menos quería era herirlo.
Tranquila bonita, no pasa nada-y me dio un dulce beso, ningún hombre me había besado con tanta ternura jamás.
-Bien Paul, debemos planearlo muy bien-le dí las indicaciones, nos vestimos y partimos a nuestra labor.
Pov: Demetri.
-Me encontraba sentado frente a mi piano, estaba componiendo una sinfonía para mi amada Carol.
-Hola cielo-Tanya me besó en el cuello, tenía casi dos horas en Forks y no paraba de acosarme.
-Tanya basta, te lo dije, salgo con una chica y la amo-
-Cielo eso es pasajero lo sé, estoy totalmente segura, Demetri acéptalo tu y yo somos el uno para el otro-Tanya si no paras de molestarme me vas a obligar a salir de mi propia casa-pude ver en sus enormes ojos la sorpresa.
-Que mierda te dio esa mocosa?-
-Se llama Carol y me dio amor solo eso, ahora si no te molesta sal de mi estudio quieres?-ella salió indignada, no había nada que hacer, yo amo a Carol y eso no cambiará.
Me alisté para el colegio y cuando bajé Jane y Tanya estaban en la sala traían puestos sus uniformes de porristas, a Jane le sentaba divino, pero Tanya va ella lo único que quería era que los chicos la miraran.
-Demi como amaneciste?
-Bien Jane y tú?-
-Muy feliz adoro que Tanya esté aquí, ahora es porrista como yo-su efusividad me dio ternura, odiaba tener que hacerle ver que Tanya no era la mejor compañía.
-Cariño nos vamos-y me plantó un beso, detestaba tenerla tan cerca.
-No me llames cariño y no te atrevas a besarme de nuevo, Tanya no me hagas olvidar que yo soy un caballero y tu una dama-
-Chicos chicos no pelen de acuerdo, Tanya sube al auto de Félix que Demi se va por su cuenta-y sin más la aludida salió por la puerta.
Subí a mi auto y conduje hasta casa de Carol, suerte que aún era temprano, debía hablar con ella sobre la actitud de Tanya.
-Cariño llegaste temprano-ella subió al auto.
-Carol esto, quiero hablar contigo muy seriamente-
-Cariño que pasa no me asustes-
-Carol a casa llegó Tanya pero cielo ella no para de acosarme-ella puso su dedo índice sobre mis labios callándome.
-Demetri mi cielo yo confio en ti, pero si tu me traicionas te olvidas de mí de acuerdo?-
-De acuerdo y posé mis labios sobre los suyos, podría pasar el resto de mi eternidad besándola.
|